Away: The Survival Series, an¨¢lisis PS5: descubre en primera persona el reino animal

Si indagamos en el cat¨¢logo de cualquier plataforma veremos que no faltan juegos que consisten en simular la vida animal. T¨ªtulos como Maneater o Goat Simulator nos ponen en la piel de especies no humanas y sembrar el caos, pero eso s¨ª, siempre desde un punto de vista casi hiperb¨®lico o humor¨ªstico, o en algunos casos, ambos, pero costar¨ªa encontrar alguno que represente la naturaleza de una forma m¨¢s fidedigna. Away: The Survival Series viene un poco para rellenar ese espacio, adem¨¢s haci¨¦ndonos recrear la vida de una especie un tanto desconocida como es el petauro del az¨²car, que en apenas unas horas nos hace descubrir lo dura que puede ser la vida para un mam¨ªfero que es a la vez presa y depredador, pero...?lo consigue de manera divertida?

Away: The Survival Series parte de una premisa curiosa, y es que el hombre ha sido completamente extinguido del planeta debido a la explosi¨®n de multitud de los tristemente c¨¦lebres ultimamente volcanes alrededor de todo el globo, con lo que los animales de todas las especies son los principales habitantes de la Tierra. El petauro solo es uno de los que veremos a lo largo de la aventura, pero es justamente el protagonista, y el que se enfrentar¨¢ a una serie diversa de peligros a los que hacer frente con sus habilidades.

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Una aventura en forma de documental

Tras un somero tutorial en el que aprender todas ellas, tenemos que destacar algunas como el planeo, un salto de capacidad bastante generosa y el que no pod¨ªa faltar, un instinto animal que nos avisa de peligros cercanos o posibles alimentos, de una forma que si tuvi¨¦ramos que compararlo, podr¨ªamos hablar de una suerte de visi¨®n t¨¦rmica. Obviamente, el uso de este instinto no es infinito, y habr¨¢ que mantener unos buenos niveles de energ¨ªa con la ingesta de alimentos como setas u otros peque?os animalillos.

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Dicho esto, hay que decir que el control del peque?o protagonista no es todo lo preciso que desear¨ªamos, sobre todo a la hora de saltar y planear, teniendo que ajustar en ocasiones a ¨²ltima hora el aterrizaje para que nuestro destino no sea la muerte. Esto significa que uno de los apartados jugables del t¨ªtulo, como son las plataformas, no son lo que se dice satisfactorias, al menos en las secciones m¨¢s exigentes, aunque por suerte contamos con la posibilidad de apuntar el lugar de aterrizaje tras un salto, algo que facilita mucho las cosas.

Otro de esos apartados es el combate, claramente diferenciado cuando nos convertimos en depredador o en presa. En el primer caso no es algo que destaque sobremanera, ya que no es dif¨ªcil dar cuenta de peque?os lagartos o insectos con los que llenar el buche, pero si nos enfrentamos a otros animales como serpientes o ara?as la cosa cambia, y es que debemos pasar a adoptar una actitud m¨¢s defensiva, teniendo que esperar el error de nuestro contrincante para asestar un contraataque hasta poder librarnos de la amenaza. No son combates especialmente complicados, pero aportan ese puntito de variedad necesario y nos trasladan la frecuencia con la que los peque?os animales pueden ver su vida amenazada en un d¨ªa cualquiera. Algunos de ellos incluso terminan en persecuciones que toman la forma de quick time event, algo que a?ade cierta tensi¨®n aunque como casi todas las situaciones que se dan durante le transcurso de la aventura, no sea algo que requiera una habilidad especial al mando.

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La presentaci¨®n de esta historia es uno de los puntos m¨¢s peculiares del juego, ya que la descubriremos en forma de documental, con una voz en off que hace m¨¢s que narrar, ya que en no pocas ocasiones sus palabras nos servir¨¢n como pistas para continuar con nuestro camino, junto a nuestro propio instinto. Como dec¨ªamos antes, no es un juego en el que sea f¨¢cil perderse ya que es principalmente lineal, pero sobre todo en las secciones de plataformas puede no ser sencillo saber por d¨®nde continuar. Dicho esto, hasta cierto punto nos ha decepcionado la belleza de los escenarios, probablemente m¨¢s debido a un apartado t¨¦cnico lejos de ser puntero que a una direcci¨®n art¨ªstica pobre, ya que esta, sin ser brillante, si goza de cierta personalidad, sobre todo cuando se nos permite contemplar los vestigios de la antigua presencia del hombre en forma de m¨¢quinas, edificios, etc.

Esto si hablamos del modo Aventura, ya que podemos jugar tambi¨¦n su modo Explorador, que nos da m¨¢s libertad no solo para explorar el entorno, sino incluso para ponernos en lugar de otros animales como lagartos, abejas¡­ Est¨¢ bien a modo de curiosidad y para aquellos completistas que busquen no solo logros, sino tambi¨¦n algunos coleccionables como audios para conocer la historia anterior a esta en que se desarrolla Away: The Survival Series.

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Ya coment¨¢bamos antes que el apartado t¨¦cnico no es destacable, aunque despu¨¦s de todo, hablamos de un estudio independiente que ha querido ofrecer una experiencia diferente, ya que no son muchas las propuestas de este tipo en el mercado. Algunas texturas con poco detalle o f¨ªsicas extra?as al realizar determinadas acciones -cuestiones mejoradas hasta cierto punto con un reciente parche- nos alejan de disfrutar de un mundo que por lo dem¨¢s podr¨ªa ser muy bonito si gozara de una producci¨®n m¨¢s generosa, aunque insistimos, obviamente no es algo que podamos achacar a Breaking Walls, el estudio a cargo del juego.