C¨®mo el Fightcade rescat¨® los juegos de lucha retro

Era 2014 cuando Pau Oliva decidi¨® hacer un cliente de GGPO para salvar una ca¨ªda del servidor que dur¨® una semana. Aficionado a los juegos de lucha, adoraba Super Street Fighter II Turbo, t¨ªtulo que compart¨ªa con un amigo. ?ste ¨²ltimo, tras competir en un torneo en USA, volvi¨® muy ilusionado con la experiencia y con el GGPO, lo cual impuls¨® a Oliva a dise?ar un servidor para Linux y Mac. Fue as¨ª como naci¨® Fightcade, un emulador arcade que permite jugar en modo multijugador online juegos retro. Durante el confinamiento a causa de CoVid, este proyecto experiment¨® un ascenso en su n¨²mero de usuarios, y el debate sobre el rollback?netcode en el fighting ha vuelto a poner sobre la mesa esta iniciativa. En MeriStation hablamos con Pau Oliva y Jordi "Shine" Ros, los art¨ªfices de este ring gracias al cual disfrutamos de t¨ªtulos de lucha cl¨¢sicos.

La evoluci¨®n de un proyecto personal

¡°Cuando mi amigo volvi¨® del torneo de Super Street Fighter II Turbo, vino bastante hypeado. El juego ten¨ªa buen que hab¨ªa input y se reg¨ªa por GGPO. Vimos que el cliente iba bien y yo, que era usuario de Linux, hice un cliente de GGPO de Linux y Mac que funcionaba muy bien¡±. Fue un acontecimiento desafortunado el que finalmente impuls¨® el Fightcade, como nos cuenta Pau Oliva: el servidor dej¨® de funcionar, y el encargado de mantenerlo se hallaba ausente. Como en ese momento no pod¨ªa arreglarlo, Oliva dio un paso adelante y puso en marcha su propio servidor que, aunque presentaba muchas carencias, solvent¨® el problema y el boca oreja atrajo a muchos jugadores, que se fueron sumando a Fightcade desde 2014 hasta 2017.

En 2017, Pau Oliva fich¨® a Jordi "Shine" Ros y le cont¨® los problemas de escalabilidad que ten¨ªa con Fightcade a causa de malas decisiones de dise?o y lo escribieron desde 0. Sacaron una beta de Fightcade e hicieron un emulador totalmente nuevo. ¡°El anterior estaba hecho con Python y el actual con JavaScript¡±, apunta Ros. El d¨²o lanz¨® la beta en el 2017 y sus imperfecciones se fueron puliendo hasta alcanzar una versi¨®n final que llegar¨ªa en la pandemia. ¡°Durante el confinamiento, pudimos dedicar m¨¢s tiempo al emulador¡±, explica Pau. ¡°Jordi y yo ten¨ªamos nuestros empleos, y cuando me qued¨¦ sin trabajo me pude dedicar de pleno. Por otro lado, m¨¢s gente se dedic¨® a jugar online durante el confinamiento. Finalmente, dejamos de lado el Fightcade y pasamos a Fightcade 2.¡±

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Las cifras son testigo del auge que experiment¨® Fightcade en 2020: en marzo se registraron 400000 partidas al mes siguiente 600000. En 2017 se hab¨ªan alcanzado las 300000 y el crecimiento era paulatino. Si bien en enero y febrero empez¨® a subir la comunidad un poco m¨¢s, la subida m¨¢s significativa no llegar¨ªa hasta abril. El equipo nos confirma que durante 2021 se han sumado nuevos luchadores, poco con un ritmo m¨¢s pausado.

Lo cl¨¢sico VS lo moderno

Asimismo, se ha despertado un inter¨¦s renovado por los juegos de lucha, fen¨®meno que tambi¨¦n comenta Pau Oliva: ¡°Dragon Ball y Street Fighter han dado un nuevo boom al fighting. Hay gente que no conoc¨ªa los juegos de lucha, pero s¨ª es muy fan del anime de Dragon Ball y Dragon Ball FighterZ les ha abierto las puertas a este g¨¦nero. En cuanto a Street Fighter, el V no ha gustado tanto como el IV y mucha gente sigue prefiriendo las versiones m¨¢s antiguas, con lo que ha recurrido a los t¨ªtulos retro a trav¨¦s de Fightcade¡±.

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Street Fighter es una saga muy apreciada por el d¨²o. Oliva destaca que prefiere las entregas antiguas a las actuales: ¡°El Alpha 3 y el 3rd Strike me gustan m¨¢s que el SFV. Street Fighter V facilit¨® el tema de combos e inputs, lo cual es bueno y malo, porque no creas una escala igualada. Es f¨¢cil aprender cosas, pero no permite a los jugadores evaluar qu¨¦ tan buenos son el juego. Los juegos antiguos requer¨ªan m¨¢s dedicaci¨®n y la escala es m¨¢s alta. Eran m¨¢s injustos, pero si les dedicabas tiempo pod¨ªas llegar a tener un nivel excelente¡±. Jordi apunta: ¡°En cambio, Street Fighter V es como un Excel a la hora de aprenderse los frames, es muy matem¨¢tico. Si te quedan 3 frames, sabes qu¨¦ puedes hacer. Antiguamente los juegos eran m¨¢s ¡®piedra, papel y tijera¡¯¡±.

No obstante, Dragon Ball ha protagonizado diversos t¨ªtulos de lucha, y los cl¨¢sicos de Super Nintendo tienen su lugar en Fightcade, aunque su comunidad no es muy grande. Oliva y Ros enumeran los juegos m¨¢s populares dentro del emulador: los m¨¢s exitosos son King of Fighters (2002 y 1998) y Street Fighter III 3rd Strike. Jojo¡¯s Bizarre Adventure es otro muy aclamado gracias al resurgir del manga, y la comunidad alrededor de Super Street Fighter 2X no es nada desde?able. ¡°En cuanto a n¨²mero usuarios, el top 3 de pa¨ªses lo protagonizan USA, Brasil y Corea, los cuales estaban presentes desde la primera beta. Por la ma?ana hay m¨¢s coreanos y por la noche brasile?os. Tambi¨¦n hay mucha presencia de Francia, Reino Unido y Jap¨®n¡±.

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Asimismo, Fightcade incluye otros g¨¦neros m¨¢s all¨¢ del fighting. Tetris y Bubble Bubble son otros juegos muy queridos dentro del emulador. Adem¨¢s, gracias al proyecto de Oliva y Ros los jugadores han descubierto joyas ocultas como Jackie Chan¡¯s Fists of Fire, Waku Waku y Karnovs Revenge, con mucha comunidad en Francia.

Por otro lado, la lista de deseos dentro de Fightcade tiene sus protagonistas, seg¨²n Ros: ¡°Piden muchos t¨ªtulos de PSX y PS2, pero implementar el rollback en ellos es dif¨ªcil. Los Mortal Kombat cl¨¢sicos son los m¨¢s demandados y nuestro p¨²blico nos ha agradecido mucho poder disfrutarlos¡±.

Accesibilidad, la clave del ¨¦xito de Fightcade

Otra de las claves del ¨¦xito de Fightcade es la plataforma de matchmaking: ¡°Hay que buscar la IP del aniversario y intentamos que sea r¨¢pido encontrar un rival¡±, apunta Jordi Ros, quien se?ala adem¨¢s que dos de los grandes retos de Fightcade fue crear una interfaz de usuario c¨®moda, adem¨¢s de integrar el GGPO en la ¨²ltima versi¨®n. ¡°Tambi¨¦n nos cost¨® meter peque?os detalles que en el c¨®digo fuente no estaban implementados¡±, explica Oliva. ¡°El 3rd ocupaba m¨¢s memoria, me cost¨® mucho incorporar la integraci¨®n. Metimos rift balance para equilibrar las partidas, para que el juego fuera igual para los dos jugadores. Si uno va m¨¢s avanzado se frena y si el otro va m¨¢s retrasado, hace fast forward. Si un juego no tiene rollback ocupa poca memoria porque es antiguo, hacemos un snapshot de los frames y aplicamos los inputs que tenen poca memoria. El 3rd ten¨ªa m¨¢s memoria. Cuanto m¨¢s moderno, es m¨¢s dif¨ªcil implementar el rollback, porque hay que elegir qu¨¦ parte de memoria quieres hacer el snap y ver c¨®mo la memoria afecta al estado de los jugadores¡±.

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Uno de los escollos a la hora de impulsar un emulador es el debate sobre la legalidad de los juegos. Pau Oliva nos cuenta c¨®mo el p¨²blico m¨¢s reacio a usar Fightcade por cuestiones ¨¦ticas se acab¨® abriendo a ¨¦l: ¡°Los japoneses son muy tajantes con el tema de pirater¨ªa, y ahora son de los que m¨¢s usan Fightcade. Pero han llegado a un punto medio: La versi¨®n del 30 aniversario de Street Fighter incluye el 2X y hay un script que extrae las ROMs y las hace compatible con Fightcade y, como ya han pagado por el juego, consideran que ya no est¨¢n incurriendo en la pirater¨ªa¡±.

La accesibilidad de Fightcade es otro de los puntos a favor del emulador. Oliva destaca lo sencillo que es encontrar rivales: ¡°Pongamos el King of Fighters de ejemplo. Lo que hac¨ªa la gente antes era abrir el juego, entrar en la sala y mirar si hay alguien. As¨ª pod¨ªan pasarse 5 minutos, hasta que cerraban y se iban. Pero en FightCade abres la aplicaci¨®n y la dejas abierta, te puedes pasar una hora o dos hasta que encuentras a alguien mientras haces otras cosas, lo cual es una facilidad. En el 1 s¨®lo pod¨ªas tener un juego abierto, pero en el 2 puedes tener varios al mismo tiempo. Quedar con amigos es tambi¨¦n muy f¨¢cil; no hay que abrir puertos. Tambi¨¦n puedes mirar partidas, jugar offline, y se graban las partidas. Puedes meterte a ver las mejores partidas de Street Fighter, y tenemos un sistema de ranking con las mejores partidas de la semana. Es sencillo montar torneos y eso hace que triunfe m¨¢s. Adem¨¢s, el emulador est¨¢ disponible para Windows, Linux y Mac, e incorpora salas de chat¡±. Asimismo, Oliva y Ros han logrado que Fightcade sea accesible para los streamers, de tal modo que sea f¨¢cil aplicar overlays y configurarlo en el OBS.

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Actualmente, Pau Oliva y Jordi Ros tienen en el horizonte nuevas misiones que cumplir con Fightcade, adem¨¢s de optimizar el funcionamiento del emulador y atraer a m¨¢s jugadores: ¡°Ahora es bastante estable y queremos incluir peque?as mejoras en los ranking, en la moderaci¨®n, en las b¨²squedas¡­ Tambi¨¦n queremos mejorar el replay, que es como un streaming y no se puede rebobinar por c¨®mo se guarda. Tambi¨¦n queremos mejorar el multijugador, que s¨®lo soporta a 2 jugadores y estar¨ªa genial que 4 personas pudieran jugar a las Tortugas Ninja¡±. Fightcade para sus creadores es un proyecto personal?que compaginan con la vida profesional. ¡°No se puede monetizar, pero s¨ª queremos que guste a la comunidad y le d¨¦ valor y nos compense a nivel personal. Hay que guardar un equilibrio entre qu¨¦ queremos hacer y qu¨¦ podemos hacer, combinado con la vida diaria¡±.

Adem¨¢s del cari?o de la comunidad, Fightcade ha proporcionado muchas alegr¨ªas a sus dise?adores, de entre las que destacan el Fightcade Offline Festival (Tudela): ¡°Se compraron muchas m¨¢quinas arcade japonesas y aprovechamos el nombre de Fightcade y aprovechamos para hacer un evento de 4 d¨ªas para jugar estos juegos. Antes no dispon¨ªan de muchas m¨¢quinas y gracias a ello decidieron invertir, y pasaron de tener una a 90. Vinieron franceses, italianos japoneses y mucha gente de fuera. La parte social es un plus¡±. Aun quedan m¨¢s combates para venir, pero la primera batalla de Fightcade se ha completado con una victoria para la comunidad: la preservaci¨®n de t¨ªtulos cl¨¢sicos en la escena actual online.

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