Expectativas fuera de 車rbita
El poder de convocatoria de las grandes empresas est芍 derivando en eventos digitales en ocasiones innecesarios, muchos pueden resumirse en notas de prensa.
Durante estas 迆ltimas semanas hemos presenciado tres eventos digitales de envergadura: Nintendo Direct, State of Play y Pok谷mon Presents. Tres retransmisiones centradas en ofrecer un vistazo a aquello que est芍 por llegar para las respectivas consolas o sagas de Sony y Nintendo; seguramente de los encuentros con m芍s seguimiento dentro de este tipo. Hay un punto en com迆n en todos ellos: se expres車 una decepci車n constante. Tengo la sensaci車n de que las grandes compa?赤as est芍n perdiendo el control de las expectativas de sus jugadores; que no se est芍 calibrando bien ese periodo que abarca entre el anuncio del evento y su puesta en escena.
Algo est芍 fallando.
La tarde o la noche de antes, entramos a Twitter o a cualquier foro y vemos listas eternas con deseos acordes a la mejor de las fiestas. Siempre falta algo m芍s, y no ser谷 yo quien niegue esa cierta sensaci車n de vac赤o al terminar muchos de esos encuentros. No creo que sean los usuarios quienes tienen la culpa, sino las compa?赤as por elevar expectativas en ocasiones infladas, sin correspondencia directa con lo que vamos a encontrar.
Algunos eventos podr赤an resumirse en notas de prensa
Anta?o, cada Nintendo Direct era un acontecimiento; digamos que los bombazos y sorpresas a modo de ?one more thing? eran un valor seguro. Merec赤a la pena quedarse hasta altas horas de la noche para ver qu谷 es aquello que se esconde detr芍s de unos escuetos ※estad atentos§. Somos reincidentes por naturaleza y, dentro de unos meses, volveremos a no perdernos la cita en nuestra posici車n de amantes de la cultura del videojuego. Por tanto, es necesario que haya algo m芍s de responsabilidad de parte de las grandes empresas a la hora de organizar estos eventos. Algunos podr赤an resumirse en notas de prensa; no necesitan convertirse en una convocatoria medi芍tica.
Identificado el problema, propongo varias soluciones. La primera pasa por no recurrir a nomenclaturas ※sagradas§ tan a menudo. Si tenemos apellidos como ※Mini§ es por algo, porque si recurres al formato que llev芍bamos esperando desde septiembre de 2019, es l車gico que la gente tuviese listas de deseos acordes a las de un E3. Y si no, haber avisado. Quiz芍 esas cosas (retrasos, ausencias de t赤tulos esperados#) hay que comunicarlas por otras v赤as y dejar que la fiesta sea para dar buenas noticias.
Se est芍 desperdiciando el poder de convocatoria
Nos ha pasado con los EA Play, Ubisoft Connect, Xbox Game Showcase, State of Play# Entiendo que la pandemia lo ha retrasado todo y est芍 haciendo que nos aproximemos a un calendario at赤pico. Con mayor motivo, si la situaci車n es extraordinaria toca actuar de forma diferente. Reunir a decenas de miles de personas para eventos que pueden dejar en peor lugar a tu marca no es la mejor idea. Es todo una cuesti車n de comunicaci車n. No creo que merezca la pena tender un pulso a la paciencia de los jugadores, comprometer esa confianza que tanto cuesta ganar. Ser m芍s precavidos y avisar de que no va a haber para tanto, en definitiva.
No entiendo para qu谷 levantar tal expectativa si no vamos a ver lo que la gente est芍 esperando. Con m芍s transparencia, cuando llegue el momento de la verdad se saborear芍 mejor. Seguramente hay elementos que se me escapan, como la necesidad de dar respuesta a accionistas y provocar que todo el mundo hable de ti en un momento dado. No s谷 cu芍l es la soluci車n a esta problem芍tica, lo que no cabe duda es que hay mucha gente frustrada.
Hay un inconformismo constante por parte de la comunidad al t谷rmino de estos eventos. Debe llegar el momento de pararse a pensar y reflexionar si verdaderamente esa comunicaci車n se est芍 haciendo lo mejor posible o se est芍 tensando la cuerda m芍s de lo necesario. Las grandes compa?赤as se han ganado la confianza de sus millones de fieles a base de videojuegos para el recuerdo; son ellos, los Sony, Nintendo y Microsoft, quienes tienen que moderar esas expectativas cuando no hay grandes anuncios en el horizonte.