For the People
- PlataformaPC6
- G¨¦neroAventura
- DesarrolladorBrezg Studio
- Lanzamiento13/08/2020
- TextoIngl¨¦s
- Editor101XP
Bienvenidos a la Uni¨®n de Comunidades Naranjas Populares
For the People, an¨¢lisis: todos somos corruptibles
Una Uni¨®n Sovi¨¦tica alternativa sirve de marco para un juego cuyo objetivo es mostrarnos como cualquier idealista, sometido a las circunstancias adecuadas, acabar¨¢ sucumbiendo a alguna forma de corrupci¨®n.
Quiz¨¢ tan antigua como la propia pol¨ªtica es la corrupci¨®n inherente al uso (y abuso del poder). Un tema tratado muchas veces, el del buen hombre inocente que, puesto en el lugar y momento indicados, acaba sucumbiendo a las inevitables tentaciones. Ese es el hilo conductor de este For The People.
Surgido de la mente de unos j¨®venes rusos y publicado por 101xp, este t¨ªtulo nos sumerge en una versi¨®n ficcionada pero altamente reconocible de la Uni¨®n Sovi¨¦tica en su etapa madura. Reconvertida en la Uni¨®n de Rep¨²blicas Naranjas Populares, se nos presenta como una sociedad altamente jerarquizada y profundamente corrupta, donde una peque?a parte hace y deshace sin importar las penurias del pueblo llano al que supuestamente se deben bajo la distra¨ªda mirada de un partido m¨¢s preocupado en mantener el control.
En nuestro papel de joven brillante, elegido por nuestros m¨¦ritos acad¨¦micos para liderar una ciudad de mediano tama?o, deberemos lidiar con la camarilla de caciques locales, el partido y las propias necesidades de nuestra poblaci¨®n mientras gestionamos los recursos de la ciudad, a un grupo de agentes parapoliciales y resolvemos un extra?o asesinato en nuestros ratos libres.
Alcalde pluriempleado
Efectivamente, hablamos de varias f¨®rmulas jugables distintas que debemos atender en distintos momentos de cada jornada laboral como alcalde, desarrolladas cada una a su manera. La principal es atender las quejas que recibimos en forma de cartas de nuestros conciudadanos. Resolver sus problemas nos costar¨¢ dinero, pero a la vez ignorarlos provocar¨¢ desde peque?os accidentes a grandes desastres, erosionando de paso nuestra popularidad a los ojos de nuestros conciudadanos, del partido o de ambos.
Pero aparte de la lectura de las peticiones ciudadanas, tendremos que lidiar tambi¨¦n con problemas que nos transmita el partido. Para ellas contaremos con una serie de fieles funcionarios, reconvertidos en una suerte de cuerpo parapolicial a nuestras ¨®rdenes, a los que deberemos encargar como proceder. Fracasar en estas misiones nos har¨¢ perder la confianza de nuestros superiores, lo que podr¨ªa hacer peligrar nuestra posici¨®n al frente de Iron 1.
A todo ello se a?ade nuestra obligaci¨®n diaria de decidir la producci¨®n de la factor¨ªa local, y a la vez decidir por qu¨¦ objetos (alimentos, medicinas...) de los que carece nuestra ciudad intercambiaremos esa producci¨®n. Aumentar la producci¨®n diario provocar¨¢ el estr¨¦s de los vecinos y nuestra p¨¦rdida de popularidad.
Pero por desgracia, coincidiendo con nuestra llegada a la alcald¨ªa deberemos lidiar con una pandemia y hambrunas entre nuestros vecinos, lo que nos obligar¨¢ a destinar esos recursos extra si no queremos que nuestros ciudadanos sufran y se rebelen contra nosotros. Adem¨¢s, deberemos cumplir con pedidos del partido, lo que nos obligar¨¢ a decidir si aumentar temporalmente el ritmo de producci¨®n, a costa de enfurecer a los trabajadores.
Esta parte de gesti¨®n de recursos es un a?adido un tanto in¨²til y poco divertido, siendo el ¨²nico reto acordarse todos los d¨ªas de sobre adquirir el recurso que en ese momento nos demanden los ciudadanos, y convirti¨¦ndose en simplemente tedioso a medio plazo.
Por ¨²ltimo, una vez acabe nuestra jornada laboral, empezar¨¢ nuestra vida como detective, conociendo a distintos sospechosos y comprobando pistas para poder realizar una posterior acusaci¨®n. Unas secuencias que nos permitir¨¢n conocer un poco m¨¢s a fondo Iron 1, nuestra ciudad, y la clase de gente que vive en ella.
Realidad inmoral
Pero la realidad es que toda la jugabilidad es una excusa para la narrativa, la cual est¨¢ centrada en mostrarnos y hacernos part¨ªcipes de la corrupci¨®n pol¨ªtica. Desde el mismo momento que ponemos un pie en nuestra oficina tenemos la oportunidad de dejarnos llevar por los distintos poderes f¨¢cticos en juego, y por muy decentes que queramos ser, esa marea nos arrastrar¨¢ hasta acciones poco decentes queramos o no. Este es un juego sobre corrupci¨®n y no vamos a poder escapar de ella, aunque podremos participar en distintos grados seg¨²n nuestras decisiones.
Eso s¨ª, la partida no se alargar¨¢ mucho. La forma en la que el juego est¨¢ dise?ado reduce nuestro periodo en la alcald¨ªa a apenas un par de semanas, lo que hace el elemento de gesti¨®n un tanto in¨²til, y a la vez deja una trama que va bastante al grano.
Esta escasa duraci¨®n se debe en parte al accidentado desarrollo del propio t¨ªtulo, tal y como explicaron los desarrolladores en su p¨¢gina de Steam. Nacido de una idea de amigos y desarrollado originalmente por colaboradores en su tiempo libre, con la meta de tener el juego en seis meses, la empresa result¨® demasiado ambiciosa y aquel primer intento de desarrollo acab¨® con la gente abandonando el proyecto. Solo gracias a la entrada de nuevos inversores y la profesionalizaci¨®n de su desarrollo, finalmente pudo llegar a buen puerto tras varios a?os de desarrollo. Este pasado ayuda a entender la sensaci¨®n que transmite For the People, la de un proyecto cuya ambici¨®n supera con mucho lo que realmente llega a materializar.
En lo t¨¦cnico el juego muestra una est¨¦tica cumplidora, pero sin alardes. La m¨²sica hace su trabajo con el objetivo de sumergirnos en la atm¨®sfera. Mientras, su accidentado desarrollo pasa factura en el apartado gr¨¢fico, que muestra irregularidades en los acabados e incluso alg¨²n toque un tanto cutre, como usar la cara de Emma Watson pasada por un filtro para uno de los personajes. Respecto al idioma, el juego solo llega en ruso, chino, ingl¨¦s y alem¨¢n, por lo que al estar basado completamente en la lectura, se recomienda un buen nivel de alguno de estos idiomas para disfrutarlo.
Conclusi¨®n
For the People cumple su misi¨®n de sumergirnos por un rato en el clima de decadencia moral de las d¨¦cadas tard¨ªas de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, a la vez que un alegato a la facilidad con la que cualquier ideolog¨ªa da paso a la creaci¨®n de ¨¦lites corruptas y explotativas. Por desgracia, lo hace con una ambici¨®n que supera sus posibilidades; qued¨¢ndose en un producto que podr¨ªa haber dado much¨ªsimo m¨¢s de s¨ª de haber centrado el enfoque en sus virtudes en vez de intentar abarcar todas las ideas de sus desarrolladores.
Lo mejor
- La forma en que los creadores han sabido reflejar los mecanismos de la corrupci¨®n.
- La experiencia de Iron 1 resulta cre¨ªble respecto a su organizaci¨®n como peque?a ciudad industrial.
- La m¨²sica ayuda a ambientar correctamente las distintas secciones.
Lo peor
- Se hace bastante corto: toda la historia se desarrolla en unas dos semanas de juego, y a pesar de los varios finales, la repetici¨®n de las mismas peticiones y eventos no invitan a la rejugabilidad.
- La parte de estrategia, as¨ª como la investigaci¨®n criminal, parecen pegotes que no acaban de estar pulidos, sinti¨¦ndose como un a?adido innecesario al juego.
- Para ser un juego basado en detectar suspicacias en los mensajes que leemos, la ausencia de espa?ol se puede hacer dura para quienes no controlen bien el ingl¨¦s
Correcto
No es lo ¨²ltimo ni lo m¨¢s original, tampoco cuenta con la mejor ejecuci¨®n, pero puede divertir si te gusta el g¨¦nero. Bien, pero mejorable. C¨®mpralo si te gusta el g¨¦nero y te gusta tenerlos todos.