La mejor m¨²sica de inicio en un videojuego. Press Start?
Selecci¨®n de videojuegos con temas musicales tan incre¨ªbles en el men¨² principal que siempre apetece escucharlos antes de empezar a jugar
El estreno hace unas semanas de las ediciones definitivas de Mafia II y Xenoblade Chronicles nos ha recordado algo que tienen en com¨²n. ?C¨®mo? Os estar¨¦is preguntando. Dejad de devanaros los sesos buscando coincidencias entre dos t¨ªtulos tan distintos, lo que queremos resaltar sucede antes incluso de presionar cualquier bot¨®n. Una vez arrancamos ambos juegos, en la pantalla de Press Start hay algo que nos impide empezar a jugar. S¨ª, nos referimos a los magn¨ªficos temas musicales que podemos escuchar en estas pantallas de mero transito. En el siguiente reportaje rescatamos estos y otros ejemplos de composiciones magistrales que retienen nuestro dedo sobre el bot¨®n que dar¨¢ comienzo a la partida.
Xenoblade Chronicles
Y empezamos con el cl¨¢sico moderno de Monolith Soft que fue llegando a todo el mundo entre 2010 y 2012. Sab¨ªamos, por su tr¨¢iler de lanzamiento y las glorias vertidas en la prensa especializada, que en Xenoblade Chronicles nos esperaba una aventura inigualable, y sin embargo, cuando por fin introdujimos el disco en nuestra Wii, m¨¢s de uno aguantamos las enormes ganas de comenzar la partida.
Una extra?a espada clavada en la llanura. Es de d¨ªa, la brisa mece ligera la hierba y las nubes se desplazan perezosas sobre el escenario. Comienza una melod¨ªa que se despliega lenta y nost¨¢lgica a trav¨¦s de las teclas de un piano. Se suman instrumentos, y las cuerdas entran en escena junto al anaranjado del atardecer. El ritmo de la m¨²sica aumenta, tambi¨¦n su intensidad, mientras los rayos del sol, que van muriendo poco a poco, hacen brillar el costado de la espada, que parece que requeriere de nosotros ser empu?ada. Pero seguimos esperando, porque seguimos escuchando. Cuando llega la noche Monado, que es as¨ª como se llama la espada, refulge con energ¨ªa propia bajo el cielo estrellado. El ritmo decae de nuevo, solo queda un viol¨ªn, que da paso de nuevo al nost¨¢lgico piano cerrando el c¨ªrculo perfecto mientras aparecen de nuevo las primeras luces del amanecer. Ahora s¨ª, presionamos el bot¨®n que nos abre las puertas a uno de los m¨¢s grandes viajes de nuestras vidas.
Mafia 2
No se escatim¨® con la banda sonora de Mafia 2. Esta historia cl¨¢sica de g¨¢nsteres americanos a lo largo de varias d¨¦cadas merec¨ªa una m¨²sica incidental a la altura, y vaya si la tuvo. Las excelsas composiciones se grabaron con la orquesta filarm¨®nica de Praga, que durante un tiempo vio sorprendida c¨®mo los videojuegos llamaban a su puerta para adornar sonoramente los o¨ªdos de futuros jugadores.
Las notas iniciales de Mafia 2 parecen el resumen de algo, una conclusi¨®n, la palmada en la espalda por lo vivido. Entonces arranca con br¨ªo, cabalgando pero a la vez contenida, y estalla en una parte central que nos arrastra con delicadeza y nos mece. Entran los coros, que se suman a las cuerdas a lo Leonard Bernstein. Despu¨¦s, todo se aten¨²a, y la m¨²sica dialoga de nuevo con nosotros como si fu¨¦ramos ya un viejo amigo para ella. Sublime.
Ori and the Blind Forest
Rime
El caso del precioso y delicado t¨ªtulo de Tequila Works es diferente. Aqu¨ª el problema para presionar Start viene tras haber avanzado hasta el final del juego. Rime va desvelando su secreto conforme avanzamos y cada cap¨ªtulo lo remarca con su t¨ªtulo (no vamos a caer en spoiler por aqu¨ª, no os preocup¨¦is). El caso es que La canci¨®n del mar, la maravillosa canci¨®n que pone brillante punto final, la vamos a tener presente en la pantalla de inicio de la segunda vuelta. Todas las cartas est¨¢n sobre la mesa, ya no hay nada que esconder, y la delicadeza de la melod¨ªa y la voz refuerzan la tremenda emoci¨®n que sentimos al terminar nuestro periplo. Es una canci¨®n que no solo querr¨¦is escuchar entera en ese momento, os aseguramos que en m¨¢s de una ocasi¨®n la buscar¨¦is en Spotify o Youtube. No solo es que sea muy buena, es que cada vez que la escuch¨¦is tendr¨¦is ah¨ª condensado en menos de tres minutos la emoci¨®n de lo vivido y sentido en esa aventura que tambi¨¦n es recept¨¢culo de memoria, que tambi¨¦n es ya, recuerdo.
Pero hay m¨¢s. Lo curioso del asunto es que tenemos dos versiones de la canci¨®n compuesta por David Garc¨ªa. Mirella D¨ªez Mor¨¢n interpreta la pulcra versi¨®n de los cr¨¦ditos finales. Es digamos el tema estrella de una banda sonora que ya de por s¨ª es tremenda de principio a fin. La versi¨®n que podemos escuchar en la pantalla de inicio tiene la voz de Silvia Guillem Cofreces, que se acompa?a a su vez por una instrumentaci¨®n distinta. Es una interpretaci¨®n m¨¢s racial, ligeramente aflamencada si se quiere, alejada de la perfecci¨®n del tema principal. Digamos que una es la versi¨®n que podr¨ªamos escuchar en una pel¨ªcula de animaci¨®n de Disney, y la otra la que nos deleitar¨ªa en una peque?a sala en directo. No hay que elegir una, por el contrario, habr¨ªa que dar las gracias por tenerlas a ambas. Aqu¨ª est¨¢n las dos en un solo v¨ªdeo, primero la de Mirella D¨ªez, y a partir del minuto 2¡¯46¡¯¡¯ la de Silvia Gillem.
Fallout 4
En Fallout 4 se nos mostraba un taller con una servoarmadura del Enclave, a su alrededor, un mont¨®n de detalles reconocibles por la legi¨®n de fans surgida a partir de Fallout 3. Desde el primer segundo reconocemos las notas graves de piano que acompa?an la escena, porque acompa?an tambi¨¦n nuestros sentimientos y los recuerdos de lo vivido en el anterior t¨ªtulo. Hay solemnidad en esas notas, y nos hacen sentir en casa, nos sabemos de vuelta de nuevo, y nos regodeamos contemplando y escuchando a sabiendas que tras pulsar Start volver¨¢n a brillar las sensaciones pasadas a?oradas durante largo tiempo.
The Legend of Zelda Ocarina of Time
La apertura de esta obra maestra es una secuencia en movimiento sin una narrativa expl¨ªcita. Adem¨¢s, la m¨²sica que suena en estas escenas tampoco es excepcional por sus apuntes sonoros. Eso s¨ª, es una melod¨ªa que refleja perfectamente lo que vemos en pantalla: el ¨ªntimo despertar de un mundo. Debemos pues ponernos en contexto. Encender en 1998 por primera vez la Nintendo 64 con Ocarina resultaba epif¨¢nico. Se trataba del salto a las tres dimensiones de una de las grandes franquicias de los videojuegos. Un salto que result¨® ser sublime y para la posteridad. Pero entonces desconoc¨ªamos que est¨¢bamos ante uno de los mejores juegos de todos los tiempos. Probablemente s¨ª sab¨ªamos por la prensa que comenz¨¢bamos nuestra aventura de ni?o. As¨ª pues, observar en esas escenas iniciales a un Link adulto cabalgando a Epona era algo digno de admirar. Pasar¨ªan varias partidas hasta que pudi¨¦ramos realizar esa acci¨®n por nosotros mismos, as¨ª que se convert¨ªa en un ritual dejar pasar esa secuencia por completo, con su Press Start suplicando ser pulsado en su parpadeo, hasta que por fin nos calz¨¢bamos las botas de adulto en esta aventura inolvidable.
Final Fantasy X
Desconcertaba la primera vez que ve¨ªamos la pantalla de inicio de Final Fantasy X. Por el impresionante salto gr¨¢fico de la franquicia en PS2 con respecto a PSX, pero sobre todo porque nos mostraba una escena de la que desconoc¨ªamos su significado. To Zanarkand, el sublime tema a piano de Nobuo Uematsu, nos recib¨ªa con unas sensibles notas de piano. Eran notas tristes, y el ambiente general del grupo protagonista, sentado cabizbajo alrededor de una hoguera, tambi¨¦n hac¨ªa presagiar duros acontecimientos. Result¨® que la mayor parte del juego se mov¨ªa en flashback en busca de esa escena. Para cuando lleg¨¢bamos a ese punto en la historia tras muchas horas delante de la pantalla, tambi¨¦n nosotros est¨¢bamos imbuidos de esa tristeza. Todo encajaba a la perfecci¨®n en una historia tr¨¢gica y compleja emocionalmente que nos iba a marcar para el resto de nuestras vidas.
World of Warcraft
Cambiamos los ambientes intimistas para meternos de lleno en la ¨¦pica, y entre los ejemplos posibles, en la m¨¢s grande todas. Las pantallas de Login de World of Warcraft anticipaban la entrada a otro mundo que se convertir¨ªa para muchos en su segunda casa. Miles de horas pasadas con amigos en el fant¨¢stico Azeroth, viviendo infinidad de experiencias que se impregnar¨ªan en los recuerdos de toda una generaci¨®n de jugadores a lo largo de sus m¨¢s de quince a?os de existencia.
Persona 5
El impresionante juego de Atlus se ha ganado a pulso salir del nicho que conforman los t¨ªtulos de culto para abrazar por fin audiencias m¨¢s amplias. La clase y el dinamismo de Persona 5 se ven en su fant¨¢stico dise?o, pero tambi¨¦n se escucha. La banda sonora es un no parar de hits,? modernidad bien entendida y buen rollo.
Medal of Honor Frontline
Es sorprendente el main theme de Michael Giacchino para Medal of Honor. Esta serie de videojuegos b¨¦licos ambientados en la Segunda Guerra Mundial, promovidos por un Steven Spielberg que acababa de entregar en cines Salvar al soldado Ryan, nos regalaba en el men¨² inicial un tema musical tremendamente sensible y respetuoso con el legado hist¨®rico. Se dir¨ªa que incluso celestial, como sentido homenaje a las millones de almas perdidas en el conflicto. Los coros y los vientos nos llevan en volandas hacia tiempos de dolor y sacrificio. Tambi¨¦n a la tradici¨®n cinematogr¨¢fica de la ¨¦poca, regada con grandes gestas que se impregnar¨ªan en el imaginario colectivo de generaciones por encima de la misma realidad, mucho m¨¢s ¨¢spera y prosaica que el pulcro rostro de una estrella de cine. No es de extra?ar que esta composici¨®n aparezca habitualmente entre los incontables conciertos de m¨²sica de videojuegos que se dan por todo el mundo.
My Brother Rabbit
Nos despedimos haciendo hueco a un juego peque?ito, que no solo de grandes nombres viven nuestros o¨ªdos. Esta deliciosa aventura gr¨¢fica con tono visual de cuento infantil cl¨¢sico (sus dibujos de corte parecen salidos de libros ilustrados de muchas d¨¦cadas atr¨¢s) nos recibe con una nana de notas enso?adoras cuya voz nos acuna no sin una pizca de extra?eza. La colaboraci¨®n entre Arkadiusz Reikowski (Layers of Fear, Kholat, Observer) y Emi Evans (NieR: Automata, Dark Souls) busca su identidad en la imaginaci¨®n infantil, en sus miedos, sue?os y deseos. Delicioso.
Sonoras reivindicaciones
No quer¨ªamos despedirnos sin hacer un par de incisos. Por un lado, mencionar un par de t¨ªtulos cuya pantalla de inicio no hace justicia musicalmente al tesoro que son sus bandas sonoras: Virginia, un videojuego de est¨¦tica c¨®mic y ambiente Lynchiano que hace un espectacular y radical uso del montaje cinematogr¨¢fico fragmentado; y Everybody?s Gone to the Rapture, walking simulator de tintes misteriosos donde Jessica Curry crea a base de coros un sacro b¨¢lsamo para el alma.
En segundo lugar, agradecer cuando los desarrolladores introducen dentro del juego una jukebox en la que disfrutar de la banda sonora al completo. Volviendo al inicio del reportaje, la versi¨®n de Switch de Xenoblade Chronicles carece de dicha opci¨®n, que s¨ª estaba presente en la de New Nintendo 3DS (recordemos, una versi¨®n vitaminada de la port¨¢til que permit¨ªa en exclusiva correr este exigente t¨ªtulo). Tiene especial significado porque el magn¨ªfico videojuego de Monolith Soft, en el que se ha hecho un esfuerzo al introducir el modo teatro, se habr¨ªa beneficiado del trabajo que ha sido la remasterizaci¨®n de la banda sonora. Habr¨ªa resultado un placer tener la original y la actual en una lista de reproducci¨®n en la que alternarlas ambas a placer. Afortunadamente hay estudios que s¨ª miman este detalle. Puzzling Dream nos brinda 30 temas en The Way. En esta pixelada historia futurista, el protagonista visita un remoto planeta con la intenci¨®n de devolver la vida a su fallecida esposa. Las notas del teclado se alargan tanto como la distancia que hay entre la Tierra y ese misterioso lugar¡ o como la que tambi¨¦n hay entre el protagonista y su amor perdido.
Por ¨²ltimo, queremos reivindicar la jukebox de Super Smash Bros. Ultimate de Switch. En un juego tan enorme es f¨¢cil perder la perspectiva. Contiene tant¨ªsimo material que ser¨ªa un crimen no prestar atenci¨®n a este aut¨¦ntico y descomunal tesoro. Nada menos que m¨¢s de 900 temas, m¨¢s de 30 horas de m¨²sica donde se recorre buena parte de la historia de los videojuegos. Clasificados por sagas (las de Nintendo como Mario, Zelda, Star Fox, F-Zero, Metroid, Kirby, Fire Emblem, Kid Icarus, Splatoon, Animal Crossing, Xenoblade, Pokemon, Pikmin, Donkey Kong¡ pero tambi¨¦n Castlevania, Banjo Kazooie, Persona 5, Mega Man, Street Figthter, MEtal Gear Solid,Dragon Quest, Sonic, Final Fantasy VII, Pac Man, Bayonetta, el DLC de King of Fury con 50 temas de SNK¡) no se limita a juntar temas cl¨¢sicos uno detr¨¢s de otro. Muchos de ellos contienen nuevos arreglos, lo que demuestra el mimo y esfuerzo detr¨¢s de este apartado. La jukebox nos permite adem¨¢s crear nuestras listas y escucharlo todo de forma lineal o aleatoria con la pantalla de la consola apagada, como si de un reproductor de MP3 se tratara. Resulta apabullante, imprescindible para los amantes de los videojuegos en general, y es de por s¨ª una raz¨®n de peso m¨¢s por la que hacerse con esta joya.
Estamos seguros de que mientras le¨ªais y escuchabais este reportaje os habr¨¢n venido a la mente mil ejemplos m¨¢s, cl¨¢sicos y modernos, de ayer y de hoy. No dud¨¦is en compartirlos con nosotros en las redes sociales. A ver si creamos entre todos un hilo de pantallas imprescindibles de Press Start. Esas que incluyen temas musicales tan maravillosos que fueron capaces de impedir que empez¨¢ramos a jugar.
Xenoblade Chronicles Definitive Edition
- Acci¨®n
- RPG
Xenoblade Chronicles Definitive Edition es una nueva versi¨®n del exitoso RPG de acci¨®n de Wii a cargo de Monolith Soft y Nintendo para Switch. Gracias a un nuevo ep¨ªlogo, gr¨¢ficos en alta definici¨®n, mec¨¢nicas de juego m¨¢s pulidas, pistas musicales remasterizadas y mucho m¨¢s, tanto los jugadores curtidos como aquellos que se atrevan por primera vez con este juego podr¨¢n disfrutar al m¨¢ximo de la versi¨®n definitiva de las aventuras de Shulk y compa?¨ªa.