Deliver us the Moon, an¨¢lisis. Una hipn¨®tica odisea del Espacio

Muchas veces hemos hablado de los ¡®juegos imperfectos¡¯, t¨ªtulos con carencias en uno o varios de sus apartados que, sin embargo, luego constituyen experiencias que nos dejan un calado mayor que una obra m¨¢s ¡®perfecta¡¯, con m¨¢s calidad en sus apartados -partiendo del concepto de que la perfecci¨®n intr¨ªnseca NO existe. Son juegos que por tal o cual causa no van a tener una puntuaci¨®n brillante, que si se miran con lupa sus partes se va a detectar fallos, pero que conforman una aventura emocional que puede engancharte. Deliver us the Moon es uno de ellos.

Salvar al Mundo

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El a?o es el 2030, la Tierra experimenta una enorme crisis energ¨¦tica a nivel global. El mundo empieza a perder sus oc¨¦anos, que se convierten en desiertos; las tormentas de arena son una constante. El planeta est¨¢ abocado a la extinci¨®n, pero un grupo de cient¨ªficos logra lo imposible: encontrar una fuente de energ¨ªa alternativa en la Luna, en el is¨®topo Helium-3. Y logran crear una base lunar que lo extrae, lo procesa, y a trav¨¦s de un rayo espacial, traslada esa energ¨ªa en bruto a la Tierra, que durante 15 a?os logra ver la esperanza.

Pero algo sucede, el llamado ¡®Gran Apag¨®n¡¯: de repente la base lunar deja de enviar la energ¨ªa, y nadie sabe qu¨¦ ha sucedido. Unos 5 a?os despu¨¦s es cuando arranca la trama de Deliver us the Moon, que tras debutar en PC el a?o pasado, llega al fin a las consolas PS -donde lo hemos analizado- y Xbox One, con un port para Switch previsto tambi¨¦n.

WSA

Como siempre hacemos, no vamos a desvelar m¨¢s de la trama, s¨®lo deciros que nos toca encarnar a un astronauta que debe ir a ver lo sucedido en el complejo lunar. Partiendo de bases reales -la crisis de los combustibles f¨®siles, el is¨®topo Helium-3 que enfrenta actualmente en debates a expertos que lo consideran una fuente poderosa de energ¨ªa alternativa-, la mayor baza de DUtM es precisamente su tremenda narrativa.

Cogiendo pedacitos de aqu¨ª y all¨¢, es f¨¢cil ver que el estudio KeokeN se ha dejado empapar de obras magnas del cine de Ciencia Ficci¨®n adulta e introspectiva como 2001 y su secuela 2010, el Interestellar de Nolan, Gravity, la cinta de culto MOON o el Wall-E de Pixar. La historia de DUtM es sencilla pero enormemente atrayente; no es especialmente original pero s¨ª bien construida, escrita y dosificada. Al estilo de los cl¨¢sicos Survival Horror de la 5? y 6? Gen, te toca ir uniendo las piezas de la trama recopilando documentos, diarios sonoros, fotos y hologramas.

Juntos componen un relato eficaz y delicioso para los amantes del Espacio, la Astrona¨²tica y las obras Sci Fi sobre el futuro de la Humanidad -si busc¨¢is duelos de naves o xenomorfos babosos, no los encontrar¨¦is aqu¨ª.

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Puzzle Narrativo

Con una duraci¨®n que oscila entre las 4 - 7 horas, dependiendo de si quieres ir a fundirlo sin m¨¢s o prefieres explorarlo a conciencia, el juego pide, ruega esto ¨²ltimo. Porque los coleccionables no son un mero elemento secundario para alargar artificialmente la duraci¨®n jugarle como pasa muchas veces, sino que en este caso todos son parte indisociable del argumento, y cuantos m¨¢s encuentres, m¨¢s sabr¨¢s del tapiz de personajes, historias y revelaciones que van sucedi¨¦ndose, de tal manera que ya en el ¨²ltimo nivel tienes el 90% de la historia atada.

Y la tienes porque la has descubierto tu, ya que las cinem¨¢ticas -hechas en base al original concepto de hologramas- te dan las pinceladas generales, pero muchas de las motivaciones y trasfondos de los personajes no. Muchos de los audios, hologramas y elementos que debes escanear no son dif¨ªciles de encontrar -la mayor¨ªa de las veces te salen al encuentro-, pero indudablemente se te pueden pasar algunos, lo que provoca que el final se quede un poco incompleto debido a dos notas de audio que precisamente se van desencriptando seg¨²n descubrimos m¨¢s coleccionables.

Astronaut Simulator

Pero da la sensaci¨®n de que Deliver us the Moon es un ¡®walking simulator¡¯, y nada m¨¢s lejos. Esto es un juego, no una experiencia jugable, y lo bueno es que es muy variado, y no siempre estar¨¢s haciendo lo mismo. Hay fases en gravedad cero por una estaci¨®n espacial en silencio; hay momentos de pilotar veh¨ªculos en la superficie lunar; de sobrevivir a paseos espaciales que r¨ªete tu de los de Sandra Bullock en Gravity -o de Kirk y Khan en Star Trek into Darkness-; de plataformas y hasta de disparos. Kudos a algunos instantes de tensi¨®n que parecen dirigidos por el Cuar¨®n de Gravity.

Algunas est¨¢n muy bien implementadas, como los saltos en gravedad cero o conducir sobre la Luna -un absoluto placer-, otros como el elemento de disparo se pueden hacer cuesta arriba por la forma de mapearlos en el mando. La mec¨¢nica que m¨¢s usar¨¦is es explorar y resolver puzzles, pero por otro lado la dificultad de las pruebas es nimia, y se resuelven r¨¢pido. Lo que no nos ha gustado son los 2-3 picos inesperados de dificultad, m¨¢s por necesitar un ajuste de la jugabilidad que por la prueba en s¨ª, y que provocan que se pierda el momentum y en un caso en concreto toda la tensi¨®n y espectacularidad de la escena.

El mapa en tu cabeza

Puede parecer que los escenarios son peque?os, pero no hay que olvidar que en las estaciones espaciales reales no hay precisamente mucho espacio f¨ªsico en el que moverse. Una de las cosas que m¨¢s nos han gustado es la ausencia del cl¨¢sico mapa como tal. Con el hub que tienes en la mu?eca lo usual habr¨ªa sido llevar un mapa en ¨¦l que fuese haci¨¦ndose visible a medida que exploramos.

Pero no, aqu¨ª el mapa lo llevas en tu cabeza. Bien es cierto que en cada sala ves paneles con el mapa del nivel en el que est¨¢s para no perderte demasiado, pero no te dicen m¨¢s que est¨¢s en tal o cual ¨¢rea. La exploraci¨®n la haces por tus propios ojos, y cuando est¨¢s en la superficie de la Luna es m¨¢s complicado.

Y es que este es de esos juegos que no requieren prisa, sino pausa. Con un tempo m¨¢s cercano a 2001 que a Star Trek (2009), Deliver us the Moon juega a posta con la baza que le proporciona el elemento espacial, esto es: trajes pesados, movimiento lento -aunque el personaje puede correr y a veces debe-, zonas de gravedad cero, etc. La contemplaci¨®n es uno de sus pilares, y DUtM nos entrega momentos jugablemente contemplativos hipn¨®ticos, con la belleza fr¨ªa del espacio, de los entornos as¨¦pticos y blancos, o del tremendo brillo solar en la superficie de la Luna.

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Outward

Usando el motor gr¨¢fico Unreal, a nivel gr¨¢fico no le pid¨¢is que sea un Battlefront o un Mass Effect Andromeda -precisamente le ayuda. Pero aunque sus texturas son simples y sus efectos rallando en lo indie, el conjunto y la direcci¨®n art¨ªstica hacen que te sumerjas de lleno y no te des cuenta. De hecho, la cantidad de momentos visualmente enormes es muy alta, y partes como el primer paseo lunar son hipn¨®ticas.

Por contra las animaciones del personaje se antojan poco fluidas -apoy¨¢ndose en la excusa de llevar un pesado traje espacial-, hay veces al reiniciar un checkpoint que las texturas tardan en cargarse, y al menos en PS4 da tirones y se para unos segundos cuando guarda autom¨¢ticamente.

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Hay un detalle que solemos ver por ejemplo en las pelis de Disney: titulares, carteles, fotos y recortes de prensa vistos en los escenarios salen en castellano, aunque si hay m¨¢s texto -el cuerpo de una noticia o una nota escrita por detr¨¢s- los ver¨¢s en ingl¨¦s. Eso s¨ª, todos los textos est¨¢n localizados al castellano.

El sonido del Espacio

Las voces est¨¢n en tres idiomas: ingl¨¦s, alem¨¢n o franc¨¦s, pero subtituladas al castellano. Y aunque a alguno le fastidiar¨¢ eso, quedaos con el hecho de que el doblaje original ingl¨¦s es excelente, con unos actores que transmiten la complejidad de los momentos y sentimientos que sus personajes viven.

Kudos al realismo, porque cuando estamos o flotando en el Espacio o sobre la superficie lunar, no se escucha nada a nivel de efectos de sonido, simplemente la m¨²sica cuasi ambiental y m¨¢s apagada. Y hablando de la BSO, la composici¨®n de Sander van Zanten es preciosa, triste, melanc¨®lica y esperanzadora. Sin subir de intensidad apenas, van Zanten toda distintos palos y logra transmitir la sensaci¨®n opresiva de soledad, de desesperanza, de nueva esperanza. Una composici¨®n magn¨ªfica de o¨ªr por separado, y que sin duda tiene al Interestellar de Hans Zimmer o al Ad Astra de Max Richter como referencias.