Zombie Army 4, impresiones

No deja de ser parad¨®jico que muchas de las grandes sagas de videojuegos actuales hayan surgido como una ramificaci¨®n de un producto principal. Ah¨ª est¨¢ el caso m¨¢s sonante quiz¨¢s de todos: el de Counter Strike, que naci¨® como un simple mod de Half Life y que r¨¢pidamente se populariz¨®.

Hay decenas de productos similares, pero hoy nos toca hablar de uno que est¨¢ subiendo puestos por m¨¦ritos propios: Zombie Army 4. La primera de estas entregas se lanz¨® al mercado como un a?adido para Sniper Elite V2, un contenido adicional incluido para que el jugador le sacara m¨¢s partido a¨²n a las mec¨¢nicas tan singulares de esta franquicia. Sin embargo, la producci¨®n tuvo tan buena acogida que Rebellion se puso manos a la obra para lanzar, por primera vez, un juego independiente con esta modalidad. As¨ª fue como lleg¨® al mercado la recopilaci¨®n de Zombie Army Trilogy y ahora, por supuesto, Zombie Army 4.

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Una vuelta de tuercas

Zombie Army siempre ha destacado por ser una especie de mod de Sniper Elite, pero con zombis nazis pululando por el mapa. Si comentamos esto es por una sencilla raz¨®n: a poco que se haya jugado a Sniper Elite alguna vez, el control de Zombie Army es muy familiar ¨Cpor no decir casi id¨¦ntico-. Esto es algo que desde el propio estudio saben bastante bien, as¨ª que en Zombie Army 4 se ha vuelto a apostar por ello, pero con una peque?a vuelta de tuercas.

El control del personaje principal en Zombie Army 4 es m¨¢s r¨¢pido, ligero y din¨¢mico. No hacemos referencia a la sensibilidad a la hora de manejar al personaje editable en las opciones ¨Cfaltar¨ªa m¨¢s-, sino a la fluidez entre animaciones. El movimiento es m¨¢s org¨¢nico y con transiciones m¨¢s r¨¢pidas, algo que en Sniper Elite es diferente al primar m¨¢s la pausa y la parsimonia (por aquello del sigilo, disparar con silenciadores y realizar todo aquello que no haga ruido).

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Adaptar el sistema de Sniper Elite V4 y meterle un puntito de frescura es perfecto, sobre todo teniendo en cuenta que el t¨ªtulo requiere de esta velocidad. Hay decenas de zombis en pantalla, a cada cual m¨¢s variopinto, y el jugador necesita y debe moverse deprisa. A partir de aqu¨ª, entra el siguiente punto: jugar con gente o no.

En la demo que pudimos probar en Londres tuvimos la oportunidad de disfrutar de un nivel de la campa?a y otro del modo horda. Todo esto se hizo acompa?ado por otros miembros de la prensa en un equipo compuesto por un total de cuatro jugadores. Zombie Army 4 se disfruta m¨¢s si se juega en cooperativo, y esa es una realidad que desde el propio estudio no han negado. S¨ª, puede jugarse en modo solitario, pero junto a otras tres personas es lo realmente apetecible.

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C¨®mo no, el planteamiento no difiere mucho de otros t¨ªtulos de g¨¦nero parecido. En la campa?a tendremos que ir cumpliendo determinados objetivos, aunque lo verdaderamente divertido es acabar con el mayor n¨²mero posible de zombis. En el modo horda, en cambio, la clave est¨¢ en soportar las diferentes oleadas que aparecen en pantalla vali¨¦ndonos de las armas, artilugios y cachivaches que tenemos a nuestro alcance.

M¨¢s all¨¢ de esto, dos puntos a tener en cuenta. El primero de ellos tiene que ver con las armas. Existen decenas de modelos diferentes para elegir, desde fusiles hasta rifles pasando por pistolas, escopetas y un largo etc¨¦tera con varios tipos dentro de cada categor¨ªa. Cada una de ellas se puede personalizar, lo que ofrece un abanico todav¨ªa m¨¢s amplio a la hora de c¨®mo se juega el t¨ªtulo. Por ejemplo, en la demo cogimos una escopeta a la que equipamos ataques de rayos l¨¢seres con cada perdig¨®n lanzado. A mayor variedad de ataques, m¨¢s posibilidades de acabar con los zombis.

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Y el segundo tiene que ver con las habilidades. El juego bordea la seriedad con el tono humor¨ªstico de las pel¨ªculas y series de clase B. Sabedor de ello, lo aprovecha y le saca partido: nuestros personajes cuentan con ataques especiales, limitados, etc. Todos, al igual que las armas, se pueden personalizar, con una curva de farmeo perfecta para subir aquellas habilidades que sean m¨¢s interesantes conforme a nuestra manera de jugar.

Como nota a destacar, nos ha gustado mucho el apartado t¨¦cnico. Vale, s¨ª, nada nuevo y muy parejo a lo visto en Sniper Elite 4, pero toda la demo la jugamos a 60 frames por segundo. Adem¨¢s, no hab¨ªa ni tirones ni ralentizaciones, tampoco incluso cuando aparec¨ªan muchos zombis en pantalla o de repente se ve¨ªa un compendio de fuegos artificiales digno de congelar ¨Cy sonrojar- a m¨¢s de un juego actual.

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Todo esto, y mucho m¨¢s, es Zombie Army 4. Un juego que sabe bien que no va a reinventar nada, pero que no necesita experimentar con mec¨¢nicas jugables exclusivas porque va a tiro hecho: busca que el jugador se divierta y disfrute disparando, con la actividad m¨¢s jovial, plana y accesible posible. Y a veces, aunque cueste creerlo, es justo lo que se necesita para pasar un rato agradable.