Darksiders Genesis
- PlataformaPS47.5STDPC7.5NSWXBO7.5
- G¨¦neroRPG, Acci¨®n
- DesarrolladorAirship Syndicate
- Lanzamiento05/12/2019 (STD, PC)14/02/2020 (PS4, NSW, XBO)
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
- EditorTHQ Nordic
Darksiders: Genesis, an¨¢lisis: llega el cuarto jinete
As¨ª es la cuarta entrega de la saga y precuela de la misma.
No es, a buen seguro, lo que estaba previsto, pero raramente en la vida salen las cosas como uno planea. Desde el Darksiders original estaba claro que las aspiraciones de Vigil con la saga estaban en el escalaf¨®n m¨¢s alto de una gran producci¨®n del videojuego. La clara inspiraci¨®n en Zelda, algo que muy pocos intentan, apuntaba a la ambici¨®n y confianza del estudio, armados adem¨¢s con el talento art¨ªstico de Joe Madureria para dar personalidad e impacto al dise?o de los personajes. La idea eran cuatro t¨ªtulos, uno por cada jinete del apocalipsis y cada uno m¨¢s ambicioso, tal y como qued¨® probado en el salto del primero al segundo -otra cuesti¨®n es si era mejor, pero el salto a varios niveles era evidente-.
Pero esos planes se estrellaron contra el cierre de THQ y Vigil tuvo que cerrar sus puertas para lamento de sus trabajadores, que ya hab¨ªan demostrado por activa y por pasiva que eran un grupo enormemente cohesionado con mucho esp¨ªritu de equipo y que disfrutaban trabajando juntos. Ese parec¨ªa ser el final de Darksiders, pero en un nuevo giro del destino la compa?¨ªa ¡°resucit¨®¡± y sus IPs volv¨ªan poco a poco a la vida. Un n¨²cleo de los integrantes de Vigil se hab¨ªan unido en Gunfire Games, un nuevo estudio, mientras que Joe Madureira ayudaba a montar Airship Syndicate, otro grupo con el que dar vida en forma de videojuego, v¨ªa Kickstarter, a uno de los proyectos en comic del artista: Battle Chasers. Los primeros fueron responsables de Darksiders 3 y, como todo es c¨ªclico, Airship tuvo la oportunidad de trabajar en este Origins, una precuela que tambi¨¦n sirve de introducci¨®n al cuarto jinete: Strife.
Llega el cuarto jinete
Y como dec¨ªamos, a buen seguro que no era la idea que esta cuarta entrega se presentara de esta forma . Ya con Darksiders 3 se vi¨® a las claras que el nuevo equipo no ten¨ªa los suficientes recursos como para continuar la escala presentada en la segunda parte. Pero el cuarto directamente cambia de g¨¦nero y se establece firmemente en el Hack¡¯n Slash de c¨¢mara a¨¦rea al m¨¢s puro estilo Diablo, lo que lo convierte en una rara avis dentro de la saga, algo muy distinto a lo que ha pretendido ser. Ah¨ª va la primera advertencia, los que busquen ecos del dise?o de mazmorras del primero, o de la soberbia est¨¦tica y construcci¨®n de mundo del segundo, no lo van a encontrar aqu¨ª: es un juego de una escala m¨¢s peque?a, m¨¢s concentrada, y aunque hace meritorios intentos por introducir elementos reconocibles de la saga dentro de los l¨ªmites de un g¨¦nero con fama de unidimensional, no deja de ser diferente a lo que han sido otros Darksiders.
Esto no es necesariamente malo, s¨®lo la obligada advertencia para los fans de la saga -que por otro lado seguramente no son ciegos y ya se habr¨¢n percatado antes de leer nada-. Y como no es sano criticar un juego por lo que no es, o por lo que no puede ser, aqu¨ª viene lo importante. Darksideres Genesis es un competente y entretenido Hack¡¯n Slash, especialmente atractivo para los que disfruten del cooperativo (y busquen cooperativo local, esa rareza en nuestros d¨ªas), con un buen apartado art¨ªstico, una excelente banda sonora y unos mimbres decentes para disfrutarlo las 1X horas que puede durar si eres aficionado al g¨¦nero. Igualmente, si eres aficionado al g¨¦nero tambi¨¦n puedes comprobar de primera mano sus costuras, particularmente en cuanto a profundidad y variedad de personajes, habilidades y enemigos frente a las alternativas m¨¢s potentes del g¨¦nero en la actualidad, como Path of Exile o Diablo 3.
La historia sirve de precuela de Darksiders y supone, como hab¨ªamos comentado, la aparici¨®n del cuarto jinete del apocalipsis: Strife, que hace pareja en plan ¡°buddy movie¡± celestial con Guerra. De hecho, los guionistas ten¨ªan claramente en la mente pel¨ªculas cl¨¢sicas del g¨¦nero como Danko: Calor Rojo y otras del corte: uno, un soldado con nervios de acero y poco sentido del humor que obedece ¨®rdenes, otro el verso suelto del grupo de cuatro, un deslenguado asesino con un oscuro pasado que afronta situaciones l¨ªmite con el chascarrillo en la boca. La din¨¢mica entre ambos resulta entretenida, con algunos di¨¢logos divertidos, aunque se echa un poco en falta el sentido de gravedad y autoimportancia de la serie. Todo en Genesis resulta m¨¢s ligero y desenfadado, sin esa gravitas un tanto forzada de pasadas entregas, que si bien es cierto que pod¨ªa resultar dif¨ªcil de digerir a veces, era tambi¨¦n parte del encanto de la serie.
Siguiendo el manual
El juego sigue una f¨®rmula bien establecida. Iremos avanzando por una historia marcada, completando episodios. Algunos ser¨¢n mapas de considerable tama?o que completar, otros ser¨¢n enfrentamientos con jefes finales. Una vez completado, se liberar¨¢ el modo m¨¢ximo de dificultad y podremos concentrarnos en el reto de crear los mejores personajes posibles. La dificultad normal es bastante asequible, apenas exige repetici¨®n y adem¨¢s cuenta con unos picos de dificultad que se agradecen para que no caiga en la monoton¨ªa. Mientras, el modo de dificultad m¨¢ximo es un reto adecuado para los que quieran entregarse a los placeres del grindeo, aunque entendiendo que Darksideres tiene algunas limitaciones.
Para empezar, lo obvio: s¨®lo hay dos personajes, as¨ª que la elecci¨®n de estilos es bastante limitada. La buena noticia es que podemos alternar entre ellos a placer en cualquier momento, lo que le algo de necesaria variedad a la partida. Pero los dos est¨¢n fijados en estilos muy marcados de combate, as¨ª que en global no hay demasiada variedad ni posibilidad de estilos alternativos. Guerra es un tanque capaz de aguantar castigo y realizar da?o masivo en cuerpo a cuerpo y a su alrededor; Strife (o Lucha si se prefiere) es un pistolero con poca resistencia, capaz de moverse ¨¢gilmente y atacar continuamente a distancia.
Dado que sus habilidades de combate tienen una progresi¨®n lineal y no hay objetos con los que equiparlos para personalizarlos, la evoluci¨®n de los personajes es bastante plana. La personalizaci¨®n llega a trav¨¦s de un amplio ¨¢rbol de esferas en las que podemos equipar almas de los monstruos con los que vamos acabando en combate. Cada una de esas almas tiene unas bonificaciones y tres distintos tipos de tier, que iremos ganando farmeando m¨¢s de esas criaturas. Algunos bonus son simples incrementos, otros aportan variaciones y extras que pueden ser ¨²tiles, aunque m¨¢s que perseguir builds, aqu¨ª lo que consiste es en subir experiencia y acabar con monstruos hasta que nos hagamos suficientemente fuertes. Como hemos dicho, no hay enormes cambios entre lo que hacemos con un personaje al principio y lo que hacemos al m¨¢s alto nivel, las din¨¢micas b¨¢sicas son las mismas y eso no es lo normal en el g¨¦nero.
Fatality
Lo que lo salva un tanto es el dinamismo del sistema de combate. Lejos de ser un juego pensado para el rat¨®n, en Genesis se aconseja el pad y el control recuerda m¨¢s a lo que ser¨ªa un Darksiders: con control directo del personaje, saltos, algo de plataformeo -no mucho, lo justo para no ser un incordio-, combos... No se trata aqu¨ª de tener muchas habilidades, el abanico es bastante limitado de hecho, sino de usarlas apropiadamente. Lo interesante viene de lo din¨¢mico que es el combate y las sinergias que se crean entre distintas facetas del mismo. Si podemos realizar un combo al final de la vida del enemigos, podremos pulsar un bot¨®n para hacer un finisher, que no s¨®lo luce bien sino que nos da una ¨²til ventana de invencibilidad. Si con Strife disparamos repetidamente, su barra de ira se incendiar¨¢ y tendremos disparo ilimitado y aumentado de cualquier tipo de arma por unos segundos -la munici¨®n normal es ilimitada, pero la especial debe ser recargada- Incluso podemos alternar con movimiento especial entre los protagonistas, de forma que su rotaci¨®n constante sea una ventaja -aunque tambi¨¦n podemos, casi totalmente, jugar solo con uno de ellos si as¨ª lo preferimos.
La ¨²nica opci¨®n de equipamiento disponible est¨¢ en las runas de la espada de Guerra y en la munici¨®n de las pistolas de Strife, que s¨ª podremos seleccionar en cada momento mediante un men¨² radial. Guerra puede cambiar su espada para que sea capaz de beber sangre de los enemigos para recuperar salud, o para marcarlos y que exploten cuando mueran, marcando a su vez a los que est¨¢n a su alrededor -muy satisfactoria, aunque se echa en falta la cl¨¢sica explosi¨®n de cuerpos-. Strife puede equipar balas con cargas para generar grandes impactos, o balas el¨¦ctricas que saltan de un enemigo a otro -especialmente ¨²til para situaciones con muchos enemigos en pantalla-. En modos de dificultad altos es conveniente alternar entre todas estas opciones para conseguir la versatilidad necesaria con la que salir de las situaciones, pero en el modo normal suele ser m¨¢s una cuesti¨®n de preferencia y de cambiar para tener algo de variedad.
La presencia de algunos puzles, ligerisimos, termina de conformar la singular propuesta de Airship Syndicate, un poco en tierra de nadie, que trata de llevar varios sombreros y lo hace con dignidad, aunque no hasta el punto de que se le pueda considerar a la altura de los mejores. Con m¨¢s personajes -quiz¨¢s los cuatro jinetes-, posibilidad de equipamiento y m¨¢s opciones de personalizaci¨®n del personaje, podr¨ªa poner el pie en esa liga, pero est¨¢ claro que esas alturas no estaban en los l¨ªmites marcados en este proyecto. Con todo, hay que insistir en que el pack es suficientemente completo para resultar una compra recomendable: tanto la misi¨®n principal como el modo arena -con oleadas de enemigos de creciente dificultad- nos mantendr¨¢n entretenidos durante bastantes horas, y completar el juego en el modo m¨¢ximo de dificultad es un buen reto, por lo que hay tela que cortar para los amantes del g¨¦nero.
Bastante atractivo audiovisualmente
Menci¨®n especial al elemento audiovisual, Genesis es muy vistoso, sabiendo bien como sacar partido a su c¨¢mara para mostrar expansivos escenarios que abarcan m¨¢s all¨¢ del mapa que recorremos. Hay buena variedad de ellos, algunos realmente llamativos y dotados de una gracia art¨ªstica notable. El dise?o de los personajes marca de la saga, el uso del color y las ilustraciones de Madureira para conducir la historia -a falta de cinem¨¢ticas- dan al juego ese aire agradable a los ojos caracter¨ªstico de las obras con la marca de Joe ¡°Mad¡±. Hay momentos en el que el uso de efectos nos deja un tanto a ciegas en la batalla -pero es algo aceptado en el g¨¦nero en cierta medida- y hay algunos usos de perspectivas y c¨¢maras que pueden tapar alg¨²n detalle importante en el escenario, pero el nivel general es bueno. Y el de la banda sonora, c¨®mo se ha mencionado antes, es muy bueno, con toda clase de melod¨ªas de mucho nivel que no hubieran desentonado en un proyecto de m¨¢s envergadura.
Conclusi¨®n
Darksiders Genesis es una buena manera de salvar los muebles y ofrecer ese prometido cuarto juego que termina de introducir a todos los jinetes. No es un t¨ªtulo que eleve la saga, ni la lleve a nuevas fronteras, y seguramente los muy fans desear¨ªan que la introducci¨®n de Strife hubiera sido m¨¢s apote¨®sica, o al menos m¨¢s en la l¨ªnea de otras entregas. Pero no resulta reprochable que los cuatro juegos de la serie beban de influencias distintas y tengan personalidad propia, m¨¢s que ser simples secuelas; le confiere una una cierta originalidad al conjunto. Genesis es menos ambiciosos que la tercera parte, pero considerablemente m¨¢s s¨®lido y mejor acabado, lo que no es un mal compromiso, aunque nos deja con ganas de que fuera m¨¢s grande de lo que es -incluso dentro de este estilo de Hack¡¯n Slash-.
Lo mejor
- Un buen hack'n slash, con un combate vistoso y din¨¢mico
- Buena din¨¢mica de pareja entre los dos protagonistas
- Cooperativo local
- Buenos gr¨¢ficos y gran banda sonora
Lo peor
- Un tanto limitado dentro de su g¨¦nero
- Falta de opciones de personalizaci¨®n y profundidad en la evoluci¨®n de los personajes
- Falto de un poco m¨¢s de ambici¨®n para tener el nombre que lleva
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.