The Baldur's Gate: Enhanced Edition Pack
Baldur's Gate - Baldur's Gate 2 Enhanced Edition, an¨¢lisis Nintendo Switch
Analizamos las versiones definitivas de Baludr's Gate y Baldur's Gate II en su llegada a consolas, concretamente en su versi¨®n para Nintendo Switch.
Seguramente no sea demasiado atrevido afirmar que le debemos a Obsidian y su gran ¨¦xito en Kickstarter con Pillars of Eternity este nuevo gusto por el RPG cl¨¢sico de vista cenital. Los casi 4 millones de d¨®lares recaudados en la plataforma de crowdfunding, en tiempos de bonanza de esta, dejaron patente que hab¨ªa hambre por recuperar una manera de hacer rol que se hab¨ªa perdido en pos de una f¨®rmula m¨¢s masificada, o si se quiere decir de otra manera, m¨¢s accesible al jugador medio. Gracias a eso llegar¨ªan Wasteland 2, Divinity: Original Sin y su secuela, Tyranny y por supuesto, los recopilatorios de grandes cl¨¢sicos que llegan este oto?o a consolas, entre ellos el que nos ocupa, el que re¨²ne en un mismo pack a Baldur¡¯s Gate y Baldur¡¯s Gate II.
La primera entrega marcar¨ªa un hito hace ya m¨¢s de 20 a?os, trasladando Bioware con gran acierto las reglas de dados, l¨¢piz y papel de Advanced Dungeons & Dragons al teclado y el rat¨®n, con una aventura extens¨ªsima ambientada en el universo de los Reinos Olvidados que hizo las delicias de los fans. Dos a?os despu¨¦s, Baldur¡¯s Gate II: Shadows of Amn consagrar¨ªa esa propuesta con un juego menos ¨¢rido y m¨¢s accesible, pero igualmente profundo, convirti¨¦ndose ambos en leyendas del g¨¦nero, unas leyendas que ser¨ªan resucitadas por Beamdog en 2012 con sus respectivas ediciones ¡°Enhanced¡±, mejoradas respecto a los originales y que llegan ahora a consolas en una conversi¨®n con sus pros y sus contras, y es que es evidente que estos juegos est¨¢n concebidos originalmente para disfrutarse en PC.
Leyenda del rol occidental
La perspectiva cenital no es la mejor compa?era del espect¨¢culo visual, no siendo este la mayor virtud de ambos juegos, pero Bioware quiso centrarse en otros aspectos que enriquecer¨ªan m¨¢s su obra, como es una gran profundidad con todo lo que tiene que ver con el rol. Exceptuando el editor de personajes, del cual solo podemos elegir clase, aspecto de la cabeza y el color de la ropa, a partir de ah¨ª nos encontramos con una gran cantidad de decisiones que tomar, consecuencias inesperadas, tramas, subtramas, misiones principales y secundarias¡ Lo sorprendente de esto es cuando lo ponemos en el contexto de 1998 y 2000, y descubrimos c¨®mo Bioware fue capaz de ofrecer tal complejidad hace ya m¨¢s de dos d¨¦cadas. El mundo de Baldur¡¯s Gate es rico en detalle, y requiere grandes dosis de paciencia para leer una ingente cantidad de texto -en perfecto castellano-, que en la versi¨®n para Nintendo Switch, la analizada para esta ocasi¨®n, presentan un tama?o de fuente algo peque?o bajo nuestra impresi¨®n, sobre todo si lo comparamos con lo visto en el port de Pillars of Eternity por ejemplo. Nada especialmente grave, de todos modos.
Otra de las credenciales de Balud¡¯s Gate es la libertad, ya que a pesar de no ofrecer un inmenso mundo abierto, s¨ª es f¨¢cil perderse en su entorno para llevar a cabo alguna de las m¨²ltiples misiones secundarias que surgen espont¨¢neamente hablando con alg¨²n NPC, siendo conveniente de vez en cuando para hacerse con algo de experiencia. Y ojo, lo de perderse puede ser algo literal, ya que al abrir el mapa no vamos a encontrar ninguna indicaci¨®n que nos d¨¦ facilidades para descubrir la localizaci¨®n de nuestro pr¨®ximo objetivo, habiendo como ¨²nicas pistas lo que podamos sonsacar a los personajes del juego o lo anotado en nuestro diario, un documento al que vamos a recurrir en numerosas ocasiones.
El juego da tambi¨¦n libertad para cometer errores, en defintiva, y tambi¨¦n en combate, un apartado que por supuesto est¨¢ al mismo nivel de complejidad que los dem¨¢s, y si apuramos, un puntito por encima en cuanto a dificultad y exigencia. La pausa t¨¢ctica no tardar¨¢ en ser imprescindible, y combates que al comienzo del juego se pueden solventar ordenando simplemente atacar a todos los miembros de nuestro grupo pasar¨¢n a ser todo un desaf¨ªo que habr¨¢ que pensar detenidamente y planificar para poder llevar a cabo. Es necesario tener un grupo equilibrado en cuanto a clases, y al mismo tiempo que tener guerreros y arqueros que puedan infligir da?o f¨ªsico, contar con magos y personajes de apoyo, completando un sistema de combate al que hace da?o cierto caos que se presenta con demasiados protagonistas en pantalla y no nos enga?emos, el control con pad -o Joy Con en este caso-, que no es ni mucho menos el adecuado. De hecho, si nos ponemos a¨²n m¨¢s exquisitos, el juego falla a la hora de pretender anticiparnos a los enemigos, haciendo pr¨¢cticamente imposible evitar un enfrentamiento por dos motivos principalmente: uno, y una vez m¨¢s, el control, y dos, y por encima de todo, el entorno visible en pantalla, escaso y que hace que cuando nos demos cuenta de la presencia de enemigos, ya sea demasiado tarde.
En general, el esquema de control en Nintendo Switch est¨¢ muy bien planteado, y resulta intuitivo, ya que comprobamos que al poco de comenzar la partida ya accedemos r¨¢pidamente a men¨² radial, mapa, inventario, etc. Pero es en algunas acciones puntuales donde se evidencia que con un teclado y rat¨®n estas ser¨ªan mucho m¨¢s sencillas, necesitando tambi¨¦n una precisi¨®n extraordinaria, como dec¨ªamos antes, a la hora del combate, algo que afortunadamente puede hacerse m¨¢s sencillo haciendo zoom en la imagen -que sin embargo no es posible con la acci¨®n pausada-. Podemos elegir, eso s¨ª, entre un control directo de los personajes o hacerlo mediante point & click, menos sencillo con joystick pero m¨¢s acorde con lo que exige el juego.
A nivel visual, como dec¨ªamos antes, ni Baldur¡¯s Gate ni su secuela son juegos brillantes -aunque s¨ª notables en el apartado art¨ªstico-, pero no es su intenci¨®n serlo en absoluto. Eso s¨ª, desde el punto de vista t¨¦cnico nos encontramos con un rendimiento impecable en port¨¢til y en dock, siendo la h¨ªbrida de Nintendo perfectamente capaz de mover ambos sin despeinarse, obviamente. Es en el apartado sonoro donde sorprende la solvencia no solo de su banda sonora, sino de su doblaje, con muchas l¨ªneas de texto en las conversaciones m¨¢s importantes, a pesar de la repetici¨®n de algunos chascarrillos de algunos de los miembros del grupo cuando reciben nuestras ¨®rdenes.
En cuanto a contenido, a las -muchas- decenas de horas que ya de por s¨ª ofrecen las dos entregas, hay que a?adir la expansi¨®n Siege of Dragonspear del primero, una algo inusual ya que fue creada por Beamdog 17 a?os despu¨¦s del juego original, m¨¢s la campa?a adicional The Black Pits. Mientras, Baldur¡¯s Gate II cuenta con las expansiones Throne of Bhaal, una sucesi¨®n de mazmorras a cual m¨¢s desafiante, y The Black Pits II: Gladiators of Thay.
Conclusi¨®n
Este pack que incluye Baldur's Gate y Baldur's Gate II, en su versi¨®n para Nintendo Switch, no es la mejor forma de jugarlos pero s¨ª es una de la que no dispon¨ªamos hasta ahora, y es de manera port¨¢til. No obstante no es algo que pueda achacarse a la h¨ªbrida, sino que simplemente, su jugabilidad est¨¢ pensada para disfrutarse con rat¨®n y teclado, pero a pesar de ello, el trabajo llevado a cabo en relaci¨®n a su esquema de control es notable. Se notan los a?os, m¨¢s de 20 concretamente, pero desde la perspectiva del tiempo o no, seguimos enfrent¨¢ndonos a dos RPG sobresalientes, con decenas -cientos, de hecho- de horas de contenido, profundos y exigentes que suponen una gran oportunidad para descubrir dos clasicazos del g¨¦nero.
Lo mejor
- Ambos juegos siguen siendo dos RPG fabulosos
- Profundidad, complejidad, exigencia
- Decenas de horas de contenido
- Traducidos al castellano
Lo peor
- Los controles con pad no son los ideales para disfrutarlos
- Algunos problemas de perspectiva, de distancia principalmente
- T¨¦cnicamente poco ambiciosos
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.