Little Misfortune: An¨¢lisis Pc. Una protagonista encantadora para un relato macabro y crudo

En verano de 2015, el estudio independiente sueco Killmonday Games no sorprend¨ªa con la excelente aventura gr¨¢fica Fran Bow, protagonizada por una atormentada chiquilla de 10 a?os. En su debut, los suecos nos ofrec¨ªan una aventura con una ambientaci¨®n muy personal, realmente dantesca por momentos, y que nos dejaba varias im¨¢genes verdaderamente impactantes por lo sangriento y grotesco de su propuesta. Pese a estar protagonizado por una inocente ni?a, Fran Bow tocaba temas realmente punzantes, controvertidos y adultos, en una suerte de reflejo de varias experiencias tormentosas de la vida de su creadora, Natalia Figueroa/Martinsson, quien adem¨¢s de crear la historia del juego, en cierto modo de forma terap¨¦utica para exorcizar los males de su pasado, tambi¨¦n se encargaba de todo el apartado art¨ªstico del mismo, dejando su impronta personal en toda la aventura. La otra mitad de Killmonday Games, y actual marido de Natalia, Isak Martinsson, se encargaba de las labores de programaci¨®n.

Cuatro a?os despu¨¦s de su debut, Killmonday Games nos ofrece su nueva propuesta, Little Misfortune, que cambia de registro jugable con respecto a Fran Bow. Si esta se concibi¨® en un principio como una aventura narrativa, y pas¨® finalmente a ser una aventura gr¨¢fica tradicional con elementos innovadores como los cambios de dimensi¨®n, Little Misfortune es una aventura interactiva centrada en la historia y en la toma de decisiones, que desgraciadamente no nos ha conquistado en la misma medida que lo hizo la anterior obra del estudio sueco. El sabor que nos ha dejado es bastante agridulce.

Por un lado volvemos a tener la excelente labor art¨ªstica de Natalia Martinsson, que nos deja un apartado visual personal, fresco y realmente bello y evocador. La historia vuelve a ser muy cruda, y vuelve a tener el impacto que tuvo en Fran Bow al presentarnos situaciones realmente duras y traum¨¢ticas a trav¨¦s de la perspectiva de una joven infante. Sin embargo, dicha historia no acaba de enganchar del todo, roza el tedio por momentos sin saber muy bien a d¨®nde dirigirse, y no est¨¢ nada explotada ni se profundiza demasiado en ella en las 3 horas escasas que dura la aventura. A nivel jugable estamos ante un t¨ªtulo simplificado hasta el extremo, y las decisiones que se nos plantean han demostrado no tener casi peso en el desarrollo de la aventura. Pese a ello, el toque Killmonday est¨¢ presente, y al final nos queda un t¨ªtulo que es un placer para los sentidos y que se aleja de lo ofrecido por otras obras para sumergirnos en un mundo macabro y desolador.

El verdadero horror que nos rodea

Misfortune Ram¨ªrez Hern¨¢ndez es una encantadora chiquilla de 8 a?os con una familia no tan encantadora. Al comienzo de la aventura, la vemos jugar inocentemente en su cuarto con sus juguetes. Mientras esto acontece, un misterioso narrador nos revela un ominoso destino para la peque?a Misfortune, momento en el cual la joven damisela hace ver al citado narrador que ella tambi¨¦n puede o¨ªrle, lo que dar¨¢ pi¨¦ al comienzo de la aventura. El narrador, al que la peque?a Misfortune oye dentro de su cabeza y al que ha tenido a bien ponerle el descriptivo nombre de ¡°Se?or Voces¡±, le hace una peculiar propuesta a la jovenzuela: ¡°Juega a mi juego y recibir¨¢s a cambio el premio de la felicidad eterna¡±. Nuestra protagonista decide jugar para obtener el codiciado premio, aunque en contra de lo esperable en una criatura de su edad, no es para ella para qui¨¦n ans¨ªa semejante obsequio, si no que es para su madre para quien anhela obtener la felicidad eterna.

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As¨ª pues, pasamos a seguir las instrucciones del Se?or Voces, y ya desde un primer momento nos percatamos de que algo no va bien, con ominosas visiones de parajes de pesadilla, un misterioso goteo de ni?os desaparecidos, y un zorro de formas antropom¨®rficas que ronda a Misfortune, con intenciones amorosas seg¨²n las sospechas de la peque?a y al que est¨¢ dispuesta a cortejar. Este peculiar c¨®ctel resulta muy atractivo en un principio, pero termina diluy¨¦ndose con idas y venidas sin mucho sentido y que no acaban de llevarnos a ning¨²n sitio. Pese a que apenas dura 3 horas, la aventura no nos cuenta demasiadas cosas ni nos ofrece momentos para el recuerdo, en un viaje que si bien busca ser confuso a prop¨®sito como una de sus armas, nos deja un poco fr¨ªos. Y al igual que ocurr¨ªa con Fran Bow, nos deja con un final muy abierto, aunque no ofrece tanta libertad a la interpretaci¨®n del jugador ni de lejos resulta ser tan satisfactorio como lo era aquel. Para ser una aventura interactiva centrada en la narrativa, esta carece de la fuerza y el empaque deseables.

El verdadero acierto en la narrativa de Misfortune vuelve a estar en la crudeza de lo que cuenta, y nuevamente el enfrentar a ello a una persona de tan tierna edad. Little Misfortune hace gala de una premisa triste pero cierta: los peores horrores no son aquellos que nos acechan en nuestras pesadillas, ni los males sobrenaturales que nos atormentan desde la incertidumbre o m¨¢s all¨¢ de nuestro entendimiento. Desgraciadamente, en ocasiones el verdadero horror viene de aquellos que nos rodean, de la amarga vida que nos ha tocado vivir, y de las crueles jugarretas que el caprichoso destino ha tenido a bien obsequiarnos. Si bien, al igual que en Fran Bow, nos volvemos a encontrar con la dicotom¨ªa entre el horror sobrenatural y el real, aqu¨ª la balanza se inclina descaradamente hacia el segundo. La vida de Misforune Ram¨ªrez Hern¨¢ndez es realmente cruda, llena de pesar y de circunstancias dantescas. Y la forma en que ello se relata esa una de las grandes bazas del juego. Porque este c¨²mulo de desgracias y situaciones tormentosas nos las ir¨¢ relatando nuestra protagonista desde el prisma de ingenuidad e inocencia propias de alguien de su edad, en las situaciones en las que uno menos se lo espera, y realmente resulta impactante y desconcertante por momentos. El golpe de realidad cruda, dolorosa e injusta que nos da Little Misfortune deja huella, ya que, desgraciadamente, lo que aqu¨ª se narra es el pan de cada d¨ªa para muchos desafortunados que nos rodean.

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Tambi¨¦n es menester destacar al personaje protagonista. La peque?a Misfortune Ram¨ªrez Hern¨¢ndez resulta ser una personaje memorable y arrebatador, llena de personalidad y con un car¨¢cter muy marcado. Resulta imposible no empatizar con ella y no caer rendidos a sus pies. Un aut¨¦ntico personaje para el recuerdo que nos deja una ristra de frases y expresiones inolvidables, con ese ya caracter¨ªstico ¡°Yikes Forever¡± por bandera. Killmonday Games han demostrado ser unos maestros creando grandes personajes infantiles con sus dos primeras obras, y desde luego con su nueva estrella han dejado el list¨®n muy, muy alto.

Aventura interactiva con escasa jugabilidad

El cambio de registro con respecto a la anterior propuesta del estudio es otro punto que no nos ha acabado de convencer. Estamos ante una aventura narrativa pura y dura, de hecho en Twitter los propios creadores han usado el hashtag #walkingsimulator para referirse a su obra. La jugabiliad de la aventura se basa en mover a Misfortune lateralmente en un ¨²nico plano de scroll, pudiendo interactuar con determinados elementos del escenario a partir de unos iconos que se despliegan en pantalla cuando ubicamos a nuestra protagonista en las cercan¨ªas de dicho elemento. Dichas interacciones no van m¨¢s all¨¢ de descripciones o empleo autom¨¢tico de objetos en contad¨ªsimas situaciones. El juego en ning¨²n momento nos enfrenta a ning¨²n impedimento para avanzar, salvo un peque?o y sencill¨ªsimo puzle en una situaci¨®n determinada, y un par de minijuegos no excesivamente inspirados. Su propuesta jugable nos ha parecido demasiado simple y plana, limit¨¢ndose a llevarnos de un lado para otro sin mucho que hacer salvo pulsar el bot¨®n izquierdo del rat¨®n donde queramos desplazarnos o pulsar el stick del pad en la direcci¨®n que queramos ir, o usar purpurina para endulzar el tr¨¢gico mundo que rodea a Misfortune. Esta simpleza jugable se ve agravada por una narrativa que tampoco enamora y sobre todo porque otra de las bazas del t¨ªtulo tampoco acaba de funcionar.

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Y es que a la hora de publicitar las bondades del t¨ªtulo, se ha puesto mucho ¨¦nfasis en que este nos someter¨¢ a una constante toma de decisiones que variar¨¢ los derroteros de la aventura. Y en un principio as¨ª es. Cada poco tiempo, tendremos que elegir, en cada caso siempre entre dos opciones, qu¨¦ decisi¨®n queremos tomar o qu¨¦ respuesta queremos dar ante lo que acontece en pantalla. En nuestra primera partida, esto result¨® prometedor y parec¨ªa ofrecer muchas posibilidades. Sin embargo, en la segunda vuelta que le hemos dado al t¨ªtulo, habiendo elegido las opciones opuestas a las de la primera vuelta, el desarrollo del t¨ªtulo ha sido pr¨¢cticamente id¨¦ntico, con variaciones m¨ªnimas en el desarrollo y casi imperceptibles en la trama, y que nos han conducido exactamente al mismo final de la primera vez. Es m¨¢s, en esta segunda vuelta nos hemos percatado de que muchas decisiones son trampa o directamente no son tal, porque acaba ocurriendo exactamente lo mismo en ambos casos. Lo que en un principio parec¨ªa una garant¨ªa de rejugabilidad, acaba siendo una mera excusa para que vivamos pr¨¢cticamente las mismas situaciones una segunda vez.

La aventura cuenta con una excelente localizaci¨®n de todos sus textos al castellano, con la garant¨ªa de calidad que ofrece el haber sido realizada por un veterano del sector como es Ram¨®n M¨¦ndez. Como ya hemos comentado, se puede jugar con teclado y rat¨®n o con un pad de control, y es que pese a que actualmente solo est¨¢ disponible en Pc, est¨¢ prevista su conversi¨®n a consolas en los pr¨®ximos meses.

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El arte de Killmonday Games

Donde nuevamente vuelven a destacar sin ambages los suecos, m¨¢s en concreto Natalia Martinsson, es en el plano audiovisual. El apartado art¨ªstico de Little Misforune es un derroche de buen gusto, saber hacer, personalidad y frescura. Visualmente estamos ante un t¨ªtulo precioso, bello y evocador a partes iguales, con unos gr¨¢ficos estilo cartoon con tonos acuarela y pastel que son una verdadera delicia. La caracterizaci¨®n de los personajes es magn¨ªfica, y el trabajo en las animaciones tambi¨¦n est¨¢ muy logrado, sabiendo aportar un puntito de humor entre tanta amargura. La cantidad de elementos imaginativos desplegada en pantalla resulta ser todo un alarde por parte de la creadora del arte del juego, la mencionada Natalia Martinsson.

Quien por cierto, hace doblete al llevar a cabo una labor inconmensurable al ponerle la voz a la protagonista de la aventura. Resulta incre¨ªble lo bien que encaja la labor de doblaje de Natalia con la personalidad de Misfortune, y lo acertado de su trabajo. La marcada personalidad de nuestra adorable protagonista queda completamente definida con la excelente tarea de doblaje que realiza su creadora. Para no ser menos, la locuci¨®n del ¡°Se?or Voces¡± resulta magistral igualmente, realizando otro trabajo maravilloso. Este fant¨¢stico apartado de doblaje acapara casi por completo el plano sonoro de la aventura, aunque tambi¨¦n nos encontramos varias melod¨ªas pegadizas y muy acordes con la personalidad de la protagonista, y que son capaces de aportar un tono positivo en medio de tanta amargura.

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