Contra: Rogue Corps, impresiones finales. A disparo limpio
La nueva entrega de la saga modifica sus bases y se convierte en un divertido Twin Stick Shooter alejado de los grandes valores de producci¨®n.
Las sagas cl¨¢sicas cambian con el tiempo, buscan nuevas mec¨¢nicas y tratan de reinventarse para ofrecer f¨®rmulas frescas que mantengan el inter¨¦s por la franquicia en cuestion. No es que los juegos de Contra hayan abundado en los ¨²ltimos a?os precisamente, aunque Konami ha tenido a bien comercializar Contra: Anniversary Collection, que como su nombre indica, es un recopilatorio de varios de los cl¨¢sicos de anta?o. Lo nuevo de la compa?¨ªa japonesa, Contra: Rogue Corps, rompe con el pasado.
Los antiguos run and gun de la saga eran t¨ªtulos de acci¨®n con desplazamiento horizontal, mientras que este nuevo cap¨ªtulo opta por la vista isom¨¦trica. El resultado es un producto bastante diferente, que no pierde, eso s¨ª, su enfoque en la acci¨®n. MeriStation ha acudido a las oficinas de Konami en Madrid para probar la experiencia para un solo jugador. Te contamos lo que nos ha parecido.
Damned City est¨¢ condenada
La historia del videojuego transcurre m¨¢s de un lustro despu¨¦s de los acontecimientos narrados en Contra III: Alien Wars. Regresamos a Damned City, una ciudad desbordada por la invasi¨®n de los alien¨ªgenas, de modo que no tendremos m¨¢s opci¨®n que liarnos a tiros contra todo lo que se mueva. Del argumento hemos visto m¨¢s bien poco, pero se intuye que el hilo conductor servir¨¢ de excusa para seguir disparando, por lo que nadie debe esperar un guion que trascienda m¨¢s all¨¢ de lo que es.
La ambientaci¨®n postapocal¨ªptica mezcla elementos org¨¢nicos y cibern¨¦ticos, que se reflejan en los escenarios y en sus criaturas curiosas y extravagantes. Todo ello se representa en un mundo tridimensional sucio y rugoso. A nivel gr¨¢fico se trata de una producci¨®n sin muchas pretensiones, aunque el juego funciona fluido y sin ralentizaciones.
En la direcci¨®n de Contra: Rogue Corps est¨¢ nada m¨¢s y nada menos que Nobuya Nakazato, un veterano de Konami que ya ha dirigido otros videojuegos de la saga. No nos enga?emos, Rogue Corps se aleja del pasado brillante de Contra y ofrece diversi¨®n sin mayores alardes. Nakazato se ha rodeado de un equipo modesto para crear un producto igualmente modesto.
Los preparativos antes del combate
El juego se desarrolla en dos tipos de escenarios. La base de operaciones y los niveles en s¨ª. En el campamento aliado podemos gestionar todo lo relacionado con los personajes. Cada uno de ellos dispone de dos ranuras para armas, una principal y otra secundaria. Adem¨¢s, tenemos la opci¨®n de instalar mejoras, desarrollar el potencial de las armas y adquirir nuevas.
La personalizaci¨®n va m¨¢s all¨¢. En el mundo de Contra: Rogue Corps no importa si pierdes un brazo o una pierna, pues los implantes cibern¨¦ticos est¨¢n a la orden d¨¦l d¨ªa. Es m¨¢s, ya ni quedarte sin sesera es un problema de vida o muerte. En la tienda de transplantes puedes adquirir un nuevo cerebro o someterte a una operaci¨®n para que te cambien el esqueleto al completo. No parece, sin embargo, que la cirug¨ªa est¨¦tica se lleve demasiado. Despu¨¦s de todo, disparar y esquivar deja poco tiempo para la coqueter¨ªa.
Quiz¨¢ por eso los cuatro protagonistas sean tan peculiares: Kaiser es un soldado musculado armado hasta los dientes, aunque entre sus incisivos no descanse un arma, sino un puro que no deja de fumar en ning¨²n momento; la se?ora Harakiri hace honor a su nombre y no duda en ofrecerse a llevar a cabo operaciones suicidas contra los alien¨ªgenas; Hungry Man no es humano ni extraterrestre, presume de su robusto cuerpo de oso de panda (literal, es un oso panda); por ¨²ltimo, pero no menos importante, Caballero no lleva armadura ni porta una espada, tampoco monta a caballo. Se asemeja a un monstruo, de su cabeza sobresalen unos pinchos y sus piernas son 100% mec¨¢nicas. El jugador puede elegir a cualquiera de ellos desde la base de operaciones. En la pr¨¢ctica, como son tan personalizables, no hemos notado muchas diferencias entre uno y otro, pero cada uno de ellos es especialista en un tipo de arma y posee ataques especiales exclusivos.
Hora de partir cabezas: as¨ª es Contra: Rogue Corps
Los minutos de asueto han concluido. Despu¨¦s de entrenar, equiparnos las mejores armas y disfrutar de un lifting corporal, nos dirigimos al veh¨ªculo que nos va a trasladar a la guerra. Las misiones se seleccionan desde un men¨² en el que figura la dificultad y otros detalles sobre la fase en cuesti¨®n. Como hemos mencionado, el sistema de juego difiere con respecto a otros t¨ªtulos de la franquicia. Los desarrolladores nos ofrecen un Twin Stick Shooter muy directo y divertido, pero que no enamora.
Manejamos al personaje a lo largo y ancho de escenarios no demasiado amplios, por lo que pronto se llenan de enemigos. La jugabilidad se basa en disparar y esquivar. Este ¨²ltimo punto es muy importante, puesto que el n¨²mero de alien¨ªgenas es tan elevado que enseguida empiezan a volar los disparos de un lado para otro. Por si eso no fuera poco, algunas localizaciones incorporan plantas venenosas y otros obst¨¢culos que debemos tener en cuenta. Konami ha creado un sistema de c¨¢maras m¨®vil que cambia de plano entre secciones, lo que da dinamismo al juego.
El dash juega, por supuesto, un papel crucial. De todos modos, ante tantos elementos en pantalla, a veces es complicado eludir todo lo que se nos viene encima. Las situaciones de caos se suceden y la muerte sobreviene en varias ocasiones. Afortunadamente, resucitamos un par de veces antes de que el verdadero sue?o eterno se cierna sobre nuestras cabezas. En niveles m¨¢s avanzados, tendremos que esquivar otro tipo de obst¨¢culos. Por ejemplo, en un momento determinado de la partida, dos enemigos mecanizados desplegaron un l¨¢ser que iba avanzando de manera vertical por la pantalla. La soluci¨®n era acabar con uno de esos robots para destruir el artilugio.
Contra: Rogue Corps es uno de esos t¨ªtulos en los que nos convertimos en barrenderos. S¨ª, la ciudad est¨¢ sucia, pero deja jugosos botines. Al barrer el escenario ¡ªlo decimos de forma figurada¡ª encontraremos gran cantidad de loot. Adem¨¢s, algunos elementos de los escenarios como las cajas o los cuerpos de los enemigos se pueden recoger para lanzarlos contra los monstruos.
En ese frenes¨ª imparable, cuando un alien¨ªgena cae herido, podemos acercarnos y realizar una ejecuci¨®n brutal; tambi¨¦n enfrentarnos a jefes finales muy duros de pelar o saltar por plataformas (esto nos ha parecido un poco m¨¢s torpe). Deberemos saber gestionar como es debido las habilidades de los personajes para desplegar nuestro poder en el momento oportuno. Lo mismo ocurre con los proyectiles, que son finitos. En cuanto a las armas, que se pueden cambiar con solo un bot¨®n, no se quedan sin balas, pero se sobrecalientan.
Los niveles iniciales son muy rejugables, pero no excesivamente variados. Eso s¨ª, uno de ellos cambia de esquema y nos plantea una misi¨®n de supervivencia en la que tendremos que hacer frente a varias oleadas de enemigos. En otra de las fases, una roca gigante amenaza con aplastarnos y nos obliga a correr mientras recogemos n¨²cleos de energ¨ªa. Esas parte plataformeras, como dec¨ªamos antes, se sienten poco imprecisas. El control no termina tampoco de hacernos click, manejar algunas armas no es todo lo intuitivo que podr¨ªa ser.
Contra: Rogue Corps saldr¨¢ a la venta el 26 de septiembre para PS4, Xbox One, Nintendo Switch y PC. La sesi¨®n de prueba se ha realizado en una PlayStation 4 y en solitario, pero el juego dispone de modo cooperativo.
- Acci¨®n
Contra: Rogue Corps representa el regreso de la m¨ªtica saga de acci¨®n y disparos a cargo de Toylogic y Konami para PC, PlayStation 4, Xbox One y Switch. Han pasado dos a?os del fin de las Guerras Alien y Damned City surge en el campo de la ¨²ltima batalla. En medio del caos aparece un grupo de canallas. Quiz¨¢ no sean los t¨ªpicos h¨¦roes, pero est¨¢n aqu¨ª para salvar el mundo... o al menos para hacerse ricos.