Warhammer Chaosbane - An¨¢lisis

Tras las decenas de juegos que han salido a lo largo de estos a?os de la franquicia, Games Workshop vuelve a poner el pu?o sobre la mesa con Warhammer Chaosbane. El nuevo t¨ªtulo que la m¨ªtica compa?¨ªa de miniaturas ha sacado junto a EKO Software busca crear una alternativa en lo referente al tradicional g¨¦nero del Hack n¡¯ Slash, que a lo largo de estos a?os ha sido gobernado con autoridad por t¨ªtulos como Diablo 3 o Grim Dawn. Algo curioso que nunca hab¨ªamos visto en el universo videol¨²dico de Warhammer. Cumpliendo su segunda semana en el mercado, analizamos este ¡°endiablado¡± t¨ªtulo y os hablamos de las diferentes caracter¨ªsticas, elementos y recursos que componen esta nueva obra de sangre y hordas.

Warhammer y Hack'n Slash. ?Qu¨¦ puede salir mal?

El lanzamiento de un nuevo videojuego de Warhammer siempre suele ser motivo de celebraci¨®n. Ya no s¨®lo por la cantidad de grandes t¨ªtulos previos que les avalan (Saga Dawn of War, Warhammer Total War, ¡­) sino por el inmenso e interesante LORE con el que cuenta el mundo de sus figuras. Desde su versi¨®n m¨¢s dist¨®pica y futurista ,-como es Warhammer 40.000-, hasta su vertiente de fantas¨ªa her¨®ica m¨¢s tradicional, que en este caso es la que nos ata?e. Warhammer Chaosbane une este interesante mundo con el hack'n slash de forma inequ¨ªvocamente eficaz. Un paso a tener en cuenta tras lo que nos ten¨ªa acostumbrados Games Workshop con t¨ªtulos de estrategia en tiempo real (Y algunos t¨ªtulos poco l¨²cidos en primera o tercera persona ) que se unen a la perfecci¨®n en algo que, pese a que nos haya parecido un poco descafeinado, puede resultar muy interesante de cara a t¨ªtulos posteriores.

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Para poner en contexto al jugador, y de cara tambi¨¦n a la gente que no conozca muy en profundidad el mundo de Warhammer, el juego nos introduce (con una voz en off al m¨¢s puro estilo Darkest Dungeon) la historia en cuesti¨®n.

En el auge de las hordas del Caos, el Imperio del Hombre est¨¢ en medio de una Guerra civil. Frente a la inminente muerte que parece traer Asavar Kul, que ha reagrupado a todas las tribus para hacerse con el control de Sigmar, Magnus se erige como estandarte del Imperio y acaba con Kul en combate singular. Con el fin de la guerra y la proclamaci¨®n de Magnus como nuevo emperador, las dispersas tropas del Caos urden un plan para que reine la oscuridad sobre el vasto Imperio del Hombre.

Cuatro clases donde elegir

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Bajo esta ¨¦pica introducci¨®n, elegiremos entre uno de los 4 personajes y clases que tiene Warhammer Chaosbane. El veterano capit¨¢n del Imperio Konrad Vollen (Guerrero cuerpo a cuerpo), el poderoso Alto Elfo Elontir (Mago DPS), la Elfa del Bosque Elessa (Exploradora DPS) o el enano Bragui Muerdehachas (Tanque cuerpo a cuerpo). Todos ellos con unas habilidades ¨²nicas que difieren seg¨²n el personaje, la raza y la clase que elijamos. Apelando por el confrontamiento directo, decidimos jugar la campa?a principal con Vollen. Sus ataques a mel¨¦ y sus habilidades de combate hicieron de la campa?a principal una experiencia de golpes y porrazos que rodeaban a nuestro personaje de puntos de da?o. Sin embargo esta experiencia var¨ªa enormemente seg¨²n el personaje que escojamos, as¨ª como su set, puntos y habilidades.

Un gameplay que vence pero no convence

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Con una curva de dificultad muy bien llevada. Los primeros compases del juego pueden parecer tranquilos, quiz¨¢ demasiado en algunas ocasiones. Sin embargo el desarrollo de las mazmorras nos ir¨¢ exigiendo cada vez m¨¢s hasta puntos en los que lo hemos pasado realmente mal. Esta curva variar¨¢ enormemente dependiendo del nivel de dificultad que le pongamos, entre los muchos que hay, as¨ª como el valor del bot¨ªn que nos dar¨¢n en la exploraci¨®n de las mazmorras y el desarrollo de la campa?a. En lo que ata?e al gameplay, las sensaciones han sido generalmente positivas. Es dif¨ªcil cansarse de atacar a los diferentes tipos de enemigos que nos encontraremos en cada dungeon. Incluso con Vollen, que probablemente sea el personaje m¨¢s gen¨¦rico de todos, la sensaci¨®n ha sido en t¨¦rminos generales positiva. La posibilidad de crear diferentes tipos de builds en cada personaje y la combinaci¨®n de sus diferentes tipos de habilidades, hacen del gameplay de Chaosbane algo s¨®lido y efectivo que es dif¨ªcil que canse. Sin embargo, en varios momentos lo consigue. Y es que entre la innecesaria extensi¨®n de algunos mapas, la poca variedad de enemigos en momentos dados y la elaboraci¨®n de tareas parecidas, la mayor¨ªa insustanciales; el juego peca de repetitivo y predecible y empapa con ello muchas de las cosas que en un principio nos gustan. A¨²n as¨ª, la fuerza del gameplay as¨ª como los enfrentamientos con algunos bosses de la historia (muy l¨²cidos algunos de ellos) tiene el gancho suficiente como para que, s¨®lo con jugarlo unas horas, quieras concluirlo (la campa?a dura unas 9 horas aproximadamente) o al menos, ver el loot que te dar¨¢n en la siguiente mazmorra.

Loot, mejoras, experiencia y habilidades

Otra de las cosas que caracteriza a Warhammer Chaosbane es el sistema de looteo. Con el componente rolero que caracteriza a los juegos del g¨¦nero, los enemigos nos ir¨¢n soltando diversos elementos que beneficiar¨¢n, en una medida u otra a nuestro personaje. Armaduras, armas, fragmentos de mejora, dinero¡­ Cada cosa con una utilidad espec¨ªfica que poco a poco ir¨¢n haciendo m¨¢s poderoso a nuestro h¨¦roe. Cierto es que el n¨²mero de dise?os en relaci¨®n a armas o armaduras no es muy variado. Sin embargo, las estad¨ªsticas del equipo, a pesar del dise?o, variar¨¢n seg¨²n su nivel y se adaptar¨¢n al modo de juego que tiene el jugador en concreto.

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Este equipo viene reforzado por un extenso ¨¢rbol de habilidades activas y pasivas ¨²nicas para cada personaje que se ir¨¢n mejorando o desbloqueando a medida que ganemos experiencia o fragmentos con los que podremos dar forma a la build que m¨¢s nos guste. La subida independiente de nivel por parte de cada personaje ayuda a la rejugabilidad, y da m¨¢s matices y opciones al juego as¨ª como a su gameplay. El dinero queda en un segundo plano en el juego, que sirve entre otras cosas para revivir si caes en medio de un combate. No hay comercio al uso, pero s¨ª podremos donar el equipo que no necesitemos para ir subiendo el nivel de caridad de nuestro personaje y recibir bonificaciones por ello.

Una historia floja adornada con Endgame y Multiplayer

Otra de las cosas que se han quedado a medio fuelle es la historia. Y es que pese a que tenga algunos momentos muy interesantes en su desarrollo, la sensaci¨®n general es insustancial y superficial. Una trama que bien pod¨ªa estar a la altura de las incre¨ªbles historias de la franquicia que s¨®lo consigue tocar su corteza. Ambientaci¨®n, entornos y mapas que parecen muy logrados en una primera incursi¨®n, pero que se repiten una y otra vez en cada una de las 3 zonas que comprende Sigmar. Pod¨ªan haber predicado con el ejemplo de t¨ªtulos de misma ¨ªndole como Diablo 3 o Grim Dawn y desarrollar una historia y misiones m¨¢s variada y menos repetitiva. Afortunadamente esto no es todo, y es que a pesar de la calidad media de su campa?a, el juego cuenta con un apartado endgame donde se abrir¨¢n las opciones Expedici¨®n y Asalto al jefe de cada mazmorra, donde podremos repetir nuestras gestas para obtener nuevo equipamiento. Adem¨¢s, tendremos la opci¨®n de obtener equipamiento her¨®ico especial con el modo Caza de Reliquias, donde tendremos que hacer una dungeon concreta en la que, seg¨²n su dificultad, obtendremos un bot¨ªn m¨¢s o menos valioso. Todo ello unido a un modo multijugador en l¨ªnea donde podremos unirnos a las aventuras de otros jugadores y amigos para luchar en grupo contra las Hordas del Caos. Algo que es claramente m¨¢s entretenido que hacerlo en solitario.

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Un juego con un gran apoyo sonoro

Lo m¨¢s destacable de Warhammer Chaosbane, adem¨¢s de su s¨®lido gameplay es su apartado sonoro. A lo largo de nuestra aventura, la m¨²sica y su banda sonora adquirir¨¢ un papel relevante. Acompa?¨¢ndonos por las ciudades de paso, as¨ª como en la exploraci¨®n de las dungeons y los combates con los bosses pertinentes, el sonido de estruendosos tambores y poderosos vientos dotar¨¢ al juego de ese elemento ¨¦pico que tan bien modelan las OST de corte medieval. Algo a tener muy en cuenta dentro del c¨®mputo global del juego.