Marvel¡¯s Spider-Man y sus DLC, inevitable sensaci¨®n de d¨¦j¨¤ vu

Cuando Sony anunci¨® que Marvel¡¯s Spider-Man ver¨ªa ampliada su historia principal con tres DLC, los fans del trepamuros comenzaron a ilusionarse con la posibilidad de poder enfrentarnos a otro pu?ado m¨¢s de villanos cl¨¢sicos del c¨®mic. Al final, es posiblemente una de las grandes virtudes de la obra de Insomniac Games, su fidelidad a la hora de representar tanto a Peter Parker como al resto de personajes.

La Ciudad que Nunca Duerme

Con la aventura principal nos qued¨® claro que la jugabilidad era m¨¢s que notable, que balancearnos era incluso placentero; que Nueva York, en cierta medida, nos pertenec¨ªa. Pero era justo pedirle algo m¨¢s a esos DLC, algo distinto. La Ciudad que Nunca Duerme, que es el nombre de este tr¨ªo de episodios adicionales, nos ha brindado ya dos de ellos: El Atraco, con Black Cat como protagonista, y Guerras del Territorio, con Hammerhead.

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Dos personalidades con mucho car¨¢cter y personalidad, solo que posiblemente no se haya aprovechado para ofrecer algo nuevo a la experiencia jugable sino a m¨¢s de lo que ya hab¨ªamos visto, cierto continuismo que deja esa sensaci¨®n de D¨ªa de la Marmota que no ha terminado de llenar a la comunidad, conform¨¢ndose con un acabado notable.

Con El Atraco pudimos percibir una voluntad de querer poner la guinda del pastel que ya ha sido de por s¨ª Marvel¡¯s Spider-Man, uno de los videojuegos m¨¢s exitosos de 2018 y candidato a GOTY en The Game Awards 2018. Una veintena de misiones, variedad de situaciones, alguna que otra nueva mec¨¢nica y una duraci¨®n muy bien calibrada para quedar satisfechos; eran 7,99 euros invertidos con cierto gusto al regresar un mes despu¨¦s al traje de hombre ara?a.

El problema llega con Guerras del Territorio, donde la corta duraci¨®n de la historia no permite construir una narrativa alrededor de Cabeza de Martillo. Impedir que sobresalva el enemigo protagonista resta epicidad a la pericia, elimina esa sensaci¨®n de sentirnos gratificados al ver los t¨ªtulos de cr¨¦dito. Pero si hay algo que ha dejado en cierto modo decepcionados a los jugadores es la falta de ¨¦nfasis en servir como nudo de una peque?a historia dividida en tres partes.

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El tercero de estos DLC se llamar¨¢ Silver Lining, que esperamos nos deje con la miel en los labios de cara a una secuela y presente de nuevo un conflicto en el que se planteen nuevos interrogantes, donde se ofrezcan respuestas que al mismo tiempo presenten m¨¢s inc¨®gnitas. Es decir, colmar el vaso con una historia que no sea superficial ni necesariamente autoconclusiva. Queremos ese atrevimiento que s¨ª tuvo la historia principal con un excelentemente construido Otto Octavio.

Porque no solo hace falta reincidir en lo argumental, en lo que se nos est¨¢ contando, sino en el aspecto eminentemente jugable, cuyo esquema de control, combos y combate pod¨ªa terminar siendo algo repetitivo despu¨¦s de las veinte horas de partida principal. Con El Atraco y Guerras del Territorio se introducen nuevos trajes que, al final del d¨ªa, se sienten m¨¢s como skins que como aportaciones plenas a la jugabilidad.

Hammerhead no cuenta con el pedigr¨ª de otros, no se siente tan distinto a como fueron en la aventura principal Rino respecto a Vulture o Electro, donde claramente ten¨ªan diferencias que obligaban al jugador a planear diferentes estrategias y formas de jugar. Tenemos la esperanza de que Silver Lining sea el que vuelva a poner el list¨®n en lo m¨¢s alto, que vaya m¨¢s all¨¢ con personajes como Yuri ¡ªque es la ¨²nica que est¨¢ recibiendo cierto protagonismo¡ª o los desaf¨ªos Screwball.

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Solo hemos visto una imagen de dicho DLC, uno que no puede permitirse durar tan solo tres o cuatro horas ya no porque se pueda sentir corto, sino porque ese tiempo sea insuficiente para narrar una aventura sin sentirse precipitada. Diciembre es el momento indicado para poner el punto y final de un t¨ªtulo que, ante todo, nos ha hecho emocionarnos de nuevo con Spider-Man a trav¨¦s de los videojuegos. Solo pedimos, no obstante, que termine por todo lo alto y no presentando dudas que no tuvimos all¨¢ por septiembre. Un buen postre puede compensar un dubitativo segundo plato.

A partir de este punto, el art¨ªculo contiene spoilers. Si no has terminado la historia, mejor espera.

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?Qu¨¦ esperar de Silver Lining?

El final de Marvel¡¯s Spider-Man es muy revelador. Por un lado, la confirmaci¨®n de que los Osborn engendrar¨¢n al Duende Verde en alg¨²n momento del futuro. Ese momento no va a ser el DLC, sino la secuela; no en vano, ser¨ªa estupendo un peque?o teaser de c¨®mo avanza ese momento o, lo que apunta quiz¨¢ m¨¢s probable, que en alg¨²n momento se confirme que Norman Osborn regresa de Europa para poner pies en Manhattan.

Asimismo, Doc Ock est¨¢ enfermo, pero no muerto. Un personaje con tanto potencial no puede desaprovecharse. Lo m¨¢s seguro es que en la secuela deje de ser villano y pase a tomar un papel m¨¢s secundario, pero desde la perspectiva aliada.

Y llegamos al punto m¨¢s interesante que servir¨ªa para ampliar el ya de por s¨ª redondo final de Marvel¡¯s Spider-Man en su historia principal: Miles Morales. Ya sabemos que tiene poderes, que en la secuela ser¨¢ el coprotagonista, pero no estar¨ªa nada mal verle de alguna forma en Silver Lining.

El conflicto alrededor de Yuri Watanabe debe finalizarse, pero cerrar el DLC solo con este suceso ser¨ªa una bala perdida. Sea quien sea el villano, la participaci¨®n de Morales (sin ser Hombre Ara?a) dejar¨ªa con la miel en los labios a los fans con coherencia y de manera cohesionada. ?Qu¨¦ tendr¨¢ preparado Insomniac? En unas semanas saldremos de dudas¡­