World of Warcraft Classic, reviviendo la edad de oro

Noviembre de 2004 fue la fecha elegida por Blizzard para encender la mecha de uno de los videojuegos m¨¢s importantes de las ¨²ltimas d¨¦cadas, World of Warcraft. El juego de rol online masivo lleva cont¨¢ndonos historias durante casi quince a?os. Por el camino hemos descubierto el reino qiraji de Ahn¡¯Qiraj, conocido a Illidan Tempestira y sus planes para con Azeroth, visitado las heladas tierras de Rasganorte dominadas por Arthas o vivido el renacer de Alamuerte. A lo largo de las siete expansiones que actualmente sujeta el cliente del juego hemos presenciado multitud de cambios tanto en la historia del mismo como en la jugabilidad y ambas nunca han sido del agrado de muchos de sus jugadores.

Intentar arreglar esta situaci¨®n solo era posible volviendo a sus or¨ªgenes como otros videojuegos ya han hecho. EverQuest y su continuaci¨®n cuentan con servidores cl¨¢sicos, Lineage II acaba de lanzar recientemente el suyo, los usuarios de Rift llevan desde marzo redescubriendo el mundo de Telara y hace un par de semanas la empresa tras The Lord of the Rings Online anunci¨® que se subir¨ªa al carro de lo cl¨¢sico para ofrecer desde cero la experiencia original que en su d¨ªa se ofrec¨ªa en el videojuego, aunque eso s¨ª, con matices.

Mientras que Blizzard jugaba a los h¨¦roes con Overwatch (producto resultante del que iba a ser su pr¨®ximo gran MMORPG, Titan) y pasaba el tiempo en las tabernas de Hearthstone, la comunidad nost¨¢lgica del multijugador masivo empleaba su tiempo libre en crear servidores gratuitos de la primera versi¨®n de World of Warcraft. En realidad ya exist¨ªan desde hac¨ªa bastantes a?os pero solo uno fue capaz de alterar a la compa?¨ªa de su entonces CEO Mike Morhaime, Nostalrius. El 10 de abril de 2016 (tras una petici¨®n judicial firmada por la empresa americana) fue el d¨ªa en el que los creadores del proyecto tuvieron que apagar sus servidores... pero el terremoto tan solo hab¨ªa comenzado.

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Detallar lo sucedido entre aqu¨¦l abril de hace dos a?os hasta el anuncio de World of Warcraft: Classic en la BlizzCon de noviembre de 2017 dar¨ªa para un reportaje entero pero se resume en millones de protestas hacia Blizzard por parte de sus seguidores en foros, v¨ªdeos, recogidas de firmas e incluso con diferentes eventos en servidores privados. Para a?adir m¨¢s le?a al fuego el actual presidente de Blizzard, J. Allen Brack se re¨ªa de los jugadores con su famosa cita ¡°you think you do, but you don't¡±. Poco despu¨¦s la compa?¨ªa cit¨® al equipo de Nostalrius en sus oficinas para debatir sobre los planes de un futuro servidor ¡°pristine¡±.

En noviembre de 2017, como hemos mencionado en el p¨¢rrafo anterior, Blizzard anunciaba en su propia feria mediante un nost¨¢lgico v¨ªdeo protagonizado por Chromie el regreso de World of Warcraft en su versi¨®n original bajo la coletilla Classic y ahora, un a?o despu¨¦s, hemos podido acceder a la beta que se inclu¨ªa con la entrada a la BlizzCon de este a?o.

Regreso al futuro

Ejecutar el videojuego, volver a escuchar la emblem¨¢tica pista de audio que nos invitaba a introducir nuestro usuario y contrase?a con ese imponente Portal Oscuro de fondo y comprobar que nada ha cambiado, todo sigue igual. Solo un dato nos recuerda que estamos volviendo a Azeroth catorce a?os despu¨¦s, la fecha de ¡°fabricaci¨®n¡± de dicha demo, 22 de octubre de 2018. La creaci¨®n de personajes tambi¨¦n sigue como anta?o, con sus escasas opciones de personalizaci¨®n y gazapos en la traducci¨®n al castellano (tomada prestada de la primera adaptaci¨®n que hubo a nuestro idioma en los ¨²ltimos meses de vida de vanilla) as¨ª como las pantallas de carga, a baja resoluci¨®n y con el arte antiguo. Pura nostalgia para nuestras retinas.

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Una vez creado nuestro personaje la demostraci¨®n eleva sus capacidades a nivel quince por una sencilla raz¨®n; las clases ya disponen de habilidades ¨²nicas que las hacen diferenciarse unas de otras. Con esta premisa los jugadores pueden probar la rama de talentos, domesticar nuevas mascotas, probar las artes oscuras del sacerdote o proteger al grupo con la estancia defensiva del guerrero entre otras caracter¨ªsticas. Nosotros hemos probado diferentes clases y si bien nos ha parecido que todas las habilidades disponibles coincid¨ªan con sus hom¨®nimas en 2005, hay algunas que no parec¨ªan estar presentes en su d¨ªa o fuera de lugar, aunque esto quiz¨¢s se deba a que tan solo es una demostraci¨®n temprana.

Lo cierto es que el equipo tras Classic ha tenido ciertos problemas a la hora de trasladar a los jugadores la anta?o ¨¦poca dorada de WoW al presente. El cliente original basado en la actualizaci¨®n 1.12 conten¨ªa muchos errores, agujeros susceptibles de ser utilizados por hackers, problemas para mantener a los bots a raya y multitud de problemas que con el actual cliente no suceden. Entre otros inconvenientes estaba el hecho de que la versi¨®n original no pod¨ªa integrarse en la plataforma Battle.net y este era un requisito indispensable para la compa?¨ªa. Lo que han hecho los desarrolladores es trasladar las bases de datos, parches, gr¨¢ficos y todo lo relacionado con la versi¨®n de 2006 al cliente actual basado en Battle for Azeroth. En el panel dedicado a esta vuelta a los or¨ªgenes se explic¨® dicho proceso, los inconvenientes que ocasionaban y la forma de solventarlos. Un ejemplo de ello ser¨ªa la clase p¨ªcara que utiliza puntos de combo para asestar habilidades al enemigo. En el cliente actual el videojuego sabe que esos puntos pueden utilizarse en un enemigo diferente en cualquier momento mientras que en la versi¨®n original estaban destinados a un ¨²nico enemigo y se perd¨ªan al perecer. Esa caracter¨ªstica -entre otras- han tenido que reescribirla para que funcionara con el cliente actual.

?Igual que el original?

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Nuestra experiencia con World of Warcraft: Classic ha sido tal y como esper¨¢bamos aunque con algunos matices. La regeneraci¨®n de vida y man¨¢ se sent¨ªa diferente a c¨®mo era hace catorce a?os. Lo mismo ocurr¨ªa con el da?o recibido y asestado, quiz¨¢s algo menor y mayor respectivamente al que nosotros record¨¢bamos. En diversos foros relacionados con el videojuego se ha comentado que esto, en mayor medida, se debe a la equipaci¨®n que Blizzard ha otorgado de serie a las clases en esta demostraci¨®n, algo con lo que nosotros no estamos muy de acuerdo. Todo aqu¨¦l que haya jugado al original sabr¨¢ que era dif¨ªcil equiparse con objetos de calidad y que pr¨¢cticamente los veinte primeros niveles ¨ªbamos en cueros. No obstante siempre ca¨ªa alg¨²n verde que si bien no eran la panacea s¨ª ayudaban al personaje a tener m¨¢s armadura, intelecto, fuerza, agilidad o cualquier otra estad¨ªstica principal beneficiosa. En la demostraci¨®n los personajes cuentan con tres o cuatro objetos de equipamiento de calidad verde pero no todos ofrecen jugosas estad¨ªsticas para el jugador. Por ejemplo el mago lleva una varita de calidad superior que no otorga beneficios a los par¨¢metros base, tan solo al da?o si disparamos descargas con ella. O el arma, con tan solo un punto extra de intelecto. Ambos son insuficientes de por s¨ª solos para que nuestro personaje haga cr¨ªticos cada pocas descargas de escarcha de m¨¢s de 100 puntos de da?o.

Por otra parte las misiones funcionaban con total normalidad salvo aquellas en las que el objetivo se encontrara fuera de los l¨ªmites impuestos por la demostraci¨®n -P¨¢ramos de Poniente y Los Bald¨ªos-, con sus escuetas pistas sobre el cometido a elaborar, nada de informaci¨®n impresa sobre nuestro mapa ni informaci¨®n en el tooltip del enemigo. Las ramas de talento tambi¨¦n parec¨ªan funcionar a la perfecci¨®n, al menos aquellas relacionadas con el tiempo de lanzamiento de hechizos pues son las m¨¢s sencillas de comprobar a primera vista. No est¨¢n disponibles ninguna mazmorra ni tampoco la posibilidad de entrar en Juegos de Guerra, de hecho el PvP es una de las caracter¨ªsticas en las que todav¨ªa tienen que trabajar.

Mejorando lo pasado

Si bien la demostraci¨®n sirve para comprobar que Blizzard se toma en serio el replicar la experiencia de juego al mil¨ªmetro como en 2004, lo cierto es que s¨ª se han hecho cambios tanto en el cliente como en la jugabilidad. World of Warcraft: Classic cuenta con la posibilidad de vitaminar su aspecto gr¨¢fico con opciones como el SSAO, controlar el aspecto de los rayos del sol, aumentar la vegetaci¨®n o mejorar los l¨ªquidos (agua m¨¢s realista que en Vanilla). Para los m¨¢s puristas existe un bot¨®n de configuraci¨®n llamado Classic que reduce los gr¨¢ficos al m¨¢ximo de lo que en su d¨ªa pod¨ªamos permitirnos en el videojuego, ?incluso reduce la resoluci¨®n del mismo a 800x600!

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Por otra parte los cambios en la jugabilidad vienen dados por la decisi¨®n de aplicar desde el inicio el n¨²mero de perjuicios m¨¢ximos a 16 cuando en su concepci¨®n fue de 8. Tambi¨¦n el sistema de reparto del bot¨ªn, que ahora se podr¨¢ intercambiar con los miembros del grupo durante las dos horas siguientes a su adquisici¨®n. El ¨²ltimo cambio y quiz¨¢s m¨¢s importante es la nula compatibilidad de los addons antiguos con el nuevo cliente puesto que la API de la versi¨®n 1.12 permit¨ªa incluso automatizar los combates.

Y llegamos a la faceta m¨¢s pol¨¦mica de la demostraci¨®n; el sharding. Con tan solo un mapa por facci¨®n a recorrer, el l¨ªmite de jugadores explor¨¢ndolos iba a suponer una molestia m¨¢s que una experiencia de juego fluida para los mismos. O eso pensaba Blizzard ya que solo dos de los veinte reinos cuentan con una aceptable poblaci¨®n. Para no entorpecer ni saturar el servidor los programadores han habilitado una funci¨®n llamada sharding que lo que hace es crear varias capas del escenario en un mismo reino para que no hayan problemas de lag dispersando as¨ª a los jugadores entre ellas. Esto ha creado un pol¨¦mico debate entre los m¨¢s cl¨¢sicos pues en su d¨ªa no exist¨ªa esta tecnolog¨ªa y los jugadores formaban grupos para terminar las misiones en zonas extremadamente pobladas, creando un ambiente social ameno y cooperativo. Con el sharding se pierde esa esencia cl¨¢sica en la que deb¨ªamos esperar la reaparici¨®n de enemigos para ser los primeros en asestarle un golpe y la connotaci¨®n social, pero se gana en tiempo, algo que justamente no preocupa en absoluto a los fans de la ¨¦poca cl¨¢sica. Las cr¨ªticas no han tardardo en aparecer de diferentes formas e incluso existe un hashtag para pedir a Blizzard que no haga uso de esta tecnolog¨ªa en el lanzamiento oficial. Se han pronunciado al respecto confirmando que no habr¨¢ ning¨²n tipo de sharding aunque tambi¨¦n han dejado la puerta abierta a recurrir de t¨¦cnicas similares para no congestionar los servidores los primeros d¨ªas.

Verano de 2019, la fecha elegida

La cuesti¨®n es que la demostraci¨®n de World of Warcraft: Classic nos ha encantado, ha hecho que la espera mereciese la pena y aunque a primera vista no lo parezca, el trabajo detr¨¢s de ella es abrumador como bien se nos comenta en este documento. Todav¨ªa queda mucho por hacer y dudas que resolver; ?pondr¨¢n los ¨¢rboles de talentos de la 1.12 desde el inicio o ir¨¢ cambiando con cada parche?, ?estar¨¢n las clases totalmente balanceadas o seguir¨¢n el patr¨®n de cambios que tuvieron en su d¨ªa?, ?las habilidades que tendremos ser¨¢n las definitivas o mutar¨¢n con cada actualizaci¨®n?, ?habr¨¢ en alg¨²n momento un salto hacia The Burning Crusade? Bueno, sobre esto s¨ª han dejado entrever que escuchar¨¢n a la comunidad¡­

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Para nosotros ha sido una experiencia fascinante. Poder volver a pisar Azeroth tal y como la ide¨® Blizzard hace catorce a?os es algo que todo amante de los juegos de rol online masivos deber¨ªa de experimentar al menos una vez en la vida. Nada de lo que actualmente ofrece World of Warcraft es comparable a lo que en su d¨ªa se viv¨ªa en aquellos reinos iniciales donde la cooperaci¨®n, las charlas entre amigos, la exploraci¨®n titubeante o el miedo a ser atacado por varios enemigos reinaba en el ambiente. El chat de Barrens ha vuelto, las peticiones de grupo, las ventas de objetos verdes a trav¨¦s del canal general, la satisfacci¨®n de cumplir un duro objetivo o la permanente esperanza de ver a Zangulf regresar al juego que lo hizo famoso.

World of Warcraft: Classic replicar¨¢ el avance original del videojuego desde su lanzamiento en noviembre de 2004 hasta poco antes del lanzamiento de The Burning Crusade, o lo que es lo mismo, hasta la llegada de la mazmorra de banda Naxxramas. Todo el contenido estar¨¢ fraccionado en cuatro etapas; la primera habilitar¨¢ N¨²cleo de magma, Onyxia, La Masacre, Kazzak y Azurgos, la segunda Guarida de Alanegra, Campos de batalla y recompensas PvP as¨ª como Zul'Gurub, la tercera Ahn'Qiraj con su correspondiente evento de apertura, el Tier 0,5, el contenido de Silithus y los dragones verdes, por ¨²ltimo la cuarta etapa activar¨¢ el evento de la invasi¨®n de la Plaga y la banda de Naxxramas. No es quiz¨¢s el planning m¨¢s acertado pero es solo una idea que barajan sujeta a modificaciones. Lo que s¨ª han confirmado es que World of Warcraft podr¨¢ disfrutarse gratuitamente junto a nuestra suscripci¨®n a Battle for Azeroth aunque todav¨ªa hay dudas sobre si Blizzard piensa incluir una cuota reducida para aquellos que solo quieran volver a Vanilla. El videojuego estar¨¢ disponible el pr¨®ximo verano.