Smoke and Sacrifice, an¨¢lisis

Smoke and Sacrifice es la ¨®pera prima de Solar Sail Games, un estudio independiente ubicado en Londres y fundado por Neil Millstone y Rancred Dyke-Wells, que definen este proyecto como ¡°una nave espacial pilotada por nosotros mismos¡±. El sue?o de este d¨²o es crear juegos que siempre han querido jugar, que dejen un poso en su p¨²blico que perdure mucho tiempo. Con Smoke and Sacrifice, proponen una aventura de supervivencia en la que la narrativa y el universo en el que se emplaza la historia adquieran la misma relevancia que el sistema de juego. En su misma p¨¢gina hay disponible una gu¨ªa para aquellos jugadores que se vean superados por el desaf¨ªo del juego.

Gloria al ?rbol Solar

Sachi, protagonista de Smoke and Sacrifice, vive en una aldea peque?a y tranquila, bordeada por unos p¨¢ramos g¨¦lidos que nos insin¨²an una era glacial. Adoran al ?rbol Solar, un gigante foco de luz org¨¢nico que, con su energ¨ªa, mantiene al pueblo con calor. La primera misi¨®n de Sachi ser¨¢ la m¨¢s dura de su vida, un rito al que se han enfrentado todas las mujeres de su pueblo: el sacrificio del primog¨¦nito al ?rbol Solar a cambio de su protecci¨®n.

Lo ¨²nico que tiene en la vida Sachi es a su peque?o Lio. El resto de mujeres de la aldea le dan su apoyo moral, pero palia el dolor de la inminente p¨¦rdida de su reto?o. Conviene recordar que el mito del sacrificio del primog¨¦nito est¨¢ presente en la mitolog¨ªa judeocristiana (las plagas de Egipto, Abraham e Isaac, etc.), propia de una cultura que valora la descendencia como un s¨ªmbolo de riqueza y como pilar de la preservaci¨®n del negocio familiar. En el caso de Sachi, Lio es el centro de su vida. No conocemos en ella ning¨²n otro familiar o persona cercana, con lo que perder a su reto?o es exterminar lo que da sentido a su existencia.

Al cabo de unos a?os, Sachi descubre la verdad detr¨¢s del ?rbol Solar; los peque?os no mueren al ser sacrificados, sino que son trasladados a un inframundo artificial en el que trabajan para mantener viva la energ¨ªa de su divinidad. Sachi deber¨¢ sobrevivir a esta tierra subterr¨¢nea mientras va en rescate de su peque?o.

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La historia de Smoke and Sacrifice tiene dos puntos fuertes: su originalidad y su cr¨ªtica social. Muchos son los t¨ªtulos en los que exploramos una paternidad rota que se reconstruye poco a poco (The Last of Us, God of War, The Witcher 3...), pero pocos tratan esta misma tragedia desde la ¨®ptica de una madre. Con Sachi vivimos el dolor de perder a su ¨²nico hijo y la esperanza de volver a su lado. Asimismo, resulta desgarradora la situaci¨®n de los ni?os trabajadores en el inframundo, cuyo parecido con nuestra realidad nos crea una reflexi¨®n inc¨®moda sobre una explotaci¨®n infantil que sustenta nuestra econom¨ªa de consumo.

Por otro lado, la falta de originalidad tanto en el dise?o de niveles y misiones desmerece un poco lo anterior y vuelve repetitiva una aventura cuya duraci¨®n se estima entre 8-10 horas. Los escenarios consisten en cuatro ecosistemas que se repiten: bosque, p¨¢ramo helado, zona industrial y volc¨¢nica. En cuanto a las misiones, si bien algunas est¨¢n relacionadas con la historia, otras muchas consisten en hacer favores a otros personajes a cambio de informaci¨®n, lo cual diluye un poco el hilo principal.

Sobrevivir entre humo y sacrificio

Smoke and Sacrifice cambia el ciclo de d¨ªa y noche de otros t¨ªtulos RPG y supervivencia con un ciclo de humo. Durante las horas de humo, una neblina t¨®xica inundar¨¢ el mapa y s¨®lo podremos atravesarla indemnes si llevamos una linterna, que fabricaremos en la primera hora de juego. Otros objetos que fabriquemos nos ayudar¨¢n a protegernos de los efectos del humo.

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Nos moveremos en un mapa 360¡ã, hilando misiones que nos conducir¨¢n hacia nuestro peque?o mientras elaboramos y gestionamos recursos para sobrevivir. En nuestro inventario, consultaremos nuestros objetos y su estado, ya que se ir¨¢n deteriorando con el uso y, en caso de los recursos org¨¢nicos, con el tiempo. Asimismo, contaremos con un diario de misiones y un manual de confecci¨®n, en el que figurar¨¢n todas las recetas que conozcamos.

Nuestra supervivencia ser¨¢ todo un proceso de aprendizaje. Recorreremos cada localizaci¨®n en pos de nuestra misi¨®n, al mismo tiempo que nos enfrentamos a sus criaturas y descubrimos que debemos equiparnos con la indumentaria necesaria para soportar las inclemencias de cada territorio. Tambi¨¦n habr¨¢ que andar con ojos para no salirse de los l¨ªmites, bordeados en un oc¨¦ano de brea que terminar¨¢ con nuestra vida si pasamos demasiado tiempo en ¨¦l. Los ciclos de humo, por su lado, afectar¨¢n a la aparici¨®n de las criaturas y de alguna flora, y entre la neblina acechar¨¢n los letales fantasmas de la bruma.

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Moverse a trav¨¦s de Smoke and Sacrifice es sencillo; podemos usar las flechas de desplazamiento, las teclas WASD o clickando con el bot¨®n derecho en nuestro lugar de destino. El sistema de combate es tambi¨¦n simple: click con el bot¨®n derecho sobre el enemigo para atacar y tecla espacio para esquivar, si bien acaba resultando m¨¢s org¨¢nico clickar sobre el lugar hacia el cual queremos huir, ya que la barra espaciadora s¨®lo nos lleva a una direcci¨®n. No obstante, cada enemigo supondr¨¢ una lecci¨®n, puesto que deberemos estudiar su patr¨®n de movimientos para calcular la mejor estrategia para derrotarles. Y, mientras algunos son f¨¢ciles de dominar, otros pueden ser m¨¢s desafiantes, e incluso inalcanzables, y requerir¨¢n cierta preparaci¨®n de equipamiento antes de lanzarnos a por ellos. Adem¨¢s, cada golpe recibido supondr¨¢ una p¨¦rdida considerable de salud, y es que no debemos olvidar que Sachi se trata de una mujer humana que, pese a sus cualidades f¨ªsicas como cazadora, se est¨¢ midiendo contra bestias fant¨¢sticas. En cuanto a nuestro equipamiento de armas y armaduras, podremos repararlos y mejorarlos con los ingredientes adecuados, y deberemos aprender a reservar las armas adecuadas seg¨²n el futuro enemigo al que deseemos vencer.

La obtenci¨®n de recursos en Smoke and Sacrifice no s¨®lo depende de la recolecci¨®n de plantas. Otros los obtendremos al eliminar enemigos o mediante trampas que coloquemos. Para capturar a las cr¨ªas, ser¨¢ necesario favorecer el apareamiento de dos espec¨ªmenes, atrayendo uno al otro, si bien el azar puede propiciar dicho encuentro. Asimismo, podemos extraer leche de otras bestias y provocar enfrentamientos entre depredadores y presas.

En cuanto a las recetas, ¨¦stas las aprenderemos a trav¨¦s de otros personajes durante las misiones que nos encarguen, a trav¨¦s de piedras grabadas ¡ªcuya informaci¨®n extraeremos gracias a un kit de impresi¨®n¡ª o en tapices de cuero ¡ªtras aplicar sobre ellos zumo de fruta amarga¡ª. Cocinaremos en ollas diseminadas por el mapa, y fabricaremos trajes y armas en los bancos de trabajo. Guardaremos la partida en terminales separados por distancias razonables y, una vez los desbloqueemos, podremos viajar autom¨¢ticamente de un ¨¢rea a otra mediante tubos teletransportadores.

La clave de la supervivencia en Smoke And Sacrifice ser¨¢ la atenci¨®n constante y la paciencia: vigilar el estado de nuestros recursos y planificar bien su reparaci¨®n; observar a nuestros enemigos y, en muchos casos, morir en sus garras para calcular t¨¢cticas m¨¢s eficaces en nuestra revancha; disponer siempre de la indumentaria adecuada para cada ¨¢rea y no olvidar la linterna con la que abrirnos paso a trav¨¦s del humo t¨®xico.

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Un inframundo artificial y siniestro

La est¨¦tica de Smoke and Sacrifice es perturbadora. Con unos gr¨¢ficos pintados a mano y una rica paleta de colores ocres que nos sumergen en un ambiente depresivo, hallamos un dise?o de personajes grotesco: cabezones y rostros preciosistas, con expresi¨®n ausente salvo en momentos muy puntuales, como el llanto de Sachi ante la p¨¦rdida de Lio la contracci¨®n de su rostro cuando sufra un estado alterado, el cual se indicar¨¢ con un icono bajo su barra de salud. En caso de los ni?os, impacta verlos con un rostro adulto, lo cual confiere el mensaje de la ausencia de infancia de un universo cruel. Las bestias parten de un dise?o adorable propio de ilustraci¨®n de libro infantil, con a?adidos que les otorgan un toque amenazador, como los colmillos exagerados de los jabal¨ªes o los topos con rostro de pez abisal. En caso de las animaciones, de estilo marioneta, apoyan la atm¨®sfera siniestra del juego.

La banda sonora, por su lado, se compone de melod¨ªas pausadas que consiguen crear un clima on¨ªrico e inquietante. Dichas canciones se apagar¨¢n en gran porcentaje del juego, y se echa en falta una mayor presencia de ellas, si bien se entiende que el silencio ayuda a dibujar la soledad en la que se nos hallamos. Los ruidos de los enemigos nos proporcionan pistas sobre su actuaci¨®n y es ¨²til familiarizarse con ellos para planear nuestra estrategia. Por otro lado, los personajes no tienen voces, y s¨®lo oiremos a Sachi cuando sufra da?o o fallezca.

Los textos est¨¢n traducidos al castellano, aunque hemos detectado algunos calcos y errores de g¨¦nero, as¨ª como alguna l¨ªnea sin traducir durante las instrucciones de alguna misi¨®n. A nivel t¨¦cnico, el rendimiento es correcto, salvo por alguna ralentizaci¨®n que nos ha perjudicado en alg¨²n combate.

Smoke and Sacrifice resulta una excelente propuesta narrativa y de sistema de juego, en el que hallamos satisfacci¨®n a medida que escalamos su exigente aunque justa curva de dificultad. Es una l¨¢stima que el dise?o de niveles y misiones no exprima una jugabilidad compleja, y caiga en una repetitividad que ensombrece una prometedora experiencia de juego.

Este juego ha sido analizado en su versi¨®n para PC Windows.