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Monster Hunter Generations Ultimate: preparando la caza en Switch
La entrega con m¨¢s contenido de la saga irrumpe en la h¨ªbrida de Nintendo.
La negativa de Capcom a llevar Monster Hunter World a Nintendo Switch fue un jarro de agua fr¨ªa para muchos aunque se debiese a incapacidades t¨¦cnicas. Es por ello que Monster Hunter XX se postulaba como el candidato perfecto para traspasar las fronteras niponas y aparecer en Occidente para dar respuesta a todos aquellos que deseaban cazar en la consola h¨ªbrida.
Hay que ser conscientes desde un primer momento que Monster Hunter Generations Ultimate, que es el nombre confirmado para la versi¨®n que se lanzar¨¢ en estas tierras el pr¨®ximo mes de agosto, es totalmente distinto a la exitosa nueva obra de Capcom, con sus ventajas y desventajas; pues no todo es peor en esta entrega.
Lo primero que se debe tener en consideraci¨®n es que uno de ellos es un t¨ªtulo de la Generaci¨®n IV de la franquicia de Ryozo Tsujimoto; MH World, por su parte, es de la Generaci¨®n V. La jugabilidad de MHGU es un calco de lo visto en Monster Hunter Generations hace un par de a?os en Nintendo 3DS, pues no deja de ser una versi¨®n expandida de aqu¨¦l en contenido y ciertas mejoras gr¨¢ficas. Tanto es as¨ª que podremos traspasar nuestra partida para continuar con el progreso intacto.
Regreso a las Hunter Arts de 4? Generaci¨®n
Visto lo visto y despu¨¦s de haber jugado numerosas horas a la versi¨®n japonesa, hay aspectos que merece la pena destacar de Monster Hunter Generations Ultimate y que se deben presentar como virtudes de un t¨ªtulo que a nivel de contenido es de lejos el m¨¢s completo y abundante de toda la franquicia. Su personalizaci¨®n se acrecienta al incorporar los Hunter Arts, las artes o estilos de combate con ciertas acciones determinadas a las que hay que sumar dos nuevas: Brave Style y Alchemy Style. La primera nos permitir¨¢ lanzar diferentes ataques para aumentar un indicador. Con su energ¨ªa se podr¨¢n hacer esquivas y facilitar la evasi¨®n. Es un Hunter Art claramente enfocado al juego defensivo. Por su parte, el segundo se enfoca m¨¢s al cooperativo al servir para ayudar a compa?eros a trav¨¦s de la creaci¨®n de objetos durante las batallas. En total tendremos 14 tipos de armas con 6 estilos diferentes de control, mientras que los Palico presentan un nivel de personalizaci¨®n y sinergia en las expediciones infinitamente superior a lo visto en World.
Contenido: centenares, sino m¨¢s, horas de partida
Hay un elemento donde Monster Hunter Generations Ultimate no tiene parang¨®n: el n¨²mero de monstruos. Capcom decidi¨® tirar por la ventana todo lo que se hab¨ªa visto hasta la fecha, incorporando casi 130 monstruos si contamos con los peque?os; si no son pr¨¢cticamente 100. Por contraste, en Monster Hunter World se rozan los 40. Los que vengan de anteriores entregas, los que lleven jugando desde PS2 y PSP, encontrar¨¢n aqu¨ª rostros conocidos de absolutamente todas las generaciones, monstruos legendarios que solo vimos en las consoals de Sony y que, por fin, esa coletilla de Ultimate hace gala a lo que verdaderamente presenta este vasto cartucho.
Qu¨¦ decir de su curva de dificultad, un t¨ªtulo exigente como pocos pero mucho m¨¢s pensado para ir mejorando poco a poco, sin saltos excesivos en la exigencia que imprimen las criaturas m¨¢s grandes de la regi¨®n.
No todo pod¨ªa ser positivo en Monster Hunter Generations Ultimate. Si World lleg¨® m¨¢s tare y ha necesitado tantos a?os para desarrollarse no es precisamente por un tema balad¨ª. Las mejoras t¨¦cnicas de dicha entrega, que luce especialmente bien tanto art¨ªstica como en lo puramente gr¨¢fico, hacen que volver a esta cuarta generaci¨®n sepa a poco en un primer momento. La hitbox no es tan precisa, las animaciones menos realistas, el comportamiento del personaje es m¨¢s lento, m¨¢s gravitatorio. Con todo, no es ni mucho menos malo: es lo que hab¨ªamos tenido siempre en una consola port¨¢til, solo que aqu¨ª podremos hacerlo en una pantalla de seis pulgadas.
Regreso del multijugador local
Fundamental. Dar tantos saltos hacia delante en lo t¨¦cnico tambi¨¦n implica perder cosas en el camino. World se dej¨® en su viaje el modo multijugador local, limitando la interacci¨®n con amigos a la red, con los problemas de latencia que ello implica si no tenemos buena conexi¨®n. Aqu¨ª el multijugador local a 4 vuelve a ser motivo de encuentro con amigos all¨¢ donde estemos sin perder un ¨¢pice de calidad en el camino. La versi¨®n de Nintendo Switch tiene un incremento de 9,6 veces sobre la resoluci¨®n de Nintendo 3DS en modo dock, donde se mover¨¢ a 1080p nativos. En port¨¢til como siempre ser¨¢ a 720p. La tasa de im¨¢genes se mantendr¨¢ constantemente en 30 FPS, pero sin ca¨ªdas. Los frame-pacing, no obstante, son inevitables con la actual GPU de Switch, o al menos con la optimizaci¨®n actual.
No ser¨¢ hasta el pr¨®ximo 28 de agosto cuando se ponga a la venta en formato f¨ªsico y en digital este Monster Hunter Generations Ultimate en Nintendo Switch, versi¨®n completamente localizada al castellano.
Monster Hunter Generations Ultimate
- RPG
- Acci¨®n
Monster Hunter Generations Ultimate, la continuaci¨®n de Monster Hunter Generations, llega a Nintendo Switch de la mano de Capcom. Por primera vez en la saga, los jugadores tienen flexibilidad para jugar multijugador online o red local con hasta 3 cazadores m¨¢s, bien en casa en pantalla grande o cuando salgan, como port¨¢til aprovechando la portabilidad de la consola. Los cazadores se podr¨¢n meter en cientos de misiones solos o con amigos con esta nost¨¢lgica mirada a los principios de la saga y sus evoluciones. A lo largo del camino, los jugadores deber¨¢n defender cada una de las cuatro ciudades del juego de grandes amenazas conocidas como las Fated Four adem¨¢s de los todav¨ªa m¨¢s peligrosos, Dragones Ancianos. Esta entrega presenta un nuevo y desafiante nivel llamado rango "G" que aparece por primera vez para testar las t¨¢cticas de batalla de los cazadores m¨¢s experimentados con diferentes movimientos y habilidades in¨¦ditas en el mundo salvaje, con algunos de los tradicionales enemigos a¨²n m¨¢s imponentes.