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El precedente que sienta Microsoft para la pr車xima generaci車n
Costumbres que no deben perderse
Retrocompatibilidad y Xbox Game Pass, dos valores que llegan para quedarse
Microsoft ha experimentado los dos extremos posibles durante esta generaci車n de consolas 每tanto para bien como para mal每, que si bien est芍 todav赤a lejos de finalizar parece haber vivido ya sus momentos m芍s determinantes.
Inicio abrupto
El primero de ellos fue el lanzamiento de la misma a finales de 2013, cuando tanto Sony como Microsoft materializaron en las tiendas de medio mundo PS4 y Xbox One. Pero mientras una arrancaba guiada por la inercia de una gran campa?a publicitaria, el marketing fall車 en el caso de la segunda, que tuvo que recular antes incluso de comenzar el presente ciclo.
El segundo fue la llegada de los modelos premium, PS4 Pro y Xbox One X, que han servido para alargar la vida de un hardware que parec赤a haber tocado techo demasiado pronto. Entremedias, sin embargo, los de Redmond han tomado decisiones que no deben ser consideradas banales y que, ni mucho menos, parecen ser algo pasajero. La retrocompatibilidad y su propio servicio de suscripci車n a una biblioteca ingente de contenido, Xbox Game Pass, son el motivo por el que m芍s de uno enciende su consola cada semana, cada mes o cada momento del a?o donde intentar cubrir 谷pocas de escasez de lanzamientos.
Un lavado de cara a nuestras estanter赤as
M芍s de 1000 millones de horas invertidasno pueden ser casualidad; como tampoco lo es la creciente lista de t赤tulos de Xbox 360 y la primera Xboxque ya se pueden disfrutar en la actual generaci車n capitaneada por Phil Spencer. Qui谷n nos iba a decir hace solo unos meses que esa copia que ten赤amos en la estanter赤a de Red Dead Redemption, esa que posiblemente algunos llev芍bamos m芍s de un lustro sin tocar, iba a ser ahora un objeto de deseo. Porque insertar el disco supone sumergirse en una remasterizaci車n gratuita donde claro que se nota el paso de los a?os＃ pero para bien. Basta con ver im芍genes para darse cuenta de c車mo luce el t赤tulo de los forajidos de Rockstar en 4K si disponemos de una Xbox One X.
Fidelizando usuarios; preservando el pasado
La pregunta que nos hacemos ahora es si estas costumbres a las que es tan f芍cil acomodarse han llegado para quedarse o se marchar芍n con la pr車xima generaci車n. En caso positivo, ?ser赤a Sony capaz de no hacer lo propio con PlayStation 5? ?Y Nintendo? Pensar ahora mismo en una sucesora de Xbox One retrocompatible es l車gico; pensar en una PS5 retrocompatible con PS4 es plausible, pero nos hace fruncir el ce?o vistos los antecedentes.
Xbox Game Pass nos permite revisitar la saga Gears of War al completo, sin limitaciones y con mejoras; nos invita a descubrir t赤tulos independientes y obras escondidas que no jugar赤amos de otra manera. En definitiva: se nos da la herramienta, la opci車n de elegir. Y eso siempre es bueno.
Lo que seguramente todos tengamos claro es que no queremos perder estos privilegios. Acomodarse a lo bueno es inevitable, as赤 que ahora pueden abrirse dos frentes: uno donde se preserve el pasado y se haga una apuesta plena por las bibliotecas digitales, y otro donde tengamos que volver a pagar por eso que compramos anta?o.
