The Swords of Ditto
- PlataformaPS47PC7
- Desarrolladoronebitbeyond
- Lanzamiento24/04/2018
- TextoEspa?ol
- EditorDevolver Digital
The Swords of Ditto, An¨¢lisis
Analizamos The Swords of Ditto, el ¨²nico juego en el que luchamos contra una poderosa hechicera con la ayuda de un yo-yo, una pistola Nerf o con pegatinas pegadas por todo el cuerpo.
The Swords of Ditto, An¨¢lisis
Que Devolver tiene buen ojo a la hora de apadrinar estudios indies y lanzar sus t¨ªtulos al mercado es algo de lo que nadie puede dudar. Hotline Miami, Gods Will Be Watching, el fant¨¢stico The Red Strings Club o el reciente Crossing Souls son solo una peque?a muestra de los grandes videojuegos que podemos disfrutar desde hace tiempo tanto en PC como en consolas.
La ¨²ltima obra publicada por la desarrolladora es The Swords of Ditto de OneBitBeyond, un roguelite con simp¨¢ticos gr¨¢ficos y de inacabable contenido que basa el mismo en la generaci¨®n procedimental de escenarios y mazmorras. Un t¨ªtulo que hace un sabio uso de divertidos juguetes a modo de equipables para superar mazmorras y de pegatinas para potenciar las capacidades del personaje.
El poder de la aleatoriedad
Cada cien a?os la Isla de Ditto sufre la llegada de Mormo, una bruja que no falla a su cita centenaria para obrar el mal entre sus habitantes. De entre ellos s¨®lo uno puede detener a tan pintoresca hechicera, la Espada de Ditto. El nativo h¨¦roe escogido por Pukku, una escarabajo que nos acompa?a durante el juego, debe superar diversas mazmorras, misiones y destruir los artefactos que dan poder a Mormo antes de acabar con la maldici¨®n... O saltarse todos los pasos e ir directamente a la batalla final. Porque parte de la gracia del juego reside en que podemos omitir debilitar a la bruja y darle caza antes de hora en solitario o en cooperativo local no sin un peque?o aumento de dificultad en dicha contienda.
Tanto si derrotamos a Mormo como si caemos en combate, un salto de cien a?os en el tiempo har¨¢ que el destino de la isla recaiga sobre la nueva Espada de Ditto para volver a hacer frente a la bruja, por lo que el juego se reiniciar¨¢ manteniendo el nivel obtenido por el jugador as¨ª como algunos de sus objetos y coleccionables. Y no solo eso. Seg¨²n c¨®mo haya terminado el anterior h¨¦roe la aventura, el mundo de Ditto cambiar¨¢ de aspecto ofreciendo paisajes saludables en el caso de derrotar a la enemiga o decadentes si Mormo acab¨® con nosotros. En resumidas cuentas; cada h¨¦roe que manejamos se mover¨¢ por una Isla totalmente diferente a la anterior.
Esto se debe a que el videojuego hace uso de generaci¨®n procedimental de escenarios, mazmorras y misiones ofreciendo as¨ª contenido pr¨¢cticamente ilimitado que se potencia con la obtenci¨®n de nuevos equipables, aqu¨ª llamados juguetes. Sin embargo hay que recalcar que la mec¨¢nica se vuelve aburrida con el paso de las horas a pesar de que cada partida sea distinta a la anterior. El problema reside en un sencillo sistema de combate que, aunque funciona, termina por ser repetitivo y carente de ambici¨®n que solo se salva por el uso los ¨ªtems previamente mencionados.
The Swords of Ditto se juega desde una perspectiva cenital ligeramente inclinada sin llegar a ser del todo isom¨¦trica. No oculta sus reminiscencias a juegos como The Legend of Zelda de ocho y diecis¨¦is bits o Alundra, pero tampoco a otros m¨¢s modernos como Hora de Aventuras: El Secreto del Rey Sin Nombre. De hecho algunas de las mec¨¢nicas que vemos durante la aventura se comparten entre las obras anteriormente citadas. Todo en el videojuego se muestra con aspecto infantil -di¨¢logos inclu¨ªdos- pero con peque?os toques adultos, una extra?a sensaci¨®n que nos ha encantado.
El t¨ªtulo cuenta con tres niveles de dificultad bastante ajustados que podemos intercambiar seg¨²n avance la partida. El modo m¨¢s f¨¢cil solo es recomendable para aquellos que busquen una experiencia tranquila ya que adem¨¢s de otorgar m¨¢s tiempo al jugador para superar la haza?a principal -vencer a Mormo-, los enemigos son menos agresivos. En los dos restantes la dificultad asciende de manera exponencial y el n¨²mero de d¨ªas requeridos para derrotar a la bruja se reduce a cuatro. Pero tranquilos, existe una manera de aumentar ese l¨ªmite para que podamos explorar a conciencia la isla y adem¨¢s el tiempo se detiene en ciudades y mazmorras.
Un Action RPG diferente
Para que os hag¨¢is una idea de c¨®mo se juega a The Swords of Ditto, imaginad un Diablo III b¨¢sico y sencillo. Esto es; recoger misiones secundarias -bastante pobres y cl¨®nicas con recompensas superfluas- y explorar/superar escenarios y mazmorras que se generan de manera aleatoria a golpe de espada como si de un action rpg se tratara. Todo ello se supera con la ayuda de juguetes y pegatinas que potencian al h¨¦roe tanto en la batalla como a la hora de regenerar la vida en combate u otras caracter¨ªsticas. Entre estos curiosos artefactos hay una bola de bolos, un yoy¨®, un traje que te convierte en superh¨¦roe gigante -un gui?o hacia la saga Viewtiful Joe- o una pistola tipo Nerf que lanza proyectiles de goma entre otros ¨²tiles. Todo muy acorde con el aspecto infantiloide del juego pero con sorprendentes y coherentes usos.
Como ya hemos comentado, lo interesante del videojuego es poder dejar como legado parte de tu inventario a tu sucesor as¨ª como el nivel adquirido y coleccionables. Significa que el siguiente h¨¦roe podr¨¢ enfrentarse a enemigos m¨¢s complicados, que la dificultad en general aumente, que aparezcan nuevas mazmorras que hagan uso de otros juguetes, nuevas pegatinas y poder mejorar las estad¨ªsticas del protagonista. Una partida normal desde que obtenemos la espada, destru¨ªmos las dos anclas que debilitan el poder de Mormo y la batalla final, puede tener una duraci¨®n aproximada de cuatro a cinco horas si superamos entre medias alguna mazmorra extra. A poco que hagamos cuentas y m¨¢s si jugamos con otro amigo, la cifra de horas jugando a The Swords of Ditto pueden aumentar a las veinte horas tranquilamente sin apenas darnos cuenta, que no est¨¢ mal para el precio con el que sale al mercado.
?Puntos negativos? Adem¨¢s de una mec¨¢nica repetitiva que termina aburriendo, est¨¢ el hecho de que la trama principal del juego es escasa a pesar de haber coleccionables que ampl¨ªen la historia de Ditto. No hay nada de satisfactorio en repetir una y otra vez la misma f¨¢bula. Sumamos tambi¨¦n lo poco acertado que es su sistema de impactos donde a veces castiga al jugador con da?os que en realidad hemos esquivado e impactos hacia el enemigo que no terminan de acertar. Pero el m¨¢s importante a nuestro juicio es el hecho de no contar con cooperativo online y reducirse solo a un modo local. Un videojuego de esta ¨ªndole precisa de conectividad para poder jugarlo con un amigo a cualquier hora desde sus respectivas casas y The Swords of Ditto no cuenta con esta caracter¨ªstica.
Por suerte su sencillez, adem¨¢s de jugar en su contra, tambi¨¦n es un punto a favor que puede atraer a jugadores poco duchos en el g¨¦nero roguelite. La divertida banda sonora cumple con creces lo que se espera de ella con melod¨ªas tremendamente pegadizas y variadas. Su dise?o art¨ªstico es excepcional y entra por los ojos tan solo viendo algunas de sus capturas, am¨¦n de contar con unas animaciones muy cuidadas. Es curioso tambi¨¦n que incluso jugando con la configuraci¨®n gr¨¢fica m¨¢s baja posible sea en ocasiones m¨¢s hermoso a nivel visual que con todas las opciones activadas.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.