Ash of Gods: Redemption, an¨¢lisis

Grimdark, el rostro m¨¢s crudo de la fantas¨ªa oscura

El grimdark es uno de los subg¨¦neros de fantas¨ªa m¨¢s atractivo no s¨®lo por su nivel de crudeza, sino por la alegor¨ªa que presenta sobre la naturaleza humana, vista desde un prisma mis¨¢ntropo. En esta corriente, hallamos obras de ambientaci¨®n medieval fant¨¢stica en las que un conflicto sobrenatural se cierne sobre un universo dist¨®pico, con personajes que no se sit¨²an en la polaridad del bien y del mal que hallamos en la fantas¨ªa ¨¦pica, sino en una compleja escala de grises. Y, si bien la trama principal gira sobre una amenaza global, las tensiones sociopol¨ªticas cobran una similar importancia. En los videojuegos, tenemos grandes representantes del g¨¦nero como The Witcher, Dragon Age o el Juego de Tronos de Telltale, basado en Canci¨®n de Hielo y Fuego. 

Ash of Gods: Redemption llega en pleno auge de la fantas¨ªa medieval m¨¢s oscura, con una amalgana de g¨¦neros que se configuran para representar un mundo amargo en el que la pureza de coraz¨®n resulta la opci¨®n moral menos pr¨¢ctica: la aventura narrativa y un sistema de combate que combina el rol t¨¢ctico y los naipes. 

AurumDust (Mosc¨²) es el estudio indie detr¨¢s de este t¨ªtulo financiado a trav¨¦s de KickStarter que ha acabado recaudando 87.031 $. Se definen como amantes de los videojuegos, los c¨®mics, el cine y los grafitis y varias de sus inspiraciones se hallan presentes en Ash of Gods, cuya est¨¦tica y mec¨¢nicas narrativas guardan un innegable parecido con The Banner Saga. El gui¨®n corre de la mano del escritor Sergey Malitsky, autor ruso de fantas¨ªa oscura traducido al ingl¨¦s que adapta para Ash of Gods la trilog¨ªa hom¨®nima, publicada en Rusia entre 2011 y 2012. Algunos de sus cap¨ªtulos se pueden leer en la misma p¨¢gina dedicada a este juego.

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Un rico universo de fantas¨ªa amarga 

A nivel de gui¨®n, lo que mejor define a Ash of Gods es el complejo universo en el que se fundamenta, y en el que se percibe en todo momento que hay una trilog¨ªa de novelas detr¨¢s. Nos situamos en un mundo emplazado en el continente de Terminum, que ocupa un vasto mapa que augura un amplio abanico de regiones por conocer. Aqu¨ª reina una paz fr¨¢gil hasta que estalla la Siega, un per¨ªodo disruptivo y c¨ªclico en el que unas criaturas de origen sobrenatural conocidas como segadores acaban con toda vida humana. Ante la cercan¨ªa de uno de estos seres, los humanos mueren desagr¨¢ndose por sus orificios, mientras que otros quedan marcados con una extra?a ¨²lcera azul en su nuca, para acabar entrando en un estado feral en el que asesinan a quienes les rodean. 

Siguiendo el hilo de una novela r¨ªo, avanzamos por una historia fragmentada en cap¨ªtulos que vivimos a trav¨¦s de tres h¨¦roes principales, cuyas tramas se ir¨¢n alternando: Thorn Brenin, Hopper Roulley y Lo Pheng. El primero es un capit¨¢n retirado que, tras ver c¨®mo la Siega ha acabado con su hogar y su esposa, se lanza con sus hombres y su intr¨¦pida hija Gleda en busca de una cura para ¨¦sta, que tiene sobre su nuca la fat¨ªdica marca. Roulley, llamado en realidad Blance, es algo m¨¢s que el sabio escriba que aparenta; se trata de la reencarnaci¨®n humana de un Umbra, una especie m¨ªstica que tiene la capacidad de enfrentarse a los segadores y poner fin a su era de terror. El ¨²ltimo es un Eikon, una raza guerrera y misteriosa perteneciente al Clan de las Sombras, y que ha recibido un f¨¦rreo entrenamiento militar que le ha despojado de toda emoci¨®n. Su neutralidad moral se ver¨¢ en entredicho al verse envuelto en la Siega.

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Como en toda obra grimdark, adem¨¢s de la amenaza sobrenatural representada por los segadores, las tensiones sociopol¨ªticas cobran relevancia en la trama. La guerra entre Frisia y Berkana estar¨¢ presente durante toda la historia, as¨ª como las intrigas de la realeza en las que nos veremos envueltos. Asimismo, nos asomaremos a una sociedad que, pese a estar ubicada en un universo imaginario en el que la magia existe, sigue reproduciendo las mismas mec¨¢nicas de poder presentes en nuestro d¨ªa a d¨ªa. Es decir, el racismo y el machismo estar¨¢n a la orden del d¨ªa en un mundo en la que una minor¨ªa de poderosos gobierna con despotismo a una poblaci¨®n desfavorecida y oprimida. 

En este amargo panorama, espejo cr¨ªtico de nuestra realidad, conoceremos a una multitud de personajes que se convertir¨¢n en nuestros aliados, ya que sea de forma permanente o temporal seg¨²n el devenir de los acontecimientos. Tanto nuestros protagonistas como compa?eros no representar¨¢n la cl¨¢sica pureza del h¨¦roe de un cuento ¨¦pico, sino que lucir¨¢n una moralidad compleja alejada del manique¨ªsmo del bien y del mal, cargada de matices gris¨¢ceos que les har¨¢ m¨¢s aut¨¦nticos y humanos. As¨ª, tendremos un generoso repertorio de hombres y mujeres de distinta raza y procedencia, con una personalidad definida que iremos desvelando a medida que avance la historia, pero con una meta com¨²n a la que llegar¨¢n por sus propios medios, aprobables o no: sobrevivir. Y esto ¨²ltimo, por supuesto, no ser¨¢ una tarea sencilla.

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El mal menor, clave de la aventura conversacional

Ash of Gods: Redemption combina la novela visual con un sistema de combate rol t¨¢ctico con cartas. Durante las secuencias de aventura, narradas en segunda persona al estilo de una partida de rol de tablero, deberemos tomar decisiones y escoger opciones de di¨¢logo que perfilar¨¢n nuestras relaciones con los dem¨¢s, en funci¨®n de afectar a su lealtad y moral de grupo¡ªque se traduce en potenciadores de combate¡ª. Las que figuren con el icono de una pluma en un tintero tendr¨¢n repercusi¨®n en la historia, tanto de manera inmediata como a largo plazo, lo cual genera un ¨¢rbol con diversas bifurcaciones y, a su vez, m¨²ltiples posibilidades de rejugabilidad. En cuanto a la l¨®gica de las decisiones, como en un buen t¨ªtulo grimdark ¡ªcomo nos ha demostrado la saga The Witcher¡ª, no existen desenlaces felices ni devastadores, sino consecuencias llenas de ventajas e inconvenientes. Dichas decisiones ser¨¢n moralmente inc¨®modas, y deberemos tener presente el pragmatismo a la hora de decantarnos por una opci¨®n u otra. Por ejemplo, nos debatiremos entre entregar a un compa?ero a la justicia por cometer un robo, con la consecuente desaprobaci¨®n de nuestro equipo, o perdonarle la vida tras haber entendido sus motivos, para lo cual nuestra reputaci¨®n se ver¨¢ empa?ada. Asimismo, la vida de nuestros compa?eros, e incluso la de los propios protagonistas, depender¨¢ de muchas de estas decisiones y, en caso de acabar en el cementerio, la historia continuar¨¢ hacia uno de sus numerosos finales. 

En cada cap¨ªtulo, la aventura se dividir¨¢ en dos partes l¨²dicas. En las localizaciones, se nos plantear¨¢n varios puntos de inter¨¦s que nos llevar¨¢n a misiones, principales y opcionales, que estar¨¢n relacionadas con nuestro cometido y que resolveremos mediante decisiones narrativas o combates. En el mapa, escogeremos la ruta mediante la cual acceder a nuestro destino. En cada una de ellas, viviremos encuentros aleatorios o bien con enemigos, o bien con personajes secundarios que requieran nuestra ayuda ¡ªy no todos llevar¨¢n nobles intenciones¡ª, o bien con mercaderes errantes a los que podremos atracar o con quienes podemos establecer una relaci¨®n comercial sana. En el campamento, accesible a trav¨¦s del icono de la hoguera tanto en el mapa como en las localizaciones que lo permitan, podremos tener conversaciones adicionales con nuestros compa?eros, desarrollar su ¨¢rbol de habilidades y recuperar salud. Las strixes, a su vez, ser¨¢n un recurso que tener en cuenta en lo anterior: estas piedras, que ayudan a mantener a raya la infecci¨®n de la siega, nos permitir¨¢n viajar y curar a nuestros aliados, con lo que debemos procurar tener un buen n¨²mero de ¨¦stas en nuestro inventario. 

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Rol cl¨¢sico combinado con naipes

Al principio de nuestra partida, podremos escoger dos modos de dificultad: el cl¨¢sico y el historia. En el primero, dirigidos a los amantes del roguelike, la dificultad ser¨¢ razonable y deberemos cuidar la parte t¨¢ctica de los combates. El segundo, m¨¢s destinado a quienes deseen centrarse en la experiencia narrativa, nos plantear¨¢ enemigos de nivel m¨¢s inferior al nuestro, de tal modo que el derrotarlos no requerir¨¢ estratagemas estudiadas. Asimismo, podemos activar la batalla autom¨¢tica, a trav¨¦s de la cual la inteligencia artificial controlar¨¢ a nuestras tropas cuando est¨¦n luchando.

Antes de iniciar el combate, escogeremos los luchadores que llevaremos al campo de batalla, hasta un m¨¢ximo de seis. Nuestros protagonistas y aliados pertenecer¨¢n a una clase de entre una gran variedad de las mismas: guerrero, asesino, lancero, arquero, templario, luchador, hechicero, cl¨¦rigo, etc.; cada cual con sus propias habilidades y atributos. Antes de empezar a luchar, podremos desarrollar el ¨¢rbol de habilidades con los puntos disponibles y equipar objetos. Al empezar la batalla, situaremos nuestras tropas, y nos enfrentaremos a nuestros rivales por turnos, cada uno de ellos limitados por un espacio de 210 segundos en el que debemos participar. 

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Cada combatiente tiene un rango de casillas por el que desplazarse. El movimiento por las casillas azules es gratuito, mientras que el acceso a las casillas amarillas requiere un coste extra de energ¨ªa. Dentro del turno de cada personaje, podremos escoger una habilidad activa ¡ªcategor¨ªa en la que entran ataques y hechizos sanadores u ofensivos¡ª, y dirigirla a un oponente o aliado; o una habilidad pasiva, que no significar¨¢ el final del turno. En la siguiente vez que nos toque actuar, deberemos escoger a otro compa?ero que no haya participado. Antes de decidir qu¨¦ acci¨®n tomar, podemos seleccionar a un enemigo, ver sus habilidades y los posibles ataques que podemos lanzarles, con una estimaci¨®n del da?o que causaremos. 

Cada personaje dispone de dos barras vitales: salud y energ¨ªa. Esta ¨²ltima se consume con desplazamientos extras y habilidades. Al lanzar un ataque, podemos decidir si ¨¦ste afectar¨¢ a la energ¨ªa o salud del contrario, lo cual abre muchas posibilidades estrat¨¦gicas. A veces es necesario agotar la energ¨ªa de un enemigo para inhabilitarlo, teniendo en cuenta que los golpes dirigidos a la salud de un enemigo exhausto consumen el doble.

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Las cartas son un complemento a?adido a los combates. Si en nuestro equipo contamos con un personaje capaz de utilizarlas, tendremos acceso a un mazo m¨¢gico lleno de naipes con poderes varios y, muchos de ellos, con alguna contraindicaci¨®n, como el diezmar la salud de un enemigo a cambio de sacrificar la de un aliado nuestro. Ciertos naipes no estar¨¢n disponibles hasta cierto n¨²mero de rondas pasadas, con lo que habr¨¢ que calcular su uso a conciencia. Las cartas las obtendremos en tiendas o al finalizar los combates. Muchas de ellas est¨¢n fragmentadas en trozos que deberemos ir adquiriendo de uno en uno hasta poder confeccionar un naipe completo y ¨²til. 

Si un aliado nuestro cae en batalla, obtendr¨¢ una marca de calavera. Si acumula cuatro, su muerte ser¨¢ definitiva. Estos funestos contadores se reanudar¨¢n en los campamentos con el uso de strixes, con lo que el propio juego nos concede varias facilidades antes de perder a un personaje para siempre en batalla. No obstante, la muerte es m¨¢s probable a causa de una decisi¨®n desafortunada. 

Al final cada combate, obtendremos una serie de recompensas en forma de monedas de oro, cartas nuevas y ascensi¨®n de nivel en los personajes que hayan participado en la batalla. Cuanto mayor haya sido el riesgo que hayamos volcado en nuestra estrategia, el premio ser¨¢ m¨¢s suculento. Con cada subida de nivel, obtendremos un punto de habilidad que distribuiremos en un sencillo ¨¢rbol de habilidades, dividido en talentos de nivel 1, nivel 4 y nivel 8.  

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Adem¨¢s del modo para un jugador, Ash of Gods ofrece un multijugador online que se halla en desarrollo continuo y que promete nuevas actualizaciones. Por el momento, hemos participado en la arena que ofrece, en el que creamos nos enfrentamos en combate de grupo contra un rival de un nivel similar al nuestro, en turnos de 40 segundos. Esta modalidad tiene mucho margen de desarrollo y, si bien la campa?a principal es mucho m¨¢s atractiva, puede servir de entrenamiento en la parte de batalla t¨¢ctica.  

Un dise?o est¨¦tico digno de su g¨¦nero

Los recursos visuales de Ash of Gods: Redemption muestran una honda inspiraci¨®n en The Banner Saga que no se oculta en ning¨²n momento: el punto de vista isom¨¦trico para los combates, el punto de vista lejano para las secuencias de desplazamiento dentro de una localizaci¨®n y los cambios de c¨¢mara durante los di¨¢logos entre personajes, en los que el enfoque alterna de un interlocutor a otro, resultan un recurso calcado. Y, si bien el resultado es efectivo, se echa en falta un mayor atrevimiento a la hora de crear un lenguaje cinematogr¨¢fico propio.

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No obstante, el apartado art¨ªstico, que apela al p¨²blico adulto al que va dirigido este t¨ªtulo grimdark, hace alarde de una gran belleza. El dibujo bebe mucho del estilo de Ralph Bakshi (autor de El gato Fritz y de la pel¨ªcula de animaci¨®n de El Se?or de los Anillos), de quien AurumDust es un gran admirador, y el dise?o de personajes es variado aunque no deja de lado los clich¨¦s propios de la fantas¨ªa medieval ¡ªel guerrero de mediana edad, barbudo y noble; la espadachina de cabello corto y alejada de la feminidad tradicional¡ª con una expresividad en la que se vislumbra el car¨¢cter de cada cual. Las animaciones, creadas a partir de la captura de movimientos de actores, fluyen con elegancia durante las escenas de combate y muestras gestos curiosos en el comportamiento de cada personaje: Gleda, con un gesto gr¨¢cil, provoca a los enemigos mientras est¨¢ ociosa, y Sopp, al igual que otros bandidos con un dise?o f¨ªsico similar al suyo, se rasca el trasero con una graciosa naturalidad. 

El apartado sonoro viene de cargo de la mano de los compositores Adam Skorupa, Krzysztof Wierzynkiewicz y Michal Cielecki, quienes han colaborado en los temas de la saga The Witcher, cuyo esp¨ªritu musical se percibe en Ash of Gods: Redemption. Con instrumentos tradicionales de Europa del Este y de la ¨¦poca medieval, han creado una serie de canciones folk que aportan la emoci¨®n necesaria en cada escena, desde el desasosiego durante una escena tr¨¢gica y tensa, hasta el fragor del combate.

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Otro aspecto rese?able son sus textos en ingl¨¦s, en los que la narraci¨®n en segunda persona es, como hemos comentado anteriormente, una decisi¨®n acertada a la hora de crear el clima propio de una partida de rol cl¨¢sica de tablero. El estilo literario arcaico de los textos, con t¨¦rminos como lad o lass, resulta acorde con la ambientaci¨®n medieval de este t¨ªtulo, y el registro coloquial en los di¨¢logos aporta naturalidad a las interacciones. 

Y es que el alma de Ash of Gods: Redemption es puro grimdark en todos sus aspectos. A trav¨¦s de su est¨¦tica y una narrativa con reglas poco complacientes percibimos la brutalidad de un universo en el que la bondad es un espejismo, en el que no existen los h¨¦roes con armadura reluciente, sino diferentes personas con sus propias luces y sombras, que amoldan una ¨¦tica imperfecta a la supervivencia propia. Tal y como hacemos en nuestra realidad.

Este t¨ªtulo ha sido analizado en su versi¨®n para PC Linux.

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