Far Cry 5
Far Cry 5, an¨¢lisis
El shooter de Ubisoft regresa con una nueva entrega que no revoluciona, pero que mejora la f¨®rmula cl¨¢sica y la refuerza. Far Cry 5 es el mejor de la serie y un claro ejemplo de que esta vez s¨ª, "m¨¢s es mejor".
Far Cry 5, an¨¢lisis. A un paso del Ed¨¦n
?Padre, perd¨®nales porque no saben lo que hacen?-San Lucas, 23:24.
¡°Far Cry 5 es una reflexi¨®n sobre el mundo¡±, no un an¨¢lisis acerca de la situaci¨®n de los Estados Unidos. As¨ª lo afirma Dan Hay, director creativo del videojuego, en una entrevista publicada por nuestros compa?eros del diario El Pa¨ªs. ¡°Simplificando mucho¡±, cuenta, lo que el villano transmite es que ¡°el mundo ha estado tantas veces cerca del abismo que cuando finalmente se precipite a ¨¦l nos va a arrastrar, no vamos a ser capaces de salvarlo¡±.
Seg¨²n Hay, en el momento en que empezaron a plantear el proyecto hace tres o cuatro a?os, estaban ¡°conectados con las crecientes preocupaciones globales¡±. Sin embargo, ignoraban que Donald Trump se har¨ªa con la presidencia y se convertir¨ªa en el hombre m¨¢s poderoso del planeta: ¡°Lo que ocurre es que quiz¨¢s nos adelantamos a los acontecimientos, porque capturamos un sentimiento de lo que estaba pasando en el mundo¡±, reconoce.
La historia de Far Cry 5 se constituye como una parodia cr¨ªtica en la que subyacen temas de estricta actualidad. No en vano, sectores de la derecha norteamericana se han sentido molestos por el papel de los llamados rednecks, estereotipo despectivo que hace referencia al prototipo de hombre blanco de la Norteam¨¦rica rural.
Al revelarse el primer teaser oficial, las voces inconformes no tardaron en expresar su descontento: ¡°El americano medio es literalmente el maldito enemigo en el nuevo juego antiblancos de Ubisoft. Esto es lo que piensan de los patriotas¡±, se quejaba uno de los usuarios en Twitter. Otro de ellos elucubraba sobre si la compa?¨ªa gala cre¨ªa que ¡°los fundamentalistas cristianos son una amenaza m¨¢s grande que los terroristas de ISIS¡±. Lo cierto es que el juego toca materias sensibles, pero lo hace de forma velada, con gui?os que evocan a la realidad, aunque siempre trazando una di¨¦gesis contenida en la ficci¨®n.
El padre de uno de nuestros aliados, un candidato a senador que tiene mucho de Trump y que dibuja el perfil m¨¢s conservador de la sociedad estadounidense, desea hacer ¡°Montana grande de nuevo¡±, en clara alusi¨®n al ¡°Make America Great Again¡± del presidente. Aun as¨ª, el personaje no se encuentra entre los simpatizantes de la secta que gobierna el territorio. El verdadero punto de partida parece ser la recesi¨®n econ¨®mica de 2008, tal y como se puede entrever en una entrevista que Hay concedi¨® a Venture Beat: ¡°Comenc¨¦ a investigar cosas que ocurrieron despu¨¦s 2008 y 2009, concretamente el colapso de las hipotecas basura¡±. Quiso indagar en los sentimientos de la gente, sobre todo de los norteamericanos, y se pregunt¨® ¡°d¨®nde demonios¡± est¨¢ el Gobierno: ¡°?C¨®mo vas a salvaguardar nuestro legado? ?Qui¨¦n va a proteger nuestras casas? ?Qu¨¦ persona est¨¢ a los mandos del tim¨®n?¡±, a?ad¨ªa.
Los tres heraldos del padre
El condado ficticio de Hope, en Montana, ha ca¨ªdo bajo el yugo de una secta de fan¨¢ticos. El padre Joseph Seed, un hombre que se autoerige como mes¨ªas, ha logrado tomar el poder y controlar el territorio con mano dura. Promete la salvaci¨®n y el advenimiento del Ed¨¦n en un mundo pr¨®ximo al descalabre, ahogado en la corrupci¨®n y en los desmanes generalizados. Cada uno de los territorios est¨¢ gobernado por uno de los ¡°hermanos¡± del l¨ªder: Faith lo hace en el R¨ªo Henbane, John en Holland Valley y Jacob en las monta?as de Whitehall.
Todos estos personajes, lejos de encarnar arquetipos planos, esconden un trasfondo muy complejo que no justifica los terribles horrores que perpetran, aunque se entiende que sus vidas han atravesado episodios traum¨¢ticos dif¨ªciles de superar. Son villanos rotos, personas que se han perdido en el camino y que se han escudado en palabras melosas para transformarse en jueces de la moral.
La saga Far Cry siempre ha frisado lo psicotr¨®pico, la delgada l¨ªnea entre la realidad y la fantas¨ªa, el drama y la parodia. Tanto los heraldos como el propio Joseph experimentan con drogas y obligan a fieles y a opositores a consumirlas. El gozo, sustancia que proviene de misteriosas flores, ablanda la mente y la hace permeable a los pensamientos que uno quiere introducir. El abuso de ella provoca da?os irreparables en el cerebro del paciente, los vuelve cascarones vac¨ªos a las ¨®rdenes de la secta.
La Puerta del Ed¨¦n, que as¨ª se denomina la organizaci¨®n, no hurga en las mentes solo a trav¨¦s de la droga, tambi¨¦n lo hace mediante el condicionamiento pavloviano, el cl¨¢sico est¨ªmulo-respuesta. Los prisioneros, encerrados durante las 24 horas del d¨ªa, son sometidos a agresivas sesiones de terapia en las que se les inculcan los preceptos deseados.
Frente a los abusos de la secta, existe un grupo de resistencia que incluye a la polic¨ªa. De hecho, el protagonista del t¨ªtulo no es otro que el ayudante del sheriff, un personaje que podemos crear gracias al editor que viene incorporado. Es posible elegir su sexo y modificar el aspecto f¨ªsico y la vestimenta que lucir¨¢ durante el trascurso de la partida.
Ubisoft ha optado por la figura del personaje mudo, algo que no nos ha terminado de convencer porque la narrativa invita a que el h¨¦roe sea part¨ªcipe de las conversaciones. Hubiera sido m¨¢s atractivo que el protagonista (al que todos se refieren como ¡°novato¡±) gozara de m¨¢s capas de profundidad, en consonancia con los antagonistas, cuya riqueza resulta incuestionable.
El argumento no sigue una estructura lineal. Preguntado por este aspecto en la mencionada entrevista de El Pa¨ªs, el director creativo explica que el reto era integrar ¡°los micromomentos de narrativa¡± en la jugabilidad. ?Pero c¨®mo lograrlo?, se cuestiona. De acuerdo con las palabras de Hay, la respuesta fue ¡°permitir que el jugador, explorara en la direcci¨®n que explorara, se encontrara con una serie de personajes que le dieran informaci¨®n sobre el mundo, le propusieran misiones o, incluso, se unieran a su aventura¡±.
Sin prescindir de algunas cinem¨¢ticas, se ha fomentado una experiencia m¨¢s org¨¢nica. En una conversaci¨®n cualquiera con un NPC, si en alg¨²n momento se interrumpe o si te alejas demasiado de ¨¦l, al volver a retomarla, el personaje utiliza frases de este tipo: ¡°Como te iba diciendo¡¡±, ¡°?D¨®nde lo hemos dejado?¡±, etc.
A pesar de que el guion funciona bien en l¨ªneas generales, ciertas piezas rompen la coherencia interna de la trama, algunas justificadas por su condici¨®n de videojuego y otras que quiz¨¢ hubiesen necesitado un replanteamiento. Pese a todo, la historia que narra es entretenida y sabe mantener la atenci¨®n del usuario.
Por otra parte, diversas mec¨¢nicas cl¨¢sicas han quedado obsoletas. Es el caso de las atalayas, ideadas para el primer t¨ªtulo de los asesinos, y que tambi¨¦n han estado presentes en Far Cry hasta la cuarta entrega. El nuevo cap¨ªtulo elimina las torres de comunicaci¨®n, a la postre una imitaci¨®n de las atalayas, y organiza el descubrimiento de nuevos lugares de manera mucho m¨¢s natural. Ya sea paseando o por medio de documentos que revelan puntos de inter¨¦s, el subalterno del sheriff va completando el mapa general.
Liberar regiones, derrotar sectarios
El objetivo ¨²ltimo es reconquistar cada uno de los territorios en los que se divide la administraci¨®n del condado en aras de debilitar al padre Joseph. El jugador tiene la posibilidad de elegir el orden en el que encara las misiones, sin importar si decide liberar primero la zona gobernada por Faith, Jacob o John. Para lograrlo, debe obtener puntos de resistencia, que se consiguen al cumplir misiones principales y secundarias, as¨ª como otras tareas como conquistar un puesto de la secta, destruir sus propiedades o requisar camiones de suministros.
Si bien algunas misiones son repetitivas o de estilo recadero, el global no se hace aburrido en ning¨²n momento, todo lo contrario. Far Cry 5 es un t¨ªtulo de enormes proporciones que pone sobre la mesa mec¨¢nicas de diferente ¨ªndole con el fin de que el jugador disponga de opciones variadas a la hora de abordar las misiones. De este modo, es posible infiltrarse en una base y acabar con el enemigo desde las sombras o irrumpir con el lanzagranadas y sembrar el caos y la muerte (esto es especialmente satisfactorio, puesto que el gunplay se ha mejorado mucho). Por ejemplo, en una de las misiones principales, se nos pide destruir una colosal estatua. En un primer intento, decidimos que lo mejor es portar el lanzacohetes y liberar los explosivos sobre el armatoste de hormig¨®n. Aunque la idea es efectiva, al final nos decantamos por subir a nuestro caza y destruir la estructura desde el cielo, en cuyo horizonte tal vez se halle el ansiado Ed¨¦n.
Ubisoft es una compa?¨ªa que sabe aprovechar las virtudes de sus juegos e implementar las mec¨¢nicas que funcionan en sus distintos proyectos. Esta quinta entrega incorpora un sistema de aliados que podemos seleccionar para que nos acompa?en, desde un piloto de avi¨®n hasta un simp¨¢tico perro, pasando por un chiflado de los lanzacohetes, el puma Peaches, un feroz oso o la piloto de helic¨®ptero, m¨¢s concentrada en sus clases de yoga y en el trasero de su profesor que en sus labores de apoyo. Los aliados han de desbloquearse mediante el cumplimento de misiones. Si caen en combate, dejan de estar disponibles durante unos minutos. Por otro lado, existe la opci¨®n de contratar mercenarios que siguen al novato durante el transcurso de la partida.
La propuesta de Far Cry 5 es vasta, tanto en dimensiones brutas como en las herramientas de las que el usuario dispone para moverse por este mundo abierto. El novato camina, corre, se agacha, sube escarpadas monta?as utilizando un gancho, desciende por tirolinas, se deja caer en paraca¨ªdas, nada, caza, pesca y se sube a veh¨ªculos de tierra, agua y aire.
Transitar por las carreteras del condado de Hope no es la idea m¨¢s brillante si tenemos en cuenta la situaci¨®n en la que se hallan. Nada m¨¢s subir al coche, la barra de atenci¨®n nos indica que hemos sido descubiertos por los santitos, el apelativo que emplean los habitantes para dirigirse a los sectarios. En un abrir y cerrar de ojos, veh¨ªculos con metralletas, soldados, helic¨®pteros y aviones se lanzan contra nuestro autom¨®vil. El desenlace, en muchas ocasiones, el esperable: la muerte. La cantidad de enemigos se incrementa aun m¨¢s cuando los heraldos piden ayuda a ¡°Los Elegidos¡±, su tropa de ¨¦lite. El n¨²mero de soldados resulta desproporcionado y llega a molestar, sobre todo al estar en medio de una misi¨®n.
La campa?a est¨¢ disponible para jugar en solitario, pero se ha a?adido la opci¨®n del cooperativo. A diferencia de otros t¨ªtulos, en los que da la impresi¨®n de que la modalidad se implementa por capricho y con calzador, en lo nuevo de los estudios de Montreal la jugabilidad cooperativa funciona. Si es divertido jugarlo solo, en compa?¨ªa lo es todav¨ªa m¨¢s. Eso s¨ª, por desgracia solo es online, no local.
Cambios en el sistema de progresi¨®n y en el motor gr¨¢fico
Una de las mec¨¢nicas inamovibles de los ¨²ltimos cap¨ªtulos era la caza. Las pieles de los animales se empleaban para conseguir mejoras, algo que se ha cambiado en este nuevo episodio. La caza contin¨²a teniendo presencia, pero queda relegada a la venta y a la obtenci¨®n de dinero. Ubisoft Montreal ha construido un sistema de talentos que permite elegir las habilidades deseadas en funci¨®n de los puntos que se van atesorando. Esta funcionalidad est¨¢ ligada al sistema de desaf¨ªos, diversos retos que abarcan toda la arquitectura de juego y que se enfocan tanto en el uso de las armas como en la caza o el modo en que el personaje interact¨²a con el entorno.
Las armas se adquieren en la tienda y se pueden modificar a?adiendo silenciadores, miras telesc¨®picas o cargadores mejorados. Por a?adidura, decorar el arma con nuevos colores es la opci¨®n para los amantes de los cambios cosm¨¦ticos.
Far Cry 5 se libra del encorsetamiento intergeneracional. El juego se ha construido con PlayStation 4, Xbox One y PC en la cabeza. De esta forma, el motor Dunia, utilizado desde el segundo cap¨ªtulo, luce muy vistoso. En PS4 Pro se mueve a 30 fotogramas por segundo con algunas ca¨ªdas puntuales, pero muy estable en general. Sin embargo, los dise?os de enemigos son muy poco variados y su inteligencia artificial a todas luces mejorable. Lo mismo te detectan que pasan de largo cuando te tienen a la altura de las narices.
En lo sonoro, hemos escuchado las voces en espa?ol y en ingl¨¦s. Ambos doblajes rinden a buen nivel, a pesar de que la ambientaci¨®n invite a escuchar a los personajes en su lengua anglosajona natural. Destaca la m¨²sica, con los bonitos temas vocales, algunos incluso corales, en sinton¨ªa con el ambiente de religiosidad que se respira. Adem¨¢s, en momentos de tensi¨®n o de acci¨®n, la banda sonora resuena in crescendo, generando emoci¨®n.
Far Cry Arcade, crea mapas y comparte
No se menciona en vano que estamos ante el videojuego m¨¢s completo de la serie. Adem¨¢s del desbordante editor de mapas, que pone sobre la mesa recursos de Far Cry, Assassin¡¯s Creed, Watch Dogs 2 y de otras franquicias de la empresa francesa, la modalidad Far Cry Arcade brinda la posibilidad de compartir niveles con el resto de la comunidad. La novedad es que esta vez no est¨¢n exclusivamente centrados en el multijugador, sino que hay opciones para probar los mapas en solitario. Resulta curioso, asimismo, que Far Cry Arcade est¨¦ integrado en la campa?a principal. Ya sea en gasolineras y otros establecimientos, nos toparemos con m¨¢quinas recreativas que nos permiten acceder a estos peque?os modos de juego.
Los santitos de La Puerta del Ed¨¦n no se andan con chiquitas. Desp¨ªstate un segundo y arder¨¢s en las hogueras del fuego purificador. El Estados Unidos m¨¢s salvaje se alza ante tus ojos, sobrevivir depende de ti; acabar con la secta, tambi¨¦n. Te espera un camino lleno de espinos, de torturas inenarrables, de muerte y dolor. ?Est¨¢s preparado para el desaf¨ªo? No, nadie lo est¨¢. Y recuerda: ¡°?De qu¨¦ sirve ganar el mundo entero si se pierde la vida?¡±-San Marcos, 8:36.
An¨¢lisis de la versi¨®n PS4 Pro
Excelente
Un t¨ªtulo referente en su g¨¦nero, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutar¨¢s de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en cl¨¢sico con el paso de los a?os. C¨®mpralo sin pesta?ear.