Remnants of Naezith, An¨¢lisis

La historia de Remnants of Naezith es probablemente lo menos apetecible de este jugoso banquete jugable. Contada mediante im¨¢genes est¨¢ticas se trata de una gen¨¦rica historia sobre un hombre que une su esencia a la de un drag¨®n, consiguiendo poderes sobrenaturales que le dotan de un gancho capaz de adherirse a cualquier superficie. Es este gancho el pilar jugable de Remnants y a lo largo de sus ochenta niveles aprenderemos a manejarlo a la perfecci¨®n. Para hacerlo necesitaremos la combinaci¨®n adecuada de precisi¨®n, velocidad y ritmo. La recompensa es una sensaci¨®n de movimiento y fluidez como ninguna otra a medida que obtenemos las habilidades necesarias para atravesar los niveles en tiempo r¨¦cord.

Quiz¨¢s uno de los mayores problemas de Remnants sea requerir demasiado de su jugador, pero este no es un juego pensado para llevar de la mano a los jugadores novatos al genero hasta que sepan dominarlo. Aqu¨ª ser¨¢n los adeptos a las plataformas, aquellos que llevan ya a?os jugando a los juegos bidimensionales que m¨¢s destreza requieren del mercado, quienes aprendan gradualmente los sistemas y mec¨¢nicas jugables hasta poder amaestrarlo. Aquellos que no est¨¦n familiarizados con los plataformas ,o m¨¢s espec¨ªficamente con los plataformas basados en el control de un gancho, se encontrar¨¢n con varios muros pr¨¢cticamente infranqueables en su camino hacia el fin de la campa?a.

Esta complejidad mec¨¢nica, esta exigencia de la precisi¨®n m¨¢s absoluta en todos los saltos, movimientos y maniobras que realizamos es un arma de doble filo. Por una parte hace que Remnants sea un juego excesivamente complicado hasta que no haya sido amaestrado, lo cual implica que deberemos repetir niveles hasta la saciedad o darnos por vencidos. Pero es que cuando conseguimos hacer esos recorridos perfectos la sensaci¨®n es gloriosa, la velocidad que alcanzamos tal que podemos hasta sentir un viento no virtual en nuestros rostros. Quien tenga el tiempo y la dedicaci¨®n necesaria para dominar este t¨ªtulo se ver¨¢ recompensado con una experiencia jugable m¨¢s que satisfactoria.

Una vez completados los mundos de la campa?a desbloquearemos la posibilidad de completarlos en el modo ¡°Speedrun¡±. No es sorprendentemente que sea aqu¨ª donde el juego verdaderamente reluce, forz¨¢ndonos a amaestrar cada mundo a la perfecci¨®n, con la satisfacci¨®n que supone conseguirlo y obtener un tiempo del que estar orgullosos. Si queremos competir pero no estamos dispuestos a poner el esfuerzo para dominar cada mundo, cada nivel de la campa?a tiene marcadores individuales y nos dar¨¢ una puntuaci¨®n cuando lo completemos. Aquellos con una vena m¨¢s competitiva apreciar¨¢n la gran variedad de utensilios que Remnants nos da para medirnos con otros extra?os y conocidos a lo largo y ancho del mundo. Finalmente, quienes tengan una vena m¨¢s creativa podr¨¢n crear y compartir sus propios niveles con un editor lo suficientemente complejo como para ser el que uso el propio desarrollador.

Gr¨¢ficamente, como ya hemos mencionado, el t¨ªtulo est¨¢ bien pero no llega a destacar. Tiene algunos efectos bien hechos como el omnipresente gancho o el efecto que hacemos al correr sobre el agua pero por regla general no llega a destacar en este aspecto. Cada mundo tiene un estilo gr¨¢fico ligeramente distinto pero no dejan de ser escenarios est¨¦riles y sin vida dedicados exclusivamente a la perfecci¨®n mec¨¢nica.? La banda sonora, sin embargo, es pegadiza y perfectamente apropiada para sesiones en que repetiremos un mismo nivel con una misma canci¨®n cientos de veces. Por regla general el aspecto art¨ªstico completamente bien al t¨ªtulo pero no se hace notar especialmente.