Yakuza 6: The Song of Life, Impresiones

Un desenlace para la historia de Kiryu

Los ba?os termales cumplen una funci¨®n social en Jap¨®n. Despu¨¦s de una dura jornada de trabajo, relajarse en las aguas ardientes de un onsen¡ªbalneario nip¨®n¡ª puede ser la opci¨®n m¨¢s sabia para librarse de m¨²sculos entumecidos y de dolores de espalda. Tambi¨¦n es un buen lugar para intercambiar algunas palabras y socializar con desconocidos. Libres de ropa y provistos de una toalla para tapar partes pudendas, los nipones disfrutan de su ba?o en compa?¨ªa, casi siempre separados por sexos (los ba?os mixtos no son habituales hoy d¨ªa).

La cosa cambia cuando la tinta de colores de los irezumi circula bajo la piel, creando formas, trazando dibujos, como un arte est¨¢tico que permanece hasta el final de la vida de la persona. No es ning¨²n secreto que los tatuajes est¨¢n prohibidos en los onsen, precisamente porque son caracter¨ªsticos de la yakuza, la mafia japonesa. No importa que lleves cincelado un diminuto coraz¨®n de Zelda o un inocente Pac-Man, si es visible no te dejar¨¢n entrar a los ba?os, por muy occidental que seas. De nada sirve explicar que es imposible que pertenezcas a la mafia, la regla est¨¢ hecha as¨ª y es para todos por igual.

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Los dibujos que recorren el cuerpo de los yakuza no son discretos en absoluto: dragones, flores, guerreros samur¨¢i, figuras femeninas y toda una mir¨ªada de formas recorren la espalda, el pecho, las nalgas y los muslos de los criminales. En esta era de la informaci¨®n y de las redes sociales, lucirlos en p¨²blico puede salirte muy caro si eres un capo del crimen. Y si no que se lo digan a Shigeharu Shirai, un veterano yakuza que llevaba huido de la justicia desde hace quince a?os, cuando asesin¨® a un l¨ªder rival y se dio a la fuga. Fue fotografiado en Tailandia mientras jugaba desnudo de cintura para arriba, distra¨ªdamente. Las instant¨¢neas acabaron colgadas en Facebook, y despu¨¦s de viralizarse, la polic¨ªa japonesa reconoci¨® los tatuajes y pidi¨® una orden de extradici¨®n para arrestar al criminal.

Para Kazuma Kiryu, protagonista de la saga Yakuza, las marcas de la piel son un recuerdo constante de un pasado criminal del que quiere desligarse a toda costa. El camino que ha escogido es el de abrir un orfanato, recoger a ni?os hu¨¦rfanos y criar a los muchachos en la isla de Okinawa, una de las islas tropicales localizadas en el sur del pa¨ªs. Sin embargo, los v¨ªnculos del pasado no est¨¢n rotos todav¨ªa, los hilos a¨²n no se han separado en dos.

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Despu¨¦s de los acontecimientos narrados en Yakuza 5, Kazuma se encuentra en el hospital, recuper¨¢ndose de las graves heridas infligidas durante su ¨²ltimo enfrentamiento. Mientras tanto, Haruka Sawamura, la mayor de las ni?as hu¨¦rfanas de Kiryu, se ha convertido en una idol, una suerte de cantante, actriz y modelo que triunfa con su m¨²sica y protagoniza portadas de revistas. La chica se halla muy unida a su padre adoptivo, y de hecho, est¨¢ presente cuando despierta. Tambi¨¦n cuando lo detienen y lo env¨ªan a prisi¨®n.

Las agencias que controlan la industria de los idols son incre¨ªblemente estrictas. Por contrato, muchas veces tienen prohibido hasta mantener una relaci¨®n sentimental, bajo amenaza de despido. Aunque Haruka siempre ha deseado serlo, decide retirarse y anunciar p¨²blicamente que su padre es un miembro retirado de la mafia. Subraya lo bueno que siempre ha sido con ella, pero mucha gente es reticente y deja de ver a Haruka como la ni?a inocente de siempre. ¡°?C¨®mo va a ser buena persona si su padre es un viejo delincuente?¡±, se preguntan.

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Mientras Kiryu cumple su sentencia de tres a?os, la muchacha regresa a Okinawa para cuidar al resto de ni?os. Por desgracia, los paparazzi la persiguen y pronto publican una fotograf¨ªa que puede da?ar la imagen de los otros muchachos. Decide marcharse, supuestamente, para estar cerca de Kiryu.

La trama de Yakuza 6: The Song of Life no prescinde de los momentos de humor, pero el tono es mucho m¨¢s oscuro y serio que en otras entregas. Hemos probado los primeros cap¨ªtulos del t¨ªtulo, que llegar¨¢ a las tiendas el pr¨®ximo 17 de abril (se ha retrasado un mes), y la sensaci¨®n es que la carga narrativa va a ser m¨¢s intensa que nunca. Salvo sorpresa, el guion de la sexta entrega se ha concebido como el desenlace de la historia de Kazuma Kiryu, un personaje que ha acompa?ado a los seguidores de la serie desde la primera entrega de PlayStation 2. El punto a lamentar es que nuevamente nos llega con los textos traducidos al ingl¨¦s (voces en japon¨¦s), sin rastro del espa?ol. 

Sin deseo alguno de revelar entresijos argumentales, diremos que el detonante, el motivo por el que el protagonista regresa a Kamurocho es el atropello casi mortal de Haruka. La investigaci¨®n no parece se?alar ni al autor ni a las causas, por lo que Kiryu tendr¨¢ que volver a los barrios bajos para llegar hasta el fondo del asunto. 

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Hasta la fecha, todos los nuevos juegos de la franquicia (Yakuza 0 y Yakuza Kiwami) han salido tanto en PlayStation 3 como en PlayStation 4. Como suele ser habitual en esta clase de productos intergeneracionales, los gr¨¢ficos no aprovechan todas las capacidades de la consola m¨¢s potente. Yakuza 6, por el contrario, ha sido dise?ado espec¨ªficamente para el hardware de PlayStation 4, y se nota a primera vista. El renovado Dragon Engine ofrece personajes y escenarios bastante m¨¢s detallados. Algunos detalles nos siguen sin convencer del todo (ciertos modelados y animaciones, por ejemplo), pero no hay duda de que se ha dado un paso al frente.

Destac¨¢bamos la importancia de la trama unos p¨¢rrafos m¨¢s arriba. No es casualidad que las primeras horas de juego sean cinem¨¢ticas, con muy poca interacci¨®n del jugador. Las bases jugables se mantienen sin cambios dr¨¢sticos, pero el sistema de combate se ha refinado e incorpora una nueva barra. Cuando el medidor del modo Extreme Heat llega al m¨¢ximo, Kiryu brilla en un color azul y es capaz de desencadenar poderosos combos, ya sea con sus manos desnudas o con cualquier utensilio que recoja del escenario. Pegar pu?etazos sigue siendo igual de divertido, pero el juego arrastra el mismo problema: aunque es posible huir de los combates y correr para escapar de los matones, no es nada f¨¢cil. A la larga, termina haci¨¦ndose un tanto repetitivo.

El resto de elementos contin¨²an presentes, desde su mundo lleno de matices hasta los personajes peculiares que pueblan este Jap¨®n interactivo. No hemos podido profundizar en aspectos como el de la personalizaci¨®n (solo llegamos al cap¨ªtulo 2), pero s¨ª que hemos probado los minijuegos caracter¨ªsticos de la serie. Son, como siempre, muy entretenidos. ?Est¨¢ incluso una versi¨®n jugable de Virtua Figher 5!

Antes de su lanzamiento, est¨¢ prevista la salida de una demo p¨²blica. Ser¨¢ el pr¨®ximo 23 de febrero cuando los usuarios de PSN puedan puedan encarnar a Kiryu en la demo. Nosotros acabamos esta sesi¨®n preview con Kazuma relaj¨¢ndose en un karaoke. ?Nos echamos unas canciones?