Shadow of the Colossus
- PlataformaPS49.5
- G¨¦neroAcci¨®n, Aventura
- DesarrolladorBluepoint Games
- Lanzamiento06/02/2018
- EditorSony Computer Entertainment
An¨¢lisis de Shadow of the Colossus (PS4)
?Es un remaster? ?Es un remake? Es Shadow of the Colossus, pero como nunca lo hab¨ªas visto antes. Bluepoint Games lleva su trabajo con la restauraci¨®n de juegos al siguiente nivel e insufla nueva vida en la obra maestra del Team ICO.
Shadow of the Colossus, an¨¢lisis PS4
De entre las numerosas opciones con las que contamos en Shadow of the Colossus para adecuar la experiencia de juego a nuestro gusto, una que curiosamente no existe es la de saltar las secuencias en las que mueren los colosos que le dan nombre. Podemos saltar sus introducciones, o gran parte de las secuencias de la trama, pero no las derrotas. Es una decisi¨®n deliberada a pesar de no enmascarar cargas porque contribuye al mensaje central. Estas criaturas no s¨®lo son jefes, enemigos de gran poder que se interponen entre nosotros y nuestro objetivo. Como Mono, la muchacha cuya vida queremos recuperar, tambi¨¦n son sacrificios, as¨ª que merecen que contemplemos sus ca¨ªdas mientras una m¨²sica solemne nos hace dudar si se est¨¢ celebrando nuestra victoria o lamentando su muerte. Hay algo tr¨¢gico que no se expresa con palabras, pero se refuerza segundos despu¨¦s cuando unos grandes hilos de materia et¨¦rea negra abandonan sus cad¨¢veres y persiguen al jugador, que s¨®lo recupera el control para crear una falsa ilusi¨®n de libertad. Podemos correr, pero siempre nos alcanzan, penetrando con violencia en el cuerpo de Wander y dej¨¢ndolo inconsciente.
Empezar por aqu¨ª, y no por el t¨ªpico recordatorio sobre cu¨¢ndo se estren¨® originalmente la obra, o qui¨¦n se encarga de esta nueva versi¨®n, es importante porque decir que estamos ante una remasterizaci¨®n de un juego de PS2 es como decir que Shadow of the Colossus es un boss rush: t¨¦cnicamente cierto, pero simplificado hasta un extremo que pierde de vista lo que realmente le da sentido. Cuando Wander se adentra en la Tierra Prohibida y ¡°negocia¡± con el dios Dormin las condiciones de la resurrecci¨®n de la muchacha, el t¨ªtulo no s¨®lo establece una justificaci¨®n para enlazar de forma coherente una serie de duelos a muerte. Tambi¨¦n plantea un tema y un tono muy espec¨ªficos, perfila un mundo que inicialmente apenas alcanzamos a comprender, pero que se va dibujando de forma m¨¢s y m¨¢s n¨ªtida a medida que su magistral desenlace se acerca. Desde entonces hemos vuelto a montar a caballo, a explorar grandes mundos abiertos y a derrotar monstruos enormes en multitud de juegos, pero nada en los 12 a?os transcurridos desde su estreno ha sido capaz de ocupar el lugar de Shadow of the Colossus. Porque su clave no reside en el qu¨¦, sino en el c¨®mo.
El gigante entre gigantes
Relanzar Shadow of the Colossus en pleno 2018 en forma ya no de port HD que va directamente a una tienda digital o un pack de varios juegos, sino de tratamiento completo que lo mete en el terreno del remake y permite su venta en solitario como novedad, provoca la clase de escrutinio que pocos t¨ªtulos con m¨¢s de una d¨¦cada a sus espaldas podr¨ªan superar con ¨¦xito. La tecnolog¨ªa mejora, las ideas alimentan nuevas ideas, y aunque a veces se dan algunos traspi¨¦s por el camino, la industria se mueve hacia delante. Juegos como Breath of the Wild, Horizon: Zero Dawn o The Witcher 3 eran casi inconcebibles cuando el Team ICO cre¨® Shadow of the Colossus en 2005, pero helo ah¨ª, intentando compartir generaci¨®n con ellos. Y el resultado es tan asombroso como su valent¨ªa, porque el matrimonio entre la sensibilidad de la obra de Fumito Ueda y la eficiencia t¨¦cnica de Bluepoint Games da lugar a una propuesta todav¨ªa muy vigente, que en rar¨ªsima ocasi¨®n, si alguna, refleja esa naturaleza limitada o anacr¨®nica que dicta la l¨®gica.
La explosi¨®n de los mundos abiertos en los ¨²ltimos a?os ha derivado en cierto desencanto por parte del p¨²blico, ya que a la desaparici¨®n del factor sorpresa hay que sumar la frecuente incapacidad para llenarlos con una calidad de contenido proporcional a la cantidad de espacio. Esto, lejos de perjudicarlo, juega a favor de Shadow of the Colossus, ya que ni su escala resulta tan desproporcionada al lado de otros mastodontes recientes, ni intenta justificarla con recolecciones o tareas repetidas ad infinitum. A¨²n podemos cazar lagartos de cola brillante para aumentar la resistencia o recoger frutas de los ¨¢rboles para aumentar la vida, pero es algo del todo accesorio que s¨®lo distrae al que lo busca voluntariamente. Por regla general la Tierra Prohibida existe simplemente para estar, extenderse hacia el horizonte y proporcionar un entorno veros¨ªmil a la par que misterioso por el que cabalgar entre batalla y batalla. Sin enemigos corrientes, personajes secundarios o m¨²sica que nos acompa?e, el sonido del viento y los cascos de nuestro fiel corcel Agro entrecortan los silencios de un mundo melanc¨®lico. Majestuoso, y sin embargo desprovisto de vida que aprecie su belleza.
A pesar de las llanuras verdes, nuestra montura y la espada que empu?amos, la exploraci¨®n de Shadow of the Colossus tiene m¨¢s de Journey que de Zelda. El profundo remodelado y retexturizado llevado a cabo por Bluepoint (no queda nada de PS2 a la vista) puede privarle de parte de la cualidad on¨ªrica que favorec¨ªa el menor nivel detalle del original, pero a cambio materializa escenarios mucho m¨¢s ricos e igual de evocadores. La c¨¢mara sabe jugar y adaptarse a diferentes perspectivas para enfatizar la ¨¦pica, pero tambi¨¦n promueve una introspecci¨®n impropia de un juego sobre matar gigantes. Donde otros miran hacia sus protagonistas para elevarlos por encima de sus adversidades y rivales tanto a un nivel moral como f¨ªsico (God of War, que coincidi¨® con ¨¦l entonces y vuelve a hacerlo ahora, es un gran ejemplo), Shadow of the Colossus se sirve de la escala y la soledad para buscar el efecto contrario y conseguir que Wander parezca tan insignificante cabalgando por las extensas colinas como luego al lado de los colosos.
Escalando hacia lo m¨¢s alto
As¨ª lo que sobre el papel podr¨ªa sonar como la cl¨¢sica fantas¨ªa de poder, en la pr¨¢ctica toma un rumbo pr¨¢cticamente opuesto. Aunque no es un juego particularmente dif¨ªcil ni en su modo m¨¢s alto (ahora hay tres, accesibles ya de inicio), la inteligente combinaci¨®n de narrativa, ambientaci¨®n y dise?o logra que la aventura se perciba como una gran odisea s¨®lo superable gracias a la inquebrantable voluntad del protagonista. La animaci¨®n siempre ha sido uno de los puntos fuertes del Team ICO, y gracias tanto a su minuciosidad como a algunos retoques de esta nueva versi¨®n, Wander se mueve y reacciona a su entorno de forma sorprendentemente natural, adaptando su cuerpo a los desequilibrios del terreno, tropezando en obst¨¢culos o balance¨¢ndose en el aire cuando alguno de los gigantescos titanes intenta librarse de ¨¦l. La dureza de los combates se vuelve real gracias a la sinergia entre lo que vemos en pantalla, la m¨²sica que s¨ª sale al frente en esos momentos, y el met¨®dico aproximamiento desde el mando, donde se requiere un buen control de la mec¨¢nica de agarre en conjunci¨®n con ciertas dosis de paciencia para adaptarnos a la fisionom¨ªa y rutinas de cada coloso.
Y es que Shadow of the Colossus es un juego espectacular, pero no uno orientado al mero espect¨¢culo. S¨®lo podemos derrotar a los colosos apu?alando sus puntos d¨¦biles, as¨ª que no hay combos, quick time events o set pieces para ofrecer situaciones molonas. Desde el inicio se plantea una serie de reglas b¨¢sicas en cuanto al funcionamiento de las f¨ªsicas, las armas (adem¨¢s de la espada tambi¨¦n disponemos de un arco) y nuestra habilidad de agarre, y a partir de ah¨ª los combates funcionan como un puzle que debemos resolver averiguando c¨®mo encaja todo eso con el cuerpo de cada coloso, el escenario a su alrededor o incluso la velocidad y relativa autonom¨ªa de nuestro caballo. Como la representaci¨®n m¨¢s dramatizada de David contra Goliat que podemos encontrar en un videojuego, la fuerza siempre est¨¢ del lado de nuestros contrincantes, por lo que el jugador se tiene que valer de virtudes como su observaci¨®n, pericia e incluso paciencia. Gestionar la resistencia es vital, as¨ª como decidir cu¨¢ndo retirarse a partes m¨¢s estables para recuperar energ¨ªa, o el tiempo que debemos cargar cada pu?alada sabiendo que un fuerte meneo nos hace perder la postura y reiniciar el proceso.
A veces puede resultar frustrante caer por un error de c¨¢lculo, un aspaviento inesperado o las reacciones provocadas por las colisiones entre nuestro personaje y los colosos, pero es parte del aprendizaje, de esta odisea aparentemente imposible de Wander. Adem¨¢s, aunque no tan visible como la exhaustiva remodelaci¨®n gr¨¢fica, tambi¨¦n disfruta de una peque?a capa de pulido extra en el plano jugable y funciona mejor que la versi¨®n original de PS2 o el remaster de PS3. El framerate es estable, la respuesta m¨¢s r¨¢pida y el agarre m¨¢s fiable, sin olvidar que tambi¨¦n se han aumentado las configuraciones del mando para que cada uno elija su preferida. Como resultado este ¡°nuevo¡± Shadow of the Colossus construye una experiencia todav¨ªa m¨¢s s¨®lida sobre las geniales ideas y mec¨¢nicas dejadas por el Team ICO, sin adulterar su esencia, pero reduciendo las inconsistencias derivadas de problemas t¨¦cnicos. De vez en cuando la c¨¢mara a¨²n acaba en posiciones inc¨®modas, y las interacciones con algunos colosos pueden dar m¨¢s dolores de cabeza que otros, pero son momentos puntuales que no impiden que el desenlace de los combates est¨¦ en manos del jugador.
La segunda juventud de un cl¨¢sico
Y son esas mismas manos las que tras un arduo recorrido ejecutan a los colosos mediante una ¨²ltima pu?alada que siempre se da a c¨¢mara lenta, para mayor recreaci¨®n en el logro conseguido. Un logro, cerrando ya el c¨ªrculo, que se torna agridulce gracias a la m¨²sica y la direcci¨®n con la que se graban estas derrotas. Las criaturas, tan majestuosas y misteriosas como el mundo que habitan, se desploman sin vida, en muchos casos sin haber hecho mayor mal que defender su territorio o a s¨ª mismas de ese diminuto atacante. De puesta en escena minimalista, Shadow of the Colossus triunfa a la hora de dejar la clase de poso que s¨®lo un medio interactivo como los videojuegos podr¨ªa dejar. Como jugadores somos c¨®mplices de Wander aun sin necesidad de saber nada acerca de ¨¦l o su relaci¨®n con la fallecida Mono, pero a pesar de ello seguimos a su lado porque el mundo es fascinante, los combates intensos, y cada coloso sorprende con dise?os y rutinas nuevas, creando un constante bucle de asombro, experimentaci¨®n y superaci¨®n que nos empuja hacia delante para ver m¨¢s.
Es por eso que Shadow of the Colossus sigue siendo una obra tan recomendable en 2018 como lo era en 2005. No para todos, por supuesto. El que quiera mundos llenos de vida, personajes definidos a trav¨¦s de sus palabras en vez de sus acciones, o sistemas de combate donde un par de botones consigan resultados espectaculares en cuesti¨®n de segundos dif¨ªcilmente encontrar¨¢ aqu¨ª su juego ideal. Pero del mismo modo que antes sobresal¨ªa entre el grueso del cat¨¢logo de PS2 por rehuir convenciones como esas, ahora vuelve a hacerlo en una PS4 con obras de mayor calibre porque no dedica sus esfuerzos a marcar las mismas casillas. El concepto y la ejecuci¨®n a¨²n son ¨²nicos, trasciende al boss rush m¨¢s all¨¢ de la sem¨¢ntica, y su absoluta dedicaci¨®n a los elementos que lo sostienen en pie consigue que tanto el n¨²cleo jugable como el emocional sean m¨¢s f¨¦rreos que en infinidad de juegos modernos. El hecho de que luego encima de eso Bluepoint reconstruya todo piedra a piedra, brizna de hierba a brizna de hierba, no hace m¨¢s que legitimarlo como un nuevo destacado de esta generaci¨®n.
Huelga decir que no alcanza los picos de las grandes producciones dise?adas desde cero para la m¨¢quina, como Uncharted 4, Horizon o el venidero God of War, y que tambi¨¦n encontramos imperfecciones como popping o algunas texturas peores que otras. Pero en ning¨²n momento evidencia sus or¨ªgenes de PS2: desde los modelos hasta la iluminaci¨®n, pasando por las f¨ªsicas del agua o la carga poligonal general, todo ha recibido un gran empuj¨®n. Lo que antes eran simples texturas ahora pueden ser rocas o baldosas talladas de forma individual, con motones de peque?os detalles y grabados. Y lo mejor es que a pesar de esta completa sustituci¨®n de recursos, el conjunto a¨²n es fiel al esp¨ªritu del Team ICO, y tambi¨¦n mucho m¨¢s estable que el visto en The Last Guardian. Con Shadow of the Colossus Bluepoint establece un nuevo list¨®n para esta clase de trabajos, m¨¢s cercano al remake a pesar de partir del c¨®digo original, e incluso va varios pasos m¨¢s all¨¢ ofreciendo filtros para que podamos acercarnos al estilo desaturado de anta?o, realzar la viveza de los colores o incluso disponer de un modo nocturno.
Modos y extras: ?pica a la carta
Las opciones no terminan ah¨ª, ya que si bien algunos podr¨¢n lamentar la p¨¦rdida del efecto 3D implementando en el remaster de PS3, esta versi¨®n a?ade HDR para quien tenga televisor compatible. Adem¨¢s, los usuarios de PS4 Pro tambi¨¦n se podr¨¢n beneficiar de un incremento en la calidad de imagen, sobre todo en caso de disponer de tele 4K (modo cinem¨¢tico), o en cambio elegir un rendimiento a 60 frames por segundo (modo de rendimiento fluido). Aunque los poseedores de la PS4 est¨¢ndar no deben preocuparse, ya que ah¨ª tambi¨¦n corre sin ninguna clase de problema (el juego ha sido analizado en base a esa versi¨®n y todas las im¨¢genes que acompa?an al texto salen de ella), la mejora en Pro es palpable y luce todav¨ªa m¨¢s la fant¨¢stica labor de Bluepoint. Por eso es de agradecer que tambi¨¦n hayan decidido incluir el hoy por hoy casi imprescindible modo foto, que permite detener la acci¨®n en cualquier momento para jugar con la perspectiva, los filtros y otros efectos antes de sacar las capturas m¨¢s bonitas u originales que se nos ocurran.
Otras de las nuevas opciones de personalizaci¨®n pasan por la desactivaci¨®n de las pistas de Dormin (que pod¨ªan ¡°destripar¡± el truco si tard¨¢bamos mucho tiempo en derrotar a un coloso) o la posibilidad de jugar sin interfaz como en ICO. Es una experiencia interesante para los que busquen un reto extra, ya que el juego alerta mediante el sonido cuando nos queda poca vida o resistencia, pero hasta entonces no hay ning¨²n punto de referencia y la gesti¨®n de la escalada se puede volver m¨¢s tensa. Y hablando de desaf¨ªos, como ya adelantamos antes esta vez contamos con hasta tres modos de dificultad: se ha a?adido uno f¨¢cil donde Wander inflige m¨¢s da?o y recibe menos; luego est¨¢ el normal, el ¨²nico que ven¨ªa por defecto en PS2; y por ¨²ltimo encontramos el dif¨ªcil, anta?o desbloqueable tras terminar el juego, pero ahora disponible desde el principio. Es una buena decisi¨®n de cara a los veteranos, que pueden preferirlo de inicio dado que, adem¨¢s de recalibrar los par¨¢metros de da?os, a?ade nuevos puntos d¨¦biles a varios colosos haciendo que las peleas sean m¨¢s largas y variadas.
Claro que, para bien o para mal, la galer¨ªa de artworks e im¨¢genes s¨®lo se puede desbloquear al completo jugando en las tres dificultades, as¨ª que a los que vayan con af¨¢n de conseguirlo todo no les queda otra que hacer varias pasadas. Por suerte, con la opci¨®n de nueva partida + tambi¨¦n llega el nuevo modo mundo espejo, donde todo se invierte, y nuestros logros se siguen acumulando como en el original: por un lado se mantienen tanto las mejoras de vida como las de resistencia (algo que sirve para m¨¢s que los combates); y por otro, podemos conseguir una serie de objetos si batimos determinadas marcas contrarreloj. Estas peleas cronometradas s¨®lo est¨¢n disponibles a partir de la segunda partida, tambi¨¦n hacen distinci¨®n de dificultad, y nos proporcionan ¨ªtems como m¨¢scaras, espadas o flechas que m¨¢s all¨¢ del cambio est¨¦tico proporcionan diversas mejoras para Wander. Aunque en condiciones normales Shadow of the Colossus es un juego corto (la primera partida puede rondar las 8 horas), sus extras y secretos sirven para mantener el disco bastantes d¨ªas dentro de la consola.
An¨¢lisis realizado en base a una copia de prensa facilitada por Sony.
Excelente
Un t¨ªtulo referente en su g¨¦nero, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutar¨¢s de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en cl¨¢sico con el paso de los a?os. C¨®mpralo sin pesta?ear.