Shadowhand
- PlataformaPC6.5
- G¨¦neroEstrategia, RPG
- DesarrolladorGrey Alien Games
- Lanzamiento07/12/2017
- TextoIngl¨¦s
- VocesIngl¨¦s
- EditorPositech
Shadowhand, An¨¢lisis
Grey Alien Games presenta un entretenido juego de cartas que intercala mec¨¢nicas RPG con una historia ambientada en el siglo XVIII. La protagonista, la noble inglesa Lady Cornelia Darkmoor, mudar¨¢ sus tocados y vestidos por ropa c¨®moda y dejar¨¢ las intrigas de corte para pasar a la acci¨®n. A partir de ese momento, se la conocer¨¢ como Shadowhand, una temible bandolera que har¨¢ lo posible para recuperar a su querida amiga Mariah. ?La acompa?ar¨¢s en su viaje?
Dama de corte de d¨ªa, rufiana de noche
Cae el sol, luna llena en el firmamento. El carruaje traquetea tropezando con las piedras del camino, ajeno a los males que est¨¢n por venir. En la Inglaterra del siglo XVIII, las sinuosas arterias se abren sangrantes ante la presencia de pistoleros ¨¢vidos de botines golosos. Cuando Lady Cornelia Darkmoor se sube al transporte junto a su leal amiga Mariah se adentra, sin saberlo, en una vida nocturna de trapisondas, peripecias y duelos a muerte. Todo ocurre en cuesti¨®n de segundos: mientras los cascos del caballo golpean con virulencia el embarrado suelo de la floresta, un bandolero encapuchado emerge de entre los ¨¢rboles portando una pistola en sus manos. Sin pens¨¢rselo dos veces, aprieta el gatillo y la bala alcanza al cochero, que se derrumba como un fardo cargado de piedras. Le siguen minutos de confusi¨®n en los que Mariah desaparece sin dejar rastro.
Para una mujer de la corte como Lady Cornelia, acostumbrada a las intrigas intestinas, a los juegos de poder, a las apariencias y a las lenguas b¨ªfidas, empu?ar el filo no es lo m¨¢s habitual. La nobleza prefiere que otros se manchen las manos por ellos, o que sus archienemigos se desplomen muertos despu¨¦s de ingerir una copita de vino debidamente aderezada con sustancias venenosas. Sin embargo, la dama Cornelia tarda poco en tomar la espada, no como noble guerrera, sino como bandolera. Fracasada la misi¨®n secreta a la que acud¨ªa junto a su amiga, lo ¨²nico que le queda es recuperar a Mariah sea como sea. Con ese objetivo en mente, la joven deja atr¨¢s su anterior existencia para embarcarse en la vida pendenciera.
Desde ¨¦pocas remotas, en las rutas de tr¨¢nsito, las tabernas han servido para acoger a los viajeros cansados. Sentados los maltrechos huesos en posici¨®n de reposo, un plato de comida alivia las quejas estomacales; la bebida desentumece el gaznate y elimina los restos de polvo acumulados en la garganta. Entre bocado y sorbo, los chismorreos se deslizan con cada chasquido de lengua, y a medida que el alcohol se adhiere a las venas de los comensales, las voces elevan el tono y las risas explotan cacareantes, fundi¨¦ndose con el coro ininteligible de palabras. Alguna pelea por aqu¨ª, alguna vomitona por all¨¢; unos duermen despatarrados, otros gritan bien despiertos. Pero sobre la mesa no faltan las cartas ni las apuestas de dinero. En toda taberna que se precie, incluida la de MeriStation, el juego es un elemento de socializaci¨®n imprescindible.
Un RPG estrat¨¦gido de cartas
La criminal Shadowhand no se detiene en tabernas, pero lleva las cartas en los bolsillos, a buen recaudo. El nuevo t¨ªtulo de Grey Alien Games retoma el juego del solitario que ya explot¨® en su anterior producci¨®n, Regency Solitaire, y lo mezcla con mec¨¢nicas roleras. De todos modos, que nadie espere exploraci¨®n ni libertad de movimientos. La obra centra toda su atenci¨®n en las partidas de cartas, por mucho que hayan intentado construir una atm¨®sfera alrededor para dar empaque al producto.
La historia parte de una premisa que puede dar pie a un desarrollo interesante, pero sin embargo, la narraci¨®n fluye a trav¨¦s de im¨¢genes est¨¢ticas que no seducen ni a la vista ni al coraz¨®n. Por a?adidura, lo que cuentan las pantallitas de texto aburre m¨¢s r¨¢pido de lo que Lady Cornelia tarda en desenfundar su pistola, que es un suspiro. A pesar de que los 22 cap¨ªtulos (m¨¢s de 150 misiones en total, o m¨¢s bien, partidas de mesa) se ambientan en entornos diferentes y presentan a personajes de toda ¨ªndole, las conversaciones incitan a machacar el bot¨®n izquierdo del rat¨®n para que pasen lo m¨¢s r¨¢pido posible (la pesta?a de "pasar la historia" es la opci¨®n m¨¢s veloz). Los que no dominen la lengua de Shakespeare¡ªpasada por la m¨¢quina del tiempo dieciochesca¡ªlo tendr¨¢n m¨¢s dif¨ªcil para seguir las aventuras y desventuras de Shadowhand.
El desarrollo de la trama no conecta bien con la jugabilidad. Funciona en los duelos, pero languidece cuando despu¨¦s de una conversaci¨®n, sin comerlo ni beberlo, el personaje se dedica a jugar al solitario, as¨ª de repente. Por un lado, es compresible, habida cuenta de que este videojuego es en realidad un t¨ªtulo de cartas adornado con secciones narrativas. Por otro, queda la sensaci¨®n de que la interactividad entre ambos elementos podr¨ªa haberse explotado un poquito m¨¢s.
Cada cap¨ªtulo ofrece un n¨²mero determinado de misiones. Se distinguen dos tipos: las manos en las que Shadowhand juega contra ella misma y los duelos contra enemigos. Las dos variedades se basan en el juego del solitario. En la parte superior de la pantalla disponemos de las cartas, cada una marcada con un valor num¨¦rico del cero al nueve; en la inferior, bocarriba, permanece expuesta una ¨²nica carta. La finalidad es colocar encima de ella otro naipe cuyo valor sea inmediatamente superior o inferior a la de esta. Por ejemplo, si sobre el tapete descansa una carta con un seis, solo podr¨¢ colocarse encima un cinco o un siete.
A menudo, descubriremos con no poca frustraci¨®n que ning¨²n naipe de la parte superior es compatible con la baraja de la parte inferior. Siempre es posible sacar otra carta de esa baraja para tratar de continuar, pero llegar¨¢ un momento en que los naipes se acaben. En los casos en los que estemos jugando en solitario, el objetivo es descartarse completamente antes de que eso ocurra. Durante los duelos aparecer¨¢ un nuevo mazo de cartas cuando el anterior se agote. Como se puede entrever, la suerte juega un papel importante, a veces crucial. Por lo tanto, la habilidad y la agilidad mental quedan a merced de un componente tan voluble como el azar.
Las fases de duelo son las m¨¢s entretenidas. Nos batimos contra el enemigo como en un juego de rol por turnos, solo que utilizaremos las cartas y el solitario para atacar. El objetivo es encadenar descartes para recargar nuestras armas y as¨ª poder activar los patrones de ataque. Tanto Lady Cornelia como el rival disponen de puntos de vida, y obviamente, lo que deberemos hacer es agotar los puntos del contrario antes de que el enemigo acabe con la vida de Shadowhand.
Puede que la base del videojuego sea el solitario de toda la vida, pero los desarrolladores han implementado novedades que se reflejan en la jugabilidad. No todas las cartas est¨¢n desbloqueadas desde el principio. Tanto es as¨ª que manos enteras se encuentran cerradas con candado, de forma que nos vemos obligados a buscar la llave de entre la mara?a de naipes. En otros casos, debemos buscar una l¨¢mpara para iluminar el conjunto de cartas ocultas en la oscuridad. Como en las barajas reales, las cartas est¨¢n englobadas en un palo determinado. A veces nos toca recopilar unas cuantas del mismo palo para desbloquear una secci¨®n determinada. Las especiales, el joker y las spare (de repuesto, sobrante), cumplen dos funciones distintas: la primera la podemos colocar siempre, independientemente del naipe que est¨¦ bocarriba, mientras que la segunda reinicia la cuenta num¨¦rica dependiendo del valor que marque.
El toque RPG est¨¢ reservado para la personalizaci¨®n de la pistolera. Lady Cornelia puede equiparse con diferentes armas, ropajes y pociones. Seg¨²n vaya mejorando, es capaz no solo de mejorar sus atributos principales (el jugador selecciona las caracter¨ªsticas que quiere mejorar al subir de nivel), sino tambi¨¦n sus habilidades: las pasivas funcionan durante la lucha sin que Shadowhand tenga que hacer nada, mientras que las activas son asignables y son cartas que alteran de alguna manera el ritmo y las reglas de juego; por ejemplo, aumentando la probabilidad de obtener el n¨²mero requerido para continuar o barajando los naipes con el fin de que la disposici¨®n quede modificada.
La m¨²sica llama la atenci¨®n por su sonido, que captura la esencia de las notas del XVIII con instrumentos de cuerda y melod¨ªas orquestales. La pega es que los temas son escasos y enseguida se hacen repetitivos. Pese a ello, no habr¨ªa que olvidar qui¨¦nes est¨¢n detr¨¢s de Grey Alien Games: son un matrimonio, Helen Carmichael y Jake Birkett. Ambos se encargan del n¨²cleo conceptual de sus videojuegos y contratan a personal para completar ciertos apartados. No tienen experiencia en juegos de alto presupuesto, pero han desarrollado numerosos t¨ªtulos independientes. El resultado en este caso es positivo. Shadowhand funciona en el sentido de que engancha a pesar de sus puntos d¨¦biles.
Correcto
No es lo ¨²ltimo ni lo m¨¢s original, tampoco cuenta con la mejor ejecuci¨®n, pero puede divertir si te gusta el g¨¦nero. Bien, pero mejorable. C¨®mpralo si te gusta el g¨¦nero y te gusta tenerlos todos.