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M¨¢s all¨¢ del juego: Los efectos de Tetris en el cerebro
Consecuencias contrastadas en la conducta humana
M¨¢s all¨¢ del juego: Los efectos de Tetris en el cerebro
Han pasado m¨¢s de 33 a?os desde que el cient¨ªfico sovi¨¦tico Aleks¨¦i P¨¢zhitnov crease el que es a d¨ªa de hoy videojuego m¨¢s vendido de todos los tiempos, Tetris. El t¨ªtulo, que es la representaci¨®n m¨¢s cercana a una f¨®rmula matem¨¢tica que podamos imaginar en la industria del ocio electr¨®nico, cuenta con efectos que afectan al rendimiento cerebral, ya que en la medida en que vamos jugando asimilamos conductas y actos que repercuten no solo en nuestra destreza jug¨¢ndolo sino incluso tambi¨¦n a nivel psicol¨®gico.
Psic¨®logos como Tom Stafford, de Mind Hacks, aseguran que jugar a Tetris tiene efectos positivos en nuestro cerebro, adem¨¢s de ser altamente atractivo para jugadores y jugadoras por causar placeres b¨¢sicos similares a los que sentimos cuando ordenamos cosas, solo que en esta ocasi¨®n se trata de echar un pulso que sabemos que siempre vamos a perder; tarde o temprano veremos la pantalla de Game Over.
Es sin embargo el camino, ese proceso donde las piezas encajan cuando recibimos esa retroalimentaci¨®n directa del juego, como si de meter constantemente monedas en una hucha se tratase, solo que aqu¨ª es m¨¢s lanzar monedas al cielo. El efecto Tetris, tarea infinita que intenta postergar una inevitable catarsis, tambi¨¦n es asemejado pro algunos psic¨®logos como el Efecto Zeigarnik, que es b¨¢sicamente la tendencia de las personas a recordar m¨¢s las tareas inconclusas que las que ya se han realizado.
Lo que muchos otros jugadores que alcanzan un nivel de destreza por encima de la media en este t¨ªtulo es que los efectos pueden afectar a su comportamiento en el d¨ªa a d¨ªa, incluso durmiendo.
El efecto Tetris, ?qu¨¦ es?
Para entender correctamente lo que significa el s¨ªndrome Tetris, lo mejor es recurrir a un interesante art¨ªculo publicado en Wired all¨¢ por 1994, ¨¦poca en la que el juego de Aleks¨¦i P¨¢zhitnov todav¨ªa era algo contempor¨¢neo, actual. Y en dicha reflexi¨®n se plantea un tema derivado en muchos de los jugadores que hab¨ªan quedado atrapados por las ganas de seguir jugando diariamente al t¨ªtulo, convirtiendo las partidas en algo rutinario y no simplemente como un pasatiempo.
El ¡°Efecto Tetris¡± se interpreta por ende como un comportamiento obsesivo con el videojuego, que traspasa la l¨ªnea del inter¨¦s para convertirse en casi necesidad. Pero este s¨ªndrome no solo afecta a la adicci¨®n, sino que tiene tambi¨¦n efectos secundarios que afectan al d¨ªa a d¨ªa por condicionar la actividad de las personas de manera autom¨¢tica, inintencionada.
No es ni mucho menos una broma; llega convertirse en un problema como la aparici¨®n de piezas de Tetris en sue?os o la percepci¨®n ilusoria de los tetriminos en el escenario que rodea al campo de visi¨®n humano. Pongamos un ejemplo: un alumno que se encuentra en clase tomando apuntes y, en el espacio que ocupa la escuadra de la pizarra, cree que cabe una pieza de Tetris¡ y la encaja, pero solo en su cabeza, como si todo lo que se representase frente a sus ojos fuese un tablero del t¨ªtulo que nos concierne.
Otras personas incluso aseguran haber tenido efectos secundarios en el sentido del o¨ªdo, pero en este ¨²ltimo caso no tenemos ning¨²n ejemplo de personas conocidas, al contrario que en los otros supuestos mencionados.
?Y qu¨¦ dice la medicina?
Como todo s¨ªndrome o problem¨¢tica, no todos cuentan con un diagn¨®stico m¨¦dico o son considerados enfermedades. En este caso, el efecto Tetris ni siquiera es considerado patolog¨ªa, sino que se trata de casos aislados, en ocasiones err¨®neamente definidos como algo anecd¨®tico; pero la realidad emp¨ªrica dice que afecta a la conducta de muchas personas.
Recalcar por ello que considerarlo ¡°s¨ªndrome¡± no es del todo correcto al no haber un origen claro que dictamine su causa ni tampoco el tratamiento. La soluci¨®n, de acuerdo con personas que han sufrido de los efectos de jugar tanto ¨Cdemasiado- a Tetris, es simplemente dejar de hacerlo durante un tiempo y que la mente se despeje. Al final, todo es bueno en su justa medida¡