Final Fantasy XV Pocket Edition, impresiones

Hace poco menos de un a?o que Final Fantasy XV lleg¨® por fin a nuestros hogares, cerrando un c¨ªrculo iniciado en 2006 con Versus 13 y que aguant¨® coleando hasta que por fin pudimos ponernos a los mandos de Noctis y compa?¨ªa. Pero sus historias estaban lejos de quedar relegadas al ansiado proyecto, expandi¨¦ndose al cine -Kingslaive-, anime en formato serie -Brotherhood- y videojuegos para m¨²ltiples sistemas a modo de precuela -A King's Tale-, spin-offs -Monsters from the Deep para VR- o lanzamientos en m¨®vil como Justice Monster 5 o King's Knight. Sin embargo, de todo lo anunciado hasta la fecha quiz¨¢ sea Pocket Edition el proyecto m¨¢s chocante. No por la rareza de su planteamiento sino porque es, en esencia, un remake del t¨ªtulo de PS4, Xbox One y PC.

La extra?eza viene de la propia apuesta est¨¦tica y jugable, de la simple idea de convertir un juego de aspecto fotorrealista y generoso en la reconstrucci¨®n de su mundo, vivo y preciso, en una recuperaci¨®n de los c¨®digos visuales de los juegos de PlayStation o a lo sumo de propuestas port¨¢tiles como Bravely Default. Pero ojo, no para Nintendo Switch, 3DS o Vita: en tablets. Su primer tr¨¢iler nos choc¨® pero tras jugarlo en Paris Games Week durante apenas quince minutos tenemos que decir una cosa: es menos rupturista de lo que parece y, en verdad, funciona lo suficientemente bien como para que pueda ser una buena puerta de entrada en el juego para un p¨²blico nuevo.

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No ser¨¢ eso s¨ª el tipo de consumidor acostumbrado al sota-caballo-rey de los juegos para estos dispositivos, es decir, no captar¨¢ la atenci¨®n de quien usa su tel¨¦fono o tableta para jugar a Clash Royale. Aqu¨ª no tenemos, al menos anunciadas, cajas de looteo. Tampoco parece que pudieran encajar muy bien, aunque hemos visto recientemente que las compa?¨ªas cada vez tienen menos escr¨²pulos (e imaginaci¨®n) para a?adirlas con calzador. El que s¨ª podr¨ªa verse interesado es aquel tipo de usuario que buscando entre los juegos disponibles se halle con un RPG gratuito (el primer episodio al menos, el resto ser¨¢n de pago) con unos gr¨¢ficos simp¨¢ticos y la promesa de una historia ¨¦pica.

Lo que pudimos probar de Final Fantasy XV: Pocket Edition correspond¨ªa al arranque del t¨ªtulo, y aunque por tiempo no tuvimos la opci¨®n de comprobar si es ya el t¨ªtulo final o s¨®lo una demo, si que podemos confirmaros que estaba localizado con textos en castellano (entre otros muchos idiomas) e incluso doblado al ingl¨¦s, franc¨¦s, alem¨¢n y claro, japon¨¦s. Las secuencias iniciales son id¨¦nticas en argumento e incluso en di¨¢logos de texto a las del t¨ªtulo de 2016, si caso algo simplificadas para que el ritmo no sufra por el camino. Pero lo importante est¨¢ ah¨ª, adquiriendo nuestra primera misi¨®n en Hammerhead: hablar con Ignis, luego con el resto del grupo y finalmente con Cidney.

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La mec¨¢nica nos pedir¨¢ que acabemos con un grupo de enemigos que campan a sus anchas por las proximidades y toparemos as¨ª con los alacranes y los dafoenos, criaturas que todos los que hayan jugado al original reconocer¨¢n. Y la primera y gran novedad de esta versi¨®n, al margen de la evidente (su desenfadado dise?o art¨ªstico) se presenta en la forma de control que tiene su explicaci¨®n en lo evidente, que es un juego para tablets con pantalla t¨¢ctil, por lo que todo consiste en tocar el punto exacto al que queremos movernos. La c¨¢mara parece fija, sin rotaci¨®n, al menos esa es la impresi¨®n que daba en este tiempo que tuvimos para jugarlo, as¨ª que de esta forma la mayor complicaci¨®n es adaptarnos a la perspectiva a¨¦rea y la movilidad que la acompa?a.

La parte de exploraci¨®n no ten¨ªa nada de especial: si queremos coger un objeto sirve con acercarse a ¨¦l y tocarlo, al igual que interactuar con personajes. Los combates son otro tema diferente y aunque es cierto que s¨®lo pudimos vencer a los enemigos citados, que carecen de patrones demasiado elaborados, da la impresi¨®n de ser algo m¨¢s simple de lo que debiera. B¨¢sicamente controlamos a Noctis y tras darle un click encima al enemigo, el personaje se queda atac¨¢ndole hasta que lo mata, por lo que lo marcamos instintivamente como objetivo. Tenemos varias funciones que van m¨¢s all¨¢ de golpe b¨¢sico, tal como hacer una t¨¦cnica cruzada que quita m¨¢s vida, deslizar el dedo en diagonal para hacer el warp de desplazamiento o pulsar un icono en el momento justo para hacer un movimiento evasivo a modo de ruptura de la ofensiva del enemigo.

Y en realidad poco m¨¢s podemos decir porque la sesi¨®n de juego fue corta y perteneciente a una parte del juego que no es mucho m¨¢s que un tutorial, y adem¨¢s literalmente porque la siguiente misi¨®n era nocturna y a¨²n segu¨ªan saliendo pantallas de ayuda. Pero la sensaci¨®n que se nos qued¨® fue positiva, porque parece que han conseguido mantener el esp¨ªritu del juego, adaptarlo a un apartado art¨ªstico diferente y a¨²n con todo hacer que se sienta realmente fresco. Queda por ver c¨®mo de automatizado est¨¢, si la dificultad es escalable y c¨®mo estructuran los cap¨ªtulos en relaci¨®n duraci¨®n/precio. Pero lo que parec¨ªa una idea algo loca podr¨ªa terminar por convertirse en una peque?a sorpresa a poco que sigan por este camino.

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