Dragon Ball: Fusions, an¨¢lisis

Nota: este an¨¢lisis se ha hecho con la versi¨®n original japonesa del juego; actualizaremos elementos como el sistema online cuando podamos probar su funcionamiento con la versi¨®n espa?ola, as¨ª como la anunciada supuesta censura en occidente

Dragon Ball Fusions, an¨¢lisis 3DS

Contra pron¨®stico, Dragon Ball Fusions llega a occidente. Se anunci¨® en 2015 y por su naturaleza tan nipona, parec¨ªa que correr¨ªa la misma suerte que otros juegos de la saga que Bandai Namco no ha tra¨ªdo a Europa. Desde los Heroes, inspirados en las recreativas japonesas de id¨¦ntico nombre, hasta el doloroso ¨Cpor brillante- Ultimate Butoden que sali¨® en Nintendo DS en su momento. Pero la buena acogida del juego en el pa¨ªs del sol naciente, el repunte en el inter¨¦s ¨Cque nunca ha deca¨ªdo del todo- en el mundo de Goku y compa?¨ªa gracias, en parte, a Dragon Ball Super, y la buena salud de 3DS en todo el mundo hicieron que se anunciara la llegada de este RPG a Espa?a el pr¨®ximo viernes, d¨ªa 17. Y no mentimos si, como ya dijimos en su momento, estamos ante un t¨ªtulo sorprendente.

Dragon Ball se ha basado en su mayor¨ªa de propuestas por convertirse en un videojuego de lucha cuando ha pisado el mundo del ocio electr¨®nico. Los primeros en cosechar grandes ¨¦xitos fueron los Butoden de Super Nintendo, mientras que la excelencia de la franquicia se consum¨® hace un par de generaciones con Budokai 3 y con Tenkaichi 3. Por el camino, juegos de todo tipo. Algunos han coqueteado con el JRPG m¨¢s tradicional ¨CAttack on Saiyan-, otros han apostado por el formato ARPG ¨CLegado de Goku- y otros han buscado el estilo m¨¢s beat¡¯em up tanto en 2D como en 3D.  Desde hace tiempo, los combates dominan las experiencias Dragon Ball, con los Xenoverse como ¨²ltimas iteraciones destacadas que, eso s¨ª, han a?adido elementos roleros y de personalizaci¨®n interesante. Pero Fusions es m¨¢s que todo esto. Se puede definir como una mezcla de rol, Dragon Ball y experiencia Pok¨¦mon en medio de un mundo y puesta en escena original. De las m¨¢s curiosas entre los m¨¢s de cien juegos DBZ que han aparecido hasta el momento.

El mundo al rev¨¦s

Los eventos de Fusions empiezan con nuestro avatar y su compa?ero y rival que, tras encontrar las bolas de drag¨®n, le piden a Shenron un deseo: organizar el torneo mundial definitivo.  No queda muy claro lo que entiende el gran drag¨®n porque acto seguido, somos absorbidos por un portal dimensional y acabamos en un mundo que no es como conoc¨ªamos: se han fusionado elementos de distintos lugares t¨ªpicos de Dragon Ball. La soluci¨®n, ir a la corporaci¨®n c¨¢psula para hablar con Bulma.  Aqu¨ª empezar¨¢ nuestro periplo para llegar al torneo, que se complicar¨¢ con un malvado plan que deberemos erradicar y la presencia de un brazalete creado por Bulma que permite fusionar todo tipo de personajes sin las limitaciones que conocemos sobre esta t¨¦cnica.

El argumento, que avanza mientras vamos entablando conversaciones y situaciones divertidas con un sinf¨ªn de personajes y villanos, sirve para hilar un videojuego que se basa en tres conceptos: exploraci¨®n, recolecci¨®n y combates. Nuestro desarrollo se narra junto a estos personajes: Trunks, Goten, Pan y Goku peque?o. El cruce de universos, personajes y mundos es total, sin limitaciones ni miedos a que el fan m¨¢s ac¨¦rrimo haga una mueca de desaprobaci¨®n. Porque esto hay que tenerlo claro: no es un juego para el defensor a ultranza del ¡°canon¡±, de lo que es Dragon Ball y lo que no puede ser. Aqu¨ª se da barra libre en todos los sentidos, y como antes lo acepte el fan de Goku mejor se lo va a pasar.

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Previo a todo esto tenemos la posibilidad de personalizar nuestro personaje con un nivel de detalle que nos hubiera encantado ver en Xenoverse. Humanos, saiyans, namekianos, monstruos y aliens son las posibilidades iniciales, escogiendo tambi¨¦n el g¨¦nero que queremos y teniendo a nuestra disposici¨®n una gran cantidad de pelos, caras y facciones distintas. Adem¨¢s, la nueva raza alien permite crear personajes parecidos a monstruos conocidos como Ginyu, Dodoria o Burter entre otros, mientras que hay una raza mucho m¨¢s completa que la de monstruo = a Boo, pudiendo hacer creaciones similares a los Kai. En este punto es importante destacar que a medida que compramos y conseguimos piezas de ropa, ¨¦stas tambi¨¦n las podemos personalizar cambi¨¢ndoles el color, permitiendo mucha m¨¢s variedad tambi¨¦n en este sentido.

Destacar que vamos a tener por delante un camino en el que podremos encontrar m¨¢s de mil personajes. Muchas son creaciones tipo avatar que no tienen demasiado inter¨¦s, pero no faltan los grandes personajes de la saga. De hecho, es el juego con m¨¢s personajes jugables de todo el espectro de videojuegos Dragon Ball. Adem¨¢s, podremos fusionar muchos de ellos. Todos los personajes son fusionables con nuestro avatar, aunque el resultado visual no es el mejor y denota cierta falta de inspiraci¨®n; pero tambi¨¦n tendremos fusiones entre personajes conocidos muy curiosas. Ver personajes como Piccolo o Krilin, Tien y Yamcha, Raditz y Nappa, Jeice y Guldo, Gohan del futuro y Trunks¡­ Cada personaje ¡®canon¡¯ tiene distintas fusiones disponibles que ampl¨ªan el potencial de sus habilidades. Aqu¨ª entra el concepto recolecci¨®n, ya que el juego invita a ir reclutando todo tipo de personajes para completar nuestro listado y de paso, conseguir hacer equipos m¨¢s y m¨¢s fuertes. Eso s¨ª, las fusiones con nuestro avatar son muy flojas y poco trabajadas a nivel visual.

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El camino hacia el m¨¢s fuerte

Una vez estamos ubicados en esta brecha temporal que une los mejores luchadores de distintas l¨ªneas de tiempo, tenemos que intentar llegar al gran torneo. Pero para hacerlo tendremos que romper unas barreras que exigen conseguir una serie de energ¨ªas de colores. Bulma, siempre atenta, nos regala Ziku, un radar-3DS que nos acompa?a y nos ayudar¨¢ en nuestros primeros compases. Para conseguir esta energ¨ªa simplemente tenemos que derrotar a enemigos que encontramos por el mundo y que tengan el tipo de color que buscamos. La acci¨®n se divide en dos partes: por un lado exploramos libremente el mundo buscando misiones principales, eventos secundarios y otros extras; y por otro, el mapa de batalla cuando entramos a luchar.

Los combates son una mezcla del formato cl¨¢sico de juego por turnos pero con varios elementos din¨¢micos. Tenemos una barra debajo del escenario en la que los iconos de nuestro equipo, de un m¨¢ximo de cinco, y los rivales van corriendo de un punto A a un punto B. Tipo ATB de los Final Fantasy, cuando llega el turno del personaje puede atacar (cada uno tiene distintas velocidades). Las opciones son varias: ataques mel¨¦, ataques ki, cargar energ¨ªa o hacer ataques especiales.  Una vez decidimos el ataque, tenemos que marcar desde que direcci¨®n hacerlo.

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Esto es importante por varios motivos: primero porque se activa un minijuego en el que el rival puede bloquear el golpe; segundo, porque cuando atacamos podemos conseguir propiedades extras. Por ejemplo, mandar el enemigo hacia la posici¨®n de un compa?ero para que d¨¦ un golpe extra; o hacerlo rebotar contra un rival para que se da?en ambos; o, lo mejor, lanzarlo fuera del ring para hacerle da?os importantes y que reinicie su turno.

En este punto tambi¨¦n se a?aden funciones complementarias, como hacer ataques combinados si tenemos personajes de nuestro equipo cerca. Una vez tenemos cargadas varias bolas de energ¨ªa (cuando nos golpean, cuando golpeamos o cuando reservamos turno se cargan) podremos lanzar ataques especiales que son m¨¢s contundentes y que recrean fielmente acciones del universo Dragon Ball.  Naturalmente, aqu¨ª entra en juego la personalizaci¨®n de nuestro equipo: hay personajes curadores, como Pan y Gine, otros que potencian ataque y defensa del equipo, otros basados en ataques f¨ªsicos, otros con ondas de energ¨ªa poderosas¡­ encontrar el equilibrio y cambiar de equipo en seg¨²n qu¨¦ batallas por las particularidades del enemigo es clave.

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El sistema de combate es muy din¨¢mico,  permite hacer combinaciones interesantes y adem¨¢s, a?ade movimientos devastadores que aportan espectacularidad y agilidad. Tendremos una barra verde que se rellena en dos partes. Una primera mitad nos puede servir para reclutar un enemigo si conseguimos lanzarlo fuera con dicho ataque. La segunda es la multifusi¨®n: creamos un personaje fusionado con los cinco miembros del equipo y lanzamos ataques devastadores. En ambos casos se activa primero un minijuego donde luchamos en tiempo real cargando barra de ki y da?ando de manera grave a los enemigos antes de acabar lanzando el gran golpe.

A todo esto hace falta a?adir un par de detalles m¨¢s. Algunos niveles nos obligan a terminar de alguna manera, por ejemplo matar a todos los enemigos a la vez o lanzarlos todos fuera del ring; tambi¨¦n podremos hacer fusiones in-game entre personajes (como Goku y Vegeta) para conseguir un personaje m¨¢s poderoso. Por ¨²ltimo, una vez hemos completado el combate subiremos stats de nuestros personajes, que van ganando niveles y atributos,  y conseguiremos nuevos ataques. Dichos ataques podemos seleccionarlos y personalizar a nuestro equipo, cambiando los movimientos especiales de nuestro avatar pero tambi¨¦n de otros miembros.

En el juego iremos avanzando por las misiones principales y con la necesidad de hacer combates aleatorios con personajes repartidos por el mapa o con las misiones secundarias. Ambos casos son necesarios para reclutar personajes y conseguir la energ¨ªa para abrirnos paso en los 7 mundos que iremos visitando hasta el gran y dif¨ªcil jefe final. En cierto punto de la aventura encontraremos brechas temporales que podremos activar cargando Ki. A cambio aparecer¨¢n luchadores m¨¢s poderosos ¨Cy atractivos porque no son avatares- para enfrentarnos a ellos y, si ganamos, poderlos reclutar.

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El sistema de combate funciona perfectamente y tiene muchas posibilidades, pero es cierto que algunos combates se pueden hacer algo pesados en algunos momentos por la naturaleza de los mismos. A veces, sin poder hacer nada, nos encontraremos con salidas de ring constantes que nos obligar¨¢n a ser espectadores hasta que nos toque el turno, y sobre todo en niveles altos puede ser frustrante en varios momentos.

El principal problema que encontramos en el juego es que por un lado hay muchos de los mejores personajes, ic¨®nicos y carism¨¢ticos, que no podremos reclutar hasta haber terminado la campa?a. Esto hace que el avance durante las primeras veinte horas de juego, que es lo que dura la historia principal, pierda algo de fuerza cuando vemos que hablamos con saiyans legendarios que no se suman al plantel a pesar de que por guion, podr¨ªan hacerlo perfectamente.  Otro problema es que el endgame es menos rico de lo que podr¨ªamos esperar. S¨ª, tenemos la opci¨®n de ir reclutando personajes  con las brechas temporales y conseguir m¨¢s y mejores luchadores, pero tampoco es que tengamos grandes eventos posteriores donde aprovecharlos (uno con el abuelo Gohan, otro Beerus) m¨¢s all¨¢ de los, eso s¨ª, duros, combates para dichas brechas.  Tambi¨¦n podremos recolectar las bolas de drag¨®n, combates mediante tras encontrar su lugar con el radar, para poder pedir deseos.

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Apartado t¨¦cnico

Dragon Ball Fusions usa un estilo gr¨¢fico ¡®cabez¨®n¡¯ que es desenfadado y encaja bien con el tipo de propuesta que nos ofrece. Por desgracia, es cierto que t¨¦cnicamente el juego es mejorable tanto en los detalles y elementos que podr¨ªamos ver en pantalla, tanto en modo exploraci¨®n como en combate, y tiene excesivos jaggies a la vista, algo que forma parte del d¨ªa a dia de 3DS pero aqu¨ª es m¨¢s acusado. Eso s¨ª, las animaciones de combate y di¨¢logos de los personajes funcionan a buen nivel. Las voces en japon¨¦s tambi¨¦n son un regalo para los fans de la saga y la m¨²sica que acompa?a el juego cumple su cometido sin m¨¢s. Destacan los efectos especiales de ataques, golpes o movimientos como el efecto de volar a toda velocidad.