Visita el mundo entero en tiempo real con esta p¨¢gina de webcams urbanas 24 horas

Dice una vieja canci¨®n para ni?os llamada ¡®En el auto de pap¨¢¡¯ que ¡°El viajar es un placer¡±. Y para muchos lo es. Viajar es algo que puede hacerse de la forma tradicional como es eligiendo un destino, reservando habitaci¨®n, pasajes para el medio de transporte elegido, decidiendo la mejor ruta si vamos en coche, etc. O tambi¨¦n a lo aventurero / mochilero, que es cogiendo la maleta o li¨¢ndose el petate y a la aventura, a hacer auto-stop, ir en bicicleta o de la forma que sea y encontrarse con el mundo sin m¨¢s.

El mundo entero en tiempo real

Hay quien adora viajar, pero por razones como el trabajo, la familia o los ingresos s¨®lo puede hacerlo durante sus vacaciones o directamente no puede, lo que le lleva a la frustraci¨®n por el deseo no cumplido. Pero aunque sea un fastidio y nos amargue, podemos suplir esa carencia con peque?os trucos y tomarnos mini-vacaciones de -10 minutos en el destino so?ado al que pronto o nunca iremos. ?C¨®mo? Mediante un artilugio que es fuente de divisi¨®n entre los que odian estar bajo un proceso de vigilancia constante y los que las aprueban para sentirse m¨¢s seguros: las webcam urbanas.

?Estamos en mitad de un lunes de m**** y nos gustar¨ªa escaparnos a la Fontana di Trevi en Italia? ?O qu¨¦ tal pasar 5 minutos entre reuni¨®n y reuni¨®n en Las Vegas, en una playa de las Maldivas al anochecer o a bordo de un catamar¨¢n en las aguas de Tenerife? Pues puedes, todos podemos, s¨®lo hace falta un dispositivo con conexi¨®n a Internet en el que abrir un navegador web y meter la direcci¨®n Skylinewebcams.com, una p¨¢gina web que recopila decenas de webcams urbanas instaladas por todo el mundo que est¨¢n emitiendo en tiempo real y nos permiten ver qu¨¦ sucede gracias a la magia del Streaming.

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La vuelta al mundo en 80 clicks

Con una emisi¨®n constante las 24 horas del d¨ªa, la elecci¨®n es nuestra, y seg¨²n el estado de ¨¢nimo puede que nos apetezca ver el panorama de la ciudad que nunca duerme desde un rascacielos de Nueva York, o la aurora boreal en directo en el pueblo de pescadores de Henningsvaer en el archipi¨¦lago de Noruega. ?Quiz¨¢s el amanecer en los Dolomitas italianos, la lluvia ahora mismo en la Puerta del Sol de Madrid? O la majestuosidad de la mism¨ªsima fachada de Petra en Jordania con su ruido de fondo y el trasiego de gente. Como decimos el mundo entero al alcance del rat¨®n.

Y aunque ni por asomo es lo mismo que estar f¨ªsicamente en esos lugares, la idea de verlos en tiempo real nos acerca al tiempo que nos aleja un poquito de la aburrida realidad.