BLACKBIRD
Los coches que ves en muchos anuncios realmente no existen
Esas tomas imposibles de deportivos por el desierto... simplemente son eso, imposibles, ya que muchos de los coches del cine y la publicidad son el Blackbird.

Pong芍monos en situaci車n, vemos un coche deportivo rodando por un terreno imposible y, quiz芍s, no nos hemos dado cuenta que es demasiado perfecto todo para ser verdad. Lo cierto es que aunque suponemos que la mano del ordenador est芍 presente en todo esto, puede que no sepamos donde est芍 el truco, a continuaci車n os lo vamos a revelar.
Desde la revista Wired nos revelan algo que ha hecho que se nos caiga un mito. Los coches de los anuncios y las pel赤culas, al menos una gran mayor赤a de ellos, no son reales. La verdad es que lo 迆nico real en ellos es lo que pod谷is ver en la imagen, el Blackbird, el coche que se puede transformar en cualquier otro veh赤culo para rodar cualquier tipo de escena.
Todos los coches de los anuncios son el mismo: el Blackbird
Se trata del Blackbird que como nos cuentan en Wired, y pod谷is ver en el v赤deo que acompa?a este texto, es un prototipo de coche el谷ctrico que gracias a la magia del modelado 3D se puede convertir en cualquier veh赤culo. Para ello, cuenta con un chasis que es capaz de ampliarse y encogerse, para tener la medida exacta del coche al que quiere imitar, pudiendo hacerse tan peque?o como un Fiat 500 o largo como una limousina. Adem芍s se le puede acoplar cualquier tipo de rueda del mercado, que de hecho, es lo 迆nico real que vemos en las im芍genes de los spots.
Despu谷s, como en la captura de movimiento con los actores humanos, los puntos con tri芍ngulos de su carrocer赤a marcan las referencias para colocar la carrocer赤a virtual que habr芍 encima. Tras eso, una c芍mara 360? y diferentes sensores en el coche hacen el resto en forma de captar los reflejos y sombras para dar verosimilitud a todo el conjunto. Y s車lo queda ya hacerlo rodar por la carretera y gracias a la postproducci車n, hacer que cualquier coche recorra ese sendero.
?Por qu谷 las marcas usan al Blackbird y no un coche real?
La respuesta a esta pregunta es a迆n m芍s f芍cil. Se trata de un problema de dinero. Trasladarse a esos id赤licos lugares donde se ruedan, sobre todo, spots publicitarias - ya que en el cine tambi谷n se usa ese prototipo pero menos que en publicidad donde el presupuesto es m芍s limitado - es caro, realmente caro. Y adem芍s, en ocasiones cuando se est芍 preparando la campa?a, los fabricantes a迆n no han presentado su nuevo modelo y ser赤a un riesgo que se filtrara por alguien que estuviera cerca de la zona con ganas de fastidiarles la sorpresa.