Senran Kagura 2: Deep Crimson

Aunque en el mercado ya exist¨ªan juegos como el Ikkitousen de PSP, el absoluto componente sexual de Senran Kagura y su estreno en una consola ¡®infantil¡¯ como 3DS levantaron la pol¨¦mica en muchas partes cuando lleg¨® a Europa el a?o pasado ¨Cla serie lleva en Jap¨®n desde 2011. Pero tambi¨¦n el ¨¦xito m¨¢s all¨¢ de su pa¨ªs de origen, ya que sus creadores siguen trayendo cada entrega ¨Cya sea para port¨¢tiles o sobremesa- a Occidente, lugar en el que est¨¢ creando un reducto de fans fieles a las sexis shinobis y sus t¨¦cnicas que acaban con el enemigo y su vestuario al mismo tiempo. Despu¨¦s del spin off musical para Vita, 3DS recibe la secuela del Burst original con este Senran Kagura 2 Deep Crimson.

Crimson Flames

Lo primero es dejar bien claro que a quien se le atraganten este tipo de juegos ya sea por su extremo componente sexual o por la forma/fondo de sus tramas y personajes en cuanto a conversaciones y maneras de comportarse, mejor que ni se lo plantee. Pero si ya sabemos c¨®mo son los juegos y la narrativa nipona, en Deep Crimson encontramos un t¨ªtulo de acci¨®n decente que supera a Burst en muchas cosas, pero que tambi¨¦n plantea algunos fallos que ah¨ª est¨¢n.

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Empezamos por la trama, secuela tan directa del anterior que de hecho empieza por su tramo final, por lo que tendremos una peque?a presentaci¨®n de personajes en forma de una fase para cada una de las cinco shinobis de la escuela Hanzo y directos al monstruo final. La trama nos presenta un duelo entre dos escuelas de guerreras shinobi, Hanzo y Hebijo, y podemos decir que esta vez est¨¢ m¨¢s enfocada en su narrativa, que gana enteros en el hecho de que ahora la parte de novela visual est¨¢ aligerada. Sigue presente, por supuesto, y las conversaciones de repente dram¨¢ticas y al instante hilarantes de las chicas mezclado con momentos surrealistas, pero Tamsoft va m¨¢s al grano sin descuidar relaciones ni arcos argumentales, y eso se agradece. Tenemos la opci¨®n de saltarlas todas, por si queremos ir directamente a la parte jugable.

La oferta jugable ha aumentado con respecto a Burst. Dentro del modo Misiones tenemos las del modo Historia que van desbloqueando la campa?a, realmente cortas y que en muchos casos terminamos en 2-3 minutos, incluyendo Jefe Final con varias barras de vida que ir quit¨¢ndole. Su brevedad apenas nos da tiempo a situarnos, pero se compensa porque a partir del primer Final boss ¨Cque suele ser una lucha 1VS1 contra una de las shinobi de la escuela rival seg¨²n la que llevemos-, la dificultad sube enteros y un despiste nos manda a la pantalla de Reiniciar Misi¨®n dada la velocidad y furia a la que golpea el enemigo.

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Yoma¡¯s Nest es quiz¨¢s el modo m¨¢s conseguido de Senran Kagura 2, ya que nos somete a ir conquistando diferentes salas que conforman una pir¨¢mide de hex¨¢gonos que van d¨¢ndonos paso a otros niveles. Se trata de un desaf¨ªo considerable, puesto que la salud no se nos regenera tras superar cada habitaci¨®n, y perder toda la vida supone perder todos los puntos de experiencia  que llevemos desde la primera habitaci¨®n. Eso s¨ª, tal castigo tiene su recompensa, ya que cuantas m¨¢s habitaciones limpiemos de un tir¨®n m¨¢s subir¨¢n los puntos y hasta encontraremos nuevas armas para las chicas. El modo Free Training ya habla por s¨ª solo, y en ¨¦l podemos practicar el combate, t¨¦cnicas y la novedad de las peleas en pareja. Special Missions es tambi¨¦n otra opci¨®n a tener en cuenta, ya que se trata de pruebas con unas reglas en espec¨ªfico ¨Csolo ataques a¨¦reos por ejemplo, o no dejar que nos hieran. Superadlas y tendr¨¦is las Shinobi Stones, piedras que podremos equiparnos en combate para mejorar al personaje. De lo mejor que trae el juego es su divertido modo cooperativo, tanto local como online, que supone una ayuda para un elemento del que hablaremos ahora.

Shinobis x 2

A nivel jugable es un acierto el pasarse directamente a fases en 3D, pero la c¨¢mara nos deja vendidos demasiadas veces y es irritante ser golpeados por un enemigo que pod¨ªamos haber visto dispararnos a lo lejos pero la c¨¢mara no nos ha querido ense?ar, ocasionando a veces que iniciamos un combo pero pegamos al aire porque el rival no est¨¢ en esa direcci¨®n, y formando un peque?o caos en los combates. Tenemos dos botones para ir formando combos, tanto en tierra como a¨¦reos, que podemos usar en combinaci¨®n con el bot¨®n superior R para golpear en carrera con m¨¢s fuerza, pero que por s¨ª solos no aportan mucha variedad. Si los combinamos con L ¨Cbot¨®n que inicia la transformaci¨®n cambiando la ropa del personaje por si estamos en modo normal-, accederemos a las t¨¦cnicas especiales de cada shinobi, que dado su nivel de recarga utilizaremos ¨Cy tendremos que hacerlo- muchas veces en las peleas contra los jefes finales. El Frantic Mode de Burst viene con mejoras, y b¨¢sicamente nos drena la vida a cambio de pegar el doble de fuerte, de r¨¢pido y tener t¨¦cnicas ilimitadas. Lo bueno es que cada enemigo vencido nos da salud.

Esta vez si tenemos una diferenciaci¨®n de cada luchadora a nivel de ataque, ya que cada una pega de forma distinta, posee diferentes t¨¦cnicas y esto ayuda a darle variedad al gameplay en cuanto a que no todas tienen el mismo combo. Pero la novedad m¨¢s palpable es la opci¨®n de pelear en parejas. Deep Crimson pone dos personajes en pantalla y la opci¨®n de saltar de una a otra guerrera en cualquier momento, adem¨¢s de darle a una de ellas una orden de ataque manteniendo un bot¨®n pulsado, o realizar un ataque desvastador si tenemos a las dos transformadas y con 3 pergaminos en el medidor. De lo mejor del juego, el problema es que la IA aliada es tan mala, que nos complicar¨¢ los combates en vez de echarnos una mano, ya que es f¨¢cil ver al personaje de repente en ropa interior, lo que significa que se ha ido a por el jefe final y peleado tan mal, que este le ha dejado en la situaci¨®n m¨¢s d¨¦bil posible. Si cae tenemos la opci¨®n de hacer que se levante, si muere seguimos solos. Lo mejor de este modo es jugarlo en cooperativo, ya que con un amigo que lleve a la otra shinobi, la cosa mejora much¨ªsimo.

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Para el final dejamos el detalle m¨¢s fanservice de todos. Al igual que Burst, esta secuela tiene un hub central en el que podemos escuchar la bso del juego, ver los videos, leer las novelas, cambiar de personaje, acceder al online y a la campa?a. Pero adem¨¢s tiene un modo en el que darle rienda suelta a nuestra vena de mirones. Todas las chicas est¨¢n disponibles para que las vistamos ¨Cde dentro a fuera con todo tipo de uniformes y fantas¨ªas-, las pongamos en posturas inocentes, sensuales o directamente expl¨ªcitas, ya sea sonriendo o incluso con miedo. Y para rematar les tiremos una sesi¨®n de fotos que guardar en la tarjeta de la memoria. En comparaci¨®n con Burst, este modo tambi¨¦n se ha ampliado considerablemente.

A nivel visual, y excepto lo comentado de la c¨¢mara, Senran Kagura 2 luce estupendo en 3DS, y la bajada de frames en las situaciones m¨¢s intensas, aunque se sigue produciendo, no es tanto. Las t¨¦cnicas, la velocidad del combate y el dise?o de cada shinobi se ven muy bien, y las cinem¨¢ticas y la novela visual mejoran con el 3D activado. De hecho, como dec¨ªamos en el primer Burst, Senran Kagura sigue siendo de las series que mejor aprovecha el efecto 3D, dando una profundidad espectacular ¨Cen el modo foto, si aument¨¢is el modelo de cada una, ver¨¦is las partes de su cuerpo como un pie o los mismos pechos salir de la pantalla literalmente. El problema es que si ponemos el 3D en el combate, la fluidez se resiente. Nuestro consejo es que durante las partes ingame lo dej¨¦is en 2D, y en cualquier escena o dialogo activ¨¦is el 3D. A nivel sonoro, para igualar la intensidad y brevedad de los combates se ha optado por una bso habitual de rockera, con mucha percusi¨®n, samplers electr¨®nicos y riffs de guitarra, am¨¦n de alg¨²n que otro toque dubstep a veces. Las voces vienen en japon¨¦s, pero como ya est¨¢ siendo habitual en la serie, los subt¨ªtulos solamente est¨¢n localizados al castellano.

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