Just Cause 3, Impresiones Gamescom 2015

Mira el mundo arder, que dice el eslogan final de Just Cause 3. Y lo miramos encantados, fascinados de c¨®mo Avalanche Studios, tambi¨¦n con el salvaje Mad Max preparando su etapa final para salir ahora en septiembre, ha conseguido sacar partido a las nuevas consolas y ordenadores m¨¢s potentes en un sandbox de v¨¦rtigo donde lo ¨²nico que importa es la felicidad y satisfacci¨®n que otorga cargarse de todo y sentirnos libres en movimientos y formas de afrontar los retos. El t¨ªtulo ha estado en Gamescom 2015 con nueva demo, justo cuando cre¨ªamos que no pod¨ªa ense?arnos nada m¨¢s tras la extensa presentaci¨®n hands on que hicimos en Hamburgo poco antes del E3, aqu¨ª las Impresiones de aquella generosa toma de contacto. Pero s¨ª, nos quedaban bastantes cosas por conocer, lo que lo hace a¨²n m¨¢s genial y enorme.

Square Enix, editora de este tercer episodio exclusivo de la nueva generaci¨®n, empieza su presentaci¨®n poniendo un poco a los periodistas asistentes a la cita a puerta cerrada en antecedentes, como primer paso antes de dejarnos probar todo el nuevo abanico de misiones y zonas, hasta ahora sin desvelar y que no est¨¢n accesibles en la zona de p¨²blico, en el llamado showfloor. Yo cre¨ªa conocer de sobra el juego, pero en seguida me siento equivocado, hay puntos importantes de la historia que ni sospechaba a cuatro meses del lanzamiento, puntos que se est¨¢n explicando por primera vez en la feria alemana. Rico Rodr¨ªguez, el protagonista, tiene algunos secretos, como que su madre era natural de estas Medci Islands y su padre mexicano, e incluso que habr¨¢ ciertas relaciones con personajes de anteriores Just Cause que sorprender¨¢n a los fans de la marca.

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A nuestro hombre le tocar¨¢ unirse a los rebeldes de este precioso archipi¨¦lago del Mediterr¨¢neo que se inspira en Malta, Ibiza o Sicilia. Estos insurrectos -a partir de ahora amigos- est¨¢n liderados por un tal Mario, el encargado de plantear todas las misiones rebeldes para combatir al General DiRavello, dictador de la isla con conductas fascistas, e ir acabando con su control total en todas las aldeas, bases e instalaciones propagand¨ªsticas. El pueblo espera una soluci¨®n, y Mario parece tenerla. Aunque en esta nueva misi¨®n que se ense?a aqu¨ª por primera vez nos va a tocar rescatarlo de un secuestro gubernamental.

La nueva misi¨®n que hemos visto y se vio bien resumida en la conferencia de Xbox del martes se produce en la noche, en un pueblo atacado por DiRavello donde casas de inocentes medicianos arden.  Rico entra en escena con toda su brutalidad, no necesita puertas al ir cargado con sus explosivos puedecontodo, encuentra r¨¢pido al l¨ªder rebelde y lo rescata, encendiendo todas las alarmas y consiguiendo que un mont¨®n de unidades del ej¨¦rcito comiencen su despliegue desde distintas naves y helic¨®pteros ruidosos. Una de las cosas que quer¨ªamos ver m¨¢s en funcionamiento de Just Cause 3 era la acci¨®n armada pura y dura, su faceta como third person shooter m¨¢s all¨¢ del desparrame de demoliciones y explosiones por todas partes -es uno de los sandbox m¨¢s destructibles que recordamos-.

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Y el gameplay y gunplay no fallan. Se produce un aut¨¦ntico tiroteo devastador en el aire, con Rico aprovechando su paraca¨ªdas y su wingsuite para moverse como el ave m¨¢s libre del mundo mientras apunta a toda velocidad a lo que le rodea. Dispara a los paraca¨ªdas de los enemigos desplegados para hacerlos caer y acabar f¨¢cilmente con ellos, antes de que lleguen a tierra fime y empiecen a cubrirse y respaldarse. Este tiroteo contin¨²a en el suelo, con conductas de IA que no est¨¢n mal, pero que podr¨ªan ser m¨¢s impresionantes ciertamente. La inteligencia de los soldados rivales no va a ser el fuerte del juego pero lo hace lo suficientemente desafiante. Hora de montar en veh¨ªculos, se desata una persecuci¨®n disparatadamente r¨¢pida y suicida. Rico no duda en saltar de un coche a otro, robar uno de torreta militar, chocar otros entre ellos haciendo que todos salte por los aires, disparar desde cualquier posici¨®n... 

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Total libertad y creatividad para salir airoso de las situaciones, en este caso con Mario ya liberado. ?sa es la gran caracter¨ªstica de Just Cause 3, que si hubi¨¦ramos querido ser sigilosos tambi¨¦n hubi¨¦ramos podido. O si, para terminar de rematar la faena, nos hubi¨¦ramos qurido dedicar a bombardear la zona, era otra v¨ªa posible de rescate a lo bestia. Cualquiera de las posibilidades son viables, lo importante es poseer el equipo para llevarlas a cabo e ir frenando la presencia dictatorial que asola la isla. Pueblo a pueblo, ciudad a ciudad, playa a playa, base a base... las estatuas de DiRavello, sus cuarteles y sus pesad¨ªsimos altavoces con megafon¨ªa propagand¨ªstica deben caer.

Y cuando se libera de la tiran¨ªa una ciudad o una base, en el mapa se pone en azul, indicando la tarea ya hecha. Hay decenas de pueblos y bases en todo el mapa, que por cierto va por regiones y es de lo m¨¢s grande que recordemos en un sandbox as¨ª de ¨¢gil y destructible. La interfaz es s¨²per limpia y ampliable a muchas escalas, para organizarse con todo lo que hay por hacer. Tambi¨¦n hemos conocido GPS in-game que har¨¢ degu¨ªa, se despliega hasta en aviones indicando en grande sobre la tierra el camino a seguir.

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La lista de veh¨ªculos es otro factor visible desde el men¨² de Pausa adem¨¢s del mapa, la de armas obtenidas y disponibles tambi¨¦n. Adecuar unos u otras a la misi¨®n es necesario para elegir con qu¨¦ ayudas o v¨ªas queremos contar. Para coleccionar veh¨ªculos, basta con ir a un garaje y guardarlo en nuestra lista. Habr¨¢ decenas. Igual ocurre con las armas, primero tendremos que ir encontr¨¢ndolas. Una vez las poseamos y solicitemos a nuestro apoyo a¨¦reo, cae una caja de suministros desde el helic¨®ptero rebelde que llega, en cualquier lado donde lo solicitemos. Eso s¨ª, esta funci¨®n de libertad y juego personalizado solo estar¨¢ disponible una vez consigamos esa cobertura y confianza de los rebeldes. Es muy gracioso c¨®mo se produce el despliegue del contenedor y c¨®mo sale de ah¨ª el arma, coche, helic¨®ptero, lancha o malet¨ªn de granadas envuelto en una nube de confeti.

Otro punto que nos quedaba por conocer era el sonido, la banda sonora m¨¢s all¨¢ de los temas rockeros de anteriores tomas de contacto. Hemos visto que la ambientaci¨®n isle?a no tiene desperdicio, con canciones a guitarra espa?ola, algunas percusiones artesanales como timbales y maracas, flautas... Pero no faltan las melod¨ªas playeras, frescas y muy alegres, aderezadas de toques electr¨®nicos para la acci¨®n m¨¢s pura. El conjunto musical es estupendo. No hay detalles a¨²n del doblaje.

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Una vez contemplado todo este hands off en la nueva misi¨®n, tocaba ponernos manos a la obra, mando en mano que es como mejor se explora el mapeado y desaf¨ªos. Las demos, cinco, pasaban aqu¨ª solo por dos tipos de reto: surf a¨¦reo con aros y misiones de destrucci¨®n o demolici¨®n en un tiempo l¨ªmite. Aseguraban sus creadores que habr¨¢ cientos de desaf¨ªos, divididos en m¨¢s de 20 modalidades para conseguir la mejor variedad de secundarias hasta la fecha en la saga. Hay buenas ideas, no obstante, como varios caminos a elecci¨®n del jugador para puntuaci¨®n variable en los descensos a¨¦reos a trav¨¦s de aros o ranking online en todas las pruebas para comparar puntuaciones con amigos y el Top mundial.

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Un ¨²ltimo aspecto que quer¨ªamos conocer c¨®mo queda, pues hab¨ªamos visto su planteamiento e interfaz provisionales, est¨¢ en el sistema de progresi¨®n por puntos a gastar libremente. Cada subida de nivel de Rico se convertir¨¢ cuando queramos en habilidades f¨ªsicas o de su equipo que se explican detalladamente con un video a la derecha antes de su adquisici¨®n, todo muy claro, visual y que hace que ninguna de estas habilidades de progreso de personaje sea estrictamente necesaria para avanzar en la aventura, pero s¨ª que hay algunas m¨¢s recomendadas para misiones concretas. La tabla o ¨¢rbol de desarrollo es bastante b¨¢sica, se divide por categor¨ªas, con habilidades en el aire, de disparo, de veh¨ªculos, mejoras sensoriales para mejor exploraci¨®n y b¨²squedas, etc. Tambi¨¦n se tratan las armas, con perks y bastante personalizaci¨®n o potenciadores a repartir, a gusto del jugador.

Todo esto es lo que hay de Just Cause 3 en las demos de prensa de la Gamescom. No es poco, de hecho es mucho m¨¢s de lo que esper¨¢bamos tras las extensas sesiones de juego de hace un par de meses. Y, lo mejor de todo, es que sigue respir¨¢ndose frescura, sigue con su buena pinta y parece que en Avalanche han ido por el camino adecuado para la franquicia. Quedan menos de cuatro meses para que est¨¦ en las tiendas. Y la diversi¨®n y destrucci¨®n sin l¨ªmites en un entorno precioso y vasto como ¨¦l solo ya podemos asegurarlas. 1 de diciembre.