Mario Vs Donkey Kong: Typping Stars

Stylus en Acci¨®n

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Con una jugabilidad que lo convirti¨® en un heredero espiritual del m¨ªtico Donkey Kong, Mario Vs Donkey Kong inici¨® en 2004 en la Game Boy Advance una saga que ya ha cumplido 11 a?os  y sigue en activo, aunque fue a partir de su segunda entrega ya en DS cuando la serie afianz¨® la que ser¨ªa su mec¨¢nica b¨¢sica: Guiar de manera indirecta a peque?as versiones rob¨®ticas de personajes como Mario manejando el escenario que recorren, procurando al estilo del ic¨®nico Lemmings que evitasen trampas, peligros y alcanzasen la salida de cada nivel a golpe de Stylus en la novedosa pantalla t¨¢ctil de la consola. Poco cambi¨® la serie en sucesivas entregas de DS, aunque la que vamos a analizar aqu¨ª se parece m¨¢s a Mario Vs Donkey Kong: Megal¨ªo en Minilandia que la ¨²ltima en s¨ª, Minis on the Move (3DS-2013), entrega aprovech¨® la nueva consola para acercar la propuesta m¨¢s a una especie de Pipe Mania nintendero y con gr¨¢ficos en 3D de perspectiva isom¨¦trica. Vamos ya a recoger estrellas.

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Lo primero que notamos si lo comparamos directamente con Megal¨ªo en Minilandia  y otros es que Typping Stars aligera su propuesta hasta el punto que ya no tenemos ni (casi)Jefes Finales, ni minijuegos extra, ni una historia que nos vaya guiando m¨¢s all¨¢ de que Pen¨¦lope ha sido secuestrada, sino m¨¢s bien una propuesta enfocada directamente en la premisa base de su jugabilidad: Resolver puzles. Estamos aqu¨ª para conducir con ¨¦xito a versiones mini de Mario, Peach o Toad hasta la salida (o salidas, a veces una para cada tipo de personaje en el llamado modo Multipuerta) correspondiente. Y eso es lo que b¨¢sicamente haremos. Puede que el esquema se vaya complicando con distintos elementos, recursos y accesorios, pero desde el primer nivel hasta el ¨²ltimo de los extras ser¨¢ as¨ª.

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Convertido en el primer juego first party de Nintendo que inaugura el Cross-Buy ¨Ccomprando la versi¨®n Wii U tendremos c¨®digo para 3DS y viceversa-, Typping Stars se muestra generoso en contenido, comenzando con 6 mundos tem¨¢ticos divididos en 8 fases, m¨¢s un par de mundos extras a desbloquear y 27 niveles de Bonus que necesitar¨¢n de puntuaciones perfectas y estrellas para abrirlos. Pero, ?cu¨¢l es la jugabilidad de la serie? Para los que se acerquen por primera vez a ella es como hemos mencionado en la intro: Con el Stylus manipulamos el entorno alrededor de los personajes, que se mueven a su aire, para guiarlos a salvo hacia la salida y que no caigan en trampas, enemigos u otros peligros. La pieza m¨¢s b¨¢sica es tender puentes de vigas en horizontal, vertical y diagonal entre plataformas para que los mini-robots suban o bajen, alcancen el punto que queremos o desciendan, ¨ªtem que aprenderemos a manejar en el primer mundo.

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A partir del segundo mundo veremos sucesivamente la inclusi¨®n de saltadores, de cintas transportadoras, de interruptores, ca?ones, versiones de Kong que nos lanzar¨¢n por los aires y m¨¢s objetos que hay que aprender a usar, siendo el pen¨²ltimo nivel de cada mundo una especie de examen final de lo aprendido hasta el momento. Cada ¨ªtem en s¨ª est¨¢ limitado: Por ejemplo tenemos que tener 3 o m¨¢s vigas en el inventario para poder abrir un puente que requiera 3 vigas m¨ªnimo para cubrir el hueco, lo que implica deshacer otros puentes que hayamos tendido para recuperarlas; o solo dos saltadores por escenario que activar a la vez. En s¨ª se nota la apertura al p¨²blico que apenas tiene experiencia o nunca ha tocado un t¨ªtulo de esta serie o de puzles en general, ya que la dificultad es muy escasa durante la mayor parte del juego. Solamente los ¨²ltimos niveles o las fases Bonus nos retar¨¢n a objetivos m¨¢s complicados en cuanto a manejar elementos y acabar con enemigos. Y cuando la cosa se pone dif¨ªcil contar¨¢ m¨¢s nuestra respuesta y timing exacto, como por ejemplo deshacer una plataforma horizontal y abrir una en diagonal en una fracci¨®n de segundo en la que el personaje ¡®rebota¡¯ y se gira contra la pared.

Y es que los m¨¢s expertos solamente necesitar¨¢n de un vistazo al nivel antes de empezar para dar con el camino adecuado, fallando en todo caso en la ejecuci¨®n por la exactitud a veces de un elemento en s¨ª antes que por no saber el camino. Para que esto no se convierta en un mero paseo de inicio-salida en cada nivel, las fases tienen una serie de monedas de oro y de Mario que nos dar¨¢n m¨¢s estrellas al terminar el nivel. Cogi¨¦ndolas todas abriremos las fases Extra, que plantean un desaf¨ªo mayor.Y tambi¨¦n tendremos m¨¢s estrellas a gastar para lo que debemos considerar como el 50% de la propuesta, el modo creaci¨®n del que hablaremos m¨¢s adelante. Las dos fases finales de cada mundo resumir¨¢n lo aprendido en ellos, ya que en el Nivel 7 habr¨¢ un personaje con una llave que abre la puerta de salida, y m¨¢s que evitar peligros nuestra misi¨®n ser¨¢ colocarlo primero y que no vaya detr¨¢s de otro mini-robot para que no rebote sobre este cuando se acerquen a la puerta cerrada.

El 8? nivel se puede considerar una especie de Jefe Final y una de las (escasas) novedades de mayor peso que tiene esta entrega, ya que uno de los mini-robots a rescatar aparece pose¨ªdo y convertido en una entidad oscura que nos har¨¢ perder la partida si entra por la puerta de salida. Solamente ¡®exorcizarlo¡¯ una vez a martillazos con el mazo de Donkey Kong ser¨¢ lo que lo saque de ese trance de oscuridad, por lo que al reto del nivel en s¨ª hay que a?adirle el que uno de los personajes coja el ¨ªtem del mazo y llegue a tiempo al mini-robot pose¨ªdo, ya que el acto en s¨ª de ir dando porrazos es temporal. Como decimos, el mayor problema del juego es que las soluciones de cada nivel son muy directas, dejando poco espacio al reto la mayor parte de su modo Historia, algo compensado por su tramo final, sus extras y su modo Creaci¨®n y por esa promesa de Nintendo de subir dos niveles extra cada semana durante nada menos que 50 semanas, o sea, m¨¢s de un a?o.

Construyendo nuestro Desaf¨ªo

Similar a los anteriores, pero con nuevos elementos, el Taller nos permite dise?ar hasta 50 niveles en modo Una Puerta o Multipuerta, ayudados de plantillas. Para ir abriendo nuevos elementos tenemos que cambiarlos en la tienda por las estrellas conseguidas. Y aqu¨ª entra la otra novedad de peso y la que le da nombre: La comunidad del juego permite subir nuestras creaciones y jugar las de otros usuarios, recolectando m¨¢s estrellas aparte del modo Campa?a para ir comprando cosas. Pero tambi¨¦n puede pasar que no somos de los que les gusta construir cosas, sino bajarnos creaciones. En ese caso, y si uno de los niveles de la comunidad nos gusta considerablemente, podemos darle a ese usuario una propina en forma de estrellas para ayudarle a que consiga m¨¢s items y cree niveles m¨¢s complejos. Lo mejor es que no importa si estamos en Wii U o 3DS, ya que crear, subir, jugar y bajar niveles se hace por igual indistintamente de la versi¨®n que estamos jugando.

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A nivel gr¨¢fico tenemos el toque Nintendo por todas partes en un juego colorista y agradable pero que tampoco destaca apenas. Las diferencias entre ambas versiones son imperceptibles, aunque en el tema del ratio de pantalla es cierto que hemos encontrado m¨¢s agradable la versi¨®n de Wii U en su Gamepad porque la parte t¨¢ctil se presenta en 16/9 panor¨¢micos, debiendo estar contra¨ªda en la versi¨®n 3DS debido a las dimensiones de su  pantalla t¨¢ctil. Aunque esta ¨²ltima cuenta con la ventaja port¨¢til. El sonido son melod¨ªas de ambas series y efectos de sonido cl¨¢sicos, destacando el pastiche de su tema principal hecho con los temas de Super Mario Bros  y Donkey Kong, y ese genial piano del mundo 6 que har¨¢ sonre¨ªr a los fans.