?Puede Kojima salvar a Silent Hill?
La que es desde ya la mayor sorpresa del a?o nos ha tra¨ªdo algo tan inesperado como es el regreso a sus cimientos del terror m¨¢s psicol¨®gico de una serie tan aclamada, adorada y seminal en el videojuego como es Silent Hill. Y todo con un teaser que ha convertido las siglas P.T. en una esperanza: La de volver a pasar miedo en el terreno de los AAA como anta?o. El futuro se presenta brillante para la IP de Konami, ?conseguir¨¢n Kojima y Del Toro devolver el prestigio perdido?
Vuelta a Casa
Anunciado en mitad de un carrusel de otros t¨ªtulos; nombrado casi a la ligera, sin entrar en detalles. Sin t¨ªtulo, sin informaci¨®n, solamente que ven¨ªa de un ¡°nuevo estudio¡±, y que daba mucho miedo a tenor del video de reacciones de jugadores. Los que picaron enseguida y ni esperaron al final de la conferencia se encontraron con una demo de 1,3GB llamada P.T., que usaba la primera persona y el minimalismo de acciones habitual del nuevo Terror Independiente para matarnos de miedo dentro de un ¨²nico escenario que se repet¨ªa en bucle una y otra vez: Un simple pasillo en forma de ¡®L¡¯. No hab¨ªa forma posible de saber qu¨¦ era aquello, y para colmo su gameplay parec¨ªa estar compuesto de acciones aleatorias. Eso s¨ª, nadie dudaba de su capacidad de terror, ya que la primera vez que ve¨ªamos al ente, a c¨¢mara fija y casi saliendo de la pantalla para devorarnos, el susto inesperado no hab¨ªa qui¨¦n nos lo quitase. Pobres de aquellos DualShock 4 que volaron al suelo.
Con un bucle que parec¨ªa no tener fin, y peque?os logros como recomponer una fotograf¨ªa o activar eventos ¨Cel ba?o, la sinfon¨ªa de horror al dar la medianoche-, nadie sab¨ªa qu¨¦ demonios era eso. Y as¨ª deber¨ªa haber sido, tal y como sus autores quer¨ªan. Nadie deb¨ªa dar con la soluci¨®n, resolver el enigma hasta pasados d¨ªas, o incluso semanas. Pero apenas transcurrieron horas la sorpresa salt¨® en mitad de la resaca informativa del d¨ªa, el boca a boca en la red se propag¨® como la p¨®lvora ardiendo, apoyado por ese video en Twitch de la jugadora que hab¨ªa logrado dar con la clave, y la comidilla en la Gamescom y en todos los medios, redacciones y conversaciones de videojuegos fue el mismo: P.T. eran en realidad las siglas de Playable Teaser, una demo que terminaba con la mayor de la sorpresas: Guillermo del Toro y Hideo Kojima anunciaban un nuevo Silent Hill hecho por Kojima Productions. Y por si a alguien le quedaba dudas, las notas inmortales de la mandolina con que el genio Akira Yamaoka abri¨® la intro del primer Silent en 1999 resonaban a modo de confirmaci¨®n de que la saga volv¨ªa por la puerta grande.
No cabe duda que tras una generaci¨®n entera en la que el g¨¦nero fue muriendo paulatinamente en el mercado de los AAAs, estamos experimentando una vuelta de este al margen de la brillante reescritura del miedo que los indies han logrado. Podemos contar a The Evil Within, a Project Zero V, Alien: Isolation, el remake del mejor Resident Evil hecho ¨Cel de Game Cube-¡ Parece que los ejecutivos de las Majors han vuelto a apostar por hacernos pasar miedo pad en mano delante de la TV y de jugarse presupuestos millonarios en ello. Entre las sagas que hemos visto morir, quiz¨¢s que la m¨¢s ha dolido era precisamente esta, Silent Hill. No vamos a entrar en discusiones de si cap¨ªtulos como Shattered Memories, Homecoming o Downpour son mejores o peores, merecen considerarse Silents de pura cepa o no, pero s¨ª que ejemplos como ese insulto absoluto, esa patada en la boca a la IP que fue Book of Memories ¨Cno habr¨ªa pasado nada si Konami no hubiese tomado la err¨®nea decisi¨®n de remarcar Silent Hill en el t¨ªtulo-, y que intentaron suavizarla escud¨¢ndose en la excusa de que era un ¡®spin off¡¯, fueron pruebas de que hac¨ªa falta un revulsivo, de que no pod¨ªa permitirse tocar fondo una saga que en sus primeras entregas no solo era aclamada y sin¨®nimo de calidad, sino que reescribi¨® el terror Survival, inaugur¨® el miedo psicol¨®gico, y ciment¨® las bases de un miedo basado m¨¢s en nuestra mente que en saltar con el efecto de sonido y el susto a la pantalla. La saga necesitaba volver a casa, a Konami Jap¨®n, al seno donde una vez un equipo de outsiders llamado KCET, por el que nadie en la compa?¨ªa daba un duro, crearon una obra maestra sin fisuras, sin discusiones, sin m¨¢s.
?Tiene ante s¨ª Silent Hills un futuro brillante? Esa es la duda a resolver. Echando un vistazo a cr¨¦ditos y dem¨¢s nos encontramos con dos pilares fundamentales. El primero es Guillermo del Toro, magn¨ªfico cineasta con un universo interior variado, pero siempre deudor de sus pasiones victorianas de maestros del terror como Edgar Allan Poe y sobre todo H.P. Lovecraft ¨Cconatos por todas partes en Blade II o Hellboy, por citar un par. Del Toro es adem¨¢s un gamer de pura cepa que ve¨ªa en el sector su posibilidad de contar sin cortapisas alguna lo que quer¨ªa. Y lo iba a hacer, clamaba que devolver¨ªa el miedo al sector con su inSane, el prometedor inSane de perturbador teaser. Pero THQ y su ruina econ¨®mica dio al traste con un juego ambicioso que iba a salir en varias entregas. Quiz¨¢s alguien tenga dudas de si Del Toro sabe manejar los resortes del Terror ¨Cdel Fant¨¢stico est¨¢ claro que s¨ª-, as¨ª que os invitamos a repasar Mimic o El Espinazo del Diablo. Pero de cara a la complejidad que exige un buen Silent Hill, de esa realidad que se mezcla con la pesadilla y/o las enso?aciones de otro plano existencial, ah¨ª est¨¢ El Laberinto del Fauno, para que ve¨¢is como el cineasta lidia con distintas realidades en un cuento de hadas de final tan tr¨¢gico como a la vez liberador. Y si algo hay en la saga Silent Hill, es precisamente personajes que purgan sus demonios interiores, o intentan hacerlo. S¨®lo imaginad los que conozc¨¢is la historia de Alessa en manos de este hombre.
El segundo pilar es, por supuesto, una de las personalidades del sector. Hideo Kojima tiene fama de muchas cosas, pero no por algo ha conseguido que le nombremos mundialmente como El Rey del Hype. Siempre le ha encantado el misterio, el ense?ar una fotograf¨ªa sesgada o comentarios cr¨ªpticos que solamente ¨¦l entiende. Pero entre este ejercicio de marketing viral que ha sido P.T. y el anterior de Joakim Mogren con The Phantom Pain y la falsa entrevista a un CEO con la cara vendada, el creador ha dejado el list¨®n en la estratosfera para otras que les gusta el juego viral como Valve. Kojima es amado/odiado, pero como productor ah¨ª lo tenemos. Supo coger a Castlevania, otra IP necesitada en sobremesa, y traerla al primer plano de la actualidad con el primer Lords of Shadow. Encima juega en casa, en Kojima Productions, y los autores de P.T. son b¨¢sicamente los mismos que trabajan en Metal Gear Solid V. Hay quienes tienen miedo, y a la vez quienes se relamen, pensando en la narrativa Hideo aplicada a un juego que pide siempre buenas historias como es Silent Hill. Para Kojima la historia que cuenta tiene preferencia, como Ken Levine. Eso le hace ganar al menos ahora el beneficio de la duda, los resultados ya se ver¨¢n.
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Y debemos concederle el beneficio de la duda a Kojima porque, hablando en plata, no sabemos qu¨¦ demonios vamos a encontrarnos. Al final de P.T. dejan claro que lo visto y jugado no es m¨¢s que una demo que no tendr¨¢ nada que ver con el juego final. La primera persona, la ausencia de armas¡ Alguno dir¨¢ que me estoy agarrando a un clavo ardiendo, que la personalidad de Kojima se impondr¨¢ por encima, que Del Toro no podr¨¢ hacer su magia o que quiz¨¢s sus ideas cinematogr¨¢ficas no casen con un juego. No se; no puedo predecir el futuro, ni tampoco quiero. Me baso en lo visto y jugado, y en materia de proyectos AAA, hacia mucho que algo como P.T. no me mataba de miedo jugando de noche y con cascos. Quiz¨¢s es por eso que tras Book of Memories, y viendo lo que emana de esta demo, sensaci¨®n de desasosiego, de estar en un purgatorio y querer salir de ¨¦l, de cargar con una culpa que carcome, de una pesadilla que no termina y se repite en bucle, yo le veo un futuro brillante a este Silent HillS ¨Crese?emos en may¨²scula la S, que es la mayor sorpresa de todas. Tambi¨¦n puede ser que quiera verlo, porque me condicione mi deseo interior de volver a las ra¨ªces, a las entregas de hace 14 a?os que tanto me marcaron, a mi y a quienes las jugaron en su momento sin tanta sobreinformaci¨®n wikipedica ni gameplays youtuberos.
Por una vez no quiero ser pesimista y s¨ª tener esperanzas. Que me las arrebaten o no ser¨¢ cosa del futuro que a¨²n est¨¢ por llegar. Como muestra de la incertidumbre que rodea al proyecto, en la redacci¨®n de MeriStation no todos ven esto igual a pesar del debut que ha sido P.T. Y el cisma resultante de la duda que todo esto plantea, si Kojima rescatar¨¢ Silent Hill o fracasar¨¢ en el intento, tiene divisi¨®n de opiniones y debates planteados al lado del aire acondicionado, igual que la palabra en la calle. Sea por c¨®mo han ido las cosas desde que la IP se puso en manos de estudios occidentales, sea por las decisiones de Konami, el resultado de las ¨²ltimas entregas o por ver simplemente el nombre Kojima asociado a ello, algunos de esta redacci¨®n vemos el vaso medio lleno, y otros lo ven medio vac¨ªo. Algunos vemos un futuro en lo ense?ado hasta el momento, y otros necesitan m¨¢s pruebas de que la cosa no ir¨¢ por otros derroteros, y si va de que al menos cumplir¨¢ lo que Hideo ha prometido, tanto de palabra como de intenci¨®n al poner su nombre al final de este teaser.
?Y vosotros? ?C¨®mo veis el vaso de Silent Hills?