Destiny, impresiones Beta

Se va acercando el mes de septiembre, momento en el que Bungie lanzar¨¢ al mundo Destiny. El primer proyecto desde que decidieran abandonar su gran creaci¨®n, Halo, y su estrecha relaci¨®n con Microsoft. Nuevas aventuras bajo el paraguas de Activision y con un enfoque multiplataforma. Destiny saldr¨¢ en Xbox 360 y Xbox One, pero tambi¨¦n aparecer¨¢ en Playstation 3 y Playstation 4. Algo impensable a?os atr¨¢s. Hace algunas semanas, coincidiendo con el E3 de Los ?ngeles, algunos usuarios tuvieron la suerte de probar la versi¨®n Alpha del t¨ªtulo, que mostraba algunos detalles sobre lo que Bungie quiere proponer. Desde esta semana est¨¢ abierta hasta fin de mes la beta. El ¨²ltimo paso antes de llegar al juego definitivo. Y Destiny muestra, con su beta, que la ambici¨®n de Bungie no tiene l¨ªmites.

La propuesta que tenemos delante es una mezcla de g¨¦neros que pretende dar muchas alegr¨ªas. No nos enga?emos, cuando se present¨® Destiny y solo ten¨ªamos palabras encima de la mesa no acab¨¢bamos de comprender hac¨ªa donde quer¨ªan ir con este trabajo. Poco a poco todo se fue aclarando hasta llegar al punto en el que nos encontramos. Despu¨¦s de 13 gigas de descarga, solo faltaba coger el mando y empezar a disfrutar de este peque?o adelanto de lo que nos espera en septiembre. Lo que ya sabemos: un shooter futurista en primera persona con una f¨®rmula de juego tipo MMO, similitudes de propuesta con la saga Borderlands, un aire a Halo natural siendo qui¨¦n es Bungie. Palabras y descripciones que quedan en eso, palabras. Lo importante es lo que transmite cuando estamos jugando.

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Tal y como pasaba con la Alpha, lo primero que tenemos que hacer es elegir una de las tres clases que nos propone el juego. Tit¨¢n, cazador o hechicero. Una vez hecho ¨Cel cazador est¨¢ triunfando en la red, pero algunas habilidades del tit¨¢n son simplemente devastadoras- toca personalizar nuestro protagonista. Raza, colores, tipo de pelos, marcas¡­ el toque RPG est¨¢ presente tambi¨¦n en Destiny, y no solo en la elecci¨®n del aspecto de nuestro personaje, que tiene varias opciones aunque no sean por decenas como en ciertos juegos de rol. Superado estos pasos ya solo queda iniciar la beta y ver qu¨¦ nos depara el juego. Espectacular introducci¨®n que nos ubica y a empezar.

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Despertamos en una zona peligrosa sin saber muy bien qui¨¦n somos. Un espectro ¨Cun peque?o dispositivo volador- nos explica que ha dado con nosotros y que quiere llevarnos a un lugar seguro. Que somos un guardi¨¢n y que tenemos una misi¨®n que desarrollar. Avanzamos siguiendo al espectro buscando una nave para partir hacia la ciudadela. Antes nos asaltan diversos enemigos que vencemos sin demasiadas dificultades. Una vez en la ciudadela nos damos cuenta que eso es el centro neur¨¢lgico del juego. Una zona viva donde nos equiparemos, intercambiaremos objetos, buscaremos nuevos retos y buscaremos jugadores que reclutar para compartir nuestras misiones. Mucho m¨¢s viva que en la alpha vemos que hay mercaderes de objetos, armas, otros que son capaces de decodificar objetos que hemos encontrado o incluso un cazador de contratos que nos propone retos a cambio de experiencia y otras recompensas (por ejemplo, ganar tres partidas multijugador).

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Pero lo primero es lo primero y tenemos que viajar a una zona de la tierra para buscar piezas que nos permitan montar nuestra nave y viajar a nivel interplanetario. Ah¨ª empieza de verdad la beta. Seguimos el rastro que propone nuestro espectro acabando con una serie de enemigos que ya muestran ciertos patrones interesantes: algunos lacayos m¨¢s d¨¦biles no son complicados, pero otros como los guardianes saben esquivar, ponerse a cubierto, hacer un movimiento evasivo al recibir un impacto y machacarnos a granadas.  No es demasiado complicado avanzar y acabar con ellos. Lo m¨¢s interesante de esta misi¨®n inicial es que llegaremos a una zona ¡°de oscuridad¡± en la que debemos no morir. Si lo hacemos y nadie nos reanima ¨Cvamos solos- empezaremos al inicio de la ¡°mazmorra¡±. El tramo final, con un enorme enemigo a modo jefe final pone ya en algunos aprietos.

Despu¨¦s conoceremos m¨¢s sobre la historia, sobre nuestro papel como guardianes luchando contra la oscuridad. Y a buscar nuevas misiones. Hay algunas m¨¢s que sirven para comprender que el juego apunta muchas maneras. Un par de ellas nos pedir¨¢n que defendamos a nuestro espectro durante un tiempo concreto mientras hace una tarea. Las oleadas de enemigos que van apareci¨¦ndose ante nosotros nos exigen. Y mucho. Hay enemigos de todo tipo. Adem¨¢s de b¨¢sicos y guardianes, aparecen aguijones que son peque?as naves voladoras, otros que vienen con semi-invisibilidad hacia nosotros a toda velocidad buscando el cuerpo a cuerpo. Otros que crean barreras de protecci¨®n al recibir da?o. Todo esto en abundancia nos propone ya diversos momentos de gran intensidad.

A medida que desbloqueamos nuevas misiones tambi¨¦n aparecen otras de corte m¨¢s secundario, como una de exploraci¨®n o una de asalto. Nos centramos en esta segunda. Dificultad elevada y de tipo matchmaking. Nos ubica con dos jugadores m¨¢s y empezamos: el objetivo es llegar al fondo de una zona demon¨ªaca y acabar con un artilugio peligroso. Una aut¨¦ntica locura de misi¨®n. Primero acabamos con enemigos m¨¢s duros de lo normal ¨Ctienen m¨¢s nivel que los vistos en las misiones historia- y avanzamos hasta tres zonas espectaculares. La primera, una encerrona en la que tenemos que aguantar oleadas de enemigos que demuestran lo que quiere ser Destiny: un desaf¨ªo puro y duro. Decenas de enemigos en forma de guardianes, francotiradores, monstruos que vienen de tres en tres a toda velocidad y son letales cuerpo a cuerpo, granadas por todos lados. Por un momento, uno se siente en algunos de esos grandes momentos de Halo, con los Elite esquivando y emboscando, los jackales con su precisi¨®n letal a larga distancia y los grunts generando peligro en grupo y en modo kamikaze. Una zona en la que o nos reanimamos con los compa?eros o estamos muertos. La sensaci¨®n respecto la Alpha es que somos algo m¨¢s vulnerables, y eso (o tal vez que los enemigos son mejores) le da m¨¢s enjundia todav¨ªa.

Lo cierto es que la IA enemiga tiene elementos prometedores en forma de patrones y reacciones a nuestros ataques y estrategias, pero tambi¨¦n hay que admitir que de momento no nos ha parecido algo al nivel de lo que se puede ver en los citados ?lites en los ¨²ltimos Halo de Bungie. A¨²n queda tiempo ¨Cla sensaci¨®n es mucho mejor que en la Alpha- y faltar¨¢ ver cuando tengamos enemigos de mucho m¨¢s nivel. A pesar de ello, veremos en la beta mec¨¢nicas que ya est¨¢n por encima de una gran mayor¨ªa de FPS actuales. Coberturas, lanzar granadas a un lado y atacarnos por el otro¡­ se espera mucho de este elemento, caracter¨ªstico desde siempre de Halo, y la compa?¨ªa no tiene intenci¨®n de defraudar.

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Siguiendo en la misi¨®n de asalto, nos quedamos con dos ¡°momentazos¡± m¨¢s que son un aperitivo de lo que se nos puede mostrar. M¨¢s adelante encontraremos un guardi¨¢n demonio en forma de enorme monstruo que impide pasar al otro lado de una puerta. De un disparo nos deja muertos. Y aqu¨ª la cooperaci¨®n es b¨¢sica. Tiene algunos puntos flacos, como las piernas, y para poder dar con ellas lo mejor es coordinarse con los otros jugadores. Uno va por un lado, otros por el otro. Y el enemigo quedar¨¢ a merced de alguno de los guardianes cuando apunte al otro lado del mapa. Despu¨¦s de gastar much¨ªsima munici¨®n se avanza hasta el final, una enorme estructura circular que nos intentar¨¢ destrozar mientras nos asaltan decenas de enemigos: Sepiks Prime. Aqu¨ª vemos algunos errores de IA por solventar ¨Clos enemigos no se acercan a un lugar bajo las escaleras desde donde machacamos a nuestro objetivo principal- pero la intensidad de la batalla teniendo que esquivar los l¨¢seres de Sepiks Prime al que atacamos o la necesidad de salir de nuestra cobertura para buscar munici¨®n consiguen lo que quieren: satisfacci¨®n absoluta al terminar la misi¨®n.

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La beta tambi¨¦n llegaba con una modalidad PVP en forma de Control, el modo que ya vimos en la Alpha y que permite luchar al cl¨¢sico ¡°dominio¡± intentando controlar tres puntos calientse dentro de varios mapas. En esta modalidad de matchmaking algunos detalles a destacar: la presencia de veh¨ªculos capaces de disparar, metralletas montadas para cubrir ciertas zonas y el funcionamiento de la munici¨®n. Por ejemplo: nosotros tenemos de arma pesada un lanzacohetes, pero no tenemos munici¨®n. En un momento dado se nos avisar¨¢ que se instala munici¨®n pesada en el mapa. Tendremos que ir a buscarla y cogerla para poder disparar con el lanzacohetes.

La sensaci¨®n general con la beta de Destiny es que se viene algo muy grande. En cantidad de contenido y en calidad. El gunplay con cierto sabor a Halo est¨¢ presente, as¨ª como el desarrollo Borderlands o la clara mezcla de FPS con MMO. Acci¨®n, exploraci¨®n, mercadeo, personalizaci¨®n, cooperativo y matchmaking. Casi nada.  A nivel t¨¦cnico el juego es convincente, con una iluminaci¨®n que destaca por encima de todo y sabe jugar perfectamente con el dise?o art¨ªstico futurista que respira algo de Mass Effect y que ha encandilado a m¨¢s de uno. La banda sonora, a pesar de los problemas legales con Martin O¡¯Donnell (compositor estrella de Bungie) mantiene el camino conocido de la compa?¨ªa. Capaz de acompa?ar de manera distinta a lo de siempre y capaz de brindar la ¨¦pica necesaria en el momento concreto. El doblaje, por su parte, est¨¢ a un buen nivel por lo escuchado hasta el momento, destacando la voz del espectro,  m¨¢s que familiar para los amantes de la serie de Juego de Tronos. Ser¨¢ a principios de septiembre cuando veremos hasta donde llega la ambici¨®n de Bungie.