Thief, Impresiones finales

Maestro del hurto, veterano de la sombra, escurridizo mercenario y el m¨¢s fr¨ªo arquero. Garrett es uno de los personajes m¨¢s conocidos de la infiltraci¨®n en PC y este 28 de febrero su pr¨®ximo asalto va a intentar ser el m¨¢s eficaz, reformulado y digno de la nueva generaci¨®n, adentr¨¢ndose en un g¨¦nero sin todav¨ªa poderosos exponentes en las nuevas consolas. Con versiones adaptadas para PlayStation 3 y Xbox 360, lo nuevo de Eidos Montreal (Deus Ex: Human Revolution) saca su verdadero partido en ordenadores a la ¨²ltima, Xbox One y PlayStation 4, versi¨®n esta ¨²ltima que ya hemos jugado durante m¨¢s de cuatro horas para certificar su poder¨ªo, el regreso de la serie Thief y c¨®mo Square Enix tiene bajo su sello editor otro imprescindible del sigilo. Al nivel de Dishonored de Bethesda al que, por cierto y c¨®mo no, recuerda much¨ªsimo en ambientaci¨®n, est¨¦tica, mec¨¢nicas de juego, dise?o de niveles y notoriedad.

"Lo tuyo es m¨ªo" reza su eslogan y marca todo el progreso de un jugador que se ve envuelto muy pronto en una gran Ciudad asfixiante y regida por la opresi¨®n y la epidemia, en este caso de la Tenebra, una mortal enfermedad que sacude a muchos de los barrios menos ricos de esta poblaci¨®n neovictoriana custodiada por el miedo, la desigualdad social y una colosal Torre del Reloj que sirve de guarida, banco de provisiones y almac¨¦n de reliquias a nuestro protagonista. El nuevo Garrett -as¨ª como su nuevo juego- es bastante m¨¢s fr¨ªo, misterioso, tajante y maduro que anta?o, un personaje redondo que al parecer nos tiene preparadas m¨¢s de 14 horas incansables de movimiento astuto por tejados y cornisas pero tambi¨¦n total disimulo entre las sombras de su l¨²gubre urbe laber¨ªntica repleta de unidades de la Milicia del Bar¨®n. El arco, una porra aturdidora y algunos artilugios de ¨¦poca son las ¨²nicas alianzas firmes con que puede contar este ahora m¨¢s interesante protagonista, reminiscencia directa a sus anteriores t¨ªtulos y al omnipresente hoy Corvo Attano.

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El sendero del maestro

Thief es un ejercicio exigente y f¨¦rreo en sentido jugable, de dise?o, pero tambi¨¦n en cuanto a ambientaci¨®n, tramas y personajes, es un t¨ªtulo que recuerda a c¨®mo se hac¨ªan antes los videojuegos. La est¨¦tica Steampunk regresa a un enrevesado marco de intrigas pol¨ªticas y callejones de la muerte, un marco de traici¨®n y supervivencia ante la lucha popular, un marco hostil y de inseguridad, un marco oscuro, un marco id¨®neo para un avaricioso ladr¨®n de joyas. Todo el mundo de Thief se presenta brumoso, h¨²medo y entumecido, repleto de recovecos y trucos ¨®pticos para despistar a los muy eficientes soldados del d¨¦spota Bar¨®n. No se puede decir que la nueva generaci¨®n que empieza vaya ya a ponerse patas arriba en sentido gr¨¢fico con esta superproducci¨®n, le pasa cierta factura innegable su naturaleza transgeneracional. Pero s¨ª que se ha conseguido un ambiente ¨²nico, de estilo pict¨®rico caracter¨ªstico, con muchos efectos org¨¢nicos que ya veremos s¨ª consiguen calcarse a este nivel en las ediciones de PS3 y 360.

Debemos empezar por aqu¨ª, Thief es nextgen pero con lastres de un desarrollo tambi¨¦n concebido para las m¨¢quinas que se despiden. Se nota en seguida en aspectos como las animaciones o los acabados y texturizados en los rostros de los personajes, aunque bien es cierto que ¨¦ste que hemos recorrido de principio a fin es un c¨®digo muy previo con trabajo por delante por rematar, ya anotado por la propia Eidos. Iluminaci¨®n, distancias de dibujado, tratamiento de vegetaci¨®n o fuego, alta resoluci¨®n para maderas y piedras, etc. s¨ª son puntos visuales m¨¢s que rese?ables. Tambi¨¦n c¨®mo se logran crear estampas ¨²nicas, que cuesta creer que son imagen ingame. Algo por debajo est¨¢n otros elementos como el comportamiento del agua o los reflejos en cristales, que no dejan tan claro que se vayan a refinar ya y parecen m¨¢s bien esbozados sin realismo por propia identidad de su pict¨®rica. Con todo, bien es cierto que hay aspectos gr¨¢ficos que no los podr¨ªan soportar PS3 y 360, minucias gr¨¢ficas pero que est¨¢n ah¨ª y habr¨¢ que ver c¨®mo se adaptan.

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Guante negro

La acci¨®n comienza fuerte. Conoceremos al nuevo Garrett junt¨® a Erin, otra ladronzuela ¨¢gil y envalentonada que a los pocos minutos sufre un inesperado y tr¨¢gico accidente inexplicable justo donde da comienzo esta historia y se termina el primer tutorial b¨¢sico de movimiento. Thief es duro y punzante como la mejor flecha, macabro en cierto sentido al llevar al jugador ante desagradables escenas de tortura en un burdel o cadenas de montaje donde se desmembran cad¨¢veres en busca de sus ¨²ltimas posesiones. El eje de la historia es cambiante as¨ª como las motivaciones del protagonista, a priori para nada pol¨ªticas pese a la lamentable dictadura dentro de la que sobrevive como puede aceptando encargos de otros y haciendo el Robin Hood. Y como uno de sus principales clientes, tambi¨¦n muy pronto conoceremos a Basso, otro extra?o y poco amigable personaje principal que tiene mucho que ofrecer adem¨¢s de misiones secundarias que nos reporten algo m¨¢s de dinero y reliquias para nuestra colecci¨®n de la Torre.

El barrio sur del Mercado de Piedra acoge el Callej¨®n de los Mendigos que sirve a Basso y otros comerciantes en negro como refugio y sede. En Thief es primordial el dinero, el oro, a obtener seg¨²n el valor de todo lo que hurtemos, desde candelabros hasta anillos, monedas, medallones, platos, gemas... Y lo m¨¢s importante de todo, informaci¨®n. Nada ocurre en La Ciudad sin que pase por los o¨ªdos de la Reina de los Mendigos, otra figura clave en esta cruel historia, que act¨²a un poco como cham¨¢n capaz de mejorar nuestras habilidades de Concentraci¨®n tales como ralentizar el tiempo, abrir f¨¢cilmente cerraduras, ver m¨¢s lejos al apuntar o escuchar tras las paredes pasos y conversaciones. Esta evoluci¨®n primitiva de los atributos de Garrett va unida a desarrollo del inventario de flechas del personaje, gadgets como granadas y minas que son piezas ¨²nicas de relojer¨ªa, elementos curativos como alimentos o pociones, y determinados objetos que ayudan a obtener mejores precios con los mercaderes, salud, velocidad, fuerza con la porra aturdidora, etc.

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La variedad de flechas de arco recoge el principal arsenal de armas, pero tambi¨¦n existen cabezas de flecha con recipiente de agua adjunto, pico inflamable, cuerda para crear lianas o cabezal robusto para golpear con fuerza a mucha distancia. El avance a trav¨¦s de su hilo central se marca por situaciones de sigilo, acci¨®n al ser vistos, much¨ªsima exploraci¨®n libre en busca de m¨¢s reliquias, oro y caminos posibles, y puzles. Mecanismos que activar desde la distancia con un flechazo, palancas que mover en determinado orden escrito en un pergamino, cajas fuertes, fosos y presas... Garrett en este Thief tiene que hacer mucho m¨¢s que esconderse y ser h¨¢bil con el arco, aunque bien es cierto que una vez dominadas sus directrices la tendencia del juego parece que va a presentarse ligeramente reiterativa. El mapa y el inventario, eso s¨ª, son parte fundamental de todo esto.

En PlayStation 4 este inventario de flechas, gadgets y consumibles para mejorar la concentraci¨®n o la vida -no autrregenerativas- queda alojado en el touchpad frontal del DualShock 4, con una exposici¨®n en pantalla rectangular en vez de la habitual ruleta desplegable de las otras cuatro versiones. Su colocaci¨®n inferior al abrirla y su f¨¢cil navegaci¨®n con el panel t¨¢ctil la hacen ¨¢gil y clara, pues el tiempo no se detiene del todo al acudir a los inventarios o cambiar de flecha, por ejemplo, sino que se ralentiza, de nuevo muy en la l¨ªnea de Dishonored. Tambi¨¦n de la obra de Arkane nos resultar¨¢ familiar el dise?o de los escenarios, mucho m¨¢s vertical que en anteriores Thief y donde es tan importante mirar a lo lejos como encontrar ese punto de avance espec¨ªfico arriba o abajo, quiz¨¢ en una ventana, un tabl¨®n para lanzar cuerda, una piedra para colgar el gancho o un conducto de ventilaci¨®n sobresaliente. Hay bastante libertad de actuaci¨®n y caminos, invita al an¨¢lisis exhaustivo para ser creativo al buscar soluciones y c¨®mo pasar por determinados sitios.

De hecho, moverse por el enorme mapa del juego es mucho m¨¢s dif¨ªcil que en la aventura de Corvo en Dunwall. Esta urbe es m¨¢s laber¨ªntica y no hay poderes para trepar sus paredes con facilidad. En Thief es f¨¢cil perderse y no hay opciones tan sencillas como en otros t¨ªtulos de sigilo. El tejado puede no ser siempre la mejor opci¨®n, algo que est¨¢ muy bien medido para que no se abuse de las alturas y haya que bajar a plazas o callejones repletos de guardias alertados. Tampoco es una ciudad totalmente abierta y que recorrer a nuestro antojo en todo momento. Como en Dishonored o Bioshock Infinite, la historia y el progreso de juego que llevemos marcan el nivel y tareas secundarias que se nos abren, aqu¨ª dibujados en diversos barrios, centrales, bases, catacumbas, fortalezas... La sensaci¨®n es de juego para nada lineal, de hecho se puede volver atr¨¢s atravesando puertas y tras unos leves momentos de carga. Para completarlo habr¨¢ que hacerlo. Pero no se puede ir siempre a cualquier sitio al estilo sandbox (GTA, Assassin's Creed, Far Cry...).

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Eso s¨ª, el mapa -como dec¨ªamos- cuenta con un papel clave en la experiencia de juego Thief, hay que marcar puntos con balizas, prestar atenci¨®n a conductos ocultos, examinar bien todos los callejones, palancas, mecanismos, e incluso la mayor¨ªa de las casas, pues es relativamente f¨¢cil acceder a todas con paciencia y habilidad. Los interiores tambi¨¦n son parte de un dise?o pensado para la jugabilidad por encima de la mera puesta en escena. Casas y locales con armarios para el escondite, con focos de luz que apagar, con varias plantas para buscar el avance en vertical, con varias salidas, etc. En los 4 cap¨ªtulos recorridos hemos visto bastantes espacios diferentes, desde ostentosas mansiones hasta paup¨¦rrimos ¨¢ticos angustiosos como un zulo. Eso s¨ª, todo en Thief es demasiado parecido y gris, sin importar la hora del d¨ªa o las diferencias sociales. Una apuesta por la identidad propia del juego, aunque se echan de menos algunas sorpresas o giros en dise?o de niveles.

El desaf¨ªo est¨¢ en permanecer en la sombra sin ser detectado puesto que los combates directos suelen ser desfavorables, con enemigos muy agresivos y da?inos, que se llaman entre s¨ª o preparan emboscadas y encerronas. No es f¨¢cil moverse oculto, el ruido de los pasos por el agua o cristales, las sombras que se generan en la pared, los objetos que se muevan de su sitio o un perro que ladr¨¦ ya alertar¨¢ a los matones del Imperio. Adem¨¢s, su campo de visi¨®n y o¨ªdo es bastante agudo, aunque bien es cierto que Eidos todav¨ªa tiene que mejorar algunos patrones de IA en situaciones donde la perspectiva es diagonal o directamente lateral. Son conscientes, y nos han asegurado que ya est¨¢n con ello y que el juego final que llegue a las tiendas ser¨¢ una profunda experiencia de infiltraci¨®n por la coherente visi¨®n y audici¨®n de los adversarios. Total confianza de la mano de los padres del brillante Deus Ex HR.

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Por ¨²ltimo est¨¢ el sonido, con buen doblaje al castellano que ya hemos podido escuchar y una gama de efectos de ambientaci¨®n, clima, muchedumbres, ecos, pasos, etc. asombrosa. La m¨²sica t¨¦trica se intercala con la orquestada m¨¢s acelerada para los momentos de persecuci¨®n, alertas o incluso indicar que a¨²n queda alg¨²n enemigo en la zona. Con todo esto se presenta Thief tras m¨¢s de tres a?os en desarrollo. Muy estable en todos sus apartados y totalmente reminiscente a Dishonored y los primeros juegos de la propia saga Thief, como no pod¨ªa ser menos. El ladr¨®n por excelencia regresa a su estilo habitual no sin adaptarse a los tiempos que corren. Tenemos ganas de ver las versiones de PS3 y 360 para delimitar diferencias y comprobar su verdadero salto nextgen, aunque pocas dudas nos caben de que ser¨¢ un t¨ªtulo m¨¢s que recomendable en cualquiera de sus ediciones. S¨®lido, astuto y maduro, como su protagonista.