Atelier Meruru Plus: The Apprentice of Arland
Atelier Meruru Plus
Meruru Plus es una versi¨®n ampliada del t¨ªtulo que recibimos en Espa?a a mediados de 2013. Gust a?ade algunas novedades sin apenas cambiar la mec¨¢nica del juego original de PS3, en un lanzamiento que viene a mejorar el cat¨¢logo de la port¨¢til de Sony.
A paso lento pero firme, Gust ha creado una serie de videojuegos de ¨¦xito en Jap¨®n que poco a poco comienzan a asentarse en el mercado occidental. Atelier Meruru Plus cuenta con el benepl¨¢cito de los poseedores de una PSVita que esperan novedades para el cat¨¢logo de la consola como agua de mayo, y tambi¨¦n con el de los aficionados al JRPG menos convencional, aunque igualmente sumido en ciertos clich¨¦s y tem¨¢ticas de sobra conocidas para el p¨²blico m¨¢s docto en el g¨¦nero. Anunciado hace poco m¨¢s de un a?o, su primera aparici¨®n se produjo en PS3 como cierre de la trilog¨ªa de Arland, que ha dado de s¨ª un buen pu?ado de personajes carism¨¢ticos y de situaciones que recordamos con una sonrisa en los labios. Si bien es cierto que la franquicia Atelier nunca ha destacado por ser especialmente conocida al otro lado del charco, lo cierto es que en los ¨²ltimos a?os los aficionados cuentan con la suerte de poder disfrutar de una entrega troncal que ofrece unas caracter¨ªsticas muy peculiares.
Como suele suceder en estos casos, probablemente existan dos perfiles muy se?alados de lectores que se asomen ahora a leer este an¨¢lisis: aquellos que nunca han probado las mieles de Atelier y los que asumen que esta edici¨®n es un remozado de la original de PS3, y que por lo tanto ha de contar con un buen n¨²mero de novedades que justifiquen o bien la aparici¨®n del t¨ªtulo en port¨¢tiles o bien la compra de un t¨ªtulo que sobre el papel mejora a su hom¨®nimo con m¨¢s contenido, aunque no necesariamente mejor. Antes de comenzar con el an¨¢lisis propiamente dicho es conveniente tener en cuenta que esta edici¨®n es probablemente la que mejor se adapta a las necesidades de los jugadores que se acerquen por primera vez a la franquicia. Aunque se trata de una trilog¨ªa, cualquiera de los tres cap¨ªtulos puede ser disfrutado por separado pese a que por el camino se pierden referencias y datos de inter¨¦s. Sin embargo, aquellos que esperan encontrar algo realmente nuevo aqu¨ª har¨¢n bien en pasar directamente a la secci¨®n en la que se analizan las novedades que contiene, ya que tanto su mec¨¢nica como el concepto general de juego es pr¨¢cticamente id¨¦ntico al que tuvimos ocasi¨®n de disfrutar en PS3.
Una vez tengamos esto en cuenta es mucho m¨¢s f¨¢cil disfrutar de Meruru Plus en su justa medida, incluso teniendo en cuenta que los primeros minutos de partida son una mezcla entre un pr¨®logo al sistema de juego y al argumento. Gust ha habilitado una pesta?a desde el men¨² principal que nos permite recopilar informaci¨®n sobre lo acaecido en cap¨ªtulos anteriores, en un detalle que los nuevos jugadores no pasar¨¢n por alto a la hora de seguir la trama. Asimismo, desde el men¨² de inicio podemos escoger entre escuchar los di¨¢logos en japon¨¦s o en ingl¨¦s, as¨ª como acceder a un espacio que conglomera toda clase de extras que se desbloquean a medida que avanzamos en la aventura. La interfaz es navegable y agradable a la vista, un rasgo que desgraciadamente no comparten todos los men¨²s por lo que nos movemos durante el proceso de creaci¨®n de objetos.
Una princesa y su periplo
El padre de la princesa Meruru le otorga una de las tareas m¨¢s complicadas que ha tenido ocasi¨®n de realizar en su vida: demostrar que la alquimia puede reconstruir un pa¨ªs con cierto atraso tecnol¨®gico respecto a sus vecinos. Meruru es una muchacha jovial y risue?a que sue?a desde peque?a con poder utilizar la magia para mejorar su vida, algo que seg¨²n comenta en la introducci¨®n le ha sido imposible dentro de su castillo. La princesa es querida por sus allegados, pero su caracter no invita al optimismo: el reino de Arls ha de fusionarse con Arland y para ello requiere de avances tecnol¨®gicos que nadie parece capaz de procurar. Su padre le encomienda una tarea que podr¨¢ realizar a lo largo de tres a?os, tiempo que Meruru debe emplear para "sintetizar" nuevos productos que la ayuden a construir los cimientos del nuevo reino. As¨ª comienza su historia y con ella tambi¨¦n nuestra aventura.
La franquicia Atelier ha sido conocida desde sus or¨ªgenes por ofrecer una historia de f¨¢cil degustaci¨®n en donde se apuesta por el buen humor y por el optimismo. La personalidad de los protagonistas var¨ªa a medida que transcurren los distintos acontecimientos que modifican el reino de Arls, en lo que parece ser un proceso de maduraci¨®n que ense?a al jugador la importancia de asumir responsabilidades y de tomar ciertos riesgos. Aunque la premisa parece haber sido ideada para un p¨²blico adolescente, la narrativa que Atelier emplea poco o nada tiene que envidiar a los principales exponentes del g¨¦nero, si bien se le puede achacar cierto gusto por el exceso en conversaciones absurdas que con frecuencia se alargan m¨¢s de lo necesario. Puede que los conocedores de la franquicia echen en falta la grandeza narrativa de otros cap¨ªtulos o su mayor seriedad, pero los que se asomen a Atelier por primera vez disfrutar¨¢n con su peculiar forma de entender el mundo. No hay, por cierto, novedades significativas con respecto a la versi¨®n de PS3 en este apartado.
La alquimia como moneda de cambio
La mec¨¢nica de juego de Meruru Plus se basa en la recolecta de objetos que una vez almacenados pueden ser "sintetizados" o, lo que es lo mismo, fusionados entre s¨ª para obtener un tercer objeto resultante. Si la historia se narra a trav¨¦s de di¨¢logos, la mayor parte del sistema de alquimia tiene lugar en men¨²s de ca¨®tica interfaz, cuyo dominio durante los primeros compases de juego resulta desesperante. Existen tutoriales que explican con pelos y se?ales c¨®mo conseguir buenos resultados durante la s¨ªntesis, pero en ocasiones encontrar los propios objetos o saber qu¨¦ es exactamente lo que desean otros personajes como moneda de cambio es una tarea basada en la f¨®rmula de prueba y error.
Tardaremos un tiempo en acostumbrarnos al sistema de juego que propone Meruru Plus, o m¨¢s bien al hecho de no contar con pistas que nos gu¨ªen c¨®modamente por todos los aspectos de los que est¨¢ compuesta la mec¨¢nica. La relaci¨®n entre los personajes secundarios y la protagonista es uno de los aspectos que debemos cuidar en su justa medida si queremos avanzar conociendo todos los secretos que esconden, aunque para ello es necesario salir con ellos al campo de batalla para recolectar objetos o para subir de nivel de experiencia y, en consecuencia, mejorar nuestra afinidad como amigos. Los eventos secundarios de la trama son dispares en calidad: es tan posible encontrarse con una fascinante revelaci¨®n personal como con una absurda discusi¨®n acerca del estado de la climatolog¨ªa.
Construyendo el Reino
A diferencia de otras versiones de Atelier, Meruru Plus apuesta por ofrecer una mec¨¢nica f¨¢cil de digerir. B¨¢sicamente contamos con distintas misiones que debemos realizar para acceder a nuevas ¨¢reas. Cada zona cuenta con una serie de requisitos que debemos cumplimentar para obtener puntos de desarrollo que posteriormente emplearemos como moneda de cambio para crear nuevas estructuras para el Reino. Nosotros elegimos tanto los edificios como su ubicaci¨®n. En funci¨®n de nuestra elecci¨®n, Arls ser¨¢ un reino de mayor o menor tama?o, con una densidad creciente o menguante de poblaci¨®n. Algunas estructuras mejoran notablemente la popularidad de Meruru, mientras que otras abren el abanico de opciones que ofrece el t¨ªtulo como base. En funci¨®n de los edificios que hayamos instaurado y de las decisiones que tomemos durante la aventura accederemos a un final u otro, tal y como indica nuestro asistente MeMo para orientar al jugador.
La forma de controlar la evoluci¨®n del jugador y de la propia Meruru es establecer un l¨ªmite temporal de tres a?os para la construcci¨®n del reino. Cada acci¨®n que realizamos consume un lapso de tiempo que s¨®lo puede ampliado tras la consecuci¨®n de determinadas tareas, aunque este hecho no supone un punto tan determinante en la mec¨¢nica de juego como cabr¨ªa imaginar en un principio. Esto se debe a la variedad de acciones que podemos realizar para cubrir un arco temporal, bien sea salir a explorar distintos parajes o mazmorras o simplemente invertir unas horas analizando las posibilidades que nos ofrece la alquimia. No ser¨¢ extra?o que, al terminar la historia, sigamos maquinando sobre posibles combinaciones de objetos para averiguar qu¨¦ hubiese sucedido de haber cambiado los componentes de la mezcla en cuesti¨®n. El sistema es adictivo y muy original, aunque como suele suceder en estos casos no est¨¢ llamado a satisfacer por igual las demandas de los distintos tipos de jugadores.
La s¨ªntesis adecuada de objetos es la clave para acceder a las misiones secundarias y para poder avanzar en la historia, lo que convierte esta faceta en la m¨¢s importante de la mec¨¢nica de juego. Cada objeto cuenta con sus atributos espec¨ªficos que nos servir¨¢n como herramienta de intercambio para solventar toda clase de situaciones. Dentro de un baremo que va del uno al cien, cada uno de ellos cuenta con un valor intr¨ªnseco al que se le ha de sumar el valor personal que cada personaje le otorga seg¨²n exigencias del gui¨®n. Gust no ha incluido mejoras significativas en este apartado, aunque s¨ª se ha revisado el balance de los enemigos en los combates. La aparici¨®n de nuevos jefes finales otorga sentido a este hecho, si bien son aspectos que los nuevos jugadores pasar¨¢n por alto y que apenas son apreciables para los que hayan terminado la aventura original.
La raz¨®n de la versi¨®n Plus
Son dos los aspects determinantes de esta edici¨®n con respecto a la original. En primer lugar el reescalado del motor gr¨¢fico, que pese a ofrecer grandes resultados en PSVita no termina de aprovechar el potenciar t¨¦cnico de la consola. El dise?o de los personajes y de los mapeados es id¨¦ntico al original, solo que ahora se aprecia menos definici¨®n y menor cantidad de detalles (¨¢rboles, plantas y decorados en general). De vez en cuando se producen ralentizaciones que sin motivo aparente estropean la buena impresi¨®n que ofrece el colorido mundo de Arls. En segundo, el hecho de que Gust tampoco ha considerado necesario hacer uso de las funciones espec¨ªficas de la port¨¢til, por lo que nada de pantalla t¨¢ctil ni de panel trasero para realizar las actividades de s¨ªntesis, donde hubiesen encajado como anillo al dedo. No hay ni rastro de la demanda popular por antonomasia: un bot¨®n que permita acelerar la marcha de la escenas de v¨ªdeo en caso de conocer de sobra la historia. En nuestro caso, y despu¨¦s de haber saboreado las mieles de la edici¨®n de PS3, revivir todos los acontecimientos ha sido m¨¢s un h¨¢ndicap que un beneficio, lo que de nuevo sugiere que esta edici¨®n ha sido enfocada simple y llanamente como un port y no como una mejora propiamente dicha con respecto al original.
Las novedades de esta versi¨®n, dejando al margen los cambios en el sistema de combate, las nuevas melod¨ªas y, en resumidas cuentas, los detalles secundarios que no cambian la experiencia de juego, se reducen a los a?adidos que han ido apareciendo en la versi¨®n de PS3 en formato de contenido descargable o DLC. Este contenido ha ampliado el n¨²mero de enemigos finales, zonas a explorar, personajes secundarios, disfraces, melod¨ªas e incluso de escenas destinadas a ofrecer nuevos detalles sobre este o aqu¨¦l personaje. Sobra decir que ninguna de estas opciones ser¨¢ apreciable a ojos de jugadores que disfruten por primera vez de la "experiencia Meruru", y tampoco terminar¨¢n de convencer a un jugador ac¨¦rrimo para invertir en esta versi¨®n. Es interesante tener en cuenta que el t¨ªtulo aparecer¨¢ exclusivamente en PSN con formato digital y en perfecto ingl¨¦s.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.