Los redactores de la revista hablan sobre sus impresiones con la presentaci¨®n y expectativas de cara al futuro con respecto a Xbox One, que se espera para finales de a?o.
Reza un antiguo proverbio: "Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio". Buena nota podr¨ªa tomar de ¨¦l Microsoft para sus pr¨®ximas conferencias. Al menos por respeto a todos los jugones que ayer perdieron cerca de una hora de su valioso tiempo en una presentaci¨®n en la que se habl¨® pr¨¢cticamente de todo, menos de juegos. Microsoft se centr¨® en exponer todas las posibilidades multimedia de su nuevo cacharro, pero se olvid¨® de lo m¨¢s importante. Entiendo que en un E3, en el que adem¨¢s de la prensa especializada est¨¢n presentes la gran mayor¨ªa de medios generalistas del mundo te tomes la licencia de ocupar parte de tu presentaci¨®n con contenidos orientados al p¨²blico no habitual al mundillo, pero la de ayer era una presentaci¨®n seguida, principalmente, por jugones. Cuando el eje principal de la presentaci¨®n de una nueva consola son sus posibilidades de interacci¨®n con la televisi¨®n, algo falla. Se?ores, ?que una consola es para jugar! Y cuando el t¨ªtulo estrella con el que das cierre al evento es un multiplataforma, tambi¨¦n.
Y lo peor de todo: no se aclar¨® ninguna de las dudas que durante meses han girado en torno a la nueva Xbox. Y no me valen las declaraciones de los responsables de la compa?¨ªa en las entrevistas posteriores con los medios. El lugar para decir si iba Xbox One a ser retrocompatible con Xbox 360, si iba a permitir la segunda mano o si iba a requerir de conexi¨®n permanente a internet, era en la conferencia. Y no se hizo. No me van a convencer de dar el salto hacia la nueva generaci¨®n previo pago de cerca de 500€ por el simple hecho de que ahora podr¨¦ usar la voz en vez del mando ver la televisi¨®n. M¨¢s le vale a Microsoft ense?ar todo su arsenal en la conferencia del E3, porque tal y como est¨¢n ahora mismo las cosas, Sony ha tomado ventaja sin ni tan siquiera ense?ar la consola.
Pablo Gonz¨¢lez (Redactor)
Enrique Garc¨ªa (Responsable de Actualidad)
Joaqu¨ªn Rela?o (Coordinador Retro)
Encaraba el inicio de la conferencia de Microsoft con el mismo temor con el que he encarado las conferencias de los E3 de los ¨²ltimos a?os: que lo que se supon¨ªa deber¨ªa ser m¨¢s de una hora enfocada en videojuegos (enti¨¦ndase ¡°videojuego¡± como lo que ven¨ªan significando los videojuegos hasta que entr¨® esta generaci¨®n de consolas que ya nos deja) acabara convertida en un popurr¨ª sin sentido de n¨²meros de baile y movimientos espasm¨®dicos frente al televisor; lo que viene siendo un circo, vamos. Afortunadamente no hubo mucho de eso, salvo la confirmaci¨®n de que el nuevo Kinect (que ser¨¢ obligatorio, as¨ª que si no quer¨ªas caldo no te preocupes que ya te lo metemos nosotros por la garganta) detectar¨¢ hasta el n¨²mero de pelos que sobresalen de nuestros ap¨¦ndices nasales, y perdonen que no entone un ¡°oohh!¡± a juego; pero por desgracia tampoco hubo mucho de videojuegos. ?Y qu¨¦ hubo entonces? Una consola voluminosa, cuyos ¨¢ngulos rectos y aristas har¨ªan enrojecer de envidia a la mism¨ªsima NES; la confirmaci¨®n de que a los de Redmond esto de los videojuegos les trae cada vez m¨¢s al fresco (que si NHL, que si NFL, que si NBA, que si mira como dice Spielberg lo chachi que ser¨¢ la nueva serie ¨Cde televisi¨®n, que eso de los videojuegos est¨¢ pasado de moda- de Halo¡); y sobre todo el silencio, que acaba diciendo mucho y disparando a¨²n m¨¢s la rumorolog¨ªa (segunda mano ?s¨ª o no?, conexi¨®n obligatoria ?s¨ª o no?). Si es verdad que esto es solo el aperitivo y que el plato fuerte estar¨¢ en el E3, lo ¨²nico que han conseguido es que llegue al evento con acidez en el est¨®mago en lugar de con el apetito abierto. Al menos ha estado ah¨ª Remedy con su nuevo proyecto. No han ense?ado pr¨¢cticamente nada, pero es Remedy, y para m¨ª eso ya es garant¨ªa de calidad. Ahora solo hace falta que Microsoft caiga en la cuenta de que queremos una consola de videojuegos, no ver eventos deportivos o pegarle berridos a la tele para que cambie del Gran Hermano a Cu¨¦ntame. Y s¨ª, 15 exclusivas, pero ?cu¨¢ntas ser¨¢n videojuegos y cu¨¢ntas t¨ªtulos para que movamos el cuerpo como un ?u epil¨¦ptico v¨ªa Kinect? Otro interrogante m¨¢s. Cuando una conferencia de presentaci¨®n deja tras de s¨ª m¨¢s preguntas que respuestas, es que no se han hecho las cosas bien.
Sergi Blanch (Redactor)
C¨¦sar Otero (Coordinador PlayStation)
Cristian Ciuraneta (Coordinador iOS)
Microsoft 0 ¨C Sony 1. O lo que es lo mismo: Xbox One 0 ¨C PlayStation 4 1. Esta es la sensaci¨®n con la que la compa?¨ªa de Redmond me dej¨® tras sus sesenta minutos de presentaci¨®n de su nueva y flamante Xbox. Un preview bastante superficial antes de la cita del E3 que plante¨® m¨¢s preguntas que respuestas en el terreno de funcionalidades ¨Cperdiendo la ocasi¨®n de confirmar o desmentir los rumores de estos ¨²ltimos meses¨C, con un espect¨¢culo muy al estilo yankee ¨Ccon muchos fuegos artificiales, explosiones, slow motion...¨C pero que descuidaba el elemento m¨¢s importante: los videojuegos. Eso s¨ª, Microsoft puso las cartas sobre la mesa presentando sin tapujos su nueva consola a los pocos minutos de dar el pistoletazo de salida a una conferencia seguida por millones y millones de personas en todo el mundo, algo que que es toda una declaraci¨®n de intenciones pero que sabe a poco para el gamer m¨¢s tradicional tras el escaso tiempo dedicado al software. Apenas unos pocos juegos tras un seguido de caracter¨ªsticas multimedia dise?adas por y para el mercado norteamericano y que poco futuro tienen fuera de sus tierras; por otro lado, y entrando en el terreno de los videojuegos, prometen hasta 15 exclusivas para la nueva One aunque ayer s¨®lo vimos dos: un nuevo y m¨¢s que previsible Forza Motorsport y lo nuevo de Remedy, un t¨ªtulo que se aleja de Alan Wake y promete emoci¨®n, acci¨®n y suspense. Poco m¨¢s, s¨®lo destacar el prometedor nuevo motor gr¨¢fico de EA Sports para sus futuros t¨ªtulos deportivos; y es que cerrar la conferencia con un multiplataforma intergeneracional como Call of Duty: Ghosts ¨Cde nuevo, el gran reclamo para el mercado estadounidense¨C no es lo que se espera de toda una nueva y todopoderosa Xbox. ?Ah, s¨ª! Y con DLC's de exclusiva temporal para ellos... ?Qu¨¦ novedad! Tendremos que esperar al E3 para ver todo su potencial en el terreno de los videojuegos y si realmente se cumplen todas esas promesas sobre IP's exclusivas. Y para terminar, el dise?o de la consola es, cuanto menos, controvertido; ha provocado todo tipo de opiniones entre los usuarios ¨Csobre su tama?o y aspecto extremadamente sobrio¨C, aunque tendremos que esperar a tenerla delante para valorarla en su justa medida, como todo gadget que se precie. Eso s¨ª, el mando parece una maravilla, tanto por ergonom¨ªa como por su elegante dise?o.
Francisco Alberto Serrano Acosta (Coordinador de Redacci¨®n)
No es momento de emitir juicios precipitados sobre Xbox One. Sab¨ªamos que era un evento a dos actos, y que el grueso de la parte relacionada con juegos se quedaba para el E3. Pero si bien no voy a valorar ahora mismo lo que Xbox One va a ofrecer, que no lo s¨¦, s¨ª puedo valorar la estrategia de Microsoft con este planteamiento de presentaci¨®n: muy pobre. Es un error que la primera vez que se presenta una consola de videojuegos, lo haga con la intenci¨®n de reinventar la televisi¨®n. Es un error que lo primero que ilustres con los comandos de voz de Kinect sea "Xbox Television". Es un error que el primer bloque y el m¨¢s amplio de la presentaci¨®n est¨¦ dedicado exclusivamente a la televisi¨®n y lo que puede hacer Xbox One con ella. Es un error anunciar que tienes 15 juegos exclusivos y s¨®lo mostrar unos cuantos segundos de dos de ellos -Forza 5 y Quantum Break de Remedy- dejando el principal peso a EA Sports y a Call of Duty, dos franquicias multiplataformas que adem¨¢s est¨¢n entre lo m¨¢s predecible que se puede encontrar un jugador hoy en d¨ªa por su naturaleza anual. Es, en definitiva, un fallo de estrategia haberlo planteado de este modo, porque la impresi¨®n que me deja el evento, como alguien al que le interesa poco o nada la televisi¨®n, es que Microsoft no est¨¢ muy interesado en m¨ª con su nueva plataforma.
Y luego est¨¢ el desbarajuste comunicativo de la compa?¨ªa, impropio de un coloso como es Microsoft. Las idas y venidas sobre la segunda mano -algo hay, pero no quieren decir ni qu¨¦ ni c¨®mo-, sobre la necesidad de tener la consola conectada -Harrison coment¨® que ser¨ªa necesario al menos una vez al d¨ªa-, o aspectos como la obligatoriedad de Kinect o la ausencia de retrocompatibilidad -esperada por otro lado- no acaban de sentar bien entre el p¨²blico. La idea que ahora mismo me hago de lo que quiere implementar Microsoft es algo que se parece bastante a Steam, un sistema de DRM que asociar¨¢ un juego a una cuenta espec¨ªfica: podr¨¢s jugarlo en cualquier m¨¢quina, pero accediendo con tu cuenta. No podr¨¢s prestar o vender un disco a nadie, porque el disco s¨®lo reconocer¨¢ tu cuenta, a menos que decidas transferir la licencia de uso -para lo que habr¨¢ que pagar lo que los estudios quieran que pagues-. Phil Harrison, en una segunda entrevista tratando de clarificar las cosas despu¨¦s de la tormenta inicial, lo deja claro: puedes jugar a tu juego en la consola de un amigo, siempre que te conectes a tu cuenta en ella. Si tu amigo quiere seguir jugando en su cuenta, tiene que pasar por caja. Esta es la visi¨®n que tengo ahora mismo en base a las declaraciones que hay, y ni siquiera tengo claro todav¨ªa cu¨¢l es el plan y en qu¨¦ modo puede beneficiar a los usuarios, si es que lo hace. Puede que al final no sea as¨ª, pero la culpa de no definir correctamente sus planes y quedarse a medio camino en la exposici¨®n de ellos es de Microsoft, otro error cuyas consecuencias son f¨¢cilmente apreciables para cualquier aficionado que guste de visitar foros o compartir impresiones. Me quedo abierto a la posibilidad de que la compa?¨ªa me impresione en el E3, pero no ha sido el mejor primer paso, ni mucho menos.