AVP: Evolution
AVP: Evolution llega a iOS y Android tras el fiasco del ¨²ltimo t¨ªtulo basado en la franquicia Aliens para plataformas de sobremesa, Aliens: Colonial Marines. Angry Mob Games y Fox Digital Entertainment unen sus fuerzas para tratar de devolver a la criaturas m¨¢s peligrosas del universo todo el cr¨¦dito perdido. ?Lo conseguir¨¢n? Todos los detalles en nuestro an¨¢lisis.
Los Aliens y los Depredadores se enfrentan por vez primera en tablets y smartphones en AVP: Evolution, un nuevo t¨ªtulo de acci¨®n desarrollado por Angry Mob Games y distribuido por Fox Digital Entertainment para dispositivos iOS y Android. Tras los interesantes Predators y Guerrilla Bob, los chicos de tan reconocido estudio afincado en Ruman¨ªa pretenden lograr nuevos ¨¦xitos enfrentando a las dos razas m¨¢s peligrosas del universo. El objetivo es claro y directo; como Depredador deberemos eliminar a la Reina Alien para evitar que los Super Depredadores aniquilen a nuestro clan, aprovechando las habilidades de tan implacable especie. Como Alien deberemos eliminar a los Super Depredadores para liberar a nuestra especie esclavizada. Veamos en nuestro an¨¢lisis si el en¨¦simo enfrentamiento entre tan letales razas logra convencer a los fans en su llegada a dispositivos t¨¢ctiles.
Con el antecedente del recomendable Predators para iOS, Angry Mob Games vuelve a desarrollar un t¨ªtulo de tan popular franquicia, esta vez, con la sub-saga Alien Vs. Predator como gran protagonista. As¨ª, y como se ha comentado en la introducci¨®n de nuestro an¨¢lisis, AVP: Evolution centra su desarrollo en los enfrentamientos entre Depredadores y Aliens, lo que nos permitir¨¢ cambiar de raza seg¨²n nuestras preferencias; los fans de ambos universos pueden estar tranquilos, puesto que controlaremos a ambas razas en un t¨ªtulo de acci¨®n tridimensional con una ambientaci¨®n bastante conseguida y una inmersi¨®n destacable gracias a un apartado gr¨¢fico y sonoro bastante competente. Por otro lado, presenta algunas irregularidades a nivel de jugabilidad, resultando algo m¨¢s sosa y blanda de lo que nos gustar¨ªa.
No tan letales
Y es que a medida que vayamos jugando con ambas razas y acabando con todo enemigo que se cruce en nuestro camino ?b¨¢sicamente marines coloniales, cient¨ªficos asustados y androides de combate? nos daremos cuenta de que no somos tan letales como se espera de dos seres tan badass como los que protagonizan este brutal?crossover. Empezaremos con pocos movimientos a nuestra disposici¨®n y tardaremos bastante hasta conseguir desbloquear todas las habilidades; a la poca variedad de enemigos debemos sumar unos combos poco efectivos que no nos salvar¨¢n de perder vitalidad incluso cuando los ejecutemos. El dise?o de los niveles tampoco ayuda mucho a la experiencia final, siendo demasiado vac¨ªos y gen¨¦ricos; la mayor parte del tiempo pasaremos de grupo en grupo de enemigos sin mucho m¨¢s que hacer que eliminarlos sin piedad, lo que puede resultar bastante repetitivo y falto de gracia.
Eso s¨ª, en el tramo final del juego disfrutaremos de una mayor variedad de misiones. El control, por lo general, resulta algo soso; como Alien las posibilidades son bastante limitadas y como Depredador la experiencia no resulta mucho m¨¢s cautivadora. A pesar de que podemos controlar la c¨¢mara a nuestro antojo, siempre nos ofrecer¨¢ unos ¨¢ngulos poco vistosos y que afectar¨¢n negativamente a su jugabilidad. A medida que vayamos acabando con nuestros enemigos iremos adquiriendo puntos de experiencia ?llamados Xeno Points y Honor Points? para los Aliens y los Depredadores, respectivamente. Mientras que podremos evolucionar a nuestro personaje con cierta holgura, siempre estar¨¢ presente la controvertida opci¨®n de los micro-pagos ?de los 1,79 a los ?44,99 euros!, una barbaridad?, permitiendo mejorar a nuestro guerrero o xenomorfo de una manera mucho m¨¢s r¨¢pida, aunque en ning¨²n momento llega a ser obligatorio, pero s¨ª recomendable. A ello debemos sumar un precio del juego algo elevado en la AppStore de 4,49 euros y de 3,73 euros en Google Play, eso s¨ª, con los textos en nuestro idioma.
