Call of Duty: Black Ops Declassified
- PlataformaPSV4.5
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorNihilistic Software
- Lanzamiento31/12/2012
- EditorActivision
Call of Duty Black Ops: Declassified
Black Ops da el salto tambi¨¦n en la consola port¨¢til de Sony, PS Vita. La franquicia Call of Duty se estrena sin demasiado ¨¦xito en la nueva port¨¢til de la compa?¨ªa japonesa. <
La obra de Nihilist es el segundo intento de esta compa?¨ªa norteamericana de trasladar con acierto una franquicia de m¨¢s o menos ¨¦xito en el mundo de los FPS en consola sobremesa a port¨¢til. Fueron los encargados de dar su particular punto de vista a la versi¨®n port¨¢til de Resistance, una primera intentona de mezclar port¨¢til y juego de acci¨®n en primera persona que no acab¨® de fructificar. Con Black Ops Declassified pasa algo similar. La franquicia y el nombre es importante y atractivo, pero a la hora de la verdad el resultado final queda alejado de lo que podr¨ªa prometer sobre el papel. Se supone que a la tercera va la vencida, y es algo a lo que se tendr¨¢n que agarrar los desarrolladores de este Declassified.
Nos encontramos ante un spin-off de todo el universo Black Ops creado por Treyarch. Eso significa que hay una serie de protagonistas que nos van a ser familiares a lo largo de la campa?a que presenta este juego. Nombres como el de Hudson o el de Alex Mason est¨¢n presentes en una campa?a que se divide en una decena de peque?as operaciones que se reparten por diversos puntos del mapa y en una ¨¦poca muy concreta: la Guerra Fr¨ªa. Durante estos tiempos dif¨ªciles, de tensiones pol¨ªticas y enfrentamientos secretos, una serie de h¨¦roes an¨®nimos trabajan en la sombra. El principal problema de Declassified es que estos protagonistas no trabajan mucho en la consola de Vita, ya que la campa?a dura un suspiro. Y todav¨ªa nos sobra.
Las diez misiones son extremadamente cortas, oscilando entre dos minutos y cinco para completarse de principio a fin. Tiene la ¡°trampa¡± que si nos matan empezamos de cero, algo que entre intentos y ensayo-error si nos equivocamos puede alargar m¨¢s la vida ¨²til de la campa?a. Pero no demasiado. Una hora, menos si lo superamos todo a la primera y algo m¨¢s si empezamos en las dificultades m¨¢s elevadas, es lo que nos pueden durar las diez campa?as. Se antoja excesivamente poco aunque el formato sea ideal para partidas cortas para jugar en la port¨¢til. Adem¨¢s, no ofrece grandes elementos para rejugarlo, ya que mayor dificultad significa morir m¨¢s pronto, no unos cambios en la mec¨¢nica enemiga que nos suponga un reto nuevo.
Y este es uno de los principales problemas de la campa?a de Declassified. El juego ofrece un reto excesivamente plano. Los enemigos hacen exactamente lo mismo cada vez que juguemos o repitamos una partida. El mismo enemigo saliendo por el balc¨®n, los dos soldados escapando por el mismo camino, los tres que nos vienen de cara por el pasillo¡ todo se repite una y otra vez. Inteligencia Artificial nula. Algunos dir¨¢n que esto m¨¢s o menos se ve en otras entregas de la saga. Si pero no. Lo limitado de los escenarios, pasillos y caminos de las diez misiones de Declassified hacen que todos estos defectos se vean mucho m¨¢s. En las versiones sobremesa hay muchos inputs que camuflan estos errores: m¨¢s amplitud, scripts y momentos espectaculares cada dos por tres. Aqu¨ª no. Aqu¨ª los defectos de los enemigos lucen mucho m¨¢s. Por no hablar de los que est¨¢n escondidos en una pared y le disparan a la misma en lugar de nosotros o los que lanzan granadas que rebotan en la pared que tienen delante.
El desarrollo de las misiones tampoco acompa?a en exceso, ya que acostumbran a obligarnos a ir a buscar un objeto, llegar a un punto o acabar con un enemigo o enemigos en concreto. Todo es muy guiado y lineal, no hay ninguna opci¨®n m¨¢s que la de seguir por el camino marcado, imposible de perder. La linealidad es excesiva, no por qu¨¦ no est¨¦ en otras entregas mayores, sino porque la sensaci¨®n es mucho m¨¢s acusada ante un dise?o de niveles y una amplitud de fases que brillan por su bajo nivel en t¨¦rminos generales. A cambio tenemos cinco fases contrarreloj ¨Cla primera funciona a modo tutorial- en la que picarnos con nuestros tiempos.
Una de las virtudes del juego est¨¢ en el control. Los dos sticks anal¨®gicos permiten disfrutar de los juegos de acci¨®n en primera persona con comodidad. Sirven para movernos, mientras que los gatillos se usan para apuntar y disparar. Los botones nos permiten realizar diversas acciones como recargar, saltar o acciones contextuales y la cruceta para otros elementos como activar el sprint o pedir ataques a¨¦reos. La pantalla t¨¢ctil nos permite atacar cuerpo a cuerpo, lanzar granadas apuntando donde queremos que vaya, devolver granadas enemigas y en el caso de la t¨¢ctil trasera, aguantar la respiraci¨®n para disparar con un francotirador por ejemplo. Este ¨²ltimo no es precisamente el mejor de los controles, pero cumple.
La entrega port¨¢til de Black Ops no viene solo con una campa?a, que a fin de cuentas acostumbra a ser lo m¨¢s prescindible de la franquicia Call of Duty o por lo menos donde la apuesta de la compa?¨ªa es menos profunda. A camino entre la campa?a y el multijugador tenemos tambi¨¦n un modo enemigos, que no es m¨¢s que una modalidad que sustituye los zombis de la versi¨®n para mayores. Aqu¨ª tenemos una serie de mapas, cinco, en los que debemos intentar sobrevivir a oleadas de enemigos que nos van asaltando cada vez con m¨¢s peligro. Seg¨²n las bajas que consigamos tendremos mejor puntuaci¨®n final hasta llegar a las tres estrellas y subir en marcadores. Por desgracia esta modalidad, que se dar¨ªa a cooperativo, es para un solo jugador.
La tercera pata de Black Ops: Declassified es el multijugador. Es la m¨¢s importante de todas ya que la idea de poder tener un multijugador online de Call of Duty en la palma de nuestra mano es atractiva de por s¨ª. Naturalmente se han reducido las opciones en general, aunque hay las b¨¢sicas sobre el papel. Contamos con cinco modalidades multijugador: Duelo por equipos en el que dos conjuntos se enfrentan uno contra otro, baja confirmada en la que adem¨¢s de luchar por equipos debemos recoger chapas enemigas para sumar puntos, zona de lanzamiento en la que se debe defender una zona concreta para conseguir puntos y paquetes de ayuda, partida que mezcla estas tres modalidades y un todos contra todos para los lobos solitarios. Se echan en falta algunas partidas t¨ªpicas como Dominio.
A ello se le a?aden partidas de ¡°fiesta¡± para jugar con los amigos, barracones donde podemos ver desaf¨ªos a superar con las distintas armas que tenemos disponibles, un editor para la insignia del clan y los cl¨¢sicos marcadores para ver a los mejores jugadores. Todo ello ali?ado con una extensa personalizaci¨®n de personaje con sus armas y potenciadores (rachas de muerte, perks) seg¨²n nuestras habilidades y el cl¨¢sico prestigio que se nos desbloquea al nivel 40. Completo si no fuera por una serie de errores que empa?an la experiencia de juego. Problemas para conectar con los servidores, acabar fuera de las partidas cuando conseguimos conectar con alguna y un rendimiento inferior a lo esperado. Casi nada para la modalidad m¨¢s atractiva del juego. Al menos se puede jugar en modo ad-hoc, local, con hasta cuatro compa?eros. La mitad de los ocho en online, pero con mejor rendimiento.
T¨¦cnicamente, Black Ops Declassified ofrece cosas interesantes para la consola en la que corre, aunque algunas otras son muy mejorables. En general se mantiene un nivel art¨ªstico y visual muy similar al visto en las consolas sobremesa, con una fluidez marca de la casa como principal virtud del juego. Pero todo esto queda empa?ado con elementos que empobrecen el resultado final: texturas planas y a baja resoluci¨®n que se nos aparecen m¨¢s de la cuenta, una carga poligonal mejorable en t¨¦rminos generales y los momentos Bullet time, que van como a trompicones y pierden el efecto espectacular que pretenden ofrecer.
La banda sonora juega un papel correcto sin alardes. A nivel de melod¨ªas algunas nos ser¨¢n f¨¢cilmente reconocibles por haberlas escuchado antes, aunque no es esto lo m¨¢s relevante. El sonido de las explosiones, las armas, los gritos¡ todo tiene un nivel correcto, pero no llega a la inmersi¨®n que se le pide a un juego que nos quiere meter en medio de aut¨¦nticas refriegas b¨¦licas. El juego llega totalmente en castellano, con lo que tanto los textos como las voces est¨¢n dobladas a nuestro idioma.
Mediocre
Pod¨ªa ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con ¨¦l quedar¨¢ archivado en la estanter¨ªa para no jugarlo nunca m¨¢s. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.