"Un sue?o dentro de un sue?o" El mundo de los sue?os. Un lugar en el que no recibimos ¨®rdenes, sino que las damos. Un lugar en el que nosotros dictamos las reglas, en el que las leyes del mundo f¨ªsico y la realidad que nos ata?e desaparecen y podemos ser lo que queramos ser. Un lugar cuya capacidad de poder construir la vida y felicidad que deseamos puede atraparnos con la fuerza de un tornado y dejarnos perdidos y flotando en un limbo perpetuo de enso?aci¨®n a poco que nos descuidemos, abstray¨¦ndonos de la sucia realidad que nos rodea, en la que no controlamos nada en absoluto. Dicen que no hay nada m¨¢s poderoso que el mundo de los sue?os, pues all¨ª cada persona es su propio Rey o Reina, su maestro de ceremonias y al mismo tiempo privilegiado espectador de un espect¨¢culo que se construye sobre la marcha y el ritmo que nuestro deseo as¨ª dicta. Este mundo ha sido explorado en el cine con asiduidad, sobre todo en el terreno fant¨¢stico con obras como La Gran Huida, Pesadilla en Elm Street u Origen. Las enso?aciones delirantes tambi¨¦n salpican la literatura con obras innolvidables como Miedo y Asco en Las Vegas del maravilloso iconoclasta Hunter S. Thompson, o la peque?a pantalla con la magistral y atmosf¨¦ricamente bizarra Twin Peaks del genio loco David Lynch. En los videojuegos, decenas de veces hemos recorrido un Mundo de los Sue?os virtual ya fuese en RPG, plataformas o aventura gr¨¢fica, pero en muy pocos casos como en Nights into Dreams (Sega Saturn , 1996), la joya del Sonic Team que nos sumerg¨ªa hace dos generaciones en bell¨ªsimas localizaciones de manos de un personaje ¨²nico: Nights, creado por dos nombres tan importantes en SEGA como son los de Yuji Naka y Naoto Osihma , tambi¨¦n conocidos como los padres de Sonic The Hedgehog. Rescatada para la generaci¨®n HD actual, la estilizada Nights viene dispuesta a despertarnos a los m¨¢s veteranos esos recuerdos imborrables diecis¨¦is a?os atr¨¢s, y a intentar cautivar a esa audiencia m¨¢s nueva que gracias a PSN , Steam y Xbox Live est¨¢ descubriendo, aparte de nombres m¨ªticos, otras experiencias de juego que deben ser igual de recordadas. El mundo de los sue?os no es una idea et¨¦rea y abstracta como la aburrida humanidad piensa y concibe que es. De hecho, es un lugar real dividido en dos partes: Nightopia y Nightmare (Pesadilla). Cada noche, los sue?os de todos los seres humanos son representandos en estos dos lugares, tanto los sue?os buenos y tambi¨¦n las pesadillas. Dentro de Nightopia existen las Ideya, esferas luminosas de colores que representan diferentes aspectos de las personalidades de los so?adores. Mas este mundo en perfecto equilibrio se encuentra amenazado por Wizeman the Wicked, poderoso y malvado dictador de la parte Nightmare, el cual est¨¢ robando la energ¨ªa que generamos al so?ar de aquellos 'visitantes' durmientes que cada noche aterrizan en el mundo de los Sue?os. Con dicha energ¨ªa, Wizeman re¨²ne cada vez m¨¢s poder para controlar tambi¨¦n Nightopia y por ende Dream World al completo, lo que le abrir¨ªa el acceso al mundo real humano. Con el fin de lograr sus maquiav¨¦licos objetivos crea a varios seres que llama Nightmaren, siendo lo dos m¨¢s poderosos Reala y Nights, ser sin sexo ni voz con el aspecto de una polichinela capaz de volar, mec¨¢nica principal del juego. Nights no est¨¢ de acuerdo con su creador y decide rebelarse, siendo castigado/a dentro de un palacio de Ideya (semejante a una caseta redonda como las que hay en parques y espacios p¨²blicos). Pero Nights no estar¨¢ solo/a (sus creadores se?alan que le toca al usuario decidir la percepci¨®n que tiene sobre el personaje), sino que un d¨ªa, dos ni?os aparecer¨¢n para ayudarla: Elliot Edwards, que ha tenido un d¨ªa horrible al perder un partido de baloncesto contra otro chico y Claris Sinclair, cuyo suelo es cantar en una obra, pero a la que puede el miedo esc¨¦nico cuando est¨¢ sobre el escenario. Ambos ni?os tienen pesadillas esa noche sobre el horrible d¨ªa que han tenido. Y escapan a Nightopia, d¨¢ndose cuenta de que ambos poseen la Ideya Roja del Coraje, la Ideya m¨¢s extra?a y la ¨²nica que Wizeman no puede robar. Ambos encuentran a Nights y rompen su confinamiento, escuchando la historia que les cuenta sobre los sue?os, sobre el terrible peligro que se cierne en Dream World, sobre el plan de Wizeman. Resueltos y decididos, los tres comienzan una cruzada para liberar Nightopia. Y es en este punto de la historia, en el inicio mismo de la Quest, cuando la experiencia jugable de Nights into Dreams comienza.
Ampliar
La Joven de los Sue?os Pero, ?qu¨¦ es Nights en su fondo y forma, fuera de ese halo de enso?aci¨®n que parece producir? Into Dreams es una mezcla ¨²nica de exploraci¨®n 3D con secciones de vuelo en 2D que conforman la espina dorsal de su jugabilidad. Comenzamos controlando a uno de los ni?os, Claris o Elliot, y movi¨¦ndonos en tercera persona por un mapeado con l¨ªmites definidos, pero que nos deja ir a cualquier parte y trepar a cualquier zona solamente con el bot¨®n de salto. Nada ha cambiado en este salto a la Alta Definici¨®n en cuanto a planteamiento o jugabilidad. NiD contin¨²a dividi¨¦ndose en siete niveles, siete sue?os que se su-dividen a su vez en cuatro zonas o Mares que incluyen un Final Boss. Cada uno de los ni?os cuenta con tres niveles para ellos solos tem¨¢ticamente distinto, excepto el ¨²ltimo, que es id¨¦ntico para ambos. De esta forma, Elliot comenzar¨¢ en su Splash Garden mientras que Claris lo har¨¢ en Spring Valley. Y siempre con una estructura similar, con los soldados de Wizeman rob¨¢ndonos todas las Ideyas -Azul para la Inteligencia, Blanca para la Pureza, Amarilla para la Esperanza, Verde para la Sabidur¨ªa- excepto la Roja de Coraje. Una vez llegamos al palacio de las Ideyas -marcado siempre con la direcci¨®n de la flecha a seguir-, tomamos el control de Nights, que volar¨¢ siguiendo siempre una ruta de avance bidimensional cuyo patr¨®n cambiar¨¢ autom¨¢ticamente seg¨²n la IA modifique el ¨¢ngulo de c¨¢mara para ir a las zonas que vemos al fondo, pero a las que no podemos ir. Movi¨¦ndonos de izquierda a derecha y de arriba a abajo dentro de las dos dimensiones, deberemos obtener 20 orbes azules y llevarlos a la Ideya Capture (parecido a un artilugio del Doctor Robotnik) para destruirla, la cual liberar¨¢ en cada acto la Ideya que contenga en forma de orbe dorado. Cuando tengamos la citada Ideya, debemos volver al palacio en el que pas¨¢bamos a controlar a Nights. Una vez en ¨¦l, nos trasladaremos al siguiente acto. Y cuando hayamos recuperado las cuatro Ideyas, tocar¨¢ lidiar con un Final Boss con el que tendremos solamente dos minutos para vencerle. El tiempo es un elemento importante en la jugabilidad, ya que solamente podremos controlar a Nights por una determinada cantidad de este. Una vez se termine la cuenta atr¨¢s que podemos vez en el HUD in-game, el tiempo de control se agotar¨¢ y pasaremos a manejar a Claris o Elliot, con los que tambi¨¦n podremos recolectar los orbes azules y golpear a la Ideya Capture para liberar el orbe dorado y llevarlo a su palacio. Aunque el tiempo nos perseguir¨¢ de forma implacable. Literalmente, ya que los segundos restantes nos persiguen por todo el escenario en forma de reloj que nos tira al suelo y nos roba preciados segundos que pueden provocar que los ni?os se despierten y el juego termine. Elementos del escenario como anillos -un gui?o a Sonic- y estrellas nos dar¨¢n punto cuando los atravesemos/recojamos. Cada enemigo del escenario que nos golpee nos robar¨¢ cinco segundos de tiempo. Como m¨ªnimo, y para poder progresar, tendremos que alcanzar una puntuaci¨®n de C en cada nivel para poder avanzar al siguiente. La rejugabilidad es un factor importante, ya que no solo podremos mejorar la puntuaci¨®n, sino que otra opci¨®n se nos abrir¨¢: la A-Life, una especie de simulaci¨®n de vida que nos permite usar a las entidades conocidas como Nightopians -podremos ver los obtenidos dentro de una opci¨®n en el men¨² principal- que hayamos capturado, hacerlas crecer e incluso combinarlas dentro de una especie de entorno Sandbox. Este elemento, ya presente en el juego original, cuenta incluso con su propio motor musical en el que cada variaci¨®n del tempo, el tono y? la melod¨ªa pueden alterar a los Nightopians. Incluso podemos combinarlos con los enemigos Nightmare y obtener una raza h¨ªbrida llamados Mepian, y, con algo m¨¢s de pr¨¢ctica, un Rey Pian o un Superpian.
Ampliar
"?Controlar un sue?o?" Claris y Elliot solamente podr¨¢n avanzar y saltar. Pero Nights cuenta con m¨¢s recursos y movimientos. Para empezar tenemos el Drill Dash, que manteniendo pulsado un bot¨®n frontal -A o B en Xbox 360 , X o C¨ªrculo en PlayStation 3 - har¨¢ que aceleremos r¨¢pidamente. En este estado podemos atacar a los Nightmaren repartidos por el escenario para derrotarlos, aunque consumir¨¢ poder Dash de la barra de la interfaz. Con Touch Dash atacaremos a los Nightmaren y adem¨¢s los llevaremos en la direcci¨®n que queramos con solo pulsar un bot¨®n cuando entremos en contacto con ellos. Moviendo el stick izquierdo en c¨ªrculos varias veces har¨¢ que Nights cree un c¨ªrculo llamado Paraloop en el aire que nos permitir¨¢ obtener objetos y derrotar a los enemigos que entren dentro de su radio de alcance. al tocar a un Nightmare mediante el Touch Loop, comenzaremos a girar con gran impulso por nuestra parte, creando un Paraloop en el acto. Si por contra mientras volamos pulsamos alguno de los dos gatillos superiores del pad, Nights comenzar¨¢ a realizar movimientos acrob¨¢ticos que nos brindar¨¢n la opci¨®n de ganar m¨¢s puntos. Por ¨²ltimo, uno de los controles m¨¢s ¨²tiles ser¨¢ el Freno A¨¦reo, que se activar¨¢ pulsando los dos gatillos al mismo tiempo. Nights into Dreams vino en su momento con un mando especialmente dise?ado. Un pad que se cuenta entre los m¨¢s ex¨®ticos y particulares de la historia de los videojuegos, ya que presentaba una cruceta y seis botones frontales dentro de una superficie en forma de disco en la que el a?adido estrella era un stick de control, algo que el mando normal de Saturn no incorporaba, teniendo solamente la cruceta. En esta versi¨®n HD nos hemos encontrado con dos opciones en cuanto al modo Historia. O bien podemos jugar el Brand New Dreams, la versi¨®n en Alta Definici¨®n que directamente bebe del remake que se hizo a posteriori (nada menos que en 2008) de su aparici¨®n en Saturn para la PlayStation 2 y que nunca sali¨® de Jap¨®n . Una versi¨®n que pul¨ªa texturas y perfilaba m¨¢s los modelos de los personajes, sobre todo de Nights, que luc¨ªa espectacular en contraste con el estilo m¨¢s acartonado y poligonal que siempre tuvieron Claris y Elliot. Y que inclu¨ªa los elementos que esta versi¨®n HD incluye, como soporte para pantallas 16:9 panor¨¢micas, una galler¨ªa de ilustraciones, un modo espectador para ver las cinem¨¢ticas y escenas in-game y la inclusi¨®n de poder jugar con los gr¨¢ficos de Saturn. Otro elemento que se ha implementado en esta versi¨®n HD y que tambi¨¦n conten¨ªa el remake para PS2 es la expansi¨®n tem¨¢tica Christmas Nights , que revisitaba el nivel compelto de Spring Valley de Claire adornado con una tem¨¢tica navide?a para la ocasi¨®n y que pod¨ªamos atravesar tambi¨¦n con Elliot en un recorrido distinto para este personaje. La b¨²squeda de la estrella navide?a que se suele colocar en lo alto del ¨¢rbol de la ciudad Twin Seeds nos lleva de vuelta a un Dream World m¨¢s preciosista e irresistible que nunca con esos paisajes y elementos navide?os. Por desgracia parece que el mayor atractivo de Christmas Nights no ha llegado a Nights into Dreams HD: la posibilidad de jugar como Sonic y enfrentarnos al enemigo final de esta expansi¨®n reconvertido en una especie de Robotnik . Una decisi¨®n ciertamente inexplicable.
Ampliar
Gr¨¢ficamente, la alta definici¨®n no pod¨ªa haberle sentado mejor a un t¨ªtulo tan vital y colorista como el creado por SEGA. La variedad en la marcada paleta crom¨¢tica y la fotograf¨ªa luminosa de NiD HD -deudora absolutamente junto con sus cambios de escenario de la saga Sonic, aunque con ese aire de enso?aci¨®n que los caracteriza- son una constante que lucen como nunca en PS3 y 360. Los anillos que atravesamos volando, ese reloj saltar¨ªn que siempre est¨¢ persiguiendo a los ni?os o ver a Nights realizar acrobacias sigue siendo un espect¨¢culo dentro de su sencillez jugable que contin¨²a cautivando a los que quedamos deslumbrados en 1996. Es cierto que hasta que le cojamos el truco, y en algunas ocasiones, el juego puede tornarse un poco ca¨®tico a nivel visual -m¨¢s a¨²n con su paso a 16:9 y ese ligero zoom que parece haber sido implementado para encajar la imagen en una pantalla panor¨¢mica-, y m¨¢s cierto a¨²n la sensaci¨®n de agobio que a m¨¢s de un usuario m¨¢s joven le producir¨¢ el desplazarse con los ni?os por el Dream World debido a no poder subir o bajar la c¨¢mara, pero la originalidad tiene un peque?o precio que pagar. Y musicalmente, que podemos decir del maravilloso score que escribieron a seis manos Naofumi Hataya , Tomoko Sasaki y Fumie Kumatani . Una BSO querida por el gran p¨²blico y que adem¨¢s aparece incluso en los t¨ªtulos Phantasy Star Online de SEGA. El tema principal 'Dreams Dreams' sigue sonando tan bello y evocador de un mundo de sue?os como en su momento, con multitud de variaciones como una versi¨®n coral y otras dos con letra y voces, una de adultos y la otra cantada por ni?os, permaneciendo esa preciosa versi¨®n a capella de Christmas Nights cantada a tres voces, y que se junta con melod¨ªas que van desde el lirismo absoluto a los cortes jazz¨ªsticos m¨¢s divertidos." Los sue?os, sue?os son " Es dif¨ªcil poder describir Nights into Dreams HD. Ya lo era hace diecis¨¦is a?os. ?Esto es un juego de velocidad, de vuelo, es un Sonic a¨¦reo? La velocidad que Nights llega a alcanzar, sus ataques, elementos como los anillos, la constante din¨¢mica del juego mientras volamos -esta se detiene en seco con los ni?os, que se asemeja m¨¢s a un plataformas 3D primitivo- no se pod¨ªan comparar hace diecis¨¦is a?os ni se pueden comparar ahora en pleno 2012 con otras ofertas. NiD es tan ¨²nico como su andr¨®gino protagonista: una extravaganza voladora si quer¨¦is llamarla as¨ª que el Sonic Team con Naka-sam y Oshima-san se sacaron de la manga entre juego y juego del azulado puercoesp¨ªn. Nuestra primera toma de contacto con esta versi¨®n HD ha vuelto a enso?arnos de nuevo, sobre todo a los que nos quedamos con las ganas hace cuatro a?os de esa versi¨®n de PlayStation 2 que al fin tenemos aqu¨ª bajo el prisma de la Alta Definici¨®n. Y con el a?adido de Christmas Nights que, aunque sin su mayor reclamo, si contin¨²a siendo una oferta estupenda para la Navidad que cada vez est¨¢ m¨¢s cerca. Pero sin duda que lo mejor de Nights estriba en esos instantes en que nos permitimos meramente volar, sin pensar en enemigos, anillos, orbes o el acuciante tiempo, sino solamente en volar y ver la gracilidad absoluta con la que nuestra polichinela se desplaza. Algo que recuerda a otra experiencia jugable tan hermosa como ese Nyxquest /Icarian Kindred Spirits de Wii, PC e iOS en el que volar se deven¨ªa la mejor sensaci¨®n de todo el juego. La misma sensaci¨®n que Nights into Dreams nos brinda y que se asemeja cuando en nuestros propios sue?os echamos a volar, a flotar en el aire, ingr¨¢vidos.
Ampliar