Assassin's Creed III, Impresiones Gamescom

Ampliar

Lo vimos en junio en el E3 en la conferencia de Sony y en la propia Ubisoft, pero todav¨ªa quedaban muchos detalles por conocer de este modo "abordajes" del esperado Assassin's Creed III, que llegar¨¢ a PlayStation 3, Xbox 360, PC y Wii U. La Gamescom 2012 que ha arrancado hoy en Colonia ha concedido un enorme espacio al juego dentro del stand de Ubisoft, es el claro protagonista del pr¨®ximo a?o fiscal para la compa?¨ªa y su producto m¨¢s importante del 2012, a buen seguro tambi¨¦n el que ser¨¢ m¨¢s vendido dado el ¨¦xito comercial de la saga y las promesas sobre la mesa de que esta entrega ser¨¢ la m¨¢s grande e innovadora de todas. No le faltan argumentos una vez visto en movimiento, con un nuevo marco hist¨®rico como es la Guerra de la Independencia Americana, escenarios por primera vez que se alejan de las ciudades y dejan al protagonista saltar y trepar por los ¨¢rboles y los campos, batallas multitudinarias, nuevas armas de ataque a distancia como la pistola o estos combates navales que hemos probado en la feria alemana.

Tras la llamada trilog¨ªa de Ezio Auditore, esta entrega revoluciona algunas mec¨¢nicas que ya empezaban a estancarse en la marca de Ubi. Pero el m¨¢s importante de todos estos pasos diferenciadores es sin duda la presencia que se le dar¨¢ a los combates entre grandes veleros en pleno oleaje caribe?o, un modo de juego que sin tener un protagonismo pleno en la trama central s¨ª que dejar¨¢ al jugador varias horas extra de entretenimiento y una historia paralela donde es el propio usuario quien decide hasta d¨®nde la explora, enfrent¨¢ndose cada vez a nav¨ªos m¨¢s poderosos que no solo tiene que destrozar a ca?onazos y dejar encallados, sino que tambi¨¦n abordar manejando a Connor directamente y siguiendo ya un estilo de juego de plataformas y peleas a espada m¨¢s convencional en Assassin's Creed.

Ampliar

El manejo total del buque era para Ubisoft Montreal una prioridad, de manera que como si capitanes y astilleros fu¨¦semos al mismo tiempo, tendremos que decidir qu¨¦ ca?ones colocamos a la embarcaci¨®n, c¨®mo desplegamos el velaje, qu¨¦ munici¨®n vamos a emplear, distribuci¨®n de los hombres a bordo o intentar buscar estrategias agresivas o defensivas para acabar con los rivales, en un aut¨¦ntico espect¨¢culo de fuego y maderas saltando por los aires que, realmente, sus desarrolladores han conseguido poner en pie de forma magn¨ªfica, como ning¨²n otro t¨ªtulo hasta hoy. Recuerda a t¨ªtulos como Sid Meier, o a minijuegos de lucha entre barcos piratas de algunos t¨ªtulos, pero tambi¨¦n tiene una vertiente de acci¨®n que lo hace ¨²nico, ya que no solo habr¨¢ que mantener derecho el tim¨®n para no dejarnos llevar por un todopoderoso oleaje sino que tambi¨¦n tendremos que intentar los llamados "combos de ca?onazos", es decir, hace dos tiros seguidos pulsando el bot¨®n en el momento justo, lanzar dos balas unidas por una cadena -el m¨¢s eficaz y demoledor- o saber hacer una r¨¢faga que abarque bastante y de la que no pueda escapar el buque adversario.

Audiovisualmente estos momentos son una maravilla, pero no se quedan aqu¨ª, ya que las f¨ªsicas de c¨®mo se comportan los barcos ante la fuerza del mar y los impactos rivales son otro aspecto digno de menci¨®n, que marcan sobremanera la jugabilidad y ritmo de enfrentamiento. Jugar estas partes requiere no perder de vista el temporal que tenemos a nuestros pies y las posiciones que van tomando los enemigos, adem¨¢s de saber aprovechar los combos y colarlos justo en el momento oportuno para hacer m¨¢s da?o. Y sobre da?os,  no est¨¢n representados de forma obvia, saber si estamos a punto de acabar con un velero rival o no se mira -al menos en esta demo- en el estado del propio nav¨ªo. Habr¨¢ que medir balas empleadas, tripulaci¨®n sacrificada o segundo exacto para iniciar el abordaje a pie, pero no es en ning¨²n momento un esquema de estrategia, siempre tendremos la sensaci¨®n de estar disfrutando de jugabilidad arcade y poco realista volcada con el espect¨¢culo, la rapidez y la adrenalina de los juegos de acci¨®n.

Ampliar

La segunda parte de la toma de un barco rival llega con los saltos de un buque a otro y pelea en cubierta contra los enemigos, a espada o con daga y pistola. La crudeza de estos ataques nos ha sorprendido, y aunque no hemos podido profundizar tanto en ellos como en los choques de naves a ca?onazos, s¨ª que sirven como aperitivo a lo que el nuevo sistema de lucha de Assassin's Creed incorpora en este tercer episodio central, quinto en la marca. Pelear a pie ahora ser¨¢ m¨¢s ¨¢gil y con nuevos combos y movimientos de esquivo. Connor es quiz¨¢ el asesino m¨¢s ¨¢gil de todos los que conocemos (Altair, Ezio) y su estilo acrob¨¢tico queda expuesto tanto al movernos entre m¨¢stiles, cuerdas y paredes de las embarcaciones como al luchar cuerpo a cuerpo, donde el personaje casi parece m¨¢s un gimnasta exhibi¨¦ndose que un rudo y enfurecido criminal. Golpes circulares para quitarse de encima varios enemigos  la vez, volteretas alt¨ªsimas para esquivar y subir a alg¨²n elemento o aprovechamiento de algunos elementos del escenario para hacer ataques ¨²nicos son nuevas ideas para el combate que parecen sentarle realmente bien. Espect¨¢culo y jugabilidad robustos.

Una vez asediada alguna nave, enseguida podremos saquearla en busca de nuevos items para nuestro velero en forma de bot¨ªn, como ca?ones y munici¨®n especial, mejoras en el blindaje y protecciones, en el tim¨®n y la disposici¨®n de las velas, m¨¢s hombres, etc. Esto har¨¢ a nuestra m¨¢quina naval de guerra m¨¢s y m¨¢s poderosa, pudiendo enfrentarnos cada vez a mayores rivales. No sabemos si tambi¨¦n recogeremos equipo para Connor en tierra firme, o c¨®mo se intercalar¨¢ esta jugabilidad tan llamativa con la central del juego, a pie sobre el continente americano, pero desde luego que sugiere un sistema profundo y duradero, esperemos que tambi¨¦n variado y con el suficiente atractivo como para que queramos recorrerlo de principio a fin. Assassin's Creed ha vuelto a demostrar en la Gamescom 2012 que no le faltan incentivos para considerarse un producto realmente nuevo y con un continuismo solo intermedio, justo lo que se le pide a toda secuela grandiosa que se precie.

Ampliar