PlanetSide 2

Equilibrio de poder
Nueve a?os despu¨¦s de que el MMOFPS PlanetSide comenzase su batalla a escala planetaria entre tres facciones dispuestas a todo con tal de conseguir el poder y el dominio de varios territorios, SOE (Sony Online Entertainment) ultima los detalles de la que ser¨¢ su secuela, la cual viene dispuesta a reescribir la palabra 'Masivo' en el argot de los MMO. Situado 300 a?os despu¨¦s del descubrimiento del planeta bautizado como Auraxis y su rico escenario, las tres facciones que manej¨¢bamos en el primer t¨ªtulo regresan de nuevo dispuestas a todo con tal de plantar su bandera en territorio enemigo, al coste de soldados y veh¨ªculos que haga falta. A pesar de los parecidos de la trama con la del primer PlanetSide, el reputado Marv Wolfman -reputado y premiado autor de comics, creador entre otros de La Tumba de Dr¨¢cula y el ic¨®nico cazavampiros Blade-, ha sido contratado para urdir una trama que interconecte las tres facciones enfrentadas.

Y estas son la Rep¨²blica Terran, un gobierno mundial autoritario que mantiene un f¨¦rreo dominio militar sobre las colonias espaciales y sus ciudadanos; obsesionada con la preservaci¨®n de la Ley y el Orden a cualquier precio, la opresi¨®n y la fuerza dictatorial son sus se?as. Repudiados, expertos en industria, piratas, ex-militares, piratas ex-militares y dem¨¢s componen el particular frente del Nuevo Conglomerado, dispuestos a todo con tal de lograr sus metas y derrocar a las huestes de la Rep¨²blica. Y cerrando el triunvirato jugable nos encontramos con el grupo Vanu Sovereighnty, obsesionados con la evoluci¨®n humana a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa, los cuales emplear¨¢n armas y veh¨ªculos alien¨ªgenas de enorme poder con el ¨²nico fin de descubrir los secretos ocultos en antiguos artefactos sobre la superficie de Auraxis.

Masivo
Ni 16, ni 32, 64 o incluso 128 como en el t¨¢ctico M.A.G. de PlayStation 3. Lo m¨¢s sorprendente tras aterrizar por primera vez en el campo de batalla -un mapa de nada menos que ocho kil¨®metros cuadrados seg¨²n el representante de SOE-, una vez pasadas las obligatorias pantallas de personalizaci¨®n para elegir clase de personaje, armas, camuflaje, es contemplar a cientos -que ser¨¢n miles cuando el juego sea lanzado- de usuarios combatiendo en un mapeado de una extensi¨®n vast¨ªsima, en este caso jugando con compa?eros periodistas y los chicos del estudio de San Diego. Aqu¨ª no encontraremos acciones scriptadas ni guiadas por personajes NPC (controlados por la IA del juego), sino que vayamos a d¨®nde vayamos -tengamos una misi¨®n o no que cumplir-, llevaremos la acci¨®n y el combate con nosotros. Esto no va de capturar una bandera o sabotear una instalaci¨®n, no. Esto es una guerra en estado puro entre cientos y cientos de personajes simult¨¢neos. Pertenecemos a una de las tres facciones que pelean por el pedazo de tierra salpicado de enormes bases fortificadas -muy bien defendidas- que es el mapa donde estamos. Y, al igual que en f¨²tbol americano, cada n¨®dulo que conquistamos, cada yarda que ganamos, nos hace estar un paso m¨¢s cerca de la victoria absoluta.

Tres colores aparecen en el ¨²til mapa del campo (mejor dicho continente) de batalla que podemos desplegar, y que se llena de cuadr¨ªculas hexagonales una vez lo contemplamos desde su perspectiva m¨¢s alejada. Las rojas son las zonas que hemos conquistado. Y las otras dos que presentan el color caracter¨ªstico de cada facci¨®n es el terreno de nuestros enemigos. Pero no creais que la partida est¨¢ cerca de su fin una vez casi todos los hex¨¢gonos son rojos, para nada. Porque las bases capturadas son nuestras hasta que un bando enemigo viene y nos las quita, por lo que podemos estar en un encuentro que dure d¨ªas, o incluso semanas. Identificar las zonas clave, como plantas de energ¨ªa o dep¨®sitos de armas, y tomarlas en acciones de equipo junto a otros usuarios pueden dar la victoria a nuestro bando tras un encuentro de niveles ¨¦picos de varios d¨ªas. No se trata de llegar y conquistar el lugar, sino de conquistar y mantenerlo, para que todos los soldados de nuestro bando puedan ser recompensados con extras de bonus, tecnolog¨ªa, armas o veh¨ªculos, ya que un encuentro que se extienda durante tal cantidad de tiempo requiere de estrategias de combate a largo plazo e iniciativa en las t¨¢cticas y trabajo en grupo.

Tropas del Espacio
Otro de los elementos que lo alejan del multi de un FPS al uso y lo acercan a otros como el de Starhawk, es el detalle de que tanto los veh¨ªculos, ya sean terrestres o a¨¦reos, las armas m¨¢s potentes, el C4, o las mejoras de los personajes cuestan recursos, por lo que el trabajo en equipo y la gesti¨®n adecuada de los recursos de nuestra facci¨®n, junto a estrategias de planificaci¨®n y ejecuci¨®n en la conquista de zonas de inter¨¦s en el mapeado, constituyen los elementos que brindar¨¢n la victoria a nuestro bando. Al igual que en el sucesor espiritual de Warhawk, el recurso del 'H¨¦roe Solitario' puede ser divertido de jugar unos minutos, pero sin duda solamente nos servir¨¢ para garantizarnos un respawn a cada poco rato. Y de eso est¨¢ el mercado saturado. Cada clase de personaje tiene sus puntos fuertes, y eso es lo que hay que aprovechar. Podemos escoger un soldado de Asalto Ligero, y usar su carabina mientras volamos con el Jetpack; o un soldado de Asalto Pesado que usar su arma anti-veh¨ªculos para barrer del mapa a alguno de los diez tipos de coches y naves que manejaremos. M¨¦dico, Ingeniero, Infiltrator o Mechanized Assaulto Exo-Suit (un mecha en toda regla operado por un piloto humano) son el resto de clases entre las que podemos escoger y cambiar en pleno combate. Cada una contar¨¢ con un extens¨ªsimo ?rbol de Habilidades para personalizarla a nuestro estilo, o a los requisitos de la facci¨®n o la batalla en la que estemos envueltos.

Pero no ser¨¢n las ¨²nicas, ya que tanto las armas como los veh¨ªculos -cada bando tiene al menos dos propios- tambi¨¦n ser¨¢n personalizables y exigentes en su manejo, ya que el estudio quiere no solamente que cojamos una nave y nos dediquemos a bombardear sitios, sino que aprendamos a manejarla primero -damos fe, ya que la primera toma de contacto con las naves a¨¦reas termin¨® de forma accidentadamente r¨¢pida por querer ir a las zonas donde la lucha se concentraba m¨¢s y prestar soporte a¨¦reo-, tanto estas como los variados veh¨ªculos de tierra para uno o varios soldados tambi¨¦n -indudablemente m¨¢s sencillos, aunque alguno tenga truco. En cuanto al armamento, junto con los habituales cuchillos, carabinas, pistolas y rifles, podremos empu?ar tambi¨¦n algo m¨¢s contundente, como lanzacohetes con distintas mejoras, o proyectiles con c¨¢mara en la parte delantera que podemos guiar hasta el objetivo. En cuanto a control, el rat¨®n y teclado que pudimos usar se manejaba a todos los niveles como un FPS puro, con una respuesta r¨¢pida a nuestras acciones.

"Esto va para los nuevos: Todos peleamos. Nadie se rinde"
El Force Light Engine es el motor gr¨¢fico que alimenta a PlanetSide 2. Y de que forma: buen nivel de texturizado que en ocasiones luce de forma espectacular -teniendo en cuenta que esto es un MMO y adem¨¢s Free to Play-; una iluminaci¨®n muy conseguida -los bombardeos nocturnos a¨¦reos en un mapa de noche y los destellos de iluminaci¨®n en las zonas oscuras-, con un sol que nos ciega si lo miramos de frente (inmejorable ventaja t¨¢ctica atacar contra un bando enemigo con el sol brillando a nuestra espalda); y efectos gr¨¢ficos tan sutiles como la estela de las naves, adem¨¢s de la escala de los escenarios y la cantidad de personajes simult¨¢neos dan buena cuenta de que visualmente no estamos ante otro MMOFPS m¨¢s, sino uno que cuenta con un potente engine propio que permite ciclos de d¨ªa y noche, niebla y nubes volum¨¦tricas en las que escondernos y un motor de f¨ªsicas que nos obliga a estar atentos a la gravedad si apuntamos de lejos con personajes como el francotirador.?

Conscientes de la cada vez mayor importancia que los F2P est¨¢n adquiriendo, SOE est¨¢ trabajando en un t¨ªtulo de esos que puede ser, sino referente, s¨ª una propuesta muy recomendada por su mezcla de FPS aut¨¦ntico y puro y MMO realmente masivo y con enfrentamientos b¨¦licos en mapas gigantescos que pueden durar incluso semanas. Todo ello coronado con un motor gr¨¢fico de nuevo cu?o lleno de posibilidades, y una oferta jugable que se beneficia de no ser un mero mata-mata sin m¨¢s guiado por la IA y que nos lleva de la mano de una misi¨®n a otra, sino que nos sumerge en una guerra por la conquista que nos obliga a pensar con rapidez, a establecer t¨¢cticas en equipo junto a otros usuarios -aunque siempre para actuar de forma directa, pistola en mano o mediante naves o veh¨ªculos-, a gestionar los recursos por los que hemos derramado sangre virtual y que la facci¨®n entera pueda sacar beneficio de ellos. Entre los elementos ense?ados en la demo figuran una aplicaci¨®n gratuita para dispositivos iOS, Android y para webs que muestra no solo informaci¨®n de las armas y facciones, sino del control del territorio en tiempo real y chat de voz con los compa?eros de equipo sin tener que estar dentro de la partida en curso, ideal para ir hablando de las acciones a realizar. Un Free to Play con microtransacciones que entrar¨¢ en fase de beta "en las pr¨®ximas semanas", para la cual los interesados pueden inscribirse aqu¨ª para participar.