Un vistazo al videojuego: Enric ?lvarez de Mercury Steam

Baja del escenario, del mismo lugar donde Ram¨®n y Cajal instruy¨® a los m¨¦dicos del pasado en el Colegio de M¨¦dicos de Madrid, y una horda de periodistas le espera como buitres en busca de una pieza de carne informativa que llevarse a la libreta. Son m¨¢s de diez, c¨¢mara de v¨ªdeo incluido, pero a Enric ?lvarez no le importa. Por una vez se olvida de agendas, de slots de entrevistas y del temporizador que imponen los responsables de prensa y marketing. Alguna ventaja deb¨ªa tener acudir a un evento como maestro, como fuente de inspiraci¨®n, y no como baluarte medi¨¢tico del pr¨®ximo proyecto del estudio espa?ol Mercury Steam.

Infiltrados en el corrillo de profesionales del medio se encuentran varios jugadores espont¨¢neos que buscan abrirse hueco en la industria del videojuego y acuden para resolver dudas a ID?AME en Madrid. Enric no tiene el m¨ªnimo problema en atenderles y hasta en tomarse alguna fotograf¨ªa con los atrevidos m¨¢s fans. Cercano, siempre respetuoso y a la vez despreocupado, atiende uno a uno a quienes le abordan dentro y fuera de la sala, de camino al vest¨ªbulo, donde tiende la mano a m¨¢s curiosos. El set promocional del evento sirve como plat¨® improvisado a un medio para realizar la entrevista. Las palabras de Enric tambi¨¦n corresponde a la c¨¢mara.

Sabe que tras la avalancha le esperan al menos un par de entrevistas, alguna hasta improvisada, pero no le molesta. El bullicio del vest¨ªbulo y el af¨¢n de los todav¨ªa curiosos al ver de cerca la figura del rescatador espa?ol de Castlevania, por el ¨¦xito de cr¨ªtica de Lords of Shadow, nos hace descender una planta en busca del silencio. Un r¨²stico sill¨®n de madera sin nada que ver con el hardware de Playstation 3 y de Xbox 360 nos hace pensar en la pr¨®xima generaci¨®n, ahora en boca de todos y prevista para del a?o 2013. ?lvarez espera ¡°un salto importante¡± como suele suceder tradicionalmente con cada renovaci¨®n de ciclo.

Ampliar

¡°Al final [de la pasada generaci¨®n] tambi¨¦n se hablaba de que se acababa el mundo con PS3 y Xbox 360, y no hubo para tanto. Va a ocurrir lo mismo, vamos a experimentar cambios, vamos a poder hacer seg¨²n qu¨¦ cosas que ahora no podemos y tambi¨¦n ocurrir¨¢ que cosas que ahora podemos hacer no podremos hacerlas en la pr¨®xima generaci¨®n¡±, opina el fundador del estudio madrile?o. ?lvarez no parece excesivamente interesado en el l¨®gico crecimiento gr¨¢fico de las hipot¨¦ticas Playstation 4 (Orbis) y Xbox 720 (Durango), pues prefiere  avances en la ¡°inteligencia artificial y las f¨ªsicas¡±, adem¨¢s de creer que el juego online (cooperativo y competitivo) terminar¨¢ convirti¨¦ndose casi en un est¨¢ndar en consolas.

Con Playstation 4 prevista seg¨²n fuentes de la industria para 2013 y antes que Xbox 720, es turno de testar nuevos motores gr¨¢ficos. En Mercury Steam cuentan con holgada experiencia en realizar pruebas de fuego con su propia tecnolog¨ªa audiovisual. Como se suele decir, han aprendido a base de golpes, presentando a las editoras una demo t¨¦cnica jugable s¨®lida y pionera para la ¨¦poca (2004) que cost¨® millones de euros y no llev¨® a ning¨²n acuerdo. Al borde de la m¨¢s estrepitosa quiebra, Mercury Steam salv¨® el pellejo al atraer la atenci¨®n de Codemasters ¨Ctambi¨¦n se interes¨® Konami¨C con una demo t¨¦cnica m¨¢s sencilla, de menos de veinte segundos (la anterior duraba minutos), pero de gran impacto visual.

La ¡°ni?a¡± de Mercury Steam, inspirada por la pel¨ªcula El Exorcista y por el Berserker de Gears of War, por aquellas fechas capit¨¢n del barco gr¨¢fico de Epic Games, aterroriz¨® a la editora brit¨¢nica, encantada con el uso que la demostraci¨®n hac¨ªa del  hardware de las consolas. A un a?o vista de la next gen, la desarrolladora de ?lvarez cumple una d¨¦cada en un estado que nada tiene que ver con aquella desesperada situaci¨®n. Con sus nuevos proyectos sin anunciar oficialmente ¨Clos rumores apuntan a un nuevo Castlevania¨C, nos preguntamos si es el momento de ¡°otra ni?a¡±:  ¡°Por suerte no, porque lo de la ni?a fue un milagro y esas cosas pasan muy poco a menudo. Nos salv¨® la piel a todos, y hoy en d¨ªa, bueno, no dudo que el futuro nos depara sorpresas, algunas agradables, otras desagradables, y ya veremos qu¨¦ hacemos¡±.

Ampliar

Enric encara la pregunta con cierto humor, aunque se niega a olvidar los malos momentos pasados hasta la llegada de la ¡°ni?a milagro¡±. Antes de firmar con Codemasters como publisher para desarrollar Clive Barker¡¯s Jericho, Mercury Steam ide¨® Scrapland, que no cumpli¨® con las expectativas de ventas a pesar de las cr¨ªticas favorables y dej¨® al estudio con el primer pie metido en el fango. La industria del videojuego es inestable y nunca sabes cu¨¢ndo caer¨¢s de las primeras posiciones a las ¨²ltimas con un proyecto, m¨¢s cuando se trabaja con t¨ªtulos AAA de abultados presupuestos que dependen de un editor. ¡°A lo mejor tienes raz¨®n y tenemos que preparar otra ni?a. Habr¨¢ que ver c¨®mo se configura la nueva generaci¨®n¡±, tercia. 

Debajo de la gorra que siempre corona la cabeza de Enric no se esconde un gur¨² ¨Creconoce¨C, sino ¡°un entusiasta¡± porque nunca olvida su faceta de jugador. Los tiempos actuales de la industria del videojuego son convulsos por la introducci¨®n de nuevos soportes como las redes sociales y los m¨®viles, y hasta la desaparici¨®n de lo f¨ªsico con el crecimiento de las descargas y el juego en la nube. La reconversi¨®n profesional de muchos (caso David Perry, anta?o dise?ador, ahora ¡°distribuidor¡± con Gaikai) puede convertirse en la hecatombe de otros. Dicen los expertos que la debacle vivida por la cadena de tiendas GAME se debe a su tard¨ªa adaptaci¨®n a las descargas.  ?lvarez evita opinar sobre este affaire porque ¡°los entresijos de las empresas, los trapos limpios y los sucios solo los saben ellos y nosotros solo tenemos una impresi¨®n normalmente equivocada con lo que se dice en los medios y en la calle¡±. ¡°No me atrevo ni por asomo a opinar sobre lo que ha pasado con GAME, no tengo ni idea¡±, a?ade.

¡°Una cualidad importante de las personas y de las empresas especialmente en tiempos convulsos es mantener la calma¡±, anota sobre el estado actual de la industria. En Mercury Steam ¡°saben lo que quieren hacer y van a seguir haci¨¦ndolo¡±, aunque existan nuevos modelos de negocio como los juegos para m¨®viles que parezcan, a priori, m¨¢s accesibles que el desarrollo de superproducciones. ¡°Que nadie se lleve a enga?os, el negocio de IOS y otros similares son dur¨ªsimos, y es muy dif¨ªcil sobrevivir ah¨ª. De hecho yo estoy convencido de que es m¨¢s dif¨ªcil sobrevivir ah¨ª que hacer lo que hacemos nosotros¡±, explica ?lvarez.

Ampliar

La cara empresarial de Enric no le impide disfrutar de los juegos para m¨®viles ¡°como aficionado y entusiasta¡± ¨Cinsiste de nuevo¨C. ¡°Tengo un iPhone y unos juegos estupend¨ªsimos en ¨¦l que hace diez a?os era impensable que los jugara donde me diera la gana. Solo por esto ya merece la pena¡±, admite mientras sostiene el tel¨¦fono de Apple. La plantilla del estudio est¨¢ al borde de alcanzar el centenar de profesionales concentrados en la producci¨®n de proyectos para consolas en su enfoque m¨¢s tradicional, aunque con Castlevania Lords of Shadows se adentraron en el siempre ¨¢rido territorio de los contenidos descargables (DLC¡¯s).

Dos piezas de contenido, Reverie y Resurrection, desarrolladas durante ¡°unos buenos seis meses [¡­] completaban un juego cuyo final ya era la leche, y un juego de veinte horas¡±, por lo que en la opini¨®n de Enric, ¡°la gente no ten¨ªa motivos objetivos para quejarse de nuestros descargables aparte de que les gustaran m¨¢s o menos¡±. La producci¨®n de los contenidos adicionales se inici¨® tras la comercializaci¨®n del t¨ªtulo. Otros t¨ªtulos como Mass Effect 3 se han buscado otra suerte anunciando descargables para su primer d¨ªa de vida, decisi¨®n con la que ¡°te arriesgas a que la gente lo perciba como que te lo has guardado y les quieres cobrar aparte¡±, sentencia ?lvarez, aunque reconoce que la aceptaci¨®n de las cr¨ªticas a los DLC¡¯s de lanzamiento ¡°depende del tipo de descargable¡±.

El responsable de Mercury Steam tiene claro que ¡°est¨¢ feo¡± vender aparte elementos vinculados al final de un t¨ªtulo: ¡°Est¨¢ feo dejar el juego sin final, guardarlo para el descargable y adem¨¢s sacarlo con todo el morro al d¨ªa siguiente. Con eso te arriesgas a tener mala prensa¡±. Sin cruzar esta frontera, el negocio de los contenidos descargables es perfectamente v¨¢lido para ?lvarez: ¡°No nos volvamos locos, estamos hablando de videojuegos, estamos hablando de que cada uno si quiere lo compra o no lo compra, y de que cada uno hace lo que quiere con su dinero, con su tiempo, y las empresas de videojuegos tambi¨¦n. Ser¨¢ m¨¢s o menos criticable, pero su derecho a hacerlo lo tienen¡±.

Ampliar

Durante el ¨²ltimo semestre ha quedado patente que la industria del videojuego es exactamente eso, una industria donde se comercializan productos. La aureola cr¨ªtica que envuelve a los contenidos descargables se ha tornado todav¨ªa m¨¢s demon¨ªaca si cabe con la integraci¨®n de los Pases Online (Online Pass) de un solo uso para rentabilizar la segunda mano, uno de los canales m¨¢s rentables de las tiendas especializadas. Ahora, un t¨ªtulo que pasa a un segundo jugador puede llevar coartada parte de la diversi¨®n, que se desactivar¨¢ pasando de nuevo por caja para comprar otro Pase Online.

Esta pr¨¢ctica a priori ¨²nica de los t¨ªtulos con componente multijugador tambi¨¦n se ha expandido a singleplayers como Batman Arkham City, que permit¨ªa acceder a las misiones de Catwoman a un solo jugador. ?lvarez vuelve a apelar al desconocimiento ¨Ccomo con el asunto de GAME¨C al dar su opini¨®n sobre la segunda mano: ¡°No tengo una opini¨®n demasiado formada al respecto. Es innegable que mucha gente acude a la segunda mano para comprar juegos que un mes antes estaban a sesenta euros¡±. Quiz¨¢s ¡°parte del problema es que sesenta euros por un juego sea excesivo¡±, subraya.

El tiempo se acaba, la nueva generaci¨®n apremia y el futuro de Mercury Steam no tiene respuesta oficial. De la boca de Enric no sale ni el m¨¢s m¨ªnimo atisbo sobre el proyecto o proyectos que el estudio madrile?o tiene actualmente entre manos. Sea como fuere, todo parece apuntar que ser¨¢n las plataformas de sobremesa de la presente generaci¨®n las que sigan disfrutando de la magia de este grupo de profesionales. Ha pasado casi una hora desde que finaliz¨® la clase maestra de ?lvarez en ID?AME y se dispone a abandonar, por fin, el recinto. Una llamada de tel¨¦fono acelera su marcha, que se ve truncada por el en¨¦simo asalto de otro colega de profesi¨®n. Enric cuelga, sonr¨ªe y acepta charlar a pesar de las prisas.