Silent Hill: HD Collection

No han sido pocas las veces que el mercado de los videojuegos ha echado la vista atr¨¢s y recordado diversas entregas de una franquicia como Silent Hill. Konami conoce bien el calado que ha tenido la licencia hist¨®ricamente y ha sabido explotarla, con mayor o menor acierto seg¨²n la ocasi¨®n, pero siempre teniendo en cuenta qu¨¦ era aquello que los aficionados m¨¢s deseaban ver. Entre dichos deseos, se contaba la revisi¨®n de los primeros cap¨ªtulos de la franquicia, los de m¨¢s calidad y los m¨¢s impactantes, que se han grabado a fuego en la mente de todos los amantes de los videojuegos. Es por eso que, aprovechando la tendencia actual de recuperar juegos de la generaci¨®n pasada pero adaptados a la alta definici¨®n, Konami se puso manos a la obra con Silent Hill HD Collection, una producci¨®n que recuperaba Silent Hill 2 y Silent Hill 3 con los retoques necesarios para adaptarlos a la actual generaci¨®n. Y aunque esto es motivo de alegr¨ªa en general, es justo reconocer que, en general, el resultado final no es tan espectacular como esper¨¢bamos y como deber¨ªa haber sido.

De Silent Hill 2 y Silent Hill 3 hemos hablado en infinidad de ocasiones, tanto en sus respectivos an¨¢lisis como en diferentes art¨ªculos dedicados a la franquicia o al mundo del survival horror en general, as¨ª que no vamos a pararnos otra vez m¨¢s a comentar todas las virtudes de dos aut¨¦nticas joyas atemporales del ocio electr¨®nico. Los dos t¨ªtulos se mantienen inalterados a nivel jugable, con las mismas secuencias de v¨ªdeo, la misma banda sonora y, por supuesto, la misma ambientaci¨®n opresiva y sus argumentos impactantes y cargados de sorpresas (adem¨¢s, Silent Hill 2 es la versi¨®n especial que incluye la historia extra ¡°Born from a wish¡±). Por s¨ª mismos, siguen siendo aut¨¦nticas maravillas que nadie que todav¨ªa las desconozca deber¨ªa dejar pasar. De hecho, a pesar de los problemas que comentaremos a continuaci¨®n, es ponerse de nuevo en la piel de James y Heather y darnos cuenta de lo dif¨ªcil que se hace soltar el mando, deseando recordar momentos ¨¦picos y volver a revivir sus emotivas historias. Pero, como decimos, esta HD Collection no ha estado a la altura de las circunstancias y palidece ante otras como, por ejemplo, la de Metal Gear Solid, de la propia Konami.

En primer lugar, es preciso comentar la jugabilidad. Son juegos que tienen una d¨¦cada sobre sus hombros y el mercado ha cambiado notablemente desde entonces. Aunque sigue siendo una delicia jugar a ellos y no se observan grandes problemas de ning¨²n tipo en el sistema de control, es justo reconocer que ha envejecido un poco mal y que exige acostumbrarse a sus particularidades. Para los jugadores tradicionales que hayan disfrutado de las producciones en su momento, esto no ser¨¢ un gran problema y lo har¨¢n r¨¢pidamente y de manera instintiva; por el contrario, los nuevos jugadores, acostumbrados a los sistemas de control actuales, tendr¨¢n m¨¢s problemas para llegar a dominar una jugabilidad m¨¢s bien arcaica. No obstante, este ser¨ªa un problema menor que no afecta en absoluto a la calidad de dos t¨ªtulos que solo se pueden calificar de sobresalientes en todos sus aspectos originales, jugabilidad inclusive. Los verdaderos momentos de decepci¨®n llegan cuando vemos el trabajo de adaptaci¨®n realizado por Konami.

Lo primero que llama la atenci¨®n es el acabado visual. En gran medida, es comprensible que Konami no haya realizado grandes cambios (eso supondr¨ªa casi un remake completo m¨¢s elaborado) y se haya limitado solo a recurrir al filtro de alta definici¨®n y a peque?os retoques para que ambos juegos luzcan mejor en las pantallas actuales. Sin embargo, hemos visto trabajos similares que ofrecieron resultados m¨¢s satisfactorios. Por ejemplo, las secuencias de v¨ªdeo (sobre todo las de Silent Hill 2) se antojan demasiado borrosas y poco naturales, con una calidad demasiado baja. De igual modo, la niebla de Silent Hill 2 se ha reducido y ¡°naturalizado¡± para hacerla m¨¢s transparente en algunas secciones, desvelando las limitaciones t¨¦cnicas que dicha niebla tapaba; este defecto es m¨¢s notorio en la versi¨®n para PlayStation 3 (aunque ya habr¨¢ parche el propio d¨ªa del lanzamiento para corregirlo), y aunque en Xbox 360 tambi¨¦n se hace notar, no alcanza niveles tan sangrantes.

Tambi¨¦n hay unos incomprensibles problemas en la estabilidad de la tasa de frames, menores en Silent Hill 2 (posiblemente por tener escenarios m¨¢s peque?os) pero bastante notables en Silent Hill 3 (que hace menos uso de la niebla), por los que en escenario muy amplios con muchos enemigos el juego puede sufrir un poco. No es algo que afecte de forma extrema a la jugabilidad, tan solo se hace notar por momentos desluciendo el acabado general de las producciones (m¨¢s si recordamos las entregas originales, que es como se hacen m¨¢s notables estas variaciones de la f¨®rmula). De igual modo, algunos escenarios de Silent Hill 3 se antojan un poco borrosos en el movimiento; adem¨¢s de haberse potenciado el uso de la oscuridad en ambas entregas (algo hasta cierto punto comprensible, pero que se les ha ido un tanto de las manos, m¨¢s con el cambio de la niebla), de tal forma que en ocasiones se nos har¨¢ molesto avanzar ya que lo haremos demasiado a tientas, a¨²n a pesar de los notables cambios realizados a los efectos de luz de la linterna.

Otro punto controvertido es el del doblaje. Cuando se anunci¨® que se grabar¨ªan de nuevo todas las voces (en ingl¨¦s), los aficionados saltaron dado que no quer¨ªan cambios en las producciones originales. As¨ª pues, Silent Hill 2 cuenta con un selector de doblaje, pudiendo optar por el nuevo o el original, mientras que Silent Hill 3 cuenta solo con el nuevo. Es preciso destacar que el nuevo trabajo de doblaje, m¨¢s all¨¢ de la nostalgia del original, es mejor en casi todos los aspectos. Los personajes est¨¢n mejor interpretados y adaptados, la sincron¨ªa es mejor y la calidad general muy superior, por lo que este no es un aspecto a criticar y s¨ª a alabar, ya que se ha conseguido potenciar la inmersi¨®n en el universo gracias a di¨¢logos m¨¢s cuidados y cre¨ªbles. El ¨²nico personaje de las dos entregas que pierde claramente garra con la nueva voz es Heather, pero tampoco es algo que destroce el gran trabajo general, ya que solo el agravio comparativo juega en su contra. Por lo dem¨¢s, el apartado sonoro conserva las grandiosas composiciones de Akira Yamaoka y los excelentes efectos de sonido (aunque alguna que otra vez suenan a destiempo, sobre todo en Silent Hill 3).

No han sido pocas las veces que el mercado de los videojuegos ha echado la vista atr¨¢s y recordado diversas entregas de una franquicia como Silent Hill. Konami conoce bien el calado que ha tenido la licencia hist¨®ricamente y ha sabido explotarla, con mayor o menor acierto seg¨²n la ocasi¨®n, pero siempre teniendo en cuenta qu¨¦ era aquello que los aficionados m¨¢s deseaban ver. Entre dichos deseos, se contaba la revisi¨®n de los primeros cap¨ªtulos de la franquicia, los de m¨¢s calidad y los m¨¢s impactantes, que se han grabado a fuego en la mente de todos los amantes de los videojuegos. Es por eso que, aprovechando la tendencia actual de recuperar juegos de la generaci¨®n pasada pero adaptados a la alta definici¨®n, Konami se puso manos a la obra con Silent Hill HD Collection, una producci¨®n que recuperaba Silent Hill 2 y Silent Hill 3 con los retoques necesarios para adaptarlos a la actual generaci¨®n. Y aunque esto es motivo de alegr¨ªa en general, es justo reconocer que, en general, el resultado final no es tan espectacular como esper¨¢bamos y como deber¨ªa haber sido.

De Silent Hill 2 y Silent Hill 3 hemos hablado en infinidad de ocasiones, tanto en sus respectivos an¨¢lisis como en diferentes art¨ªculos dedicados a la franquicia o al mundo del survival horror en general, as¨ª que no vamos a pararnos otra vez m¨¢s a comentar todas las virtudes de dos aut¨¦nticas joyas atemporales del ocio electr¨®nico. Los dos t¨ªtulos se mantienen inalterados a nivel jugable, con las mismas secuencias de v¨ªdeo, la misma banda sonora y, por supuesto, la misma ambientaci¨®n opresiva y sus argumentos impactantes y cargados de sorpresas (adem¨¢s, Silent Hill 2 es la versi¨®n especial que incluye la historia extra ¡°Born from a wish¡±). Por s¨ª mismos, siguen siendo aut¨¦nticas maravillas que nadie que todav¨ªa las desconozca deber¨ªa dejar pasar. De hecho, a pesar de los problemas que comentaremos a continuaci¨®n, es ponerse de nuevo en la piel de James y Heather y darnos cuenta de lo dif¨ªcil que se hace soltar el mando, deseando recordar momentos ¨¦picos y volver a revivir sus emotivas historias. Pero, como decimos, esta HD Collection no ha estado a la altura de las circunstancias y palidece ante otras como, por ejemplo, la de Metal Gear Solid, de la propia Konami.

En primer lugar, es preciso comentar la jugabilidad. Son juegos que tienen una d¨¦cada sobre sus hombros y el mercado ha cambiado notablemente desde entonces. Aunque sigue siendo una delicia jugar a ellos y no se observan grandes problemas de ning¨²n tipo en el sistema de control, es justo reconocer que ha envejecido un poco mal y que exige acostumbrarse a sus particularidades. Para los jugadores tradicionales que hayan disfrutado de las producciones en su momento, esto no ser¨¢ un gran problema y lo har¨¢n r¨¢pidamente y de manera instintiva; por el contrario, los nuevos jugadores, acostumbrados a los sistemas de control actuales, tendr¨¢n m¨¢s problemas para llegar a dominar una jugabilidad m¨¢s bien arcaica. No obstante, este ser¨ªa un problema menor que no afecta en absoluto a la calidad de dos t¨ªtulos que solo se pueden calificar de sobresalientes en todos sus aspectos originales, jugabilidad inclusive. Los verdaderos momentos de decepci¨®n llegan cuando vemos el trabajo de adaptaci¨®n realizado por Konami.

Lo primero que llama la atenci¨®n es el acabado visual. En gran medida, es comprensible que Konami no haya realizado grandes cambios (eso supondr¨ªa casi un remake completo m¨¢s elaborado) y se haya limitado solo a recurrir al filtro de alta definici¨®n y a peque?os retoques para que ambos juegos luzcan mejor en las pantallas actuales. Sin embargo, hemos visto trabajos similares que ofrecieron resultados m¨¢s satisfactorios. Por ejemplo, las secuencias de v¨ªdeo (sobre todo las de Silent Hill 2) se antojan demasiado borrosas y poco naturales, con una calidad demasiado baja. De igual modo, la niebla de Silent Hill 2 se ha reducido y ¡°naturalizado¡± para hacerla m¨¢s transparente en algunas secciones, desvelando las limitaciones t¨¦cnicas que dicha niebla tapaba; este defecto es m¨¢s notorio en la versi¨®n para PlayStation 3 (aunque ya habr¨¢ parche el propio d¨ªa del lanzamiento para corregirlo), y aunque en Xbox 360 tambi¨¦n se hace notar, no alcanza niveles tan sangrantes.

Tambi¨¦n hay unos incomprensibles problemas en la estabilidad de la tasa de frames, menores en Silent Hill 2 (posiblemente por tener escenarios m¨¢s peque?os) pero bastante notables en Silent Hill 3 (que hace menos uso de la niebla), por los que en escenario muy amplios con muchos enemigos el juego puede sufrir un poco. No es algo que afecte de forma extrema a la jugabilidad, tan solo se hace notar por momentos desluciendo el acabado general de las producciones (m¨¢s si recordamos las entregas originales, que es como se hacen m¨¢s notables estas variaciones de la f¨®rmula). De igual modo, algunos escenarios de Silent Hill 3 se antojan un poco borrosos en el movimiento; adem¨¢s de haberse potenciado el uso de la oscuridad en ambas entregas (algo hasta cierto punto comprensible, pero que se les ha ido un tanto de las manos, m¨¢s con el cambio de la niebla), de tal forma que en ocasiones se nos har¨¢ molesto avanzar ya que lo haremos demasiado a tientas, a¨²n a pesar de los notables cambios realizados a los efectos de luz de la linterna.

Otro punto controvertido es el del doblaje. Cuando se anunci¨® que se grabar¨ªan de nuevo todas las voces (en ingl¨¦s), los aficionados saltaron dado que no quer¨ªan cambios en las producciones originales. As¨ª pues, Silent Hill 2 cuenta con un selector de doblaje, pudiendo optar por el nuevo o el original, mientras que Silent Hill 3 cuenta solo con el nuevo. Es preciso destacar que el nuevo trabajo de doblaje, m¨¢s all¨¢ de la nostalgia del original, es mejor en casi todos los aspectos. Los personajes est¨¢n mejor interpretados y adaptados, la sincron¨ªa es mejor y la calidad general muy superior, por lo que este no es un aspecto a criticar y s¨ª a alabar, ya que se ha conseguido potenciar la inmersi¨®n en el universo gracias a di¨¢logos m¨¢s cuidados y cre¨ªbles. El ¨²nico personaje de las dos entregas que pierde claramente garra con la nueva voz es Heather, pero tampoco es algo que destroce el gran trabajo general, ya que solo el agravio comparativo juega en su contra. Por lo dem¨¢s, el apartado sonoro conserva las grandiosas composiciones de Akira Yamaoka y los excelentes efectos de sonido (aunque alguna que otra vez suenan a destiempo, sobre todo en Silent Hill 3).