La fuga m¨¢s original

PlayStation VITA ha irrumpido en el mercado acompa?ada de uno de los cat¨¢logos m¨¢s generosos que se recuerdan en el estreno de una nueva consola. Se podr¨ªa decir que, a grandes rasgos, hay al menos un t¨ªtulo disponible ya desde el primer d¨ªa de cada g¨¦nero, y por lo tanto, hay un juego para cada tipo de jugador interesado en la nueva port¨¢til de Sony. Sin embargo, tambi¨¦n es cierto que la mayor¨ªa de ellos son meras adaptaciones de propuestas jugables de sobremesa adaptadas a las bondades y potencial t¨¦cnico de la m¨¢quina, que es lo que comercialmente llama m¨¢s la atenci¨®n cuando se lanza de nuevo hardware. Sin embargo, dentro de ese abanico de grandes juegos pr¨¢cticamente intachables en el ¨¢mbito t¨¦cnico, tambi¨¦n hay una rareza que s¨ª ha pretendido, desde el primer d¨ªa, ense?arnos de qu¨¦ son capaces las posibilidades de control de VITA. Estamos hablando de Escape Plan, el puzzle de Fun Bits que est¨¢ disponible en la Store a un precio muy competitivo.

Como recordar¨¦is, Escape Plan fue uno de los t¨ªtulos que m¨¢s llam¨® la atenci¨®n cuando Sony present¨® la nueva port¨¢til en el E3 del a?o pasado. En una presentaci¨®n cargada de franquicias conocidas corriendo como si nada en el nuevo hardware, Escape Plan sorprendi¨® gracias a su transgresor y atractivo dise?o art¨ªstico en blanco y negro, al m¨¢s puro estilo Limbo. Supimos en aqu¨¦l entonces que se trataba de un juego de puzzles, y que aprovechar¨ªa el potencial t¨¢ctil de la consola. Ahora, y tras superar todos sus retos, podemos decir que lo de convertirse en uno de los t¨ªtulos m¨¢s atractivos visualmente del cat¨¢logo lo ha conseguido con creces, pero que no ha sido capaz de sacarle todo el partido a las variantes de control que ofrece la consola.

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Escape Plan est¨¢ estructurado en peque?os retos en forma de niveles (78 en total) en los que ayudamos a los peculiares Lil y Laarg a escapar de un extra?a f¨¢brica donde los tiene aprisionados el malvado Bakuki. A¨²n con una base argumental que no va m¨¢s all¨¢ de eso, Escape Plan consigue, gracias a su direcci¨®n art¨ªstica y a una banda sonora que le viene como anillo al dedo, un juego inmersivo, protagonizado por unos personajes que, pese a no decir nada, desprenden carisma y personalidad en cada una de sus acciones. Como dec¨ªamos, visualmente es uno de los juegos m¨¢s bellos del cat¨¢logo de VITA. Personajes y elementos 3D en un desarrollo 2D, todo te?ido bajo una contrastada escala de grises y haciendo gala de una fluidez y nitidez sorprendentes en un dispositivo port¨¢til.

La mayor¨ªa de retos son ingeniosos y sorprendentes, y en todos ellos se nos obliga a hacer uso de las habilidades de Lil y Laarg, a interactuar con los elementos del escenario, y a evitar a los enemigos que pueblan la morada de Bakuki. Sin embargo, el mayor h¨¢ndicap de Escape Plan es precisamente su principal reclamo: el control -exclusivamente- t¨¢ctil. No es que no funcione en su totalidad, pero no se adapta como deber¨ªa a la propuesta jugable. B¨¢sicamente, desplazamos a los protagonistas indic¨¢ndoles la direcci¨®n desde la pantalla delantera (pese a que tambi¨¦n haya habilidades en las que se nos requiera usar la pantalla trasera, como el sprint de Lil), e interaccionamos con el entorno usando ambas.

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Ya sea por el tama?o de la consola o por la necesidad de estar pendientes de m¨¢s de una cosa a la vez, Escape Plan se hace inc¨®modo de jugar. La respuesta a las acciones que vamos ejecutandos no es siempre inmediata, y algunos de los puzzles acaban resultando m¨¢s complicados en la ejecuci¨®n que en el planteamiento. Si a eso le a?adimos que uno de los principales retos de Escape Plan es superar los niveles ejecutando pocas acciones y en el menor tiempo posible, en momentos puede llegar a convertirse en una experiencia frustrante. Entendemos que con Escape Plan se quer¨ªa mostrar el potencial de las pantallas t¨¢ctiles, pero muchos de sus problemas se podr¨ªan haber resuelto haciendo uso de un control h¨ªbrido con los sticks anal¨®gicos y los botones para determinadas acciones. A¨²n as¨ª, y dejando a un lado esos problemas, Escape Plan es un torrente de inspiraci¨®n en el g¨¦nero de los puzzles.