Ninja Gaiden III, Impresiones
Ryu Hayabusa vuelve con la tercera entrega de su renovada saga Ninja Gaiden. Despu¨¦s de una primera parte para el recuerdo y una segunda entrega excelente, el ninja de Tecmo quiere su trono en el g¨¦nero del hack and slash.
Ninja Gaiden ha sido uno de los nombres m¨¢s relevantes de las dos ¨²ltimas generaciones de consolas. Una saga cl¨¢sica de Tecmo y Team Ninja que tuvo su primer momento de gloria a finales de los a?os ochenta y principios de los noventa. Se trataba de un beat'em up complicad¨ªsimo, un reto para los jugadores de principio a fin. La franquicia qued¨® en el olvido hasta que el estudio de desarrollo japon¨¦s, con Itagaki a la cabeza, lo recuper¨® para realizar Ninja Gaiden en Xbox. Se convirti¨® en el hack and slash definitivo, superando a la competencia por posibilidades jugables y por exigencia. Su revisi¨®n Black iba un paso m¨¢s adelante. Adem¨¢s, el portento t¨¦cnico que supon¨ªa el juego marcaba distancias en la consola de Microsoft respecto a sus competidoras. Sin duda. La segunda entrega de Xbox 360 manten¨ªa el camino marcado en Xbox: jugabilidad como si un juego de lucha se tratara y alta dificultad, reto como anta?o. Cuatro a?os m¨¢s tarde llega la tercera parte. Probamos el estado actual de un juego que, eso s¨ª, ya no tiene Itagaki detr¨¢s de ¨¦l.Esta nueva entrega nos ha prometido muchas novedades interesantes a nivel de modalidades de juego. Se sabe por la informaci¨®n oficial que circula de la tercera entrega de las aventuras de Ryu Hayabusa que habr¨¢ modo cooperativo y diversas modalidades online, dos elementos que no estaban en la saga principal aparecida en consolas de Microsoft, pero que ya intentaron asomar la cabeza en la versi¨®n Sigma 2, donde tenemos cooperativo. Precisamente, y seguramente no es casualidad, proyectos (los de Sigma) en los que Itagaki no estaba involucrado. En esta ocasi¨®n, eso s¨ª, no hemos podido ver c¨®mo funciona o qu¨¦ ofrecen estas novedades. Simplemente hemos empu?ado la espada drag¨®n y hemos empezado la trama principal de esta nueva iteraci¨®n. Y esto es lo que hemos podido ver de primera mano. Londres, un futuro muy cercano. En la localidad inglesa los terroristas se han apoderado de la ciudad, han asesinado a todo tipo de ciudadanos y tienen como reh¨¦n el primer ministro brit¨¢nico. Su ¨²nica demanda es que vaya hacia all¨ª Ryu Hayabusa. Por eso, cuando nuestro ninja les pregunta a dos operativos del gobierno 'qu¨¦ quer¨¦is de m¨ª', su respuesta es clara: 'No queremos nada, te quieren a ti'. Dicho esto, manos a la obra. Empezamos con Hayabusa en lo alto del Big Ben, preparado para saltar a las calles londinenses y enfrentarse a este grupo terrotrista. Los civiles han sido evacuados, por lo que lo ¨²nico que debemos hacer es acabar con todo lo que se mueva delante de nosotros. Nuestro principal objetivo ser¨¢ el Regente de la m¨¢scara, un misterioso terrorista que va vestido con una t¨²nica roja y una m¨¢scara que le tapa la cara.Durante nuestro avance veremos algunos indicios de lo que el Team Ninja ha estado pregonando sobre esta nueva entrega: conocer m¨¢s a Ryu Hayabusa y las consecuencias de sus actos. En las anteriores entregas -manteniendo la esencia de la trilog¨ªa de finales de los ochenta- ¨¦ramos una m¨¢quina de matar en la que, seguramente por exigencias de los tiempos actuales, hab¨ªa secuencias cinem¨¢ticas de por medio y tramas argumentales de poco peso. Meras excusas para empu?ar nuestra arma y superar los desaf¨ªos que se iban sucediendo ante Hayabusa. Ahora no. O esa es la intenci¨®n. M¨¢s all¨¢ de nuestra batalla con los terroristas y este enmascarado, veremos enemigos que nos piden clemencia y que no acabemos con ellos. En algunos casos, como al poco de comenzar, le quitaremos la vida a uno de los que nos suplica seguir viviendo. En otros, al acabar en una zona, acabar¨¢n malheridos diciendo que no les sesguemos la vida. Podremos perdonarlos o no. M¨¢s adelante, cuando nos enfrentemos al enmascarado, fundir¨¢ nuestra espada y nuestro brazo derecho empezar¨¢ a mutar de manera extra?a. '?Qu¨¦ se siente al sentir el sufrimiento de todos a los que has matado?'. El desarrollo de esta puesta en escena, a lo largo del producto final.Ya a ras de suelo, vemos una mec¨¢nica de juego que nos resultar¨¢ familiar, aunque es cierto que en los dos primeros niveles que hemos podido jugar no hemos podido profundizar a nivel de combos, algo marca de la casa de Ninja Gaiden y que ofrec¨ªa tantas posibilidades con cada una de las armas que empu?¨¢bamos (con listas de movimientos interminables y combinaciones abiertas seg¨²n cada momento). Tenemos el ataque r¨¢pido y el ataque fuerte, este adem¨¢s tiene la posibilidad de poderse cargar para embestir de manera m¨¢s devastadora. Con otro bot¨®n saltamos y con el ¨²ltimo de los botones frontales lanzamos nuestros proyectiles. Uno de los gatillos sirve para bloquear, otro para poder ir centrando la c¨¢mara cuando esta sea libre, que no es siempre. Combinando los dos botones de ataque podremos hacer juggles, machacar desde el cielo, agarres con impactos finales en la pared y movernos r¨¢pidamente entre uno y otro objetivo gracias a nuestras evasiones (direcci¨®n con el bot¨®n de bloqueo).Hasta aqu¨ª, nada nuevo bajo el sol. Cuando cargamos nuestros ataques con Y, una secuencia espectacular se generar¨¢ delante de nosotros, atacando sin descanso a diversos enemigos con los que acabaremos r¨¢pidamente. Esto lo podremos realizar tambi¨¦n m¨¢s adelante cuando despu¨¦s del primer enfrentamiento con el jefe nuestro brazo empiece a brillar en rojo cuando encadenemos diversos golpes seguidos. Adem¨¢s, combinando dos botones tendremos el ataque m¨¢gico del Ninpo, que s¨®lo se puede usar cuando tenemos la barra de Ki llena. Cargaremos una secuencia muy vistosa que arrasar¨¢ a nuestro alrededor con los enemigos con la presencia de un drag¨®n rojo limpiando la zona. Estas son nuestras herramientas de ataque m¨¢s b¨¢sicas, a las que sumaremos en el segundo nivel un arco con flechas. Pulsando un bot¨®n superior apuntaremos y con el gatillo disparamos. Al tener una fijaci¨®n autom¨¢tica, es bastante sencillo de dar con los enemigos que tenemos a lo lejos para asestarles un flechazo.Hayabusa ha mejorado tambi¨¦n en habilidades Ninja que vayan m¨¢s all¨¢ del combate cuerpo a cuerpo con los terroristas. Hay movimientos que se mantienen inalterables y presentes en esta tercera entrega, como poder saltar entre dos paredes hasta llegar a lo m¨¢s alto, agarrarnos a barrotes para usarlos de apoyo hasta llegar a otros lugares, caminar por las paredes a gran velocidad? movimientos que ya vimos en su momento. En esta ocasi¨®n, cuando estemos en edificios muy elevados podremos descender planeando a zonas m¨¢s bajas, aprovechando esta ventaja para empezar atacando a nuestros enemigos. Tambi¨¦n tenemos la posibilidad de escalar seg¨²n qu¨¦ paredes con los Kunai. Alternando los gatillos iremos subiendo, algo que nos permitir¨¢ tener algunos enfrentamientos verticales. Enemigos que intentan dispararnos y que debemos esquivar y contrarrestar lanzando proyectiles antes de que nos acierten.A pesar de tener todos estos elementos, Ninja Gaiden 3 sigue siendo un hack and slash puro y duro, por lo que nuestra libertad de movimientos por los escenarios est¨¢ m¨¢s que limitada a peque?os momentos que sirven para hacer la transici¨®n entre batallas y seguramente buscar algunos elementos complementarios por el escenario. Rara vez nos vamos a perder, ya que los caminos son bastante claros, aunque para ayudar tenemos una visi¨®n Ninja que nos permite detectar el camino correcto cuando no sepamos por donde movernos. Otro elemento que gana peso en esta nueva entrega son los Quick Time Events, algo que ha ido ganando peso en los juegos del g¨¦nero de esta generaci¨®n y que tambi¨¦n tendr¨¢ sus momentos en Ninja Gaiden 3.Aqu¨ª veremos c¨®mo mientras hacemos algunas combinaciones de ataque nos pedir¨¢ que pulsemos un bot¨®n concreto para acabar de asestar el golpe definitivo. No frenan la acci¨®n ni el ritmo de combate cuando aparecen, aunque tambi¨¦n hay otros momentos QTE. Por ejemplo, con seg¨²n qu¨¦ enemigos -jefes finales tambi¨¦n- a veces habr¨¢ choque de armas y tendremos que pulsar repetidamente un bot¨®n para poder llevarnos el duelo en ese momento. A nivel contextual hay otros QTE que est¨¢n integrados en las cinem¨¢ticas. Explosiones que nos lanzan un cami¨®n encima y tenemos que esquivarlo pulsando lo que nos pide en pantalla o movimientos concretos en el aire para esquivar ataques que recibimos mientras planeamos. No hay un gran abuso, al menos en estos compases que hemos probado, de esta mec¨¢nica de juego, y no son para nada exigentes como lo que pod¨ªamos ver en Ninja Blade, que pod¨ªamos fallar cada dos por tres. La sensaci¨®n tras esta mini sesi¨®n, en t¨¦rminos generales, es que es m¨¢s accesible. La pregunta es si llegar¨¢ a los niveles de profundidad de Black y Ninja Gaiden II, algo que queda de momento en el limbo.Otro de los elementos que est¨¢n en el punto de mira de esta tercera parte es precisamente la dificultad del juego. De todos es sabido que las dos primeras partes de estas iteraciones tridimensionales de Ryu ten¨ªan como objetivo recuperar la frustraci¨®n, el reto y el desaf¨ªo de los juegos de hace m¨¢s de dos d¨¦cadas. La dificultad era uno de los elementos clave de Itagaki, y es algo que se tem¨ªa se haya rebajado ya sin el desarrollador japon¨¦s (como pas¨® con Sigma 2). La tercera entrega en ?normal' no es demasiado exigente. Nuestros primeros compases en Londres se realizan ante enemigos armados con cohetes y metralletas, adem¨¢s de otros con armas cuerpo a cuerpo. La primera vez que nos encontr¨¢bamos con este arsenal en Ninja Gaiden II pod¨ªamos sufrir de lo lindo para avanzar sin ser alcanzados por los cohetes de turnos. Desesperaci¨®n. Aqu¨ª, lo m¨¢s seguro es que no nos maten ni una vez a pesar de estar movi¨¦ndonos entre balazos constantes, m¨ªsiles y otros terroristas con armas blancas. Un ejemplo es la acci¨®n de bloqueo, tan necesaria en entregas anteriores y que en esta dificultad la usaremos en estos primeros compases ante los jefes finales. En dificultad dif¨ªcil, tambi¨¦n disponible en la demostraci¨®n, las cosas cambian y se hacen m¨¢s exigentes, aunque perfectamente asumibles.Cada vez que nos enfrentamos a una horda de enemigos antes de seguir avanzando, vamos cargando la barra de Ki para poder hacer uso -de momento- del Ninpo. Cuando acabamos esa zona en concreto, nuestra barra de vitalidad se recupera entera nos hayan quitado lo que nos hayan quitado, mientras que la barra de Ki se queda totalmente vac¨ªa. Esto ayuda tambi¨¦n a hacer m¨¢s llevadero lo de enfrentarse a enemigos constantemente, ya que siempre tendremos sesiones con la vida en un buen estado. Los primeros terroristas son bastante sencillos de eliminar, aunque poco a poco van apareciendo enemigos m¨¢s duros de pelar. Nos bloquear¨¢n con mayor facilidad nuestros ataques, deberemos sortearlos porque llevan un escudo antidisturbios delante y dem¨¢s mec¨¢nicas que debemos ir aprendiendo para acabar con ellos.Esto mismo, aprender, es lo que tendremos que hacer contra los jefes finales que nos hemos encontrado hasta el momento. Saber qu¨¦ movimientos tenemos que bloquear para romper su guardia y poder contraatacar y cu¨¢les debemos esquivar si no queremos que nos cojan y que nos quiten una cantidad de vida m¨¢s que importante. El uso de los ataques r¨¢pidos o los fuertes tambi¨¦n es importante para cada momento. Han sido, las dos sesiones de jefes finales, lo m¨¢s complicado de este Ninja Gaiden 3, que ofrece algunas situaciones variadas como enemigos en motos que nos disparan movi¨¦ndose a toda velocidad. Usando el arco y flechas que nos entregan al inicio del segundo nivel (sobre todo por el autoapuntado) durar¨¢n poco y menos.Otro de los elementos que se ten¨ªan ganas de ver en esta nueva entrega era el tema de la sangre. La hay y no se esconde en ning¨²n momento. Nuestros primeros cortes con la katana servir¨¢n para mancharnos todos los brazos de sangre, y veremos como atravesamos cuerpos y apretamos fuerte con la espada. No hay censura en este tipo, aunque no hay ni rastro de obliteraciones. Para algunos, un a?adido sin m¨¢s de toque gore prescindible. La realidad es que es otra cosa muy distinta. Las obliteraciones en Ninja Gaiden II forman parte de la jugabilidad del t¨ªtulo. Dejar sin piernas a un ninja ara?a y que en el mar de sangre y cuerpos aparezca uno de estos, nos pille por la pierna y se inmole es un ejemplo de afectar a la jugabilidad. Aqu¨ª daremos cortes letales a todos niveles, pero por lo que hemos comprobado ni saltan extremidades ni cabezas ni nada, aunque haya violencia visual por la sangre que abunda por la pantalla y la dureza de algunas situaciones (como cuando uno nos pide clemencia y acabamos con ¨¦l).T¨¦cnicamente el juego luce a un buen nivel por lo visto hasta ahora, aunque como viene siendo habitual en el g¨¦nero -God of War 3 aparte, y teniendo en cuenta las diferencias entre el gran producto de Sony Santa M¨®nica con los hack and slash de corte m¨¢s cl¨¢sico- no es puntero ni tampoco consigue ese nivel excelso que se ve¨ªa en Black respecto a la competencia. Se han mejorado tanto elementos de part¨ªculas como explosiones, movimientos, sangre, etc. Como los escenarios en s¨ª mismo (Londres es reconocible por su misma Noria y el citado Big Ben) y la fluidez de nuestros ataques. Ryu sigue siendo veloz y ¨¢gil. La novedad viene en los constantes cambios de c¨¢mara para dar un toque m¨¢s cinematogr¨¢fico a seg¨²n que movimientos finales o momentos especiales en batalla. Podemos perder un poco el norte en algunas secuencias con tanto enemigo, ataque y encima movimiento de c¨¢mara, todo eso s¨ª en pos de un mayor toque cinematogr¨¢fico.23 de marzo es la fecha elegida por Team Ninja para publicar este hack and slash tanto en Xbox 360 como en Playstation 3. La consola de Sony recibir¨¢ por primera vez una entrega de la serie al mismo tiempo que en la de Microsoft, despu¨¦s que el adi¨® de Itagaki facilite el trabajo del Team Niinja con esta plataforma, que eso s¨ª ya tiene las dos primeras partes con ligeros cambios gracias a las versiones Sigma 1 y 2. Con voces en ingl¨¦s y textos en castellano y un precio recomendado de 59'90 euros, Ninja Gaiden 3 llega para reclamar el trono de mejor hack and slash. Ofrece muchos cambios, algunos estructurales, pero tanto el nombre de la franquicia como el prestigio cosechado con las dos primeras entregas hacen que sea muy esperado y para los esc¨¦pticos ofrezca, como m¨ªnimo, el beneficio de la duda hasta que se publique de manera definitiva. Es Ryu Hayabusa, y ¨¦l no acostumbra a fallar.