
Call of Duty: Modern Warfare 3
- PlataformaWii8
- G谷neroAcci車n
- DesarrolladorInfinity Ward
- Lanzamiento08/11/2011
- EditorActivision
El fin del conflicto
Se termina -al menos de momento- la trama que ha urdido Activision e Infinity Ward para ver nacer a un nuevo gigante de la industria. Modern Warfare 3 ha sido el fen車meno medi芍tico que de 谷l se esperaba, aunque esta vez no s車lo ha probado suerte -de entrada- en los canales m芍s favorecidos. Treyarch ha trabajado a destajo para ofrecer al p迆blico de Wii una adaptaci車n a la altura de las circunstancias, al igual que hizo en a?os pasados con Black Ops y Modern Warfare. Aparece la tercera entrega sin haber probado la segunda, en un ejemplo de lo parad車jico que resulta el mundo Call of Duty en la sobremesa de Nintendo.
Nota: Las im芍genes empleadas se corresponden con las versi車n HD de Modern Warfare 3.
Se necesita tiempo para entender la estrategias comerciales de las compa?赤as m芍s representativas de la industria. Sucede un poco lo mismo que con el cine, las series de televisi車n o con la literatura: a veces el sentido com迆n no impera en la toma de decisiones de los mandatarios sobre los que recae la responsabilidad de 谷ste o aquel comercio. Suponemos que la decisi車n de Activision de dejar de lado la versi車n Wii del primer Modern Warfare fue tomada siguiendo alguna clase de absurdo patr車n sobre la capacidad t谷cnica de la consola. No hace falta hacer memoria -porque sucedi車 pr芍cticamente ayer, como quien dice- para recordar la exaltaci車n inicial al recorrer un l迆gubre submarino que se part赤a por la mitad ante la incredulidad de propios y extra?os. Habr芍 quien diga que no fue la primera vez, pero puede que muchos descubriesen s車lo entonces la capacidad de un videojuego para combinar un mundo ficticio con la realidad que transcurre por la mente de cada jugador.
Dejando de lado aserciones in迆tiles -mucho nos tememos que las cr赤ticas y las quejas ahora caen inevitablemente en saco roto-, lo cierto es que siempre es una buena noticia dar cuenta del desarrollo de un Call of Duty para Wii. Muy al contrario de lo que una gran parte de la comunidad de usuarios puede pensar, Treyarch ha llevado con galones el peso del desarrollo de la franquicia para la sobremesa de Nintendo, primero con World at War, despu谷s con una versi車n mejorada de Modern Warfare -Reflex-, para luego dar el salto definitivo con Black Ops, hoy visto como uno de los mejores shooters que se pueden encontrar en el cat芍logo de esta consola.
El problema es siempre el mismo: las comparaciones son odiosas. Por todos es sabido que la capacidad t谷cnica de Wii no iguala a la de sus competidoras, as赤 que sobra decir que un port de estas caracter赤sticas no pretende competir en la misma liga. La filosof赤a de Call of Duty en Wii parte de la premisa de emplear un sistema de control que hasta hace poco tiempo era exclusivo de esta consola, y que todav赤a en la actualidad -y en esta misma edici車n- sigue ofreciendo resultados que de momento no se pueden comparar con los vistos en Xbox 360 o PlayStation 3. El aut谷ntico protagonista de este port -y sucede aqu赤 al igual que en el resto de adaptaciones analizadas en el pasado- es el binomio wiimote/nunchuk, dejando atr芍s la posibilidad de jugar con el mando cl芍sico o de hacer uso de modalidades que est芍n ?capadas' con respecto a las versiones HD.

De vuelta a la guerra (3)
Como hemos visto en otras adaptaciones de la franquicia, Treyarch se limita a ?convertir' la parafernalia del t赤tulo original a la capacidad t谷cnica de Wii, por lo que no hay cambios en lo que respecta a la historia, ni cortes significativos que merezcan ser destacados. Desde principio a fin de la aventura, todas las situaciones de la versi車n en HD hacen aqu赤 acto de presencia, poniendo de relieve dos aspectos: de una mano, la utilizaci車n del mismo motor gr芍fico que se emple車 en la edici車n de Black Ops; de la otra, un cambio notable en el sistema de control, que aqu赤 permite hacer uso de distintas configuraciones. The Conduit parece haber establecido el rumbo a seguir en este 迆ltimo sentido, otorgando al jugador la capacidad de elegir qu谷 bot車n prefiere utilizar para llevar a cabo cada una de las acciones que se realizan en el campo de batalla.
Esto se traduce en un protagonismo absoluto del wiimote y del nunchuk, la mejor configuraci車n de todas las posibles, incluyendo el notorio mando cl芍sico pro. La opci車n de emplear el pad tradicional fue incluida en Black Ops con buenos resultados, aunque el tiempo y la experiencia han demostrado -como bien han reclamado los propios usuarios- que el rendimiento del sensor de movimiento es superior al de cualquier otro esquema que podamos emplear durante la partida. Especialmente a la hora de afrontar el Online con otros jugadores humanos, donde la rapidez de acci車n (sobre todo en la precisi車n del disparo) prima sobre la capacidad para moverse c車modamente por los escenarios. Ya se coment車 en su d赤a que Treyarch hab赤a logrado el imprescindible balance a nivel jugable gracias a la optimizaci車n del sistema de control, por lo que no es de extra?ar que en esta edici車n apenas haya cambios significativos en este aspecto.
El inter谷s que suscita esta versi車n, m芍s all芍 de la configuraci車n de control, est芍 relacionado con el apartado t谷cnico, posiblemente el m芍s discutido hasta el momento. Dec赤amos en la p芍gina anterior que Treyarch emplea el motor gr芍fico que tan buenos resultados ofreci車 en Black Ops, aunque al parecer las exigencias gr芍ficas no son ahora las mismas que las de entonces. Al menos eso parece atestiguar la opacidad omnipresente en la mayor parte de escenarios, con dificultades para apreciar los objetos que se encuentran a cierta distancia, sin posibilidad de cambio en el contraste gr芍fico o en el brillo. Da la sensaci車n de que Treyarch ha oscurecido la pantalla para esconder la falta de resoluci車n de algunos escenarios en contraste con otros que lucen un aspecto sobrecogedor -Nueva York, por ejemplo-.

No sabr赤amos decir si se trata de una insuficiencia en el hardware de la consola o de una simple argucia de Treyarch, pero el oscurecimiento de la pantalla no evita la presencia de ralentizaciones en momentos puntuales (el primer escenario es un buen ejemplo de ello), pese a que la tasa de frames por segundos se mantiene estable en 30. No alcanza las cotas de fluidez de otros shooters de la consola (como tampoco la precisi車n a nivel de control), pero curiosamente s赤 es perfectamente capaz de reproducir las escenas de v赤deo -aquellas que narran los momentos m芍s importantes del gui車n- sin desperfecto alguno.
En realidad, esta explicaci車n se acoge a la empleada en el an芍lisis de Black Ops, dado que las taras t谷cnicas de este t赤tulo son exactamente las mismas que las de su antecesor. A nivel sonoro mantiene un nivel de excelencia incontestable, pero por momento deja entrever problemas inexplicables, como cierta acumulaci車n de clipping y popping que de cuando en cuando nos permite contemplar libremente en qu谷 posici車n se esconden nuestros enemigos? mientras est芍n al otro lado de la pared. Este ejemplo viene a subrayar lo explicado anteriormente con respecto a la profundidad que muestran los escenarios y a los contrastes en algunos momentos de acci車n, como si de una monta?a rusa se tratase.

Contenido
El otro punto crucial para entender la validez de Modern Warfare 3 Wii como una adaptaci車n notable es la selecci車n de contenido que Treyarch ha incluido en esta edici車n. Hay dos frentes: en Online y las misiones especiales o Spec Ops que se incluyen en el original. Respecto al primero, se toman los modos del resto de ediciones de sobremesa y se extrapolan a esta, a?adiendo logros, posibilidad para subir de nivel y el contenido b芍sico del modo DeathMatch, aunque se restringe el n迆mero de jugadores a un m芍ximo de 10 (5vs5). En el Online no hay ni rastro de la conectividad con CoD Elite (que mantiene un registro de nuestros datos y estad赤sticas), pero en contraposici車n s赤 que se ofrece la posibilidad de emplear? el Headbanger Headset, sin compatibilidad con el denigrado Wii Speak.
Modern Warfare 3 tiene su propia personalidad en el panorama Online de la consola. Es distinto al visto en PC, X360 o PS3. Sobra decir que la reducci車n del n迆mero de jugadores por partida cambia las reglas del juego, pero esto conlleva a un acercamiento m芍s s車lido al estilo corre-y-dispara, sin necesidad de preocuparse sobremanera por el arsenal. Se dir赤a que aqu赤 es el jugador el que determina el 谷xito o fracaso de las partidas, pero por desgracia hay un elemento que emborrona el buen hacer de Treyarch en este campo: el lag. Sucede m芍s o menos lo mismo que en la edici車n del a?o pasado (algo que se puede comprobar echando un vistazo en los foros oficiales), dado que el lag se convierte en un contrincante m芍s al que es menester vencer sea como sea (cambiando la distancia de los disparos, teniendo en cuenta el lag como se hac赤a anta?o con paup谷rrimas conexiones de Internet, etc.).
Por suerte, Treyarch ha tratado de apaciguar a la comunidad de aficionados aclarando que existe la posibilidad de parchear el juego (como ya se hizo con Black Ops) para limar los filos que quedan en el Online. Lo que no parece que pueda ser solventado es la necesidad de contar con un grupo de amigos en nuestra lista de Nintendo Friends, v赤a c車digo, la 迆nica forma viable de realizar partidas r芍pidas. Poco sentido tiene volver a criticar un elemento que se ha convertido desde hace tiempo en uno de los males end谷micos de la consola, lo que unido a la falta de gana de ciertas desarrolladoras por profundizar en este aspecto, ha llevado a Wii a ser una consola pensada para el disfrute multijugador local, pero no Online.

Esto nos lleva directamente a centrar la atenci車n en el modo Spec Ops, que debuta por primera vez en la consola. La 迆nica opci車n que est芍 disponible es ?Supervivencia', con lo que se borran de un plumazo las misiones presentes en la edici車n original. Adem芍s, no ofrece la posibilidad de jugar en pantalla dividida ni nada que se le parezca, con lo que se le resta otro plus de dinamismo. Asimismo, la omisi車n de determinado arsenal -misiles Predator o el AC-130- exigen por necesidad cambiar el planteamiento de juego que se utiliza en el resto de ediciones. Del propio foro se extrae (en opini車n de los jugadores) que esta experiencia nos lleva a un plano 'de enfrentamiento visceral y frontal', con lo que se confirma lo que se comentaba anteriormente sobre el cl芍sico corre-y-dispara. Incluso as赤, es dif赤cil encontrar en Wii shooters que sean capaces de ofrecer un contenido tan vers芍til y variado como este.
Conclusi車n
Imaginamos que lo que hoy sucede es una rara avis dentro del mundo de los videojuegos, que pocas veces en el futuro se dar芍 la posibilidad de analizar hasta tres veces el mismo juego, todas ellas con resultados distintos. Modern Warfare 3 es uno de los abanderados de la nueva generaci車n de videojuegos, al igual que lo es la sobremesa de Nintendo, aunque por motivos totalmente dispares. Activision ha decidido confiar a Treyarch el desarrollo de la franquicia, en un movimiento triunfal que ha llevado a disfrutar de tres adaptaciones notables, si no sobresalientes, que hoy por hoy encarnan la mejor oferta en versi車n shooter que se puede encontrar en el cat芍logo de la consola. Una vez el motor gr芍fico y el sistema de control fue configurado (labor que se ha ido desarrollando entre Reflex y Black Ops), s車lo quedaba descubrir de qu谷 manera se adaptar赤an las modalidades Online, y si realmente Treyarch ser赤a capaz de emular aqu赤 el dramatismo de las ediciones HD.

Como dec赤amos al comienzo del texto, las comparaciones son odiosas. Modern Warfare 3 Wii tiene de su lado la posibilidad de optimizar el control del wiimote, que pese a ignorar uno de los pocos perif谷ricos que podr赤a potenciar a迆n m芍s su calidad (Wii MotionPlus), otorga a esta adaptaci車n un planteamiento totalmente distinto al del resto de versiones. A nivel t谷cnico se abusa de la degradaci車n de colores para evitar resaltar la pobreza de algunas texturas que parecen sacadas directamente de alg迆n pobre procesador de im芍genes, las ralentizaciones hacen acto de presencia en momentos de gran calado visual, el Online -al igual que en Black Ops-, no cuenta con el mismo n迆mero de opciones que la versi車n HD. Adem芍s, el lag sigue estando presente (al menos hasta que aparezca un parche), en un h芍ndicap que ya estaba presente en la edici車n anterior.

Pese a todo esto -taras que se repiten versi車n tras versi車n-, Modern Warfare 3 ofrece tambi谷n suficientes motivos como para ser tenido en cuenta como una adaptaci車n fidedigna. A fin de cuentas se trata de un shooter que sigue una tem芍tica tan interesante como dram芍tica, a medio camino entre el videojuego y el filme, que mantiene la esencia de sus compa?eros pese al evidente desfalco t谷cnico. Para combatirlo, otorga a los jugadores una libertad de acci車n en cuanto al sistema de control se refiere casi infinita, adem芍s de respetar el global del contenido original. Todo ello hace de esta edici車n un justo merecedor de la licencia que representa, y siempre es de agradecer que un a?o m芍s se ofrezca la posibilidad al jugador de Wii de poder disfrutar de esta aventura, con sus virtudes y defectos. Eso s赤, es conveniente no perderse la segunda entrega en alguna otra consola, dado que Activision ha decidido, a juzgar por las apariencias, saltarse directamente Modern Warfare 2. ?Quiz芍s el pr車ximo a?o?
- El Online brilla con luz propia.
- La mec芍nica de control encaja como anillo al dedo a las necesidades de Modern Warfare.
- El contenido se respeta de la edici車n original -aunque con cortes-. El Spec Ops est芍 ah赤.
- Demostrar nuevamente que la calidad no est芍 re?ida con la potencia gr芍fica. Un port notable.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g谷nero. Est芍 bien cuidado a todos los niveles. C車mpralo.