Ni No Kuni: Wrath of the White Witch, Impresiones

Poco a poco se va haciendo un hueco entre los m¨¢s esperados del pr¨®ximo a?o, mostrando sus virtudes primero en Nintendo DS para despu¨¦s dar el salto a PS3. La uni¨®n entre Level 5 y Ghibli Studios se salda con la aparici¨®n de Ni no Kuni en sobremesa. Reci¨¦n salido del horno en Jap¨®n, nos sumergimos en su fant¨¢stica propuesta para echar un vistazo al en¨¦simo JRPG que parece estar llamado a reinventar el g¨¦nero.

Ni no Kuni: Wrath of the White Witch no es exactamente lo mismo que Ni no Kuni: The Another World. La versi¨®n de sobremesa, nacida a ra¨ªz de la colaboraci¨®n entre Level 5 y el conocido estudio de animaci¨®n japonesa Ghibli, cambia ligeramente el formato de la trama, mejora sustancialmente el apartado gr¨¢fico -no en vano hay un salto evidente entre su plataforma original y la que ahora explora- y explota los recursos que ofrece el pad de una consola tradicional, alej¨¢ndose del concepto port¨¢til que llevaba por bandera su hom¨®nimo en Nintendo DS. Aquel cartucho fue, dicho sea de paso, uno de los m¨¢s ?apretados' del cat¨¢logo de la consola en cuanto a contenido se refiere.

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El tiempo pasa demasiado r¨¢pido y tarde o temprano todo cae en el saco del olvido. La aparici¨®n de Ni no Kuni supuso en su d¨ªa un hito comercial que alcanz¨® en el momento de su llegada al mercado japon¨¦s la nada despreciable suma de 200.000 unidades vendidas, pero su trascendencia m¨¢s all¨¢ de las fronteras asi¨¢ticas u orientales ha sido escasa, por no decir nula, en c¨ªrculos ajenos al mundo del JRPG. Esto se debe probablemente a la ausencia de un distribuidor que mostrase el menor inter¨¦s por exportar el t¨ªtulo al Viejo Continente, territorio que tradicionalmente se ha portado bastante bien con esta clase de producciones, por norma ignoradas sistem¨¢ticamente en Norteam¨¦rica.

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Desde sus or¨ªgenes, esta producci¨®n se ha dividido en dos frentes: la edici¨®n de Nintendo DS y la de PlayStation 3. Representantes de Level-5 han asegurado que el proceso de elaboraci¨®n de ambos t¨ªtulos tuvo lugar de forma paralela pero inconexa, con lo que se sugiere que esta edici¨®n de Ni no Kuni no es exactamente igual que su hermana mayor. Lo cual resulta, como poco, parad¨®jico, dado que las dos versiones comparten no s¨®lo nexo argumental, sino tambi¨¦n mec¨¢nica de combate y -por evidente que resulte- estilo art¨ªstico. Bien es cierto que las diferencias saltan a la vista desde que el Blu-Ray comienza a girar en el lector de PS3, a trav¨¦s de un v¨ªdeo de introducci¨®n del que se extrae un dato incontestable: Ghibli nunca se anda con medias tintas a la hora de crear el en¨¦simo mundo de fantas¨ªa que, acorde con su imaginario, se escapa a la comprensi¨®n del ser humano.

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Bello, tierno e inexplorado, el viaje de Oliver hacia el Otro Mundo es a la vez una aventura hacia lo desconocido y un salto hacia siempre inh¨®spito mundo de su yo interior. 

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Los problemas comienzan cuando, en una especie de premonici¨®n fatal, la madre despierta en mitad de la noche, corre a toda prisa hacia el cuarto del muchacho y, tras ver que su cama permanece vac¨ªa -no sin estupor-, comienza una b¨²squeda que se salda con otro acontecimiento tr¨¢gico, m¨¢s tr¨¢gico a¨²n que los anteriores. Cuando la mujer encuentra a agua, rescata al muchacho entre sollozos y regresa a terreno firme. Triste fatalidad la del Destino, empe?ado en amargar la vida de quienes menos lo merecen, cuando decide arrebatar la vida de la madre de un ataque al coraz¨®n justo en ese momento, ante los ojos vidriosos de Oliver. El chico ahora carga con sus remordimientos, incapaz de aceptar lo sucedido.

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Sin embargo, ?c¨®mo se explica un ni?o la desaparici¨®n, la ausencia, la p¨¦rdida de una madre? Reza el dicho que s¨®lo aquello que muere es para siempre, y a buena fe que Ghibli ahonda en este hecho dentro de su imaginario, donde objetos inanimados cobran vida, moldeando la triste realidad a base de tinta y pincel.

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Estos ?valores' de los que hablamos no est¨¢n sujetos a la mirada con la que habitualmente se suelen ver las producciones de mayor calado en el mercado occidental. La tem¨¢tica gr¨¢fica de Ni no Kuni gira en torno a las ¨²ltimas tendencias en la animaci¨®n japonesa -de hecho, en Ghibli aseguran que el m¨¦todo de trabajo que se ha empleado en este caso es id¨¦ntico al que se pone en marcha al dise?ar una pel¨ªcula-, aunque ello lleve impl¨ªcito caer en algunos de los clich¨¦s m¨¢s manoseados del g¨¦nero, principalmente en concepto de dise?o de personajes, algunos cl¨®nicos, otros carentes de carisma. Lo curioso del asunto es que all¨ª donde esta faceta palidece, el dise?o de escenarios resplandece y brilla con luz propia, gracias al magistral uso de parajes naturales, bosques, praderas, aldeas, etc¨¦tera. 

Este punto pronto se convierte en la diferenciaci¨®n m¨¢s apreciable entre la edici¨®n de Nintendo DS y la de PlayStation 3. Cualquiera que lea estas l¨ªneas pensar¨¢ que el redactor ha ca¨ªdo en una de tantas perogrulladas que se suelen escribir en estas l¨ªneas, pero nada m¨¢s lejos de la realidad, lo cierto es que el entramado gr¨¢fico es esencial para comprender buena parte de la esencia m¨¢gica de la aventura. Es dif¨ªcil profundizar en las sensaciones que transmite la introducci¨®n, o el sutil tratado de las emociones del muchacho que, hundido en su cama, solloza a oscuras. Ahora lamenta haber confiado en Mike, su mejor amigo, mientras los recuerdos comienzan a atormentar su mente. No hay salida para Oliver o, al menos, no lo parece hasta que la magia y la fantas¨ªa desdoblan el triste mundo de la realidad en la que vive en h¨¦roe de esta aventura.

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La historia de PS3 encuentra sutiles diferencias con la vivida en Nintendo DS, m¨¢s en la forma que en el fondo. Se dir¨ªa que la trama es b¨¢sicamente la misma pero narrada desde otra perspectiva, y empleando distintos recursos para acceder al mismo punto. Los cambios se interpretan como una forma de adaptar la aventura al territorio de sobremesa antes que como una manera de cambiar la din¨¢mica del juego. En occidente esto importa poco o nada, dado que la aventura original de port¨¢til no tiene visos de abandonar Jap¨®n, mientras que esta de PlayStation 3 ya tiene distribuidor por estos lares: Namco Bandai. Qu¨¦ motivos han llevado a escoger una versi¨®n u otra es algo que ignoramos, aunque probablemente se deba al planteamiento ?adulto' de la aventura, pese a su disposici¨®n visual.

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Las batallas tienen lugar en tiempo real, cambiando la pantalla en la que acontece el combate en cuesti¨®n. Oliver puede entrar en solitario en el combate o haciendo uso de los bautizados como ?Imajinns', que cuentan con su propia barra de vitalidad. Cada personaje de la historia controla a un Imajinn, y ¨¦ste a su vez permite realizar ataques de distinta ¨ªndole, bien sean m¨¢gicos o f¨ªsicos. Mientras que los hechizos s¨®lo pueden ser lanzados por humanos -a cada uno le corresponde uno espec¨ªfico muy a tener en cuenta en los combates de mayor calado-, los ataques f¨ªsicos var¨ªan en funci¨®n del arma o de la posici¨®n que ocupemos en el campo de batalla. Pulsar el tri¨¢ngulo equivale a adoptar posici¨®n atacante o defensiva, siguiendo la tradici¨®n de los JRPGs que emplean esta estructura de batalla.

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Los combates aleatorios son casi tan importantes como los que disputamos ante los jefes finales que de cuando en cuando asoman la cabeza en la partida. Aqu¨ª se debe emplear todo nuestro conocimiento en la materia, combinando hechizos con ataques f¨ªsicos, magias de protecci¨®n con otras que causan un estado alterado en nuestro Imajinn durante unos segundos. La mec¨¢nica no dista en demas¨ªa de lo que generalmente se atribuye al g¨¦nero del JRPG, aunque se aprecia cierta intenci¨®n por parte de Level-5 de cara a mejorar el ritmo de las partidas. Tambi¨¦n se busca fomentar la lista de acciones de la que disponemos en las fases de exploraci¨®n, conectadas entre s¨ª por un mapamundi hermosamente recreado.

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Adem¨¢s de los momentos de acci¨®n, de la exploraci¨®n y de ahondar levemente en la capa m¨¢s superficial del argumento, las primeras horas de Ni no Kuni permiten que el jugador se recree en un aspecto que generalmente no se suele ni tan siquiera mentar en esta clase de textos, esto es: la m¨²sica. Al fant¨¢stico doblaje japon¨¦s hay que a?adir la batuta de Joe Hisaishi, uno de los compositores m¨¢s importantes del panorama japon¨¦s, otrora colaborador ac¨¦rrimo de Takeshi Kitano.  Aunque no es lugar para entrar en estas cuestiones, lo cierto es que Hayao Miyazaki, probablemente la figura m¨¢s representativa de Studio Ghibli, se ha asegurado la participaci¨®n de ciertas figuras emblem¨¢ticas de la industria, cuyo trabajo no pasa inadvertido ni en un videojuego ni en una pel¨ªcula con aspiraciones como Mononoke, Chihiro o Howl's, por citar tres de las m¨¢s conocidas.

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No es Ni no Kuni una gran revoluci¨®n ni tampoco un nuevo icono del g¨¦nero, o al menos no parece estar llamado a ello. No obstante, es un JRPG que cuenta con alt¨ªsimos valores de producci¨®n, y que b¨¢sicamente cuenta con todos los elementos necesarios para figurar entre los m¨¢s destacados del cat¨¢logo de PlayStation 3, si es que finalmente aparece en Europa. De momento se ha confirmado en Estados Unidos para ver la luz en alg¨²n momento de 2012.