MotorStorm: RC, Impresiones

Ha sido una de las dos sorpresas que Sony Europa ha desvelado en la presentaci¨®n londinense de su novedosa plataforma port¨¢til para la prensa europea. PSVita retomar¨¢ nada m¨¢s salir el rally extremo de MotorStorm, pero lo lleva hasta terrenos desconocidos y en peque?o tama?o como pueden ser los bancos de un parque, un jard¨ªn nevado o la esquina de un skate park. MotorStorm: RC es la reducci¨®n plena de la mec¨¢nica habitual de los juegos de PSP y PlayStation 3, tanto, que ahora la marca se adentra en un estilo de conducci¨®n muy arcade y que hac¨ªa tiempo que no ve¨ªamos: el de los coches radiocontrol. Esto hace que la perspectiva y manejo cambien por completo, con c¨¢maras cenitales y controles delicados, recordando much¨ªsimo a los inolvidables juegos de Micro Machines de hace quince a?os, pues su desaf¨ªo parte, en gran medida, de un control similar, donde es muy f¨¢cil salirse de la pista y la emoci¨®n se sirve de la propuesta tan directa que impone.

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Los t¨ªtulos MotorStorm siempre han estado caracterizados por la espectacularidad, la brutalidad, la adrenalina y lo intrincado de sus circuitos. En RC, tambi¨¦n en manos de Evolution, desaparece todo esto en pos de buscar una nueva experiencia jugable que muchos no habr¨¢n probado y que otros tantos ya casi hab¨ªamos olvidado. Lo primero que llama la atenci¨®n de esta obra en comparaci¨®n con sus predecesoras en la misma saga es la posici¨®n de la c¨¢mara desde donde contemplaremos las carreras, situada ahora muy lejos de los veh¨ªculos -que dan la perfecta sensaci¨®n de ser peque?os cochecitos de juguete- y en plano picado. No se gira con cada curva como s¨ª es habitual en los t¨ªtulos de conducci¨®n en 3D, por lo que el jugador ahora debe razonar al tomar curvas hacia d¨®nde est¨¢ mirando el coche, en qu¨¦ sentido debe torcer el joystick para no curvar hacia el lado contrario. El juego transmite con este control y angulaci¨®n visual las mismas sensaciones que tendr¨ªamos si manej¨¢semos un coche teledirigido, sin mover demasiado nuestra perspectiva pero teniendo que tener en cuenta hacia d¨®nde va nuestro guiado.

De hecho, en PSVita el juego se maneja con los dos sticks de la m¨¢quina, como si fuera un aut¨¦ntico mando de un radiocontrol. Con el derecho hacia arriba aceleramos, y hacia abajo frenamos. Con el izquierdo torcemos en una direcci¨®n u otra Y nada m¨¢s, por lo que hemos visto solo habr¨¢ un bot¨®n m¨¢s para, tras dos segundos de espera, volvernos a colocar en la posici¨®n correcta y en el centro de la pista. Sencillo, directo, distinto... pero muy divertido. MotorStrom: RC busca sus aciertos en la simplicidad jugable y los piques. Dar¨¢ juego para hasta cuatro usuarios, tambi¨¦n en PlayStation 3 a pantalla dividida -no se ha confirmado online-, donde podr¨¢ ser descargado de la Store de PSN si hemos adquirido la versi¨®n original port¨¢til, para que podamos llevarnos nuestras partidas, coches y circuitos desbloqueados del televisor a la calle, de forma r¨¢pida, f¨¢cil y coherente. Esta obra, como muchas otras que llegar¨¢n a Vita, busca la compatibilidad absoluta entre versiones.

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Los escenarios de RC restan protagonismo a los accidentes y los tramos extremos. Son circuitos con saltos, curvas muy peraltadas, cambios de rasante constantes, barro o nieve, y dem¨¢s claves de MotorStorm pero tambi¨¦n simplificados y reducidos hasta puntos que no esper¨¢bamos, al menos por los niveles que hemos visto hasta ahora. La alejada c¨¢mara y la menor irregularidad de las pistas elimina de este juego el habitual componente espectacular. Ahora los circuitos son m¨¢s planos y accesibles, con muchas curvas muy cerradas -abundan las de 180?- ya que los coches teledirigidos se prestan a moverse con normalidad en este tipo de giros bruscos. No parece un MotorStorm salvo por su est¨¦tica, ambientaci¨®n y ciertas se?as ya acu?adas a la saga, como la reaparici¨®n de los veh¨ªculos de forma parpadeante tras una ca¨ªda al vac¨ªo o destrozo, la divisi¨®n de carreras por torneos y medallas , o la m¨²sica.

El juego ha cambiado su escala. Ahora una esquina de un parque con charcos, mont¨ªculos de arena, bancos y cepas de ¨¢rboles nos recrea perfectamente un vertiginoso circuito que recorrer con nuestros todoterrenos de juguete a toda velocidad y sin accidentarlos. Destaca la ambientaci¨®n de cada pista, algo que siempre ha sido un punto fuerte de la saga y aqu¨ª no se abandona pese a los cambios. Ahora habr¨¢ mucha diversidad en esto, con 16 tramos iniciales que ir¨¢n en aumento con diversos DLC que sus creadores tienen pensado lanzar a posteriori. En cuanto a veh¨ªculos, de momento solo hemos visto los 4x4, aunque ya se ha anunciado que habr¨¢ nada menos que ocho categor¨ªas de autom¨®viles, por lo que la variedad aqu¨ª tambi¨¦n estar¨¢ servida. ?stos tambi¨¦n aumentar¨¢n con los posteriores descargables.

Siendo francos, MotorStorm: RC deja al principio unas sensaciones muy fr¨ªas, y no parece hacer justicia a la saga que pertenece y retomar¨¢. Pero en cuanto se le da una oportunidad algo m¨¢s prolongada, se descubre que la inigualable f¨ªsica de los coches, la mec¨¢nica de juego y el manejo funcionan de maravilla. Es un gameplay muy r¨¢pido y fluido, suave y preciso en su m¨¦todo de control que nos har¨¢ tener que girar el joystick hacia la izquierda para tomar una curva hacia la derecha si el veh¨ªculo que manejamos se dirige hacia la pantalla. No cuesta demasiado controlarlo y la sensaci¨®n de tener en las manos un mando radiocontrol es absoluta. En PlayStation 3 el manejo es algo m¨¢s tradicional, con el gatillo R2 para acelerar y el L2 para frenar. Podremos alternar la distancia a la que colocamos la c¨¢mara (zoom) pero nunca podremos situarla detr¨¢s o dentro de los autom¨®viles, de manera que no se pierda ese requisito extra que es saber manejar estos veloc¨ªsimos b¨®lidos de juguete y vivos colores.

Y en cuanto a lo visual, RC no es de ninguna manera el juego que mayor partido saque a la nueva m¨¢quina. Sus creadores se han centrado en que todo luzca con solidez y fluidez plena, y as¨ª lo han conseguido. A cambio tenemos un aspecto gr¨¢fico que recuerda incluso a PlayStation 2, y que queda a¨²n m¨¢s visible en PlayStation 3. Ahora bien, en la consola de sobremesa el motor est¨¢ ligeramente evolucionado y veremos m¨¢s detalles, juegos de luces o texturas. RC es un juego vistoso en cuanto empezamos a movernos, con muchos detalles y componentes que hacen a cada pista ¨²nica, pero no podemos decir que alcance el nivel gr¨¢fico de Uncharted: Golden Abyss o Resistance: Burning Skies. Los escenarios son bastante interactivos, y efectos como el del agua o el barro se han recreado a la perfecci¨®n. Tambi¨¦n el comportamiento f¨ªsico de todos los elementos destruibles, empezando por los coches rivales, bastante inteligentes "para que sea tambi¨¦n un buen desaf¨ªo singleplayer", nos explicaba uno de sus responsables.

Nos gusta la idea de que MotorStorm se redefina de esta rompedora forma. Mejor que lanzar una nueva entrega que retomara las se?as de Pacific Rift de PSP solo que con mejor apartado t¨¦cnico, la idea de pasarse a los coches radiocontrol y la experiencia de la saga pero en peque?ito en PSVita nos parece un motivo digno de elogio. Lo f¨¢cil era hacer un juego continuista. Y ¨¦ste, prob¨¢ndolo en profundidad y descubriendo sus niveles y comportamientos, es innegablemente divertid¨ªsimo, adictivo y directo, preparado para partidas r¨¢pidas, port¨¢tiles, en solitario o contra otros jugadores. La total conexi¨®n con PlayStation 3 podr¨ªa haberse aprovechado quiz¨¢ para un poco m¨¢s. Pero m¨¢s all¨¢ de esto, lo cierto es que deja unas sensaciones tan firmes, que no aparenta ser un juego que vaya a pasar desapercibido y seguro que reta durante meses a los m¨¢s desafiantes y picados. No nos cabe duda, el precio y la continuidad y posible cuant¨ªa a desembolsar por los DLC marcar¨¢n su ¨¦xito, ¨¦xito que ser¨¢, sin duda alguna, considerable.

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