[E3] Binary Domain
En un futuro cercano, oscuros intereses comerciales han llevado a la creaci車n de robots que han tomado las calles de Jap車n. SEGA vuelve a explorar el enfrentamiento hombre-m芍quina en un juego de acci車n donde la cooperaci車n y el trabajo en equipo son fundamentales.
Estamos en Tokio, en el a?o 2080. Es una 谷poca en la que se ha extendido el uso de los robots y es com迆n verlos por todas partes, ayudando a los habitantes en muy diversas tareas. Estados Unidos y Jap車n lideran el desarrollo tecnol車gico en torno a la rob車tica. El argumento tiene su comienzo en el descubrimiento de que una compa?赤a est芍 desarrollando robots con gran semejanza a los seres humanos, algo terminantemente prohibido. La IRTA, la organizaci車n encargada de supervisar el cumplimiento de las normas internacionales en cuanto a la creaci車n de m芍quinas, sospecha que es una empresa nipona la que est芍 desarrollando estos humanoides. Para averiguar qu谷 est芍 ocurriendo realmente, ha creado un escuadr車n de asalto que debe infiltrarse en aquel pa赤s y acabar con la amenaza.
Aun siendo uno de los pa赤ses m芍s modernos, Jap車n ha dado un giro es su estrategia internacional. Regresando a los tiempos previos a la Segunda Guerra Mundial, se han vuelto muy retra赤dos y no quieren interferencias por parte de agentes exteriores. ?se es el motivo por el que la misi車n debe llevarse a cabo de forma completamente secreta pero finalmente el grupo es descubierto y en ese momento el gobierno nip車n decide mandar sus fuerzas rob車ticas en su b迆squeda. El escuadr車n est芍 formado por soldados provenientes de distintas naciones y seg迆n vamos avanzando conoceremos nuevos aliados que se sumar芍n al protagonista estadounidense, al cual controlamos. En la demo que nos mostraron pod赤amos elegir a otros dos acompa?antes de entre un grupo de cuatro, otro norteamericano, una china y dos brit芍nicos.
Cada personaje cuenta con sus propias caracter赤sticas, armas y estilo de combate, as赤 que elegiremos en cada momento los que consideremos que m芍s nos convienen. Dependiendo de a qui谷n escojamos, eso tendr芍 un impacto en la historia y en las cinem芍ticas que veremos, ya que cada uno cuenta con su propia personalidad. Antes de comenzar una fase tenemos la oportunidad no s車lo de formar el grupo con el que la afrontaremos, sino tambi谷n de ajustar nuestro equipamiento. Contaremos con una especie de puntos de habilidad que podemos emplear para potenciar algunos aspectos, aunque eso en ocasiones vaya en detrimento de otros.
Los par芍metros con los que podemos jugar son la salud, cu芍nto tardamos en revivir a un aliado, el da?o que nuestros explosivos son capaces de causar y el tiempo m芍ximo que permaneceremos en condici車n cr赤tica. Esto 迆ltimo es el margen que tenemos desde que somos abatidos hasta que morimos completamente, durante el cual alguien puede llegar a rescatarnos. Seg迆n vayamos conociendo m芍s a nuestros compa?eros, llegar芍 un momento en el que tambi谷n tendremos ocasi車n de modificarles su conjunto de habilidades. De esta forma nos dar芍n la oportunidad de dise?ar un equipo m芍s equilibrado, donde quiz芍 le demos a uno de los miembros el rol de m谷dico, mientras otro juegue un papel m芍s agresivo, de avanzadilla, aunque eso suponga que tenga mucho m芍s riesgo de ser puesto en condici車n cr赤tica.
El 迆ltimo aspecto que hemos de tener en cuenta es, l車gicamente, el de las armas, ya que vamos directos a unos duros combates con robots que no se andar芍n con miramientos a la hora de acabar con nosotros. Cada arma cuenta con diferentes estad赤sticas en cuanto al da?o que pueden provocar, la precisi車n, el ratio de tiro, o el tama?o del cargador. Tenemos la capacidad para portar un arma primaria, como un rifle autom芍tico, una secundaria, de la que no llegamos a ver ning迆n ejemplo, una tercera acompa?ante, como podr赤a ser una pistola, y alg迆n tipo de explosivo como una granada. Nos da la sensaci車n de que no ha habido una gran imaginaci車n a la hora de dise?ar el arsenal.
Binary Domain podr赤amos decir que es un juego de acci車n en tercera persona al uso. Las comparativas con Vanquish o Gears of War son f芍ciles de hacer, sobre todo por formarnos una idea r芍pida de en qu谷 consiste, aunque encontramos m芍s semejanzas con el segundo que con el primero, al ser bastante m芍s pausado. Nos bastar赤a con cambiar el escenario de un planeta medio derruido poblado de Locust a un entorno ultramoderno y lleno de robots para pasar de un t赤tulo a otro. Tampoco queremos asustaros con que estamos ante un clon m芍s, sino m芍s bien trasladaros que no es en esa cuesti車n en la que destaca la apuesta de SEGA, optando por una f車rmula conocida.
El punto diferenciador que marca este juego es la manera en la que han planteado la cooperaci車n. Han querido ir un paso m芍s all芍 de lo que conocemos en torno a la mec芍nica de llevar a un determinado personaje con la capacidad de dar 車rdenes al resto del equipo. Han querido darle mayor humanidad a esos compa?eros, distingui谷ndolos de los robots que siguen ciegamente las instrucciones que reciben. Como ya hemos comentado, cada miembro del escuadr車n tiene su propia personalidad y es capaz de manifestarla no s車lo en los v赤deos en los que se desarrolla la historia, sino tambi谷n mientras estamos jugando. Se trata, por tanto, de una inteligencia artificial m芍s avanzada.
Para comunicarnos con los compa?eros podemos emplear nuestra propia voz, con un micr車fono cualquiera compatible con la consola, no hace falta utilizar Kinect. Los comandos sonar芍n relativamente naturales, aunque l車gicamente ser芍n expresiones breves y concisas, algo que en cualquier caso tiene sentido en plena batalla. La clave es la confianza, la cual nos la ganaremos con nuestras acciones, demostrando buena punter赤a, acudiendo a curarlos r芍pidamente o seg迆n las decisiones que vayamos tomando a lo largo del juego. Seg迆n c車mo nos consideren, se comportar芍n m芍s o menos amables con nosotros. Eso no es algo que se quede 迆nicamente en palabras, sino que puede significar que nos brinden mayor cobertura en los asaltos, poni谷ndose en peligro para salvarnos, o que ignoren completamente nuestras indicaciones.
Lo mejor para que lo entend芍is es dar un ejemplo concreto. En la demostraci車n hubo un momento en el que uno nos comenta que avanz芍ramos por la izquierda, a lo que respond赤amos afirmativamente diciendo 'Ok', aunque hubiera valido algo como 'S赤' o por el contrario contestar 'No puedo' o directamente 'No'. Habr芍 que ver c車mo queda en espa?ol, pero como veis no estamos absolutamente atados a una palabra concreta para cada evento. Como dijimos que s赤 segu赤amos su indicaci車n, ten赤amos realmente que hacerlo y correctamente, pues si no eso habr赤a minado la confianza de este compa?ero en nosotros. Hay que apuntar adem芍s que si nuestros compa?eros mueren, la partida se acaba.
En otro punto fuimos nosotros los que quisimos tomar la iniciativa y mandar al resto lo que quer赤amos que realizara. Para iniciar la comunicaci車n pronunciamos el nombre de una compa?era, 'Rachel', de manera que sepa que nos dirigimos a ella. Nos contesta as赤 que le damos nuestra orden, '?avanza!'. Teniendo en cuenta que estamos casi rodeados y que asomarse es pr芍cticamente sin車nimo de muerte, su reacci車n es obvia, '?est芍s completamente loco!' nos dice. Habr芍 que ver m芍s casos para conocer el potencial real de este sistema, pero sin duda es una idea de lo m芍s interesante. Es como si estuvi谷ramos interactuando en un cooperativo por Internet, pero en realidad es la CPU la que nos ofrece esa apariencia. S車lo esperamos que no se vuelva demasiado repetitivo o se quede en algo extremadamente simple.
Los enemigos a los que tuvimos acceso, en cambio, eran todo lo contrario, muy limitados en su comportamientos. No obstante, eran los m芍s b芍sicos con los que nos toparemos, as赤 que aguardaremos a ver qu谷 ocurre con el resto, porque ser赤a parad車jico que los que mostraran una inteligencia artificial avanzada fueran las personas en vez de los robots. Su dise?o resulta bastante fr赤o, sin un atisbo de humanidad en su met芍lico rostro, carente de expresi車n y con unos penetrantes ojos rojos brillantes. Un detalle que s赤 nos pareci車 al menos curioso, aunque nos dio la sensaci車n de que no iba m芍s all芍 de eso, es el da?o procedural en el cuerpo de los androides, que nos depar車 algunos momentos graciosos.
Dependiendo de si disparamos a las piernas, a la cabeza o a los brazos, estas partes se pueden da?ar por separado y desprender lo cuerpo. La reacci車n a cada una de estas situaciones es diferente: si se quedan sin piernas, se arrastrar芍n por el suelo hasta agarrarse a nosotros; si pierden el brazo que porta el arma tendr芍n la habilidad de usar el otro para recogerla y seguir disparando; finalmente, si la cabeza se les cae tendr芍 lugar la escena m芍s c車mica, pues andar芍n desorientados y sin saber qu谷 hacer, dando vueltas por el escenario. Esto tiene una parte 迆til, pues los otros robots de repente no son capaces de identificarlo como aliado, as赤 que empecer芍n a dispararlo, lo que igual sirve como maniobra de distracci車n. Te車ricamente cada enemigo tendr芍 una forma distinta de desmenuzarse, con lo que habr芍 que ver qu谷 otras situaciones tendr芍n lugar. Por desgracia, como no pudimos ver ninguno m芍s, nos quedamos con la impresi車n de que no aportaba demasiado a la jugabilidad.
Lo que s赤 nos encontramos fue un jefe final que respond赤a al cl芍sico patr車n de ara?a mec芍nica gigante y fuertemente armada, el cual respond赤a al original nombre de 'Arachne'. El cuartel central nos dio las indicaciones necesarias para acabar con 谷l, debiendo descubrir sus puntos d谷biles tras unas placas protectoras que resisten nuestras balas, con lo que nos armamos con un lanzacohetes. La orden que dimos a nuestros compa?eros fue precisamente eso, que se concentraran en disparar a esos puntos a la par que nosotros 赤bamos tirando abajo las protecciones con nuestro ca?車n.
Mencionaremos antes de cerrar el texto que en los escenarios nos iremos topando con tiendas donde equiparnos de nuevo, que nos recordaron bastante a las del Bulletstorm. Al igual que en el t赤tulo de Epic, aunque sin llegar a su nivel de profundidad en ese sentido, se nos otorgan una serie de cr谷ditos con cada enemigo destruido. Si adem芍s lo hacemos con estilo, de un disparo en la cabeza o de un golpe en cuerpo a cuerpo, el bono es mayor. En estos puesto tendremos ocasi車n de comprar armas como el mentado lanzacoetes, munici車n, kits de primeros auxilios, explosivos y dem芍s 赤tems t赤picos.
Binary Domain nos ha dejado un buen sabor de boca. No dir赤amos que est芍 entre los mejores del E3, pero s赤 que parte con atractivo planteamientos y una mec芍nica, aunque no diremos que inspirada, s赤 correcta. Menci車n especial se lleva claramente todo lo que concierne a la gesti車n de la relaciones con los compa?eros y que parece m芍s propia de un RPG que de un t赤tulo de acci車n. SEGA tiene algo interesante entre mano y esperemos que termine cumpliendo y que lo que va por tan buen camino no termine desvi芍ndose.
- Acci車n
Nuevo trabajo de Toshihiro Nagoshi, padre de la saga Yakuza. El jugador se sumerge en Tokyo en el a?o 2080 invadida por robots